Quantcast
Channel: GENEALOGIAS CANARIAS
Viewing all 315 articles
Browse latest View live

NOTICIAS SOBRE LA VARIOPINTA ESTIRPE DEL CONQUISTADOR RODRIGO DE BARRIOS

$
0
0
 CARLOS GAVIÑO DE FRANCHY
Ponencia presentada en el II ENCUENTRO DE GENEALOGÍA GRAN CANARIA,
celebrado en la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Gran Canaria,
celebrado los días 17-19 de noviembre de 2015
Próximamente se publicará en Ponencias del II Encuentro de Genealogía Gran Canaria
nº 2 (2016).Depósito Legal: GC 368-2015


Viana
En la extensa nómina de conquistadores de la isla de Tenerife a los que no fue particularmente favorable la fortuna, destaca la figura de Rodrigo de Barrios, infante de la compañía del capitán Bernardo de Chichones, enviada por el duque de Medina Sidonia en socorro de las huestes castellanas [1]. La recompensa que recibió por sus servicios resulta, a la vista de lo que otros percibieron, notablemente exigua: solares para casas en 21 de enero 1499; una fanega de riego en 15 de abril de 1500 y otras tres, también de riego, en 6 de noviembre de 1501 y 2 de junio de 1502 en Taoro, que fueron confirmadas a su viuda en la reformación de Ortiz de Zárate, el 28 de mayo de 1506 [3], cuando ya Rodrigo había fallecido.
Con este corto patrimonio no pudieron sus descendientes constituir una casa opulenta y transmisible de varón en varón, como sucedió en los linajes de tantos otros conquistadores, que quizá no se pudieran igualar en méritos al aguerrido militar. Sin embargo, la historia parece haber hecho justicia y su nombre ha quedado para siempre inscrito en el panteón de valientes guerreros españoles que tomaron parte en la toma de la Isla, dando origen a una familia, amplia y diversa, en la que muchos de sus integrantes destacaron, cada cual en su particular actividad, emulando la valía del abuelo.
Fray Alonso de Espinosa
Fray Alonso de Espinosa relaciona el nombre de Rodrigo de Barrios entre los cuarenta y tres soldados de infantería de que hace mención en su obra, escapando del olvido que sufrieron otros muchos, que por evitar prolijidad callo, no con intento de oscurecer su fama, sino porque dellos ya no hay memoria [4]. El bachiller Antonio de Viana lo menciona en los «Cantos» xi y xii de su Poema [5], pero es sin duda a un ilustre descendiente suyo, el cronista don Juan Núñez de la Peña, a quien debemos el mayor número de citas biográficas del aguerrido conquistador y su progenitura. Dice Núñez de la Peña:
Firma de Juan Núñez de La Peña
Continuóse la conquista, y a primero de noviembre comenzaron a embarcarse, el general con su capitán de a caballo don Fernando García del Castillo y capitán de infantería española, Ibone de Armas, y capitán de infantería de canarios, y naturales don Pedro de Maninidra y el capitán mayor Bartolomé Estupiñán, con los capitanes y soldados de su tercio, y al siguiente día salieron del puerto y llegaron a la isla de Tenerife al puerto de Santa Cruz, en donde hicieron la salva a la milagrosa imagen de Nuestra Señora de Candelaria, allí desembarcaron, y el general don Alonso de Lugo besó la santa cruz que en la entrada pasada había puesto en aquella playa con mucha devoción, pidiendo a Cristo nuestro redentor y a la Reina de los Ángeles su madre Nuestra Señora de Candelaria, le diesen su favor, y ayuda en aquella pretensión y conquista, y victoria contra los enemigos de la santa fe, siguiéronle en la misma devoción el capitán
Bartolomé Estupiñán, y los capitanes, Diego de Mesa, Bernardo de Chichones, Hernando de Escalante, Juan de Esquivel, Gonzalo de Soto, Bernardo de Elicona, Juan de Narváez, don Fernando García del Castillo, Ibone de Armas, don Pedro de Maninidra, el canónigo Alonso de Samarinas, Lope Hernández de la Guerra, Martín de Alarcón, y Diego de Alarcón su deudo, Alonso de las Hijas, Andrés Suarez Gallinato, Jerónimo de Valdés su hermano, Bartolomé Benítez, Alonso de la Peña, Diego de Maldonado, Fernando de Llarena, Diego de Solís, Francisco de Espinosa, Guillén Castellano, Jaime Joven, Jácome Joven, Juan Benítez, Juan de Llarena, Juan Méndez, Juan de Guzmán, Lope de Salazar, Pedro Mejía, Mateo Viña, Pedro Benítez, don Pedro de Lugo, hijo del general, Pedro Martin Buendía, Rodrigo de Barrios, Diego de Belcázar, don Alonso Fernández Gallego, Alonso de Moratalla, Andrés Díaz, Diego de León, Diego Fernández de Manzanilla, Diego de Agreda, Fernando de Trujillo, Lope Romero, Fernando de Gallegos, Juan Redondo, Fernando de Forma, Pedro Fernández de Lugo, Fernando Suárez, Juan de Almodóvar, Francisco Melsan, Francisco del Portillo, Martín Ponce, Francisco de Albornoz, Lope de Fuentes, Francisco Malpica, Juan de Almodóvar, Francisco Riverol, Antonio de Manos de Oro, Gonzalo de Lepe, Juan Navarro, Lorenzo de Alcalá, Gonzalo Muñoz, Gonzalo
Rodríguez, Juan de Badajoz, Juan Cabello, Rodrigo Montano, Juan Rodríguez de Gamonales, Rodrigo de Burguillos, Juan de Averio, Pedro de Bobadilla, Pedro Camacho, Francisco Yáñez, Sebastián de Campo, Pedro Luque, Pedro Martín, Alonso de Córdova, canario, Pedro Mayor, Martín de Valladares, Juan Delgado, canario, Diego de Mancanacio, y Pedro de Lugo, canario, Juan de Meneses, y todos los demás que dejo de referir, que acompañaban este ejército, alistados debajo de sus banderas [6].
Más adelante narra Peña en su obra la escaramuza en la que doce españoles, encabezados por Rodrigo de Barrios, lucharon contra doscientos guanches del rey de Anaga, matando a setenta de ellos y ahuyentado a los demás:
Doce valientes, y nobles soldados, llamados Rodrigo de Barrios, Juan de Guzmán, Diego Fernández de Manzanilla, Juan de Llarena, Francisco Melián, Francisco del Portillo, Gonzalo Muñoz, Juan Méndez, Diego de Solís, Lope de Fuentes, Rodrigo de Burguillos, Alonso Fernández Gallego, que todos comían en un rancho, y en el otro, que ellos no tenían entrada, pidieron licencia al general para hacer una entrada en los valles del Reyno de Anaga, fuéseles concedida; sabido de algunos soldados, quisieron ir con ellos, no lo consintieron por parecerles eran bastantes para toda la Nivaria; despidiéronse los doce famosos Españoles de su general y capitanes, los demás soldados los censuraban por ver que se arrojaban al peligro, fiados en su valor; en breve tiempo pasaron los valles de San Andrés y llegaron a Taganana,
en donde hallaron unos seis pastores, que guardando estaban ganado, diéronles asalto y los aprisionaron con más de cuatrocientas cabezas de ganado; trataron de volverse con la presa al Real, y caminando a él, ya que cerca del valle de San Andrés estaban, vieron una escuadra de más de doscientos naturales, capitaneándolos un arrogante guanche: Los doce amigos se detuvieron sin pasar adelante, por ser aquel sitio bueno, y de más ventaja para pelear con los enemigos: y para asegurar los seis pastores, los ataron de pies y manos, y dejaron un poco más abajo con el ganado: la escuadra de los naturales, que conocieron ser españoles los doce, y que traían presa, se acercaron a ellos, y el que delante venía que era el Rey de Anaga dijo a sus vasallos: estos seguros los tenemos, por el atrevimiento que han tenido de entrar en mi reyno, les tengo mandar despeñar: estando frontero unos de otros, dijo Rodrigo de Barrios: Señores guanches, ¿que pretenden? Ríndanse, porque ya hemos hecho yo y mis camaradas la cuenta, y sabemos cuantos caben a la ejecución de nuestros aceros; el Rey dio una grande risada de ver la arrogancia del español, y juzgando les hacía merced, les dijo: «Españoles, ríome de ver vuestra vanagloria, bajad y caminad adonde están vuestros camaradas, que os prometo por el hueso del gran Tinerfe mi antepasado de no agraviaros, que mi ira se ha vuelto en piedad”; los doce por no dejar la ganancia que traían, no quisieron bajar de lo alto; a esto dijo Juan de Llarena, «¿que hacemos?» Afrenta fuera nuestra, si al real fuésemos sin la presa y la mitad de estos guanches, y que diga que de temor la dejamos»; embistámosles, y diciendo Santiago a ellos, dispararon sus ballestas, y antes que el Rey y los suyos llegasen a lo alto ya habían caído más de veinte; cerraron unos con otros con sus espadas y dardos, y después de haber peleado más de un cuarto de hora, los naturales huyeron el valle abajo vencidos, dejando sólo a su rey en la pelea, que tan valeroso era que se defendió de los doce, y viéndose rendido, tuvo por mejor dar un salto la sierra abajo, a riesgo de matarse que entregarse; ocuparon aquellos andenes y laderas setenta cuerpos muertos y muchos heridos.
Quedaron los doce victoriosos, y para crédito de su embestida, salieron heridos sin riesgo: dijeron a los que huyendo iban: subid valientones, o llamad a toda Anaga, que aquí os aguardamos; dijo Francisco Melián a Lope de Fuentes, que se pusiese un pañuelo en una mano que tenía herida, y la respuesta que le dio, fue decirle: dejad amigo que esta sangre salga, que ahí llevamos con que criar otra: recogieron su ganado, desataron los seis pastores, que fueron testigos de la batalla, y prosiguieron su viaje; llegaron al Real; fueron bien recibidos de su general, y capitanes y camaradas, dándoles los parabienes del buen suceso; no faltaron envidiosos de ver habían cobrado fama: mandó el general que se curasen, y respondían, que no era nada: preguntoles el general lo que les había sucedido, y remitieron la respuesta a los seis pastores, que fueron testigos de vista, que no parecería bien ellos darla: a súplica de algunos amigos se curaron, que tan poco caso hacían de las heridas, que les parecía no habían de ser causa de muerte. Estos doce soldados anduvieron siempre juntos en todas las facciones, que se ofrecieron en la isla, hasta que fue conquistada, señalándose cada uno de por sí en su valor, y ánimo. Con la presa de el ganado tuvieron que comer algunos días los Españoles, que quisieran les viniese cada día otro socorro, porque no estaban muy sobrados de comida; y aún que algunas entradas se hacían por aquella parte de Anaga, se sacaba de ellas poco provecho, por que el Rey de Anaga hizo retirar todo el ganado de su reino a las más remotas sierras de él, por librarlo de los españoles, con que comenzaron a padecer muchas necesidades[7].
Silueta de Viera y Clavijo
La descripción de este violento enfrentamiento entre españoles y guanches y la crucial participación que en el hecho tuvo Rodrigo de Barrios, la comparte también Viera y Clavijo, quien la transcribe en su Historia, casi al pie de la letra, a pesar de la razonable desafección e injusta antipatía que manifestó siempre hacia Peña, a quien tachaba de crédulo, por desgracia, uno de estos hombres sin bastante instrucción, sin estilo, sin crítica, y sin los demás conocimientos precisos para desempeñar los difíciles encargos de cronista [8].
Con el titular «Hazaña de doce soldados españoles», refiere el encuentro de la siguiente manera:
Algún tiempo después, doce soldados españoles, que eran de un rancho y siempre marchaban unidos, habiendo pedido licencia al general para emprender solos una correría hacia los valles del estado de Anaga, ofrecieron a nuestras tropas una escena que a la verdad tenía mucho de caballería andante. Por más que los oficiales veteranos censuraron aquel arrojo, salieron de Santa Cruz los doce campeones y, corriendo armados por el valle de Igueste, penetraron hasta Taganana, en donde hicieron un considerable botín, después de haber rendido seis pastores que velaban sobre el rebaño. Ya retrocedían ufanos con la presa y entraban por el valle de San Andrés, cuando se hallaron rodeados de más de doscientos isleños, mandados por el mismo mencey Beneharo, que había convalecido de la alteración de su juicio.
Bien echaron de ver los españoles que los guanches venían resueltos a despeñarlos en el mar inmediato; así, procuraron formarse en cuadro, y tomando la palabra Rodrigo de Barrios, les dijo con entereza de ánimo: —Bárbaros, rendíos, porque hemos hecho ya la cuenta y sabemos cuántas cabezas vuestras nos toca por acero. Es de presumir que Beneharo no comprehendió el énfasis de este breve discurso, tan bravo como caballeresco; mas prendado, a lo que parece, de la singular valentía de aquellos hombres y compadecido del aprieto en que les veía, se sonrió un poco y, vuelto a sus vasallos, les advirtió que, pues no sería crédito del nombre de guanches manchar sus manos en tan corto número de enemigos, era de dictamen se les concediese paso franco para que se fuesen a los suyos.


¿Y qué hicieron los españoles? No tardaron en manifestar a los bárbaros que aquel corto número más debía de ser objeto de temores que de clemencias. Se asegura que Juan de Llarena animó a sus camaradas con las siguientes expresiones: —¿En qué nos detenemos? Afrenta será nuestra volver al real de Santa Cruz sin la presa de ganado que hemos hecho, y sin llevar la mitad de estos bárbaros maniatados... Embistámosles. Y diciendo Santiago les hicieron rostro, descargando sus mosquetes y ballestas, con increíble estrago de los guanches. Inmediatamente se echaron sobre los restantes espada en mano, con tal denuedo y felicidad que, consternados los anagueses, se retiraron el valle abajo, dejando a Beneharo solo. Este príncipe loco se defendió de los doce furiosos, hasta tanto que, sintiéndose herido, se arrojó
de un cerro muy alto, para no caer en manos de los vencedores.
Todos los pasajes de esta memorable aventura tuvieron alguna cosa de los romances del tiempo. Se refiere que, observando Francisco de Melián que Lope de Fuentes derramaba mucha sangre de una mano que tenía herida, le suplicó la atase con un lienzo, pero que éste le respondió: —Deja, amigo, que salga la sangre que quisiere, supuesto que llevamos aquí sustancia con que criar otra. Finalmente, estos doce pares de nuestra conquista entraron como en triunfo por Santa Cruz, no sin ser admirados y aun envidiados de sus camaradas [9].
Poco antes, Viera señala la presencia de Barrios en otro combate en el que resultó apresado por los guanches:
«Reencuentro de un cuerpo de guanches con los heridos de nuestro ejército».
Entre tanto el isleño Sigoñe, que con sus 400 guanches había tomado las avenidas del camino de Santa Cruz, determinaba retroceder hacia La Laguna, por haber entrado la noche, cuando, percibiendo estruendo de caballos y oyendo los sollozos de algunos españoles heridos, se apresuró a salirles al encuentro. Estos españoles eran Antón de Vallejo, Alonso Calderón, Antonio de Alfaro, Antonio de Montoya, Francisco de Mesa, Lope de Aguirre y Pedro de Fuentes, soldados de a caballo; y Juan Navarro, Martín Sardo, Juan Zapata, Lope Gallego, Rodrigo Yáñez, Diego de Cala, Juan Carrasco, Juan Delgado, Juan Ortega y Hernando Riberol, de a pie, que se retiraban a Santa Cruz para curarse de sus heridas. Escoltábanlos otros seis soldados de a caballo, Juan Perdomo, Juan Berriel, Marcos Verde, Antón Victorias,
Felipe Cuadros y Alonso Benítez, con otros seis de infantería, Francisco de Ledesma, Rodrigo de Barrios, Alonso de Calzadilla, Luis Ramírez, Diego Meneses y Juan Rebolledo.
 Barrios,Gobernador
Creyendo, pues, Sigoñe que estos españoles eran desertores de la derrota que suponía haber experimentado nuestro ejército en La Laguna, les atacó furiosa e improvisamente sobre lo más alto de la cuesta; pero a pesar de la sorpresa se pusieron en defensa nuestros soldados y se batieron con ellos por un largo rato, dando la muerte a 13 guanches e hiriendo a 26. Sin embargo, lo fragoso del sitio, la obscuridad de la noche, el número superior de los bárbaros y su propio desfallecimiento les obligó por último a rendirse todos prisioneros. Sigoñe les hizo ligar de pies y manos y, habiéndolos encerrado dentro de una cueva del barranco vecino, les puso una guardia de 100 hombres, mientras él subía a explorar el estado de los negocios en la vega de La Laguna [10].
Y con esto acaban las referencias que hemos podido obtener, relativas a la participación de Rodrigo de Barrios en la conquista de Tenerife.  Al parecer murió antes de 1506 y dejó viuda a Isabel de los Olivos, conocida como la Flamenca, y dos hijos habidos durante el matrimonio llamados Ana y Juan, cuya genealogía desglosaremos a continuación. En enero de 1499, figura con el empleo de gobernador, repartiendo solares en San Cristóbal.
Para el estudio de las las primeras generaciones de la familia hemos recurrido a los árboles que, sobre la descendencia del conquistador, formó don Juan Núñez de la Peña. Ocupan los folios 50 al 58 del tomo manuscrito conservado en la Biblioteca de la Universidad de La Laguna [11]. En la medida de lo posible hemos contrastado la información documental que contienen.

I.RODRIGO DE BARRIOS
Nada sabemos de su origen y naturaleza. El profesor Cioranescu señala que si los dos conquistadores llamados Rodrigo, de Borrios y de Barrios, citados por Espinosa y Viana, son la misma persona, y el apellido escrito con esta primera grafía no constituye una simple errata, habría que considerar la posibilidad de que procediera de las Islas, concretamente de la de Lanzarote, al formar parte en calidad de infante de la compañía de Ibone de Armas [12].
Casó en fecha desconocida con Isabel de los Olivos, la Flamenca, a la que tradicionalmente se había identificado como hija del conquistador Antón de los Olivos, a pesar de que no se le nombre como tal en su testamento. Lo cierto es que Isabel fue hija del irlandés William Peck, natural de Galway, cuyo nombre y apellido fueron castellanizados y transformados en Guillermo Piers, Piris o Pérez. Isabel dio poder a Antón Cornejo, vecino de Triana, y a Alonso Inglés, que lo era de la villa de Lepe, para cobrar la herencia de su padre, fallecido en Indias de Su Majestad, ante el escribano Juan Márquez, el 16 de septiembre de 1520 [13]. Lo que si parece posible es que la madre de Isabel fuera pariente muy próxima, quizá hermana, de Antón, al que encontramos en la documentación conservada siempre presente en el entorno inmediato de Isabel y Rodrigo. Aunque el texto de la data resulta confuso, podemos observar que los solares que les fueron asignados a ambos conquistadores en San Cristóbal, donde ya habían levantado sus casas en 1499, eran limítrofes. La fanegada de riego que le fue repartida al año siguiente a Rodrigo, también lindaba con otras dos de Antón y en un instrumento otorgado por Gonzalo Estévez, segundo marido de Isabel, ante Páez en 1508, se declara yerno de Antón de los Olivos, quizá porque éste pudo haber sido tutor de su esposa y haber mantenido con ella una estrecha relación de parentesco.
Rodrigo de Barrios falleció antes de 1506. Su testamento no se ha conservado, como tampoco el de Isabel de los Olivos que volvió a casar, una vez viuda, como queda dicho, con el portugués Gonzalo Pérez Estévez, de quien también tuvo sucesión [14].
El matrimonio tuvo dos hijos:
1. Ana de Barrios, que casó con García Rodríguez de Lemus, natural de Guimaraes en Portugal, hijo de Juan Rodríguez de Cangas Suárez de Caso y de doña Beatriz López de Lemus. Fueron padres de:
A. El bachiller Rodrigo de Barrios, beneficiado de la
Firma. Juan Rodríguez de Barrios. 1559
parroquia de Nuestra Señora de los Remedios en San Cristóbal.
B. Juan Rodríguez de Barrios.
2. Juan Rodríguez de Barrios, que sigue la línea.

II.JUAN RODRÍGUEZ DE BARRIOS
Debió nacer en San Cristóbal y allí casó con Francisca Hernández, hija de Francisco Yanes Arellano e Isabel Hernández, quienes la dotaron ante el escribano Diego de Andrade, el primero de enero de 1526 [15]. Testó Juan Rodríguez de Barrios en dos ocasiones, la primera, ante el escribano Juan del Castillo, en 11 de julio de 1559, y por segunda vez, por presencia de Francisco Márquez, el 29 de septiembre de 1564, y pidió ser enterrado en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción, en la sepultura que en ella poseía. Su mujer, Francisca Hernández de Arellano, dictó sus últimas disposiciones ante Francisco Márquez, en febrero de 1561.
Fueron sus hijos:
1.-FRANCISCO RODRÍGUEZ DE BARRIOS. Contrajo matrimonio en San Cristóbal de La Laguna, en 1558, con Catalina González de Escobar, hija de JuanGonzález y Bárbara López, que le otorgaron carta de dote ante Juan del Castillo el día 3 de julio de dicho año. Al igual que su padre, Francisco Rodríguez de Barrios dictó dos testamentos, ante los escribanos Juan de Mesa, el 4 de enero de 1581, y Benito de Ortega, el 7 de enero de 1587, ambos en La Laguna y mandó en ellos que su cuerpo fuera inhumado en la bóveda de que era dueño en la iglesia de La Concepción. Catalina González de Escobar otorgó el suyo ante Juan de Anchieta, en 1593, y pidió ser sepultada en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción.
Hijos:
Bartolomé Cairasco de Figueroa
A.-EL LICENCIADO MARCIAL RODRÍGUEZ DE BARRIOS, abogado de los Reales Consejos, que vivió en la ciudad de Las Palmas en Canaria, casado con AnaÁlvarez, de la que tuvo dos hijas. El chantre Bartolomé Cairasco de Figueroa le remitió una carta, escrita en esdrújulos,en la que hace una vívida descripción de la selva de Doramas, texto que reprodujo en su Historia, «fray Juan de Abreu Galindo» [16].

B.-EL REVERENDO PADRE FRAY GASPAR DE BARRIOS, del orden de San Francisco.
C.-MARCOS DE BARRIOS.
D.-MARÍA DE BARRIOS, bautizada en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna el día 11 de marzo de 1560, casó con el portugués Baltasar de la Mata, hijo de Maestre Juan y de Beatriz López, previa escritura dotal otorgada por sus padres ante el escribano Pedro Hernández Lordelo en 1578. Dictaron sus últimas voluntades María de Barrios y Baltasar de la Mata, en presencia del fedatario Francisco López Tamayo, el 15 de mayo de 1586, y declararon por hija única a:
Beatriz de la Mata y Barrios, b. en 1580, mujer de Francisco Navarro, vecinos que fueron de Canaria, donde procrearon a:
Doña Ana de Barrios, que contrajo matrimonio con el capitán don Antonio de Vargas, alguacil mayor de dicha Isla, y tuvieron por su hija a:
Doña Úrsula de Vargas, casó en 1665 con el capitán Gaspar Hernández deTimagada y fueron hijos suyos don Miguel, doña Ana, doña María, don Antonio, don Lucas  y don Matías Hernández de Timagada [16 bis].
E.-JUAN RODRÍGUEZ DE BARRIOS.
F.- SIMÓN DE BARRIOS.
G.-FRANCISCA GONZÁLEZ DE ESCOBAR
H.-CATALINA RODRÍGUEZ DE BARRIOS. Casó con Gaspar Simón, nacido en La Laguna y bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios el 2 de diciembre de 1548, hijo de Simón López y Francisca González [17]. Catalina Rodríguez de Barrios otorgó su testamento, ya viuda, ante el escribano Lope de Mesa, el 31 de julio de 1600. Fue su hijo:
Gaspar Simón, casado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna, el 6 de marzo de 1603, con Magdalena Marrero, hija de Benito Marrero y de Juana Bautista Núñez Gallegos, con dote ante Cosme Carreño de Prendis el 11 de mayo inmediato, y procrearon a:
El alférez Francisco Marrero, bautizado en la parroquia de La Concepción el 8 de octubre de 1607, se estableció en la isla del Hierro y en ella contrajo matrimonio con doña Isabel Quintero, hija del alférez Mateo Magdaleno y de doña María González de Mérida, quienes le otorgaron carta de dote ante Sebastián Padrón el 16 de mayo de 1637. Testaron ambos cónyuges, ante Mateo Magdaleno, el 5 de diciembre de 1583. Con dilatada sucesión.
I.-BÁRBARA DE BARRIOS, casada con N. N., avecindados en Canaria, y padres de:
Gregoria de Barrios, que casó con Miguel Alfonso de Contreras, hijo de Marcos Alfonso y Catalina Déniz de Contreras, patrono y dueño de la capilla del Santo Crucifijo en el convento de la Concepción, padres de:
a.El licenciadoMarcos Alfonso de Contreras, capellán real de la catedral de Santa Ana de Canarias, fundador de la Obra Pía de Torres.
b. Doña Ana Alfonso de Barrios, casada con el alférez Tomás Lezur de la Torre, hijo de Miguel Pérez Lezurel Viejo y de Jerónima de la Torre, con quien tuvo al licenciado don Bartolomé Lezur de la Torre, nuncio del Santo Oficio, doña Gregoria y doña Jerónima Lezur [18].
J.-SEBASTIANA DE BARRIOS.
2.-GASPAR DE BARRIOS, del que nada se sabe.
3.-BEATRIZ RODRIGUEZ DE BARRIOS, que sigue la línea.
4.-BÁRBARA RODRÍGUEZ DE BARRIOS mujer de Diego Martín de Albaida, sedero,  hijo de Diego López de Albaida, quien le otorgó recibo de dote ante Gaspar Justiniani el 27 de diciembre de 1551. Testó Bárbara Rodríguez de Barrios en Garachico, donde se habían avecindado, ante el escribano Álvaro de Quiñones en 1605, y fueron padres de:
A.-DIEGO MARTIN DE BARRIOS, bautizado en la parroquia de Santa Ana de Garachico el 2 de marzo de 1576.
B.-ANA MARTIN DE BARRIOS, recibió el bautismo
en la de Nuestra de la Concepción de San Cristóbal, el 27 de julio de 1579, falleció en la niñez.
C.-LUISA MAGDALENA DE BARRIOS, casó con Luis Díaz, que testó e instituyó capellanía, ante Gaspar Delgadillo, en 1618. Viuda y sin hijos volvió a testar Luisa Magdalena en Garachico, en 1625, ante el mismo escribano, mandó ser enterrada en la sepultura que poseía en la parroquia de Santa Ana y nombró  heredera a su sobrina Mencía de Luna, mujer de Juan Perera.
D.-DAMIANA DE BARRIOS, que contrajo matrimonio con Francisco González Tabares y se establecieron en La Habana, Cuba, donde dejaron sucesión.
E. Beatriz de Barrios, casada con Juan Luis Pimentel, tonolero, hijo de Marcos Hernández, labrador de viñas, y de Inés de Morales, con carta dotal ante Álvaro de Quiñones, en Garachico, en 1602.
5.-ISABEL RODRÍGUEZ DE BARRIOS contrajo matrimonio en dos ocasiones. La primera, con Bartolomé Rodríguez Norman, vecino de La Punta del Hidalgo, con dote ante el escribano Gaspar Justiniano el 26 de febrero de 1552. En segundas nupcias casó con Diego Martín, de profesión tonolero o tonelero, natural de Villalba de Alcor, Sevilla, e hijo de Juan Martín, ballestero, y de Catalina Rodríguez, y hermano de Juan y Alonso Domínguez Galán. Su abuelo paterno fue Diego Martín, labrador. Dispuso su última voluntad en La Laguna, ante el escribano Juan Núñez Jáimez, en 1579 y 1582. Fueron hijos del matrimonio:
A.-JUAN MARTIN DE BARRIOS.
B.-DIEGO MARTIN DE BARRIOSs, nació en La Laguna y fue bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 27 de agosto de 1573. Escribano de los del número de esta Isla, adquirió en 1614, ante el fedatario de Los Realejos Juan Sáez de Gordejuela, el
Diego Martín de Barrios
oficio de Chasna que pertenecía a Sulpicio Talarico, con el producto de la dote de su mujer, Leonor Pérez, quien así lo declaró el 16 de diciembre de 1619, por presencia de Feliciano de Gallegos. En 1616, según resulta de un expediente conservado en el Archivo Municipal de La Laguna [19], obtuvo Diego Martín de Barrios la titularidad del oficio, en lugar de Basilio Gómez del Castillo, para los lugares de Vilaflor, Abona, Adeje, Arico y La Granadilla, y lo ejerció hasta el 24 de junio de 1619, fecha en que le sucedió en el mismo Pedro de Madrid [20]. Pasó posteriormente Diego Martín de Barrios a escribir en La Laguna, en sustitución de Sebastián Borges, en el oficio decimocuarto, de 1619 a 1629, continuando en él Francisco Ruano.
Contrajo matrimonio, como queda dicho, con Leonor Pérez, bautizada en la parroquia de Santa Ana de Garachico el día 5 de diciembre de 1574, hija de Hernán González, labrador, y de Clara Hernández [21].
Dictaron sus últimas voluntades Diego y Leonor ante Agustín de Mesa, el día 30 de junio de 1622. Instituyeron una capellanía y nombraron por primer patrono a su hijo Diego Martín de Barrios. Diego Martín de Barrios, el mayor, una vez viudo, se ordenó de sacerdote.
Fueron hijos del matrimonio:
a.-El licenciado don Diego Martín de Barrios, natural de Garachico, presbítero, beneficiado de las iglesias parroquiales de San Pedro de Güímar y Santa Ana de Candelaria. El licenciado Francisco Manso de Ávila informó favorablemente sobre su genealogía, presentada al Santo Oficio, con el fin de obtener una familiatura, el 21 de octubre de 1628 [22].
b.- Clara de Barrios, falleció soltera.
c.- Juan de Barrios y
d.- Hernando de Barrios, muertos ambos antes que sus padres.
e.- Francisco Martín de Barrios.
f.- Ana de Barrios, bautizada en 1579.
6.-JUANA DE BARRIOS, casada con Cristóbal Rodríguez Norman, hijo de Luis Norman y Catalina González, de Canaria.
Hijos:
A.-ANDRÉS RODRÍGUEZ DE BARRIOS. Nació en La Laguna y fue bautizado en La Concepción el 3 de diciembre de 1563. Casó, en la misma parroquia, con Leonor Pérez, hija de Domingo Yáñez y Luisa Rodríguez Hernández, el 19 de agosto de 1591. Su recibo de dote pasó ante el escribano Juan Núñez Jáimez, el 18 de mayo de 1592. Hijos:
a.-Andrés de Barrios, casada en La Concepción, el 24 de abril de 1623, con Clara Victoria y testó ante Juan Ascanio el 10 de septiembre de 1670, fueron padres de:
(a).-Francisco de Barrios, que pasó a Indias.
(b).-Leonor de Barrios, casada con Antonio Díaz, con dote ante Luis García Izquierdo en 1646.
b.- Juan Andrés Barrios, bautizada el 14 de junio de 1592, c. en La Concepción, el 7 de marzo de 1639, con Catalina Cabrera.
c.- María de Barrios, bautizada 20 de enero de 1594, casó con Lucas Álvarez, que estaba viudo de Catalina González, el cual testó ante Juan Alonso Argüello en 1630.
d.- Francisca de Barrios, casada con N. Rizo.
e.- Ana de Barrios, bautizada el 1 de mayo de 1603.
f.- Juana de Barrios, bautizada el 6 de febrero de 1611, casada en La Concepción, el 13 de agosto de 1640, con Domingo Perera, hijo de Domingo Perera y Polonia González.
g.- Leonor Pérez de Barrios, bautizada el 1 de mayo de 1613, casada en La Concepción, el 3 de octubre de 1644, con Domingo Marrero, hijo de Gaspar Hernández del Pozo y Magdalena Rodríguez.
B.-GASPARA GUILLERMA DE BARRIOS, b. en 1584, contrajo matrimonio en la citada parroquia, el 19 de mayo de 1608, con Antón Pacheco, natural de la isla de Santa María, en las Azores, hijo de Manuel Pérez Pacheco y de María Curbelo, vecinos de dicha isla. Fue dotada ante Bartolomé Cabrejas, el 6 de mayo de 1608. Pasaron a vivir a Sanlúcar de Barrameda, donde dejaron sucesión.
C.-FRANCISCO DE BARRIOS, n. en 1569, muerto en la niñez.
D.-ANA DE BARRIOS, casó en la repetida iglesia matriz de La Laguna, el 21 de abril de 1597, con Alonso Dantes, hijo de Jorge Báez y Beatriz Dantes, con dote ante Juan Lezana de Miranda, otorgada el 3 de abril de 1597. Dejaron amplia descendencia en La Laguna.
E.- LUISA DE BARRIOS NORMAN, contrajo matrimonio donde sus hermanos, el 27 de mayo de 1591, con Diego Hernández Martín, hijo de Melchor Luis y María Martín, naturales y vecinos todos de La Laguna, con dote ante Francisco Zambrana el 20 de agosto del mismo año. Fueron padres de:
a.- El licenciado don Diego Felipe de Barrios, presbítero, beneficiado de las parroquias de Santa Ana de Garachico, Nuestra Señora de Guadalupe en Lanzarote [1639-1643] y Nuestra Señora de los Remedios de La Laguna. Familiar y comisario del Santo Oficio de la Inquisición. Bautizado en la iglesia parroquial de la Concepción de La Laguna, en 1593, testó en Garachico, ante el escribano Mateo del Hoyo, en 1656. Viera y Clavijo, al narrar los acontecimientos que se produjeron con motivo del sudor de la imagen de San Juan
Diego Felipe de Barrios
Evangelista, a la que se da culto en la iglesia de la Concepción de La Laguna, refiere que el licenciado don Pablo Gutiérrez Sotomayor, canónigo de Canaria, visitador y vicario general del obispado por el obispo Sánchez de Villanueva fue testigo, junto con el también canónigo don Juan Vélez de Valdivieso, de todos los beneficiados, y de los licenciados Luis Parrado de León y Diego Felipe de Barrios, comisario del Santo Oficio y beneficiado mayor de los Remedios, del singular prodigio [23].
El licenciado Barrios presentó informaciones de limpieza de su genealogía, ante el Tribunal de la Inquisición, el 6 de marzo de 1642, cuando desempeñaba el beneficio de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de la isla de Lanzarote, por Su Majestad, manifestando que ha muchos años días tengo deseos de ocuparme en el servicio del Santo Oficio, como lo han hecho otros ascendientes míos y para más bien hacerlo, suplico a vuestra señoría me haga merced, atento que no hay comisario en dicha isla de Lanzarote y que en mí concurren las calidades necesarias para dicho oficio, de nombrarme en el ínterin por tal comisario y para ello doy mi genealogía [24].
b.- Francisca de Barrios, que contrajo primer matrimonio con Cristóbal Martín Algarabío, con dote ante Bravo en 1616 y, por segunda vez casó con Hernando de Torres.
Fueron hijos del primer matrimonio:
(a).-Juan Felipe de Barrios, que casó con Ángela Hernández, el 4 de junio de 1651, en la parroquia de Los Remedios.
(b).-Don Cristóbal Felipe Martín de Barrios, practicó informaciones de limpieza de sangre en 1639, ante Antonio Reguilón Villarreal, notario público, con motivo de su nombramiento como capellán real de la iglesia catedral de Canaria.
(c).- Luisa Martín, vecina de Icod.
(d).- Juana Martín de Barrios, casó, en la parroquia de La Concepción, el 1 de agosto de 1655, con Pedro Hernández de Amador, hijo de Amador González y María Perdomo, y
(e).- María Francisca de Barrios, casó con Esteban Hernández de Guzmán, con dote en 1638, otorgada por sus padres en presencia  del escribano Mateo de Heredia. Cristóbal Felipe Hernández de Barrios, en nombre de su tía Francisca de Barrios, viuda de Esteban Hernández de Guzmán, residente en la ciudad de Canaria, hizo informaciones de la limpieza de sangre de ambos cónyuges por ante el corregidor don Félix Virto de Espinal, en 19 de diciembre de 1695. Padres de:
-Agustín Hernández de Guzmán, casado el 20 de junio de 1670, con María Hernández Fiallo de la Mota, hija de Juan Alonso y Águeda Hernández Fiallo.
Del segundo matrimonio procedió:
(a).-Esteban de Torres y Barrios, casado el 25 de febrero de 1669,  con María de Brito y Acorda, hija de Pedro Hernández de Acorda y de Nicolasa María de Brito.
(b).-María Francisca de Barrios, casada el 17 de junio de 1663, en la parroquia de La Concepción, con Domingo Rodríguez de Olivera, hijo de Domingo Rodríguez de Olivera y María Benítez.
c.- Juan Martín de Barrios, bautizado en la parroquia de La Concepción el día 29 de junio de 1600.
d.- Melchor Hernández de Barrios, bautizado donde su hermano el 4 de enero de 1604.
c.- Tomás Hernández de Barrios, bautizado como sus hermanos precedentes en La Concepción, el 11 de mayo de 1607.
d.- Cristóbal Rodríguez de Barrios, bautizado en La Concepción el 5 de julio de 1608, casó en la misma parroquia el día primero de octubre de 1636, con Ana Lorenzo, hija de Juan Lorenzo e Inés López de Villavicencio y ésta, a su vez hija  de Pedro Núñez de Villavicencio y Catalina Rodríguez [25].
Hijos:
(a).-Diego Rodríguez Felipe de Barrios, casado con María Camejo.
(b).-Juan Rodríguez Felipe de Barrios, casado con Beatriz Tejera Machado, hija de Juan González de Castro y de María Tejera, padres de:
- El capitán Amaro Rodríguez Felipe de Barrios, alias Pargo.
Capitán Amaro Pargo
- Don José Rodríguez Felipe de Barrios, casado con doña Juana Squinart Machado, hija de don Francisco Machado y doña Juana Squinart, y tuvieron a doña Ana Rodríguez Felipe, mujer del doctor don Amaro González de Mesa.
- Doña Francisca Tejera de Barrios Machado, casado con el capitán don Isidro José González de Mesa.
- Doña Ana Teresa Machado, mujer de Juan Yanes Felipe.
- Sor María de Santa Beatriz.
- Sor Clara de San Juan Bautista.
- Sor Juana de San Vicente, monjas profesas en el convento de Santa Catalina de Sena de La Laguna y de
- Pedro Rodríguez Felipe de Barrios, fallecido antes que sus padres. Testaron Juan y Beatriz ante el escribano Jerónimo Suárez Ramírez el 24 de julio de 1714 [26].
(c).- Luisa Rodríguez de Barrios Villavicencio, casada con Domingo Álvarez Camejo, hijo de Andrés Álvarez Camejo y Juana Rodríguez, establecidos en La Habana, Cuba.
e.- María Nicolasa de Barrios, bautizado el 23 de octubre de 1610 en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción.
F.- MARÍA DE BARRIOS, bautizada en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna, el 11 de febrero de 1573, falleció en la infancia.
a.- Petronila, bautizada en 1578.
b.- María de Barrios, recibió el bautismo donde su hermana, el 7 de mayo de 1581.
c.- Francisco de Barrios, bautizado en 1587.
d.- Clara de Barrios, contrajo matrimonio en La Concepción, el 6 de octubre de 1589, con Luis Rodríguez de Bolaños, dotada por sus padres ante el escribano Pedro Hernández Lordelo el 20 de agosto de 1591. Dictó Luis Rodríguez de Bolaños sus últimas voluntades a su pariente, el escribano Diego Martín de Barrios, el primero de septiembre de 1622, por las que fundó capellanía con imposición de misas a Nuestra Señora de la Concepción, y su mujer el 4 de dicho mes y de nuevo volvió a testar al año siguiente ante el mismo.
Fueron padres de:
Catalina de Barrios, que casó con Diego de Bethencourt, hijo de Hernando Amado y de Ana de Bethencourt y testó ante Mirabal el 22 de agosto de 1658 [27]. Con sucesión en Tejina.

7. CATALINA RODRÍGUEZ DE BARRIOS, casó con Hernán Rodríguez, hijo de Rodrigo Yanes y Catalina Hernández, quien le otorgó recibo de dote ante Gaspar Justiniano en 14 de febrero de 1561.
Hijos:
A.- RODRIGO DE BARRIOS, casó en la parroquia de La Concepción, el 19 de julio de 1587, con María Hernández Crespo, hija de Juan Hernández Crespo e Inés Hernández, con carta de dote ante el escribano Francisco de Mesa otorgada el día posterior a la celebración del matrimonio. Testó Rodrigo por presencia de Francisco Zambrana, el 23 de noviembre de 1613, y su mujer hizo escritura en nombre de sus menores hijos, ante Pablo Guillén, el 22 de marzo de 1620. Debe referirse a este Rodrigo de Barrios don Juan Núñez de la Peña cuando narra en su obra, el suceso siguiente: En el año de 1582 por el mes de junio, comenzó en la ciudad de La Laguna en esta isla de Tenerife la enfermedad de las landres, y peste que duró dos años poco más, y en ella murió mucha gente tanta, que ya no se podían enterrar en las iglesias, así los enterraban en el llano donde hoy está la ermita de San Juan, y abajo de la ermita de San Cristóbal que era enfermería de estos enfermos. Sucedió en este tiempo que un hombre vecino de esta ciudad, llamado Rodrigo de Barrios bisnieto de Rodrigo de Barrios, conquistador de esta isla, le dio la enfermedad del contagio quitósele la habla, y juzgándole todos por muerto, le echaron en la zanja que era honda, donde echaban los difuntos, y yendo al segundo día a enterrar otros cuerpos le hallaron sentado sobre sus compañeros, sacáronle, y vivió muchos años casado, dejando muchos hijos, de quienes hay larga sucesión en la Villa de Arriba.
Fueron hijos Rodrigo y María:
a.- Juan Rodríguez de Barrios, b. el 22 de abril de 1590, casado con Ana López, hija de Pedro Afonso y Jacomina López, con dote ante Bartolomé de Cabrejas, y fueron vecinos de Tacoronte. Otorgó su testamento ante Diego Martín de Barrios, el 2 de junio de 1632, y volvió a hacerlo por presencia de Luis García Izquierdo el 25 de abril de1650. Mandó ser sepultado la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción, en el sepulcro de sus padres. Hijos del matrimonio:
(a).- Bernabé Rodríguez de Barrios, casado el 28 de noviembre de 1655, con Ana de Bethencourt, hija de Miguel de Sosa y de María de Bethencourt, padres de:
Cristóbal Rodríguez de Barrios, casado el 1 de octubre de 1687, con María Guirola de Medina, hija de Manuel Pérez Guirola y María de Medina.
Isabel de Barrios, mujer de Manuel Afonso.
(b).- Catalina Rodríguez de Barrios.
(c).- María de la O Rodríguez de Barrios, casada el 10 de abril de 1636 con Alonso Gómez, hijo de Sebastián González y Juana Marrero.
(d).-Juana de Barrios, casó, el 1 de noviembre de 1640, con García Rodríguez de Ayala, hijo de Agustín Rivero y Leonor Pérez y fueron padres de:
Leonor Pérez de Ayala, casada el 21 de abril de 1681, con Juan Francisco, hijo de Francisco Juan y de Ana de la Encarnación.
José García de Barrios, casado el 28 de diciembre de 1681, con María de Melo, hija de Bartolomé Báez de Melo y de María de Sosa.
—Gaspar García.
—María de Barrios.
—Leonor.
—Pedro.
—Violante.
(e).-Ana Rodríguez o López de Barrios, casada en la parroquia de La Concepción, el 10 de abril de 1636, con Marcos Luis, hijo de Bartolomé Álvarez y María Berriel. Hijos:
—Luis.
—Juan.
—Mateo.
—Inés.
—Manuel.
—María.
—Petronila.
—Ana.
—María.
—Dominga.
—Un fraile.
(f).-Inés Rodríguez de Barrios, casada en la parroquia de La Concepción de La Laguna, el 30 de octubre de 1651, con Agustín Hernández Cuervo, hijo de Diego Hernández Cuervo y Ana Rodríguez de Alpízar [28]. Padres de:
Juan Hernández Cuervo, casado con Ana Rodríguez.
Mateo Hernández Cuervo, casado en la parroquia de La Concepción, el 28 de diciembre de 1687 con Ana María de Bethencourt, hija de Marcos de Bethencourt y Magdalena Rodríguez, naturales y vecinos de Tejina.
—Inés.
—Manuel.
—María.
—Petronila.
Ana Rodríguez de Barrios, casada el 20 de enero de 1687, con Luis de Orta, viudo de Marcelina de la Cruz.
—María.
—Dominga.
b.- Sebastiana Rodríguez de Barrios, bautizada el 24 de enero de 1593.
c.- Pascual de Barrios, casado con Isabel González, y fueron padres de:
(a).- Juan de Barrios, casado el 19 de octubre de 1648, con Magdalena Estévez, hija de Salvador Estévez y Ana de Fuentes.
(b).- Pedro González de Barrios, casado en la parroquia de La Concepción, el 25 de marzo de 1650, con María Rodríguez Rizo, hija de Bernardo Rizo y Beatriz Rodríguez.
(d).- Tomás de Barrios.
(f).- Catalina González de Barrios, casada en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios, el 6 de noviembre de 1661, con el alférez Cristóbal Lobo de Alpuín, hijo de Antonio de Alpuín y de Catalina de Sena Sotomayor.
(g).- Beatriz de Barrios.
(h).- Ana de Barrios.
(i).- María de Barrios.
d.- Francisca Hernández de Barrios, bautizada el 6 de enero de 1595, casó en tres ocasiones, la primera con Bernabé Afonso, hermano de Ana López, con dote ante Marcos Gutiérrez Bravo en 1615, por segunda vez contrajo matrimonio, con Gaspar Rodríguez y, en terceras nupcias, con Domingo Hernández Fariña, quien testó ante Juan de Ascanio el 17 de junio de 1667. Con descendencia de los tres matrimonios.
e.- Hernando de Barrios, bautizado el primero de mayo de 1600, casado con Bárbara Marrero, hija de Sebastián González y Juana Marrero, padres de:
(a).-Juana Marrero de Barrios, casada el 15 de enero de 1657, con Luis Pérez, hijo de Francisco Pérez y Antonia Francisca.
(b).- Isabel de Barrios.
f.- Rodrigo de Barrios, casado con María Suárez y fueron padres de:
(a).-Pedro Suárez de Barrios, casado en la parroquia de La Concepción de La Laguna, el 15 de agosto de 1660, con María Ascencio de Vera, hija de Felipe García y Ana Ascencio.
(b).-Juan de Barrios, bautizado en la parroquia de La Concepción el 13 de julio de 1631, casó en la de Nuestra Señora de los Remedios, el 13 de octubre de 1653, con FranciscaManuel, hija de Salvador Francisco y de Ana Martín.
g.- Benito Hernández de Barrios, bautizado el 6 de enero de 1608, casado con Isabel Hernández, y fueron padres de:
(a).- Domingo Hernández de Barrios, casado el 14 de octubre de 1657, con Águeda MaríaToscano,hija de Andrés Rodríguez y María Toscano.
(b).- Juan Hernández de Barrios, casado el 23 de enero de 1656, con Juana Pérez, hija de Juan Pérez y María de Medina.
(c).- María de Barrios.
(d).- Luis de Barrios.
(e).- Diego de Barrios.
h.- María Hernández de Barrios, casó con Cristóbal González Acero, padres de:
(a).-Salvador González Acero.
(b).-María.
i.- Catalina Hernández de Barrios, bautizada el 18 de octubre de 1610.
j.- Isabel Hernández Crespo de Barrios, bautizada el 2 de abril de 1614, casado en la parroquia de La Concepción, el 30 de octubre de 1636, con Sebastián Rodríguez Correa, hijo de Juan Correa y Ana Rodríguez. Hijos:
(a) Domingo Rodríguez Correa, casado en La Concepción el 7 de octubre de 1675, con Juana Delgado, hija de Amaro Delgado y María Felipe.
(b)   Isabel Hernández-Crespo, casada con Juan de Sosa.
B.-JUAN FRANCISCO DE BARRIOS, contrajo matrimonio en la parroquia de La Concepción, el 31 de julio de 1595, con María González, hija de Gonzalo Pérez y Catalina González, quienes la dotaron ese año ante Rodrigo Sánchez del Campo. Falleció en La Laguna, el 17 de noviembre de 1629, y formalizó su testamento ante Diego Gómez, el 10 de septiembre anterior. Hijos:
a.- Catalina González de Barrios, casó el 28 de enero de 1619, dotada por sus padres ante Pablo Guillén del Castillo el día 6 de dicho mes y año, en la parroquia de La Concepción, con Hernando de Acorda, hijo de Diego Hernández de Acorda y Bárbara Pérez.
b.- Ana Francisca González de Barrios, casada el 28 de enero de 1619, con Lucas deSánchez de Arocha, hijo de Cristóbal de Arocha y de Bernardina Tabares [29], previa dote otorgada por sus padres ante Pablo Guillén del Castillo en 6 he dicho mes y año.
c.- María Francisca de Barrios.
d.- Juan Francisco de Barriosalias la Muerte, casado con Ana Francisca.
e.- Francisco Juan de Barrios, casado con Dominga González.
f.- Francisca González de Barrios.
g.- Clara Francisca Márquez, casada el 6 de noviembre de 1589, en la parroquia de La Concepción, con Lucas Rodríguez.
h.- Beatriz González de Barrios casada con Andrés Suárez.
i.- Isabel Francisca de Barrios, casada con Amaro Hernández Martín.
C.- ISABEL DE BARRIOS, casada con Juan Gómez.
D.- FRANCISCA DE BARRIOS, casada con Pedro Martín, con dote ante Alonso Gallego el 2 de septiembre de 1584. Dictó su testamento Francisca de Barrios ante el escribano Pedro de Ocampo el día 14 de agosto de 1589, y ordenó que su cuerpo fuera inhumado en la sepultura de sus abuelos, en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción.
Hijos:
a.- Juan Martín de Barrios, bautizado el 12 de abril de 1597, fallecido en la infancia.
b.- Lucía de Barrios, bautizada en La Concepción, como su hermano, el día primero de julio de 1588, que también murió en la niñez.
8.- ANA DE BARRIOS, contrajo matrimonio con Esteban de Moreras, hijo de Domingo Martín y Juana de Morón Moreras, y fueron dotados por los padres de ésta, Esteban de Moreras y Lucía Hernández, ante el escribano Simón de Azoca, en enero de 1568. Fueron padres de:
a.- Benito, bautizado en La Concepción en 1575.
b.- Blas, bautizado en 1577.
d.-. Francisco, en 1578.
e.- Pedro, bautizado en 1579.
f.- Esteban, bautizado el 1582.
9. FRANCISCA DE JESÚS DE BARRIOS. Tuvo tres hijos naturales con el licenciado Blas Toro de Montesdeoca, hijo de Gaspar de Torres y de Inés de Montesdeoca, beneficiado de las parroquias de Nuestra Señora de los Remedios de La Laguna y, más tarde, de la de Santa Ana de Garachico.
Francisca de Jesús de Barrios
Testó Francisca de Jesús, ante el escribano Gaspar de Palenzuela, el día 8 de abril de 1596 [30].
a.- Juan de Montesdeocaque casó con doña María Ana de la Coba y Armas, previa dote otorgada ante Sarmiento, el 14 de septiembre de 1598.
Hijos:
(a).- Doña Ana Montesdeoca de la Coba, casada con el capitán Fernando Romo, sin sucesión.
(b).- Doña Francisca de la Encarnación.
(c).- Doña María de San Bernardo.
(d).- Doña Catalina de la Cruz.
(e).- Doña Juana de San Lorenzo y
(f).- Doña Isabel de San Felipe, las cinco monjas en Icod de los Vinos.
(g).- Doña Margarita Montesdeoca.
b.- El capitán Lorenzo de Montesdeoca y Torres, contrajo matrimonio con Isabel Antonia, otorgó sus últimas voluntades ante el escribano Tomás Andrés de Figueroa en 1648, y fundó capellanía.
Hijos:
(a).- Doña María Montesdeoca, casada con don Diego Carreño de Prendis, regidor de Tenerife,
(b).- El padre fray Juan Lorenzo, capuchino.
(e).- Doña Sebastiana, monja.
(f).- El sargento mayor don Cosme Carreño de Prendis, regidor de Tenerife, casado con doña María Soler de Padilla y Castilla, señora del heredamiento de Vilafllor.
c.- María de Montesdeoca, que contrajo matrimonio con Juan Franiel o Franel, mercader, natural de Brujas, y obtuvieron carta dotal ante Sarmiento en 1595. Dispuso su testamento María de Montesdeoca ante el escribano de Garachico Baltasar Delgadillo en 1627 y se procedió a la partición de sus bienes, ante Tomás Andrés, tres años más tarde.
Tuvieron la descendencia que sigue:
(a).-Blas Franiel, casado con doña Ana del Corral, originaria de las Indias de Su Majestad. Fueron padres de:
-El capitán Blas Franiel, que no tomó estado.
-Doña Jerónima Franiel.
-Doña Magdalena Franiel, que fue segunda marquesa de la Fuente de Las Palmas por herencia de su hijo. Casó en dos ocasiones, la primera con don Diego Sotelo y, en segundas nupcias, con don Lucas de Alzola. Del primer matrimonio fue fruto don Diego Sotelo, primer marqués de la Fuente de Las Palmas y caballero de la Orden de Calatrava, c. con doña Catalina Benítez de Lugo, sin sucesión [31].
(b).-Doña Francisca Franiel, casada con Conrado de Brier Falverges, mercader, natural de Amberes, con quien fue madre de:
-El capitán don Conrado Brier Franiel.
-Doña María Brier, que permaneció soltera.
-Don Juan de Brier, soltero, otorgó testamento el 23 de agosto de 1673, ante Juan PérezRamos, escribano de Garachico.
-Doña Ana de Brierque contrajo primer matrimonio en la parroquia de Santa Ana de Garachico, el 29 de junio de 1645, con el capitán Lázaro Rivero de Escobar. En segundas nupcias volvió a casar, en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción de La laguna, el 16 de enero de 1664, con don Francisco Tomás de Franchy Alfaro, caballero de la orden de Alcántara. De ninguno de ambos enlaces tuvo posteridad doña Ana, que por su testamento otorgado el 21 de julio de 1696, ante el escribano Francisco Fernández, instituyó mayorazgo en cabeza de su sobrino don Juan José de Brier y falleció, en Garachico, el 23 de octubre de 1698.
Su lejano pariente, el historiador don Juan Núñez de la Peña, en la página 329 de su Conquista y Antigüedades de las Islas Canarias, menciona a don Francisco Tomás y doña Ana por haber donado, en 1670, a la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios de La Laguna, el Cristo y su cruz de filigrana de plata, que se conserva en el altar mayor del templo [32].
Escribe, a propósito, Peña:
[…] la una es confraternidad de capellanes, que hacen fiesta al santísimo Crucifijo de los Remedios, por el día del Triunfo de la Cruz a 16 de julio, y nombran dos capellanes, y un
Cruz de los Remedios
caballero ciudadano soltero por Priostes, y gastan muchos ducados en celebrarla con fuegos y comedias y libreas, y otros festejos; tiene esta soberana imagen una Cruz, y peana de filigrana de plata con cristales, prodigiosa hechura, que en el año de mil seiscientos y setenta la dieron al santo Cristo, por su devoción el capitán don Francisco Tomás de Alfaro y Franquis, caballero de la orden de Alcántara, y su esposa doña Ana de Briel, y Barrios; están por memorias las armas de estos dos devotos, esculpidas debajo de un escudo en la peana, y devotamente se obligaron a tener la Cruz en ser, y de aderezar a costa de su hacienda perpetuamente cualquiera pieza que se quebrare; y los capellanes en agradecimiento, por lo que les toca en la autoridad de su confraternidad, le hicieron cortejo con obligación de darle todas las veces que el santo cristo saliese en procesión un báculo, para que gobierne como prioste, y de ir a buscar a su casa la santa cruz con hábitos decentes, y doce hachas y volverla, para que la guarde a su casa, todo es en utilidad de la confraternidad
.
10.INÉS DE BARRIOS, a la que sus padres señalaron bienes dotales ante Pedro Hernández Lordelo, en 1577, para que contrajera matrimonio con Nuño González, mercader, hijo de Gaspar González, de Canaria. Se establecieron en Garachico, donde dictó sus últimas voluntades Inés de Barrios, en 1589, ante el escribano Álvaro de Quiñones. Viudo Nuño casó por segunda vez con Catalina de Ortega, con la que tuvo a María y un póstumo, según declara en su testamento otorgado ante el citado escribano Álvaro de Quiñones, en 1597. Fueron hijos de Inés y Nuño:
a.- Guiomar de Barrios, bautizada en la parroquia de La Concepción de La Laguna el 2 de febrero de 1578. Falleció en la infancia.
b.- Juliana de León, casada en primeras nupcias con Sebastián Hernández, hijo de Baltasar Hernández y Luisa Rodríguez, naturales de La Palma, con dote ante Pedro de Urbina, en Garachico, en 1596 y, por segunda vez, con Bartolomé Díaz de Mesa, hijo de Gonzalo Díaz, quien le otorgó recibo de dote ante Álvaro de Quiñones, en 1597.
c.- Juan de León.
d.- Amaro.
e.- Francisco, debió morir en la niñez, porque no lo nombra su padre en el testamento.
11.-CLARA DE BARRIOS, beata.

III.BEATRIZ RODRÍGUEZ DE BARRIOS
Hija de Juan Rodríguez de Barrios y de Francisca Hernández Arellano, casó en La Laguna con Pedro Martín Centeno, quien le dio recibo de su dote ante el escribano Gaspar Justiniano, el 21 de marzo de 1549.
Fueron hijos del matrimonio:
1.- SALVADOR MARTIN DE BARRIOS, hijo primogénito, contrajo matrimonio con Isabel Pérez y se avecindaron en Tacoronte, fue su hija:
a.- María Pérez, que llamaban la Menora, y casó con Gonzalo Hernández, con quien procreó a:
(a).- Andrea Hernández de Barrios, mujer de Juan Díaz de la Fuente.
(b).- Ellicenciado Blas Hernández de Barrios, presbítero.
Blas Hernández de Barrios
Su madre le instituyó patrimonio para que se ordenase. Mayordomo de la cofradía del Santísimo Cristo de los Remedios entre 1674 y 1682, construyó el nuevo retablo para la imagen del titular y  por ajuste de cuenta me quedó debiendo la dicha cofradía dos mil doscientos  y cuarenta y tres reales y tres cuartos y tengo en mi poder del tiempo que hice el retablo a la dicha imagen del Santísimo Cristo, un remate del retablo viejo que tenía y en que está en la testa un cuadro de San Pedro, el cual dicho remate está dorado y respecto a que no tuvo lugar para ponerse lo traje a mi casa donde aquí está, el cual valdrá de cuatrocientos a quinientos reales, como así mismo pertenece a la misma cofradía un cuadro de la hechura de una Custodia y descontando el valor de uno y otro, lo demás que sobra de lo que me debe la dicha cofradía se lo remito y mando a la dicha cofradía y así es mi voluntad, según refiere en sus últimas voluntades otorgadas el día 20 de junio de 1692, ante el escribano Juan Machado Fiesco, en las que pidió ser sepultado en la capilla del Santísimo Cristo de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Remedios, amortajado con sus vestiduras sacerdotales. Falleció ese mismo año, después de dictar un codicilo, ante el mismo fedatario, el 18 de julio inmediato [33].
(c).- Catalina Pérez, mujer de Álvaro Rodríguez.
(d).- Isabel Rodríguez de Barrios, falleció soltera.
2.-GASPAR DE BARRIOS, que continúa la línea.
3.- MAGDALENA DE BARRIOS. Nació en La Laguna y recibió el bautismo en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 27 de septiembre de 1554. Contrajo matrimonio, en la misma iglesia, el 19 de octubre de 1589, con Francisco Núñez de la Peña.
Hijos:
a.- Andrés Núñez de la Peña, bautizado donde su madre, el 29 de noviembre de 1590. Pasó a Indias de Su Majestad y allí murió junto con su padre.
b.- Manuel Núñez de la Peña, establecido, también, en Indias.
c.- Salvador Núñez de la Peña, casó en la parroquia de Santa Ana de Garachico con doña Juana de Contreras Angelín, hermana de Diego Angelín, e hijos ambos de Onorato Angelín y Jerónima de Contreras; la que fue dotada por su madre y hermano ante el escribano Salvador Pérez de Guzmán, en dicho puerto en 1620. Testaron Salvador y Juana ante los escribanos Juan Alonso Argüello, en 1636, y Nicolás Guillén, el 11 de febrero de 1672, respectivamente. Fueron padres de:
(a).-El alférez Ambrosio Núñez de Angelín, escribano del número de los de la isla de Tenerife, casado con Mariana Lezur de la Torre,
Ana Lezur de la Torre
hija de Miguel Francisco Lezur de la Torre y de su primera mujer, Juana Francisca González Álvarez, con dote por importe de once mil seiscientos reales, que le otorgaron sus padres ante el escribano Juan Alonso Argüello en 1660. Viuda Mariana Lezur, volvió a casar en Santa Catalina Mártir, con el ayudante Matías de Ossorio, que también lo estaba de María Romero. Hijos del primer matrimonio fueron:
-Mariana Lezur de Angelín, que casó en la citada parroquia en 1681, con Domingo Ravelo, viudo de Francisca Bautista, vecinos del Puerto de La Orotava.
-Juana Lezur de Angelín, contrajo matrimonio en la repetida parroquia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte, con el alférez Domingo Fernández de Rivera, viudo de María Ana Lorenzo, vecinos de La Laguna. Fallecido éste, repitió matrimonio con Gonzalo Luis Martínez, hijo de Gaspar Luis Martínez y de Gaspara Rodríguez, oriundos de La Orotava.
-Josefa Micaela Lezur de Angelín que casó donde sus hermanas, con Pedro de Zulueta, hijo de Francisco de Zulueta y Ana de Uriarte, naturales de Vizcaya.
(b).- Doña Mariana Núñez.
(c).- Doña Jerónima de San Diego y
(d).- Doña Juana de Santa Margarita, monjas claras.
(e).- Doña Madalena de la Peña Angelín, soltera.
d.-El capitán don Juan Núñez de la Peña, ayudante de sargento mayor en 1646, año en que también desempeñó la mayordomía del Cabildo y la administración del hospital de Dolores en 1665 y 1666. Había nacido en La Laguna y fue bautizado en la parroquia de La
Firma de Juan Núñez de la Peña
Concepción, el 28 de noviembre de 1599, en la que contrajo matrimonio con doña María de Solís Muñoz, hija de Cristóbal de Solís y Leonor de la Cruz, con carta dotal ante Diego de Paz, otorgada el 31 de agosto de 1625. Dictó su testamento don Juan Núñez de la Peña por presencia del escribano Francisco Mirabal, el 21 de julio de 1675, y fallecido, recibió sepultura en el convento de San Agustín de La Laguna. Fueron padres de:
(a).-El doctor don Francisco Núñez de la Peña, presbítero, beneficiado, cura de Burguillos, en la diócesis de Toledo, que premurió a sus padres.
(b).-Sor Leonor Clara de San Francisco, nacida en 1634, monja, falleció siendo novicia en el convento de Santa Clara de La Laguna.
(c).-Doña Magdalena de Peña, nacida probablemente en 1637 y muerta en 1705. Casó con el capitán don Miguel de Palenzuela y Lugo, natural de Buenavista, hijo del capitán Martín de Palenzuela y Lugo y de doña María Méndez de Fonseca, en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios de La Laguna, el 19 de enero de 1681 [34].
(d).-El licenciado don Juan Núñez de la Peña, cronista general, recibió el bautismo en la parroquial de La Concepción, el 31 de mayo de 1641, de manos de su pariente el beneficiado, licenciado Diego Felipe de Barrios, mientras le sostenía y apadrinaba en la pila su deudo, el licenciado Diego Martín de Barrios. Falleció en la ciudad de San Cristóbal de La Laguna el día 3 de enero de 1721 y fue sepultado en el claustro del convento de San Agustín, bajo una loza en la que podía leerse el siguiente epitafio:
Haec est requies mea. Año 1707.
Piadoso cristiano, amigo,
Un pecador que aquí yace,
Te ruega por caridad
Digas: Requiescat in pace.
(e).-Sor María de Santa Teresa Solís, nacida en 1643, monja profesa de Santa Clara.
(f).-Sor Juana del Espíritu Santo, nacida en 1646, monja en el monasterio donde se encontraban sus hermanas, falleció a los once meses y algunos días de su profesión [35]. Por estas dos últimas, que profesaron de velo negro, dio su padre de dote dos mil ducados en tributos al citado monasterio.
4.-ISABEL DE BARRIOS, que fue bautizada en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna, el 27 de febrero de 1558. Casó con Sebastián Pérez y se establecieron en Tacoronte con sus hijos:
a.- Pedro Pérez de Barrios, que no tuvo sucesión.
b.- Sebastián Pérez de Barrios, que casó y dejó descendencia en Icod de los Vinos.
c.- Beatriz Rodríguez de Barrios, mujer de Pedro González Muxica, vecinos que fueron de La Matanza y padres de:
(a).-Pedro Muxica.
(b).-Tomé Pérez, casado con Ana Díaz, sin sucesión.
(c).-Lucía Rodríguez de Barrios, mujer de Francisco Rivero, con descendencia en Tacoronte.
d.- María de Barrios, que contrajo matrimonio, el 18 de agosto de 1626, con Pedro González o Hernández Romero, hijo de Manuel González y de María Pérez, y fueron padres de:
(a).-Pedro Hernández Romero.
(b).-Manuel Pérez Romero, marido de María Hernández Ossorio, hija de Juan Ossorio y María Hernández.
(c).-María de Barrios, que casó con el viudo Juan Viera.
(d).-Francisca de Barrios, mujer de Ambrosio González.
e.- Juan Pérez de Barrios, quien casó con María Francisca, padres de:
(a).-María Francisca.
(b).-Pedro de Barrios, casado con María Rodríguez y fueron padres de:
-Domingo de Barrios, casado el 17 de junio de 1677, con Juana Andrés, hija de Gregorio Andrés
-Juana de Medina.
(c).-Luis de Barrios, muerto en Indias sin dejar sucesión.
f.- Catalina Pérez de Barrios, casada con N. N., de donde proceden los de esta familia en Valle de Guerra, Candelaria y Güímar.
g.- Manuel Pérez de Barrios, marido de Juliana Martín, con dote ante Miguel Jerónimo en 1624, padres de:
(a).-Beatriz.
(b).-María
(c).-Juana.
5.-MARÍA DE BARRIOS, nacida en La Laguna y bautizada en la parroquia de La Concepción el 7 de abril de 1561. Contrajo matrimonio con Gonzalo Hernández Cuervo y fueron vecinos del Valle de Santiago, donde se criaron sus hijos:
a.- Juan Francisco de Barrios, casado en dicho Valle.
b.- Francisco de Barrios.
c.- Beatriz de Barrios.
d.- Gonzalo Rodríguez de Barrios.
e.- Francisca de Barrios, mujer de Antonio Arbelo.
6.-FRANCISCA DE BARRIOS, que casó con Juan Pérez, con dote ante Bernardino de Madrigal el 28 de julio de 1596.
7.-PEDRO DE BARRIOS, bautizado en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Concepción de La laguna, el 14 de junio de 1562.
8.-ANA DE BARRIOS, bautizada también en La Concepción, el 4 de noviembre de 1562.
9.-PEDRO DE BARRIOS, que recibió el bautismo donde sus hermanos precedentes, el 20 de enero de 1575.
10.-CATALINA DE BARRIOS, mujer de José García, hijo de García Báez y de Isabel Alonso, vecinos de Tacoronte, con descendencia en dicho lugar. Dictó su testamento José García ante el fedatario Juan del Castillo, el 12 de julio de 1578. Fue su hijo:
a.- Pedro García de Barrios, bautizado en la parroquia de San Pedro Apóstol del Sauzal, el 12 de marzo de 1581, casado con Catalina González. Testó ante Luis García Izquierdo el 10 de marzo de 1644 y fueron padres de:
(a).- Isabel Díaz, casada con Cristóbal Rodríguez Camejo.
(b).- Felipe García de Barrios, casado con Ana Ascencio de Vera, con dote ante Diego Gómez el 5 de agosto de 1633.

IV. GASPAR DE BARRIOS
Nació en La Laguna y recibió el bautismo en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 10 de enero de 1569. Contrajo matrimonio en ella, el 11 de noviembre de 1595, con María Hernández, hija de Domingo Yáñez y Luisa Hernández, quienes la dotaron ante el fedatario Pedro de Ocampo el día 12 de agosto de dicho año. Dispuso sus últimas voluntades ante su pariente el escribano Diego Martín de Barrios, el 17 de julio de 1623. Fueron sus hijos:
1.- PEDRO MARTIN DE BARRIOS, bautizado en La Concepción el 22 de julio de 1600. No dejó sucesión.
2.- JUAN MARTIN DE BARRIOS, que casó con María Estévez y procrearon a:
Leonor Pérez de Barrios, que celebró esponsales en la repetida parroquia de La Concepción, el 29 de septiembre 1653, con Lucas Rodríguez Galván, hijo de Juan Rodríguez Galván y Catalina Sánchez.
3.-NICOLÁS HERNANDEZ DE BARRIOS, que sigue la línea sucesoria.
4.-GASPAR DE BARRIOS, muerto en la infancia.
5.-DOMINGO HERNÁNDEZ DE BARRIOS quien, al parecer casó y no dejó descendencia.
6.- MANUEL DE BARRIOS, casado y sin hijos, con María Hernández.
7.-MARÍA PETRONILA DE BARRIOS que contrajo matrimonio en la parroquia de La Concepción el 21 de octubre de 1630, con Juan Hernández, y recibió dote de sus padres ante el escribano Diego Gómez, el 12 de octubre anterior. Padres de:
a.- María de la Cruz de Barrios, casó en la parroquia de La Concepción, el día 9 de julio de 1657, con Bartolomé Machado, hijo de Bartolomé Machado y Catalina Díaz, vecinos del Sauzal.
b.-Gabriela Hernández de Barrios, celebró esponsales en la repetida parroquia, el día 3 de noviembre de 1659, con Diego Pérez, hijo de Gonzalo Pérez y Nicolasa de Moreras.
8.- ÁNGELA MIGUEL DE BARRIOS, bautizada en la parroquia de La Concepción el 4 de octubre de 1606, casó en ella, el 16 de junio de 1631, con Miguel Hernández y fue dotada por sus padres el 9 de julio inmediato ante el escribano Diego Gómez.

V. NICOLAS HERNANDEZ DE BARRIOS
Nació en La Laguna. Contrajo matrimonio con
Firma de Nicolás Hernández de Barrios
María Ana Lorenzo la Mayor, hija de Lorenzo Pérez y Clara Domínguez, y se establecieron en Tacoronte, donde nacieron sus hijos:
1.-JUAN NICOLÁS DE BARRIOS, que sigue la línea sucesoria.
2.-MARÍA LORENZO, nació el día 20 y recibió el bautismo en la parroquia de Santa Catalina Mártir, el 23 de junio de 1638, apadrinada por Laurencio Hernández Leal. Casó con Domingo Francisco Álvarez-Franco.
3.-JOSÉ HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido en Tacoronte y bautizado el 21 de marzo de 1649, casó el 29 de septiembre de 1675, con Francisca Díaz, hija de Francisco González Cosme y Dominga González, y se trasladó a las Indias con su familia en 1691.
4.-NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, casado con Dominga González y pasaron a también a América.
5.-LAURENCIO HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nació el día 3 y fue bautizado el 5 de diciembre de 1640. Lo llevó a la pila Laurencio Hernández Leal .

María Ana Lorenzo dictó sus últimas voluntades, ante el escribano Ambrosio Núñez Angelín, en 1666, y falleció ese año.
Entre sus antepasados, en la serie de sus segundos abuelos figuran, entre otros, Pedro de Azano, hijo del guanche Juan de Azano, y de su mujer Felipa Hernández, hija a su vez de los guanches Juan Amobed y María Fernández. Testaron Pedro de Azano y Felipa Hernández, ante los escribanos Juan del Castillo y Gaspar Justiniano, en 1542 y 1545, respectivamente. También descendía María Ana Lorenzo de Francisca González, hija del conquistador Gonzalo González y de su mujer, Francisca Afonso, conocida por la Viexa de Texina, que dictaron sus últimas voluntades ante el cartulario Francisco Márquez en 1549, y son ancestros de la práctica totalidad de las casas ilustres de Tenerife; o del portugués Afonso Rivero, fundador de la iglesia del Salvador de La Matanza de Acentejo, y de su esposa, Leonor de Soussa.
Viudo Nicolás Hernández de Barrios volvió a casar, en 1667, con María Delgado, hija de Diego Rodríguez y de María Delgado, vecinos de Güímar, con la que tuvo un hijo llamado:
Nicolás Hernández de Barrios.

VI.JUAN NICOLÁS DE BARRIOS CENTENO
Nació en Tacoronte el 24 de febrero de 1642 y fue bautizado en la parroquia de Santa Catalina Mártir, dos días más tarde [36].
Casó en la citada iglesia, el día 25 de noviembre de 1667, con María Rodríguez de Aguiar, hija de Salvador Francisco Álvarez Franco y Lucía Rodríguez de Aguiar, quienes la dotaron ante el escribano Ambrosio Núñez Angelín, el mismo año.
Tuvieron por sus hijos a:
1.-NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, que sigue la línea sucesoria.
2.-MARÍA RODRÍGUEZ, nació en Tacoronte el 27 y fue bautizada en la parroquia de Santa Catalina Mártir, el 28 de febrero de 1668. Casó en la misma parroquia, el 11 de febrero de 1697, con Lucas Domínguez, hijo de Francisco Domínguez y Benita Pérez.
Hijos:
a.- Doña María Rodríguez Domínguez, nació el 6 y fue bautizada el 10 de agosto de 1704. Contrajo matrimonio, el 9 de abril de 1724, con el alférez don José de la Torre, hijo del alférez Andrés de la Torre y de doña Micaela Ramos, que fueron padres de:
(a).-El capitán don José de la Torre, con con doña María Rita Pinelo de Armas, que tuvieron a:
-Doña Josefa de la Torre, casada en 1782, con el capitán don Luis García Gómez, hijo de don Nicolás García Gómez y de doña Catalina Álvarez Marrero.
(b).-Doña María de Candelaria de la Torre, nacida el día primero y b. el 8 de febrero de 1725, la llevó a la pila su tío don Cristóbal de la Torre.
(c).-Don Agustín de la Torre, nació el 22 y fue bautizado el 31 de diciembre de 1730, apadrinándolo don Lucas Domínguez. Contrajo matrimonio con doña Manuela García, hija de Juan García y Catalina Rodríguez, y fueron padres de:
-Doña María de Candelaria de la Torre, casada en 1787, con don Antonio Martel de Espinosa, viudo de doña Josefa Alfonso Peraza.
(d).-Doña Rita de la Torre, que casó en dos ocasiones, la primera con el teniente capitán don José Hernández López, en 1744, y por segunda vez con don Juan Gaspar Rodríguez del Castillo, y tuvo una hija de cada matrimonio:
-Doña Josefa de la Torre, que casó con el teniente capitán don Juan Hernández Abad, el 5 de mayo de 1768.
-Doña María de la Torre y Castillo casada, con dispensa, con su primo don Juan Hernández de Barrios y Domínguez.
(e).-Doña María de los Ángeles de la Torre, nacida el 12 y fue bautizada el 17 de enero de 1737, fue su padrino el capitán don Pablo Ossorio. Falleció soltera.
(f).-Doña Josefa de la Torre, nacida el 7 y bautizada
Torres Perdomo
el 15 de febrero de 1739, la apadrinó su tío el capitán don Agustín de Torres-Perdomo. Casó con don Francisco García del Valle.
3. MARCOS NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS,nació en Tacoronte el día 25 y fue bautizado el 27 de abril de 1698. Contrajo matrimonio en Santa Catalina Mártir con Beatriz Francisca de Oliva, hija de Juan González Llanos del Drago y de Ana Lorenzo de Oliva. Viuda Beatriz volvió a casar en la misma parroquia con Pascual Díaz, viudo de María Rivero.
Hijo:
a.- Alejandro Nicolás Hernández de Barrios, casado con Bárbara Jorge, hija de Juan González Domínguez y María Jorge.

VII.NICOLÁS HERNANDEZ DE BARRIOS
Nació en Tacoronte el día 27 y fue bautizado en Santa Catalina Mártir el 31 de enero de 1672. Casó en dos ocasiones, la primera en Santa Catalina Mártir el día 26 de diciembre de 1694, con doña María Francisca Domínguez, hija de Juan Rodríguez Leonardo y Magdalena Domínguez Viera, nieta paterna de Sebastián Rodríguez Leonardo y Francisca Domínguez y, materna, de Benito Pérez y Nicolasa Domínguez. Un primo hermano de doble vínculo de esta señora, el teniente coronel don Felipe Antonio Rodríguez, de la milicias regladas del Valle de Aragua, vecino de Turmero en Venezuela, fue amparado en su nobleza por auto del licenciado don Ignacio Antonio de Benavides, de fecha 9 de agosto de 1786 [37].
Viudo Nicolás Hernández de Barrios volvió a casar, en la misma parroquia, el 24 de junio de 1720, con Juana González Afonso, hija de Juan Afonso y Ana González, dispensándoseles el tercer y cuarto grado de consanguinidad. Se velaron el 22 de julio de dicho año.
Dictó su testamento Nicolás Hernández de Barrios, ante el escribano Domingo Inglés, el 19 de enero de 1727.
Hijos del primer matrimonio:
1.-MARÍA RODRÍGUEZ, nacida en Tacoronte el día 20 y bautizada el 24 de enero de 1697, fue padrino Lucas Domínguez, su tío.
2.-NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido en Tacoronte el día 24 y bautizado en Santa Catalina el 27 de septiembre de 1700, lo llevó a la pila Juan Rodríguez Leonardo el Mozo. Contrajo matrimonio, el 28 de diciembre de 1724, con María González, hija de Andrés Díaz y de María Felipe, y fueron dispensados del cuarto grado de consanguinidad. Padres de:
a.- Nicolás Hernández de Barrios, nacido y bautizado el día 20 de septiembre de 1725.
b.- Ángela Hernández de Barrios, nacida el 16 y bautizada el 23 de octubre de 1730. Casó el 19 de noviembre de 1753, con Ángel Domínguez, viudo de Ángela López, e hijo de Pedro Domínguez y María Núñez. Padres de:
(a).-Don Nicolás Domínguez y Hernández de Barrios, casado en septiembre de 1834 en la parroquia de El Buen Pastor-Jesús del Monte de La Habana, con doña María de Regla Álvarez de Vera. Testó en La Habana el 28 de marzo de 1830 y declaró por sus hijos a:
-Doña Clara Domínguez y Álvarez de Vera.
-Don Nicolás Domínguez y Álvarez de Vera. Nació en La Habana el 14 y fue bautizado el 27 de noviembre de 1800 en la parroquia del Santo Ángel Custodio. Casó con doña María Lorenza Cowan Gómez, hija del irlandés don Guillermo Enrique Cowan y de doña María de la Concepción Gómez y Orta y procrearon a:
 Doña María de la Concepción Domínguez Cowan, nacida en La Habana el 18 de febrero de 1843, marquesa de Mont Roig por su matrimonio con don Antonio Ferratges de Mesa, primero de este título, quienes tuvieron por hijo a:
Ferratges
 Don Álvaro Roberto Ferratges y Domínguez, caballero de la Orden de Santiago, en cuyas pruebas demostró la nobleza de su bisabuelo don Nicolás Domínguez y Hernández de Barrios.
-Don Martín Domínguez y Álvarez de Vera.
-Doña María de la Encarnación Domínguez y Álvarez de Vera.
-Doña Josefa Domínguez y Álvarez de Vera.
c.- Agustín Hernández de Barrios, casó el 26 de noviembre de 1764, con Agustina Ramos, hija de Juan Pérez y Catalina Pérez Ramos. Falleció don Agustín Hernández de Barrios, a los ochenta y seis años de edad, el 18 de junio de 1825. Había otorgado testamento y codicilo ante testigos, en Tacoronte, el 10 de noviembre de 1824 y el 27 de mayo de 1825, respectivamente. Hijos:
(a).- Nicolás Hernández de Barrios, falleció, soltero, a los cincuenta y seis años de edad, el 23 de julio de 1821..
(b).- María de la Concepción Hernández de Barrios, nacida el 11 y b. el 15 de mayo de 1768.
(c).- Agustín Hernández de Barrios, nacido el 28 de septiembre, recibió el bautismo el 3 de octubre de 1765.
(d).-Cristóbal Hernández de Barrios.
(e).-José Hernández de Barrios.
3.- DON JUAN NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, que continúa la sucesión.
4.-JOSÉ HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido el 26 y bautizado el 29 de enero de 1704.
5.-CATALINA RODRÍGUEZ, nació en Tacoronte el 28 y fue bautizada el 29 de noviembre de 1706.
6.-JOSEFA RODRÍGUEZ, nacida el día 24 y bautizada el 27 de noviembre de 1712, fue su padrino el alférez Marcos de la Torre.
7.-SEBASTIÁN HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido el 28 de agosto y bautizado el 2 de septiembre de 1715.
-Del segundo matrimonio nacieron:
1.-JOSÉ HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido el 6 y bautizado el 12 de mayo de 1721. Casó y se veló, el día 14 de junio de 1745, con Josefa Ramos, hija de Domingo Ramos y María Jorge.
2.-NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido el 4 y bautizado el 14 de julio de 1727. Contrajo matrimonio, el 17 de mayo de 1751 y se veló el mismo día, con Ángela Lorenzo Ramos, hija de Domingo Ramos y Catalina Lorenzo, dispensándoseles el tercer y cuarto grado de consanguinidad. Falleció Ángela Lorenzo, a los sesenta y tres años de edad, el 10 de junio de 1793, ab intestata. Padres de:
a.- Joaquina Hernández de Barrios y Lorenzo, nacida el 20 y bautizada el 27 de marzo de 1753.
b.- José Nicolás Hernández de Barrios y Lorenzo, nacido el 8 y bautizado el 15 de mayo de 1755. Muerto en la infancia.
c.- Ángela Antonia Hernández de Barrios y Lorenzo, nacida el 18 y b. el 24 de octubre de 1757.
d.- José Antonio Nicolás Hernández de Barrios y Lorenzo, nacido el 4 y b. el 12 de abril de 1761.
e.- Nicolás Antonio Hernández de Barrios y Lorenzo, nacido el 16 y b. el 24 de febrero de 1764, fallecido en la niñez.
f.- María Agustina Hernández de Barrios yLorenzo, nacido el 23 y b. el 30 de abril de 1765, fue padrino de la ceremonia don Cristóbal Pérez de Medina, su tío.
g.- Nicolás Antonio Hernández de Barrios y Lorenzo, nacido el 28 de julio y b. el 8 de agosto de 1768, fue apadrinado también por don Cristóbal Pérez de Medina.
h.- Josefa Hernández de Barrios, nacido en 1774. Casó con don Juan Acisclo Carmona y falleció, a los treinta y un años de edad, el 3 de febrero de 1809.
3.-JUANA GONZÁLEZ, nacida el 27 de febrero y bautizada el 5 de marzo de 1721, contrajo matrimonio el 26 de febrero de 1755, con don Cristóbal Pérez de Medina, viudo en primeras nupcias de María Alonso y, en segundas, de María del Rosario Ramos Núñez, e hijo de Matías Pérez e Isabel Hernández.
4.-ÁNGELA HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacida el 4 y bautizada el 10 de diciembre de 1724, apadrinándola el capitán Luis José Ramos.

VIII. DON JUAN NICOLÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS EL MAYOR
Nació en Tacoronte el 26 de febrero y fue bautizado el día primero de marzo de 1699. Casó el 25 de mayo de 1733, con doña María Rafaela González López, hija de Sebastián López de Torres y Rafaela González.
Testó doña María Rafaela el 20 de diciembre de 1796, documento conservado en la Colecturía Parroquial de Santa Catalina Mártir de Tacoronte. En 22 de mayo de 1811, ante el escribano José Quintero y Párraga y a instancia de doña Josefa Mandillo, se interpuso demanda de partición de bienes entre sus herederos.
Fueron sus hijos:
1. DON JUAN HERNÁNDEZ DE BARRIOS EL MENOR, nacido en Tacoronte y bautizado en la parroquia de Santa Catalina Mártir el día de su nacimiento, 20 de febrero de 1733. Alférez de Milicias. Subteniente del regimiento de Milicias Provinciales de Abona. Alcalde Real de Tacoronte.
Casó en la parroquia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte, el 24 de octubre de 1757, con doña Ángela Domínguez Afonso, hija de José Afonso Guanche y de Ángela Domínguez, con dispensa del cuarto grado de consanguinidad. Falleció don Juan Hernández de Barrios el 23 de mayo de 1783, cuando redactaba su testamento ante el escribano Quintero y Párraga, que quedó sin firmar. Hijos:
a.-Don Juan José Hernández de Barrios y Domínguez, nacido el 6 y bautizado el 13 de diciembre de 1758. Alférez de Milicias. Contrajo nupcias en la iglesia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte en 1781, con su prima doña María del Castillo y de la Torre, hija de don Juan Gaspar Rodríguez del Castillo y de doña Rita de la Torre, ya citados, dispensados en cuarto grado de parentesco. Testó el alférez don Juan Hernández de Barrios ante testigos, el 15 de julio de 1783, y falleció en dicho pueblo el 21 de marzo de 1784. Fueron padres de una única hija:
-Doña María de la Caridad Hernández de Barrios y Rodríguez del Castillo, fallecida moza.
b.- Don Cristóbal Hernández de Barrios y Domínguez, nacido el 27 de septiembre y fue b. el 4 de octubre de 1760. Falleció don Cristóbal Hernández de Barrios el Mozo, a los veintiséis años de edad, el día primero de septiembre de 1786. Había otorgado testamento ante el escribano del lugar el día 11 de agosto inmediato.
c.- Don Cristóbal Francisco de los Dolores Hernández de Barrios y Domínguez, n. 29 de marzo y b. el 8 de abril de 1765, fue su padrino fray Francisco de la Concepción, superior del convento de San Agustín de Tacoronte. Dueño junto con su tío, el capitán don Tomás Hernández de Barrios, del bergantín «San Francisco de Paula», alias «El Brillante» apresado por los británicos en 1801. Falleció en La Habana, Cuba, soltero, el día primero de septiembre de 1786. Testó el 11 de agosto de dicho año.
d.- Doña María de San Antonio Hernández de Barrios y Domínguez, nacida el 22 y  el 30 de marzo de 1767, fue su padrino el ya citado fray Francisco de la Concepción.
e.- Don Nicolás Hernández de Barrios y Domínguez el Menor. Nació en Tacoronte y fue bautizado en la parroquia de Santa Catalina Mártir el 19 de enero de 1772. Capitán graduado de Milicias. Gobernador de las Armas de Tacoronte y su alcalde Real. Teniente coronel retirado de Milicias en 1844. Casó en la parroquia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte, el día 6 de marzo de 1791, con doña María de los Santos Rivero, hija de don Pedro Rivero y de doña Josefa Rita Hernández, con quien fue padre de:
a.  Doña Juana Paula Hernández de Barrios y Rivero, nació en Tacoronte el día 25 de junio y fue bautizada el primero de julio de 1786.
b.Doña Isabel Rita Hernández de Barrios y Rivero, recibió el bautismo donde su hermana, el 20 de julio de 1794. Falleció en la juventud.
f.- Doña Ángela de la Concepción Hernández de Barrios y Domínguez, nació en Tacoronte el día 7 y fue bautizada en la parroquia de Santa Catalina Mártir el 16 de diciembre de 1773. Contrajo matrimonio, el 30 de enero de 1791,
Firma de Esteban Mandillo
en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de Santa Cruz de Tenerife, con don Esteban Mandillo y Díaz Bencomo, hijo de don Esteban Mandillo y Bozzano,

natural de Génova, y de doña María Bárbara Agustina Díaz Bencomo y Marrero, que lo era de Güímar, en Tenerife. Testó ante Matías Álvarez de la Fuente el 6 de enero de 1796, falleció cinco días más tarde en Santa Cruz de Tenerife y fue sepultada en la citada parroquia. La partición de sus bienes se realizó ante el notario don Rafael Martín Fernández en 1861. Fue su única hija:
(a).- Doña Ángela Estéfana Mandillo y Hernández de Barrios, nacida en Santa Cruz de Tenerife, fue bautizada en La Concepción, el 17 de mayo de 1792. Casó en la misma iglesia, el 23 de abril de 1809, con el teniente del batallón de Infantería de Canarias don Francisco de Matos y Azofra, hijo del capitán don Matías de
Francisco de Matos y Azofra. 1821
Matos y Carrós y de doña María Josefa de Azofra y Becaria, previa dote otorgada a su hija por don Esteban Mandillo, el 26 de noviembre de 1808, ante el escribano Enrique José Rodríguez. Falleció doña Ángela Mandillo en Santa Cruz de Tenerife, el 17 de octubre de 1859, y fue sepultada en el cementerio de San Rafael y San Roque. Fueron hijos de este matrimonio:
-Don Juan Bautista de Matos y Mandillo, nacido en 1816.
-Doña Ubaldina de Matos y Mandillo, nacida en Tacoronte en 1818.
-Doña María del Pilar de Matos y Mandillo, n. en La Laguna el día 12 y bautizada en la
Mandillo
parroquia de la Concepción el 19 de octubre de 1819. Falleció en la ciudad de su nacimiento, el 4 de junio de 1893.
-Don Francisco de Matos y Mandillo. Nació en Santa Cruz de Tenerife el día 4 de noviembre de 1822. Capitán de la séptima compañía del batallón de Cazadores de Andalucía, falleció a consecuencia del cólera morbo en el destacamento de Guaracabulla, Cuba, el día  primero de octubre de 1869, bajo testamento militar que fue reconocido como único y elevado a documento público el 26 de septiembre de 1869.
-Doña María del Pino de Matos y Mandillo. Nació en La Laguna el día 3 de diciembre de 1824 y fue bautizada en la parroquia de la Concepción el 4 de enero de 1825 casado con don Juan Pedro Schwartz Fernández-Prieto, hijo de don Pedro Matías Schwartz y Schweiger, agente consular de Francia en Santa Cruz de Tenerife, y de doña Isabel Fernández-Prieto y Gómez. Fue don Juan Pedro cónsul en Canarias de las ciudades hanseáticas de Hamburgo y Oldemburgo, de la Confederación Alemana del Norte y, más tarde, de Prusia [1853-1883] y decano del Cuerpo Consular.

2.-DON TOMÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS, capitán de Artillería, que sigue lalínea.
3.- DOÑA MARÍA RITA HERNÁNDEZ DE BARRIOS, casó el día primero de octubre de 1766 con don Cristóbal González Álvarez, hijo de don Manuel González Álvarez y de doña María Rodríguez, con dispensa del cuarto grado de consanguinidad. Viudo volvió a casar, en 1779, con doña Josefa Marrero, hija de don Francisco Rodríguez López y de doña Catalina González Marrero. Testó doña María Rita ante el escribano don Francisco Quintero y Párraga, el 15 de octubre de 1776 y dejó un hijo:
A. Don Cristóbal González Hernández de Barrios, muerto en la infancia.
4. DON NICOLÁS MIGUELHERNÁNDEZ DE BARRIOS EL MAYOR. Nació en Tacoronte el día 15 y fue bautizado el 23 de septiembre de 1748, apadrinándolo su abuelo paterno Nicolás Hernández de Barrios. Teniente capitán de Cazadores, capitán del regimiento de milicias provinciales de La Laguna, gobernador de las Armas del lugar de Tacoronte y su alcalde Real. Participó en la defensa de Santa Cruz, del ataque del contralmirante Nelson, mandando en calidad de subteniente, con don Agustín Peña y el capitán don Nicolás Quintín García Gómez, el contingente de quinientos hombres de las milicias de La Laguna, que se incorporaron a la columna del teniente coronel Creagh [40]. Casó en dos ocasiones, la primera en la iglesia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte, el 23 de diciembre de 1770, con doña Josefa María López Ramos, viuda del teniente capitán don Salvador Rodríguez López, e hija de Manuel González, natural de La Victoria, y de María López Ramos, con dispensa de tercer grado de parentesco; la segunda, en la parroquia de San Pedro Apóstol del Sauzal en 1773, con doña María Juana de Sossa y Marrero, hija de don Pedro Jorge Marrero y de doña Nicolasa Francisca de Sossa Marrero y se velaron el 18 de agoto de 1777, en la de Santa Catalina de Tacoronte. Falleció don Nicolás Hernández de Barrios, cuando ostentaba la vara de alcalde del lugar, el 5 de octubre de 1807. Había testado tres días antes [39]. Hijos:
(a).-Doña María Juana Hernández de Barrios y Sossa, nacida el 8 y fue b. el 19 de octubre de 1775, apadrinándola don Cristóbal González Álvarez.
(b).-Doña María Antonia Hernández de Barrios y Sossa. Nació en Tacoronte el día 24 de septiembre de 1776 y fue bautizada el 2 de octubre inmediato. La llevó a la pila su tía doña María Antonia Hernández de Barrios. Contrajo matrimonio, el 10 de noviembre de 1794, con el capitán don Agustín Isidro de Torres-Perdomo y Ramos, nacido el 7 y bautizado en Santa Catalina el 26 de abril de 1739, viudo de doña Ana de Acevedo, oriunda de Caras, Venezuela, e hijo de don Agustín de Torres-Perdomo y de doña Josefa Ramos. Inmediato sucesor en el mayorazgo denominado «de Tacoronte» que detentó hasta su fallecimiento su hermano el capitán don Andrés de Torres-Perdomo, marido de doña Nicolasa Morera, hija de don Nicolás Morera, oriundo de La Palma, y de doña Josefa González del Drago. Otorgó testamento el 22 de abril de 1825 y falleció el día 10 de junio siguiente, dejando tres hijos:
-Doña María del Carmen de Torres-Perdomo y Hernández de Barrios, nacida en Tacoronte el día 11, y recibió el bautismo en la parroquia de Santa Catalina el 18 de julio de 1799, apadrinándola su tío el teniente don Nicolás Antonio Hernández de Barrios.
-El capitán don Tomás de Torres-Perdomo y Hernández de Barrios, gobernador de las Armas de Tacoronte, nació el 2 y fue bautizado el 5 de octubre de 1805, actuando de padrino en la ceremonia su tío el teniente capitán de Artillería don Tomás Hernández de Barrios. Casó con doña María de la Concepción González Bacallado, hija de don Cristóbal González y de doña -María Candelaria Bacallado. Con sucesión. Testó el capitán don Tomás de Torres Perdomo, en 1843, ante Juan Oliva.
- Don Nicolás de Torres-Perdomo y Hernández de Barrios, fallecido a los veintiocho años de edad, soltero, el 18 de febrero de 1832 [41].
c.- Don Pedro Antonio Hernández de Barrios y Sossa, nacido en Tacoronte el 29 de junio y fue bautizado el 6 de julio de 1778. Contrajo matrimonio, el 30 de octubre de 1803, con su prima doña María Álvarez Hernández de Barrios, hija de don Francisco Álvarez y de doña María de la Concepción Hernández de Barrios, dispensados de segundo con tercer grado de parentesco. 

IX. DON TOMÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS

Nacido en Tacoronte el día 20 y bautizado en la parroquia de Santa Catalina Mártir el 26 de diciembre de 1740. Capitán de mar, armador, dueño de varios navíos, entre ellos del llamado «Santísimo Cristo de los Dolores», alias el «Infante», cuya propiedad compartía con don Antonio Eusebio Quevedo. Junto con sus cuñados Esteban y Francisco Mandillo, vendió el bergantín «La Pura Concepción», alias «La Begoña», el cual había obtenido en remate por 3.175 pesos en 1789, como buque incautado a los británicos por el Tribunal de la Subdelegación de Reales Rentas Generales de las Islas Canarias, al intentar extraer plata acuñada del puerto de La Orotava. El buque se deterioró a causa de la inactividad y los socios lo enajenaron en 1792, antes de ser enviado a La Habana desde Cádiz, donde lo adquirió don José Zubiaur en mayo de 1793 por 2.800 pesos [42].

Ante el escribano José Manuel Salazar, el 21 de diciembre de 1797, vendió al capitán del Real Cuerpo de Artillería don Sebastián Pérez Yanes la tercera parte de la fragata la «Santísima Trinidad» alias «La Atrevida», de la que era dueño por mitad con don Francisco Betancourt, vecino del Puerto de La Orotava,con su respectiva jarcia y arboladura y demás aparejos, lancha, pertrechos y demás utensilios que le corresponden y tiene para poder navegar, surta en esta bahía, por precio y cuantía de dos mil trescientos treinta y tres y un tercio pesos corrientes de a quince reales vellón de Castilla por haber estimado el todo de ella en siete mil pesos, también de a quince reales.

Teniente de Milicias, agregado al real cuerpo de Artillería, capitán de Artillería, se distinguió en la defensa de Santa Cruz de Tenerife del ataque del contralmirante Nelson, como comandante artillero de la batería baja del castillo de Paso Alto, dotada con cuatro cañones y cincuenta y cinco hombres [43].

Casó primero en la parroquia de Santa Catalina Mártir de Tacoronte, el 26 de noviembre de 1764, con doña María Antonia Hernández, hija de Nicolás Hernández y de Juana Rodríguez Alfonso, con dispensa del cuarto grado de consanguinidad. Casó por segunda vez, en Santa Cruz de Tenerife el 6 de enero de 1788, con licencia paterna a la contrayente otorgada ante el escribano Juan Antonio Sansón, el 31 de mayo de 1787, con doña Josefa Micaela Mandillo y Vidal, nacida en Santa Cruz de Tenerife en 1771 y bautizada en La Concepción, hija de don Esteban Mandillo y Bozzano y de doña Ana María Vidal y Delgado.

Falleció el capitán don Tomás Hernández de Barrios en Santa Cruz de Tenerife, el 21 de enero de 1808 y fue sepultado en la iglesia del convento de San Pedro de Alcántara al día siguiente. Había testado ante el escribano don Enrique José Rodríguez, el día 13 de diciembre de 1807, y dictado un codicilo ante el mismo fedatario el 13 de enero de 1808. Su viuda, doña Josefa Mandillo, murió el 13 de enero de 1843, sin haber otorgado disposiciones testamentarias, por lo que sus herederos hicieron escritura de partición amigable el 14 de agosto de 1844, ante el escribano Manuel del Castillo. Su cuerpo recibió sepultura en el cementerio de San Rafael y San Roque, extramuros de Santa Cruz de Tenerife.

-Hijos del primer matrimonio:

1.-DOÑA MARÍA DE LA CONCEPCIÓN HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacida  el 8 y bautizada el 15 de diciembre de 1765.

2.-DON JOAQUIN HERNÁNDEZ DE BARRIOS, teniente capitán de Milicias. Casó con doña María Fernández de Bethencourt, nacido en Santa Cruz de Tenerife, hija de don Francisco Fernández Figueroa y de doña María Andrea Bethencourt. Falleció don Joaquín, el 12 de noviembre de 1806, habiendo testado seis días antes, y su esposa, el 30 de mayo de 1823. Fueron sus hijos:

a.- Don Joaquín Hernández de Barrios y Fernández de Bethencourt. Testó ante el escribano Rodríguez Suárez en 1858.

b.- Doña Ramona Hernández de Barrios y Fernández de Bethencourt. Casó con don Francisco Rivero.
c.- Don José Hernández de Barrios y Fernández de Bethencourt. Dejó una hija natural llamada Josefa.
d.- N. Hernández de Barrios y Fernández de Bethencourt.
3.-DON SANTIAGO HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido el 18 y b. el 31 de julio de 1768.
4.-DON JUAN HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido en 1773.
5.-DON SEBASTIÁN HERNÁNDEZ DE BARRIOS, nacido en 1776.
-Hijos del segundo matrimonio:
1.-DOÑA MARÍA DE LOS DOLORES HERNÁNDEZ DE BARRIOS Y MANDILLO. Nació en 1789. Falleció en 1821.
2.-DOÑA FRANCISCA HERNÁNDEZ DE BARRIOS Y MANDILLO. Nació en Santa Cruz de Tenerife y fue bautizada en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 6 de diciembre de 1791. Casó en la misma iglesia, el día 2 de febrero de 1836, con el doctor don Manuel Álvarez Albarrán, médico inspector de epidemias de esta provincia, natural de la villa de San Miguel de Serrezuela, Ávila, hijo de don Santo Álvarez y de doña Manuela Albarrán. Falleció doña Francisca en 1881.
3.- DON TOMÁS HERNÁNDEZ DE BARRIOS Y MANDILLO. Nació el día 19 y fue bautizado el 21 de mayo de 1795. Falleció a los treinta y cuatro años de edad, el 17 de mayo de 1829, y recibió sepultura en el Cementerio de San Rafael y San Roque de Santa Cruz de Tenerife, al día siguiente.
4.-DOÑA CATALINA HERNÁNDEZ DE BARRIOS Y MANDILLO, nacida el 24 y fue bautizada el 27 de noviembre de 1802 en la misma parroquia que sus hermanos, y contrajo matrimonio, el día primero de octubre de 1821, con don Pascual Ghirlanda y Marazzi, natural de Dino-Sonvico, en la vicaría de Lugano, cantón de Ticino, República Helvética, hijo de don Nazario Ghirlanda y de doña Petra Marazzi. Falleció doña Catalina Hernández de Barrios en Santa Cruz de Tenerife el 7 de noviembre de 1875, y don Pascual en 1851. Fueron hijos del matrimonio:
a.- Don Virgilio Francisco Ghirlanda Hernández de Barrios, nacido el 27 de octubre y fue bautizado el 8 de noviembre de 1822. Armador, naviero y consignatario de buques.
Rosario de Foronda y Mandillo
Comendador de la Orden de Cristo de Portugal y de la del Duque Francisco Ludovig de Oldemburgo. Cónsul del Gran Ducado de Oldemburgo en Canarias [1853-1872], de la República Argentina [1857-1883] y de Portugal [¿?-1900], detentó así mismo los viceconsulados de Suecia y Noruega. Decano del Cuerpo Consular. Súbdito suizo, obtuvo la nacionalización española por Real Decreto dado en El Pardo a 13 de diciembre de 1865. Casó en primeras nupcias, el 20 de marzo de 1850, con su prima en segundo grado doña Hermógenes de Foronda y Mandillo, hija de don Juan Manuel de Foronda y de doña Ana Mandillo y Martinón. Repitió matrimonio, el 16 de septiembre de 1869, con don doña Paula de Foronda y Mandillo, su hermana política. Casó por tercera vez en su casa, el 25 de septiembre de 1884, con doña Andrea de Foronda y Mandillo, también cuñada suya. Falleció don Virgilio Ghirlanda, en Santa Cruz de Tenerife, el 24 de junio de 1900, y fue sepultado al día siguiente en el cementerio de San Rafael y San Roque.
-Hijos de la primera mujer:
(a).-Don Adolfo Ghirlanda de Foronda, bautizado en la parroquia de La Concepción el 31 de enero de 1851. Falleció en la ciudad de su nacimiento, el día 20 de febrero de 1890, al precipitarse al vacío desde una ventana en el número 24 de la calle de la Cruz Verde.
(b).-Doña Jorgina Ghirlanda de Foronda. Falleció en 1863.
(c).-Doña Leonor Ghirlanda de Foronda, nacida el
Juan Rodríguez Botas Da Pelo
día primero de julio de 1856, fue bautizada el 7 inmediato. Casó en la parroquia de La Concepción, el 7 de enero de 1880, con su primo hermano don Millán Rodríguez-Botas de Foronda, teniente de Infantería, hijo de don Juan Rodríguez-Botas Da-Pelo, y de doña María del Rosario de Foronda.
(d).-Doña Florencia Ghirlanda de Foronda. Nació en Santa Cruz el día 22 de febrero y fue bautizada en La Concepción, el 20 de marzo de 1858. Falleció el 13 de julio de 1926 en la misma ciudad.
(f).-Doña Catalina Ghirlanda de Foronda, bautizada en la Concepción [Libro xxvii, f. 15v]. Falleció en 1863.
(g).-Doña Rosa Ghirlanda de Foronda, nació en Santa Cruz el 31 de agosto y bautizada el 9 de septiembre de 1865, c. en 1887, con don Julio César Carreño López de Mántaras, nacido en Oviedo en 1863, hijo de don Estanislao Carreño del Cañal, delegado del Banco de España en esta provincia, y de doña Ángela López de Mántaras y Secades. Falleció don Julio Carreño en Santa Cruz de Tenerife, el 24 de abril de 1929 y su mujer en La Laguna, el día 12 de febrero de 1933.  Hijos:
-Don Julio Carreño Ghirlanda, nació en La Laguna el 13 de septiembre de 1888, c. con Carmen Trujillo Díaz.
-Don Virgilio Carreño Ghirlanda, falleció a los cuatro meses de vida, el día 20 de febrero de 1890 en Santa Cruz de Tenerife.
-Don Luis Carreño Ghirlanda, nació en Santa Cruz y fue bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 7 de marzo de 1891. Contrajo matrimonio, en la citada iglesia, el 20 de marzo de 1920, con doña Ermesinda Rodríguez Espinosa.
-Doña Emilia Carreño Ghirlanda.
-Don Estanislao Carreño Ghilanda, murió en Santa Cruz, a la edad de siete meses, el 7 de julio de 1894.
-Doña Rosa Carreño Ghirlanda, nació en Santa Cruz de Tenerife, el 23 de abril de 1895.
-Don Francisco Carreño Ghirlanda.
-Doña Carmen Carreño Ghirlanda, casó en 1930, con don Ramón Trujillo Torres, nacido en Santa Cruz el 10 de agosto de 1904, hijo de don Ramón Trujillo Hidalgo y de doña Evarista Torres y López.
-Don Fernando Carreño Ghirlanda, falleció en Santa Cruz de Tenerife, el 2 de febrero de 1920.
-Hijos del segundo matrimonio:
Dña Carmen Ghirlanda de Foronda
(a2).-Doña María del Carmen Ghirlanda de Foronda. Nació en Santa Cruz el día 28 de enero y fue bautizada el 15 de febrero de 1875. Casó en la misma ciudad, en 1894, con don Francisco de Armas Clos, licenciado en Derecho Civil y Canónico por la Universidad Central [1885-1891], asesor y fiscal de Marina, coronel del Cuerpo Jurídico de la Real Armada, diputado a Cortes por El Hierro [1918-1919] y gobernador civil de Las Palmas, aunque no llegó a tomar posesión del cargo por problemas de salud, auditor de Marina, nacido en Santa Cruz de Tenerife, el 27 de diciembre de 1876, y muerto en Madrid, el 2 de junio de 1941. Fueron padres:
-Don José de Armas Ghirlanda, nacido en Santa Cruz de Tenerife el 13 de octubre de 1895. Comandante de Intervención Militar y comisario de Guerra, formó parte del gabinete militar del ministro de la Guerra don Manuel Azaña.
-Don Antonio de Armas Ghirlanda.
-Don Francisco de Armas Ghirlanda, nació donde su hermano el día 18 de mayo de 1898, licenciado en Derecho y sacerdote misionero, recibió las sagradas órdenes en el convento seminario de los redentoristas de Astorga, el 27 de septiembre de 1925. Falleció en Santander, el 25 de octubre de 1993.
-Doña África de Armas Ghirlanda.
-Doña Soledad de Armas Ghirlanda. Falleció a los seis días de vida, el 24 de enero de 1904.
-Doña Soledad de Armas Ghirlanda, casó en Madrid, parroquia de los Santos Justo y Pastor, el 15 de noviembre de 1934, con don Ramón de la Torre e Ibarra, hijo de los condes de Torrepando, y falleció en dicha ciudad el 2 de diciembre de 1988.
-María Jesús de Armas Ghirlanda.
Falleció doña María del Carmen en Santa Cruz, el 21 de enero de 1904, y su viudo repitió nupcias, el 22 de julio de 1905, en la misma ciudad, con doña María de la Asunción Lecuona y Jiménez, con la que procreó a:
(a).-Don Alonso de Armas y Lecuona, marqués de la Granja de San Saturnino.
(b).-Don Álvaro de Armas Lecuona.
(c).-Don Enrique de Armas Lecuona.
(d).-Doña María Teresa de Armas Lecuona, casada con don Joaquín Pérez del Real.

(b2).-Don Virgilio Ghirlanda de Foronda. Nació en Santa Cruz de Tenerife el 9 de agosto de 1872. Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada. Abogado y secretario general del Gobierno Civil de Canarias. Jefe de Administración Civil de primera clase. Casó en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 19 de abril de 1911, con doña Hermógenes Ravina y Morales, hija de don Felipe Ravina de Castro y de doña Francisca Morales González, sin sucesión. Falleció don Virgilio en Santa Cruz de Tenerife en febrero de 1962.
(c2).-Don Horacio Ghirlanda de Foronda.
(d2).-Doña Laura Ghirlanda de Foronda.
(e2).-Doña Emilia Ghirlanda de Foronda.

b.- Don Manuel Ghirlanda Hernández de Barrios. Nació el día 12 y fue bautizado el 23 de marzo de 1824. Armador, naviero y consignatario de buques. Cónsul de los Países Bajos [1884-1891] y de la República del Uruguay [1862-1891]. Falleció, soltero, sin haber formalizado disposición testamentaria, en Santa Cruz de Tenerife, a las ocho de la mañana del día 8 de agosto de 1891, en el número 30 de la calle del Castillo.
c.- Don Horacio Ghirlanda Hernández de Barrios, nació el 11 de marzo de 1826 y fue bautizado, el mismo día, en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción.
d.- Doña Emilia Ghirlanda Hernández de Barrios. Nació el día 17 y fue bautizada el 23 de agosto de 1832. Falleció en 1884.
e.- Don Augusto Ghirlanda Hernández de Barrios. Caballero Gran Cruz de la Real Orden Americana de Isabel La Católica y comendador de la Distinguida de Carlos iii, Gran Oficial de la Orden de la Gloria o del Nichan Iftikhar de Túnez,
Hermanos Ghirlanda Hernández de Barrios
cónsul de la República de San Salvador en Marsella y de la del Congo en Canarias [1904]. Solicitó autorización para instalar y explotar una línea telegráfica entre Cuba y la península de Yucatán en la República de Méjico y para amarrar el cable en Santiago de Cuba o La Habana. Por Real Orden de 3 de marzo de 1888, se le otorgó la concesión y se aprobó el pliego de condiciones. Posteriormente se le concedieron seis meses de ampliación del plazo para la presentación de los pertinentes estudios y, finalmente, se dio por caducada la concesión. Pintor aficionado, participó en la exposición de Bellas Artes celebrada en Santa Cruz de Tenerife en 1854. Falleció en dicha ciudad, soltero, el 17 de febrero de 1918.
f.- Doña Laura Ghirlanda Hernández de Barrios. Nació en Santa Cruz el 11 y fue bautizada el 28 de diciembre de 1829. Contrajo matrimonio el día 7 de octubre de 1850, con don Jacinto Casariego García, tesorero de Hacienda de esta provincia, natural de Burgos, hijo de don Mateo Casariego y doña Petra García, fallecido en Santa Cruz de Tenerife el siete de agosto de 1883. Hijos:
a.- Don Evaristo Casariego Ghirlanda, nacido en Santa Cruz de Tenerife en 1858. Teniente coronel de Estado Mayor. Casó con doña Matilde Sánchez-Pinedo y Manjón, hija de don Blas Sánchez-Pinedo y de doña María de la Concepción Manjón. Con sucesión.
b.- Don Jacinto Casariego Ghirlanda, nació en Marsella en 1869. Alcalde de Santa Cruz de Tenerife [1916-1917], y consejero del Cabildo Insular [44]. Casó en Santa Cruz de Tenerife, el día primero de febrero de 1892, con doña Polonia Caprario y Fernández del Castillo, hija de don Cesáreo Caprario y Arias y de doña Polonia Fernández del Castillo y Estévez. Doña Polonia Caprario fue presidenta de la Comisión Provincial de Damas de la Cruz Roja. A su esfuerzo y perseverancia se debe en gran parte la rápida construcción del edificio de la Cruz Roja y el auge que ha adquirido esta institución en los últimos años. También se recuerda con elogio su gestión en la presidencia de las Cocinas Económicas, que tantos beneficios reportaron a las clases desamparadas en momentos aflictivos para el país [45]. El matrimonio tuvo cuatro hijos:
(a).- Jacinto Casariego Caprario.
(b).- César Casariego Caprario.
(c).- María del Carmen Casariego Caprario.
(d).- Soledad Casariego Caprario.
Falleció doña Laura Ghirlanda en Santa Cruz de Tenerife, el 2 de julio de 1915 y su viudo, don Jacinto Casariego, casó de nuevo con doña Ernestina Lima Romero, de quien tuvo, también, una hija, y falleció en Santa Cruz de Tenerife, el día 4 de enero de 1931.
g.- Doña Olimpia Ghirlanda Hernández de Barrios, nacisa en 1843 y casó, el día 15 de agosto de 1870, con don Luis Menárguez de Vera, teniente coronel de Infantería, natural de Pau, Departamento de los Bajos Pirineos, Francia, hijo de don Lorenzo Menárguez Pérez de Tudela, brigadier de los ejércitos nacionales, oriundo de Alcantarilla, Murcia, y de doña María Dolores de Vera y Olozabal, que lo era de San Sebastián, hermana de don Joaquín, sexto marqués de Narros, grande de España, por su matrimonio con doña Josefa de Corral y Suelves. Fallecieron don Luis Menárguez y su esposa, en Santa Cruz de Tenerife, el 3 de enero de 1909 y el 20 de junio de 1917, respectivamente.
Hijos:
(a).- Don Horacio Menárguez y Ghirlanda, nacidoen Santa Cruz de Tenerife el día 22 de mayo de 1872. Falleció en Madrid, el día 9 de mayo de 1895.
(b).- Don Manuel Menárguez y Ghirlanda, nacido en Santa Cruz de Tenerife el 6 de septiembre de 1873. Falleció, soltero, en Toledo, cuando se encontraba estudiando en la Academia Militar, el día 7 de abril de 1894.
(c).- Don Lorenzo Menárguez y Ghirlanda, nacido en Santa Cruz el 27 de junio de 1877 y murió en ella el 31 de julio de 1907.
(d).- Don Luis Menárguez y Ghirlanda.

h.- Doña Hortensia Ghirlanda Hernández de Barrios. Falleció, soltera, en Santa Cruz de Tenerife, el 25 de noviembre de 1922.

5.- DON LAUREANO HERNÁNDEZ DE BARRIOS Y MANDILLO
Nació en Santa Cruz de Tenerife en 1804 y contrajo matrimonio en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 10 de febrero de  1828, con su prima hermana doña Telesfora
Escudo. Mandillo
Mandillo y Pérez del Castillo, hija de don Esteban Mandillo y Díaz Bencomo y de doña Ana Pérez del Castillo, su segunda esposa. Testaron mancomunadamente ambos cónyuges, don Laureano y doña Telesfora, ante el escribano Manuel del Castillo Espinosa en 1851. Fue nombrado tutor de doña María de la Consolación González de Ara y Carmenatis, por su padre, en 1847.
Falleció don Laureano en la casa familiar de la calle del Castillo, en Santa Cruz de Tenerife, el 29 de marzo de 1876, cinco años más tarde que su mujer y prima, que murió en 1871.
Fue hijo único:
a.- Don Esteban Hernández de Barrios y Mandillo.
Nació el día 20 y fue bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción el 28 de diciembre de  1828. Casó en la misma iglesia, el día 24 de mayo de 1860, con doña María de la Consolación González de Ara y Carmenatis, hija de don José González de Ara, natural de Santa Úrsula, y de doña Isabel Carmenatis y Calzadilla, que lo era de La Victoria de Acentejo. Figuró don Esteban en el décimo lugar de la lista de los mayores contribuyentes del distrito de Santa Cruz de Tenerife en 1889 y falleció el día 2 de octubre de 1891, en su casa de la calle de Los Álamos de La Laguna. Fue sepultado al día siguiente en el cementerio de San Rafael y San Roque de Santa Cruz de Tenerife. Doña María de la Consolación González de Ara, murió en la expresada residencia de La Laguna, el 7 de agosto de 1902. Fueron padres de cuatro hijos:
1.- Don Arecio Hernández de Barrios y González de Ara.
Nacido en Santa Cruz de Tenerife el día 28 de abril, fue bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción, el 14 de mayo de 1870.
Cónsul de la República del Paraguay en Canarias [1901]. Cónsul de España en Swansea, Gales, Reino Unido [1909] y en Londres. Juez municipal suplente de Santa Cruz de Tenerife.
Casó con doña Francisca María Le Brun y Rudall, nacida en Santa Cruz de Tenerife el día 7 de abril de 1872, hija de don Carlos Guillermo Le Brun Poignard y de doña Francisca María Rudall Smith, y fallecida en la misma ciudad el 2 de abril de 1956
Fueron padres de:
(a).-Don Arecio Hernández de Barrios y Le Brun.
Nació en La Laguna, en la casa familiar de la calle de Los Álamos, el día 29 de julio de 1894. Falleció soltero, en Santa Cruz de Tenerife, a los cincuenta y siete años de edad, el 15 de marzo de 1952
(b).-Doña Margarita F. Hernández de Barrios y Le Brun.
Nació en Santa Cruz de Tenerife el 8 de abril de 1893. Casó, el 5 de junio de 1918, con don Joseph T. Hamilton Monteverde, nacido en Santa Cruz de Tenerife el 9 de junio de 1891, hijo de Mr Charles Howard Hamilton y de doña Carmen Monteverde Cambreleng. Fallecieron doña Margarita Hernández de Barrios y don Joseph Hamilton, en Santa Cruz e Tenerife, en 1979 y 8 de mayo de 1981, respectivamente.
Hijos:
-Don Luis José M. Hamilton Hernández, nacido el 17 de julio de 1921,  c. con doña Juana Benítez Filpes.
-Doña María del Carmen Hamilton Hernández, nacida el 23 de enero de 1924, c. con don Luis Díaz de Losada y García.
-Don José Arecio Hamilton Hernández, nacido el 2 de noviembre de 1925. Casó en primeras nupcias con doña María del Carmen Eugui Pereira y por
segunda vez con doña Laura Pérez López.
-Doña Olga Luisa Hamilton Hernández, nacida el 2
Familia Hamilton
de octubre de 1927, casada con don Alfonso de Lugo-Viña Becerra.
-Doña Araceli Erenia Hamilton Hernández, nacida 26 de abril de 1929, casada con don José Caballero Martínez.
-Doña Margarita María de la Paz  HamiltonHernández, nacida el 28 de junio 1930, casada con don Juan Ignacio Lazcano Gallo.
-Don Hugo Carlos Hamilton Hernández, nacido el 7 de septiembre de 1931, casado con doña María Luisa Castro González.
-Don Juan Félix Hamilton Hernández, nacido 12 de julio de 1936, casado con doña Anunciación Rodríguez Regidor. Falleció el 14 de junio de 2003.
-María Cristina Hamilton Hernández, nacida el 4 de mayo de 1938, casada con don Francisco García del Rey García.

2.- Doña Alicia Hernández de Barrios y González de Ara, nacida el día primero de junio de 1880, casó en el Sagrario de la Catedral de La Laguna, el 28 de julio de 1901, con don Nicolás Díaz Beautell, hijo de don Nicolás Díaz Hernández y doña María de los Dolores Beautell y Díaz, quien protagonizó uno de los crímenes más horrendos de su época, al asesinar a su mujer disparándole cuatro tiros de revólver en su casa de la calle de Herradores de La Laguna, el 3 de diciembre de 1913, e intentarlo, también, con su única hija doña Mercedes, de nueve años, pero fracasó en su demencial propósito.
3.- Don Laureano Hernández de Barrios y González de Ara, nacido en Santa Cruz de Tenerife el 18 de mayo de 1885 y casado en La Concepción, el 16 de junio de 1909, con doña Micaela Garavito Adam, hija de don Eduardo Garavito Delgado y de doña María Adam y Cruz. Falleció en Nueva York el día 22 de enero de 1936.
4.-Doña Erenia Hernández de Barrios y González de Ara, nacida  en Santa Cruz el día 17 de noviembre de 1887, casó en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción, el 26 de julio de 1906, con don Agustín Portillo y Ferreiro, comandante de Intervención Militar y comisario de Guerra. Falleció doña Erenia en Madrid, el día 29 de enero de 1947, y su marido en Las Palmas en septiembre de 1953. Con sucesión.

REFERENCIAS
[1] Viana, Antonio de: La Conquista de Tenerife. Tomos I y II. Edición de Alejandro Cioranescu. Aula de Cultura de Tenerife. Santa Cruz de Tenerife, 1968.
Alonso, María Rosa: El Poema de Viana. Estudio histórico-literario de un poema épico del sigo xvii. Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Madrid, 1952,p. 608
[2] Moreno Fuentes. Francisca: Las datas de Tenerife. Libro primero de datas por testimonio. Instituto de Estudios Canarios. San Cristóbal de La Laguna, 1992,  p. 15.
[3] Reformación del repartimiento de Tenerife en 1506. Instituto de Estudios Canarios. Fontes rerum canariarum vi. Santa Cruz de Tenerife, 1953, p. 133.
[4] Espinosa, fray Alonso: Historia de Nuestra Señora de Candelaria. Introducción de Alejandro Cioranescu. Goya Ediciones. Santa Cruz de Tenerife, 1980, p. 120.
[5] Véase nota 1.
[6] Núñez de la Peña, Juan: Conquista y antigüedades de las Islas de la Gran Canaria… Impreso en Madrid año de 1676. Reimpreso en Santa Cruz de Tenerife. Imprenta Isleña. 1947, pp. 133-134.
[7] Núñez de la Peña, op. cit, pp. 149-150.
[8] Bonnet Reverón, Buenaventura: «El cronista D. Juan Núñez de la Peña». Revista de Historia. Número 79. La Laguna de Tenerife. Julio-septiembre de 1947, p. 317.
[9] Viera y Clavijo, José: Noticias de la Historia General de las Islas Canarias. Octava edición. Introducción y notas del doctor Alejandro Cioranescu. Índices de Marcos G. Martínez. Dos tomos. Goya Ediciones, Sana Cruz de Tenerife, 1982, pp. 651-652.
[10] Viera y Clavijo, op. cit., pp. 644-645.
[11] Ms. 133. Procedente de la Biblioteca del Instituto de Canarias donde ingresó por donación de don José Rodríguez Moure. Biblioteca de la Universidad de La Laguna.
[12] Viana, Antonio de: La Conquista de Tenerife. Tomos I y II. Edición de Alejandro Cioranescu. Aula de Cultura de Tenerife. Santa Cruz de Tenerife, 1968, p, 228.
[13] Padrón Mesa, María: Protocolos de Juan Márquez [1518-1521]. Primera parte. Instituto de Estudios Canarios. San Cristóbal de La Laguna, 1993, pp. 449-450
1.204. 1520-septiembre-16: Fol. 475r. Leg. 598
Isabel de los Olivos, hija de Guillermo Pérez, natural de Galway, en Irlanda, vecina, con licencia de Gonzalo Estévez, su marido, presente, da poder especial a Antono Cornejo, vecino de Triana, guarda y collación de Sevilla, correo de las Indias, yerno de María de Vega, y a Alonso Inglés, vecino de la villa de Lepe, ausentes, para cobrar todos los maravedíes, oro, plata y moneda amonedada que de Guillermo Pérez, su padre, difunto, quedaron en las Indias o en otra parte, que a ella pertenecen como legítima y universal heredera de todos sus bienes; y también para hacer transacciones, conveniencias e igualas acerca de lo susodicho. Otorgada dentro de las casas de la cárcel pública de la villa de San Cristóbal.
Testigos: Antón de los Olivos, Francisco de Lucena y Alonso Márquez, vecinos.
Por no saber, Francisco de Lucena.
[14] Hijos de Gonzalo Estévez e Isabel de los Olivos fueron Diego González, casado con Catalina Rodríguez, hija de Gonzalo Ramírez e Isabel Ortiz; Pedro González, que contrajo matrimonio con Isabel González; Francisca González, mujer en primeras nupcias de Diego Alonso, casó por segunda vez con Juan Borges y Catalina González, que casó con Amador González, hijo de Gonzalo Yáñez y de Cecilia González, con dote en 1543, ante Juan del Castillo. A la descendencia de este matrimonio se refiere Núñez de la Peña en su obra, ya citada, pp. 2397-398, cuando dice: La dicha Isabel de los Olivos casó dos veces, la primera con Rodrigo de Barrios, fue de los conquistadores más señalados en esta Isla, son sus descendientes el licenciado Rodrigo de Barrios, comisario del Santo Oficio, y el capitán Juan Núñez de la Peña en esta ciudad; y el capitán don Juan de Molina Calzadilla, en La Orotava. Doña Ana de Barrios Mata, en Canaria, y otras muchas personas; del segundo matrimonio son descendientes el licenciado don Francisco Espinosa y León, regidor y teniente general, que fue de esta Isla. El capitán don Manuel Espinosa, y el licenciado don Diego Sánchez del Valle, y otros muchos.
[15] Dote de Francisca Hernández. Diego de Andrade. 1 de enero de 1528, ff. 30v-31r.
[16] Abreu Galindo, fray Juan: Historia de la conquista de las siete Islas de Canaria. Introducción, notas e índice de Alejandro Cioranescu. Goya Ediciones. Santa Cruz de Tenerife, 1977, p. 166.
[16 bis] A don Miguel Rodríguez y Díaz de Quintana, debemos lo siguientes datos relativos a la familia Timagada.
I. Francisco Hernández de Timagada, no consta quien fue su mujer, pero sí que fue padre de:
II. María Hernández de Timagada, que obtuvo recibo de dote el 22 de octubre de 1557, por parte de Pedro González, zapatero, con quien había tenido al menos dos hijos:
     1. Francisco Hernández de Timagada, e
     2 Inés Hernández, bautizada en el Sagrario de la catedral de Santa Ana en 1556.
III. Francisco Hernández de Timagada, bautizado en la citada parroquia del Sagarario el 25 de junio de 1554, casó con Mencía Rodríguez, hija del sevillano Gonzalo Rodríguez Pambaso, propietario de tierras en las proximidades del barranco de Guiniguada, que aun conservan como topónimo su segundo apellido.
     De este enlace consta que fue hija legítima:
     1. Doña Tomasina Hernández de Timagada, confirmada en la parroquia de Santa Brígida en 1591, tuvo un hijo natural con el canónigo don Diego Vázquez Botello Romero, doctor en Sagrada Teología, que testó el 2 de septiembre de 1651 ante Juan Báez Golfos. Doña Tomasina ingresó posteriormente en el monasterio de Santa Clara. Fue éste:
     A. El capitán don Pedro Romero Vázquez, nacido el 9 de septiembre de 1637, y casado en Telde, el 26 de enero de 1637, con la viuda doña María Suárez Tello. De este enlace procede numerosa descendencia, entre otros, la familia Casabuena.
     El citado Francisco Hernández de Timagada, tuvo fuera de su matrimonio, con Francisca Hernández de Acevedo, a:
IV. Pedro Hernández de Timagada, fundidor, que contrajo matrimonio con María Déniz de Vargas, y dictó sus últimas voluntades ante Diego Álvarez de Silva en 1658, dejando los siguientes hijos:
     1. Doña Tomasa Hernández de Timagada, nacida en 1616, c. en 1660 con Gaspar González de Fleitas, padres de:
     A. Doña Andrea González mujer, desde 1689, de don Alonso Román Falcón, con distinguida sucesión en la ciudad de Las Palmas.
     2. Doña Antonia Hernández de Timagada, nacida en 1619.
     3. Doña Lucía Hernández de Timagada, que casó, en 1638, con Francisco López de Barraza, padres de:
     A. El bachiller Lucas López.
     4. Don Lucas Hernández de Timagada, presbítero.
     5. Doña Úrsula Hernández de Timagada, n. en 1626.
     6. Don Gaspar Hernández de Timagada, n. el 22 de julio de 1628, casó en 1665 con doña Úrsula de Vargas Navarro, los cuales testaron el 30 de julio de 1703 y en 1730, respectivamente, y están enterrados en el convento de Santo Domingo.
     Hijos:
     A. Don Miguel Hernández de Timagada.
     B. Doña Ana Hernández de Timagada.
     C. Doña María Hernández de Timagada.
     D. Don Antonio Hernández de Timagada.
     E. Don Lucas Hernández de Timagada, fallecido en 1678.
     F. Don Matías Hernández de Timagada, que murió el 2 de junio de 1690.
    7. Don Pedro Hernández de Timagada, y
     8. Don Francisco Hernández de Timagada, que nació el 30 de junio de 1633.
[17] Véase Fernández de Bethencourt, F., et al: Nobiliario de Canarias. Tomo ii, p. 464 y Tomo iv, p. 359-368.
[18] Familia Lezur.
[19] S-1, T-xxi, 1. Archivo Municipal de La Laguna.
[20] Véase Índices de los protocolos pertenecientes a la escribanía de Vilaflor. Instituto de Estudios Canarios. La Laguna, 1968, p. x.
[21] Hernán González, hijo de Diego González, vecino de Acentejo, recibió dote para contraer matrimonio con Clara Hernández, hija de Hernando Yanes del Malpaís y de Brígida Martín, en 1573, ante el escribano de Garachico Gaspar de Sexas [f. 177] y él le otorgó en arras 200 doblas.
Hernán o Hernando Yanes del Malpaís dejó varios testamento. En 1571, ante el dicho Sexas, al folio 7. Codicilo en 1574 [f. 148r] y otro testamento el mismo año [f. 154]. Testó de nuevo en 1575, ante el mismo cartulario, y declaró ser dueño de una sepultura en la iglesia del convento de San Francisco. De nuevo dictó otro codicilo al año siguiente [f. 199] y otros dos más en 1578, en uno de los cuales revocaba el dictado en fecha anterior, ante Quiñones, por el que legaba el tercio de sus bienes a su hija Clara Hernández, mujer de Hernán González. En 1579 se inventariaron sus bienes [f. 405] ante Sexas.
[22] Memorial de los padres y abuelos de Diego Martín de Barrios, clérigo presbítero, vecino del lugar de Garachico.xl-22 C (76). El Museo Canario. Las Palmas de Gran Canaria.
[23] Viera y Clavijo, op. cit., tomo II, p. 669.
[24] Año de 1642. Núm. 24. Legajo 17.  Informaciones de limpieza de la genealogía del bachiller Diego Felipe de Barrios, beneficiado del lugar de Lanzarote. Lxxxiii-15. El Museo Canario. Las Palmas de Gran Canaria.
[25] Esteban Hernández de Guzmán, padre de Cristóbal Hernández de Guzmán Villavicencio, fue hermano legítimo de Nicolás Hernández de Guzmán Villavicencio, que hizo informaciones de limpieza de sangre ante Juan Alonso Argüello en 1631.
Catalina López de Villavicencio, mujer de Pedro Hernández de Guzmán, fue hermana de Inés López de Villavicencio, casada con Gaspar Tabares, que de su calidad y limpieza hizo información Tomás Hernández de Figueroa, como padre legítimo de Antonio de Figueroa Bethencourt Villavicencio, por ante Manuel de Merodio, en junio de 1677.
María Francisca de Barrios, viuda de Esteban Hernández de Guzmán Villavicencio, residente en la ciudad de Canaria, dio poder a su sobrino el licenciado don Cristóbal Hernández Felipe de Barrios, presbítero, vecino de la ciudad de La Laguna, para que en su nombre hiciera información ad perpetuam rei memoriam de la filiación, ascendencia, limpieza y calidad de Cristóbal Hernández de Guzmán Villavicencio, su hijo legítimo y de su marido, vecino de la ciudad del Puerto de Santa María, en donde está casado. Ciudad de Canaria, 6 de octubre de 1695. Ante el escribano Francisco de Rego.
[26] Autos de la filiación, limpieza, nobleza e hidalguía del capitán don Amaro  Rodríguez Felipe de Barrios y de sus hermanos, con autos declaratorios y de amparos en la posesión vel cuasi en que por sí y sus mayores ha estado de tal hijodalgo notorio y sus hermanos, que obtuvieron auto de amparo por ante el corregidor José Manuel de Mesones Velasco, el 25 de enero de 1725, quien ordenó que se fijaran y protocolaran en los registros del escribano José Isidro Uque Osorio. En ellos se encuentran las informaciones practicadas por Juan Felipe Rodríguez de Barrios, padre del don Amaro, en nombre propio y de sus hermanos Diego Felipe de Barrios y Luisa Rodríguez de Barrios Villavicencio, mujer de Domingo Álvarez Camejo, en 11 de noviembre de 1695, aprobadas por el corregidor de Tenerife y La Palma, don Félix Virto de Espinal. Entre los testigos presentados por don Amaro Rodríguez figura el teniente coronel don Juan Machado Fiesco quien, en la pregunta sexta del interrogatorio declaró: Es cierto y constante que así los dichos Juan Rodríguez Felipe de Barrios como Beatriz Tejer Machado, padres de los dichos don Amaro y sus hermanos; y Cristóbal Rodríguez de Barrios y Ana Lorenzo Villavicencio, abuelos los unos y los otros sus bisabuelos, unos y otros, por línea masculina y Juan González de Castro y María Tejera, su mujer, sus abuelos maternos y los demás sus ascendientes, todos unos y otros, han sido, fueron y son habidos, tenidos y comúnmente reputados, cada uno en su tiempo, (así por el que el testigo lo vio ser y pasar así, como por que lo oyó decir a sus mayores y personas ancianas) todos los referidos eran gente limpia de toda mala raza, de moros, judíos, y recién convertidos a nuestra Santa Fe Católica, que no han tenido ni tienen oficios mecánicos, viles, ni otra alguna nota, ni mancha por donde puedan en lo mínimo ser reparables, antes si es cierto, sin cosa en contrario, que siempre se les ha tenido y reputado por familias de limpia sangre y generación, y de calidad, amparados por lo expuesto en la notoriedad de caballeros hijosdalgo, nobles, como descendientes de los conquistadores de esta Isla, que estos fueron quintos y sextos abuelos de los dichos […]. Y por la línea de Barrios proceden dichos don Amaro Rodríguez Felipe de Barrios y demás sus hermanos de Rodrigo de Barrios, conquistador de esta Isla, heredado en repartimiento por el Adelantado de ella don Alonso Fernández de Lugo, en tierras de riego de La Orotava y fue dicho Rodrigo de Barrios casado con Isabel de los Olivos, que fueron quintos abuelos de los dichos don Amaro y sus hermanos, de los cuales procedió el licenciado Diego Felipe de Barrios, venerable beneficiado que fue de las parroquiales de Nuestra Señora de los Remedios de esta ciudad, y de la del lugar de Garachico, y comisario del Santo Oficio de la Inquisición, hermano legítimo y entero que fue del dicho Cristóbal Rodríguez de Barrios, abuelo paterno de los dichos don Amaro Felipe de Barrios y demás sus hermanos, y descendiente también de Nicolás de Barrios, natural de la Isla de la Madera, en la ciudad de Funchal, por línea masculina, a quien el rey don Fernando [mandó ]pasar cota y blasón de armas por ser como era caballero hijodalgo, y consta de su Real Cédula, su fecha en Lisbona, tres de julio del año de mil quinientos sesenta y tres, anotada y firmada de Jorge Pedrozo, principal Rey de Armas [de] Portugal, registrada en la chancillería por Roque Viera. Pn. 307. Archivo Histórico Provincial de Tenerife.
[27] El 10 de enero de 1596, ante Bernardino de Madrigal, Ana de Bethencourt, viuda de Hernando Amado, solicitó información testifical y la apertura del testamento de su marido, que había otorgado el 25 de agosto de 1594, ante Francisco Zambrana, pidiendo también que se le concediera la tutela y curaduría de sus hijos menores de catorce años.
Hernando Amado, vecino de Texina, estando enfermo, en caso de que se produzca su fallecimiento, pide ser enterrado en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna. Declara ser casado con Ana de Bethencourt, que trajo de dote un pedazo de viña en Texina que le cupo en la partición de sus hermanos, y también una parte de casas en que moran en dicho lugar. Hernando llevó al matrimonio una heredamiento de viña donde dicen el barranco de Flandes y setenta fanegadas de tierra en la Punta del Hidalgo que había heredado de sus padres, más tres reses vacunas, dos bestias asnales y cuatro reses porcunas. Bienes multiplicados durante el matrimonio, las otras tres partes de las casas compradas a sus cuñados, cinco reses vacunas, tres puercas, tres marranas, dos bestias asnales, doce colmenas, un caballo castaño y ajuar de casa. Deja mejorados a sus hijos Diego, Polonia y Juana en un pedazo de tierra en la Punta del Hidalgo, donde dicen La Hoya debajo de la morada donde viven. Nombra albaceas a su hermano Francisco Sánchez Amado, a Diego Hernández, vecino de Tejina y a su mujer, Ana de Bethencourt, y herederos a sus hijos Juan, Tomás, Asensio, Diego, Polonia y Juana.
En 1580, ante el escribano Lucas Rodríguez Sarmiento, el bachiller Juan Bello y los hermanos Francisco Sánchez Amado y Hernando Amado, dotan con cinco doblas y se comprometen a fabricar una ermita en la Punta del Hidalgo.
[28] Diego Hernández Cuervo, fue hijo de Domingo González y de Catalina González Cuervo, a los que fue señalada dote ante el escribano Juan del Castillo el 13 de febrero de 1575. Catalina era hermana del doctor Juan Fernández Cuervo, beneficiado de la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de La Laguna, y de doña Beatriz Fernández Cuervo, mujer de don Alonso de Fonseca Messía, hijos, entre otros, de Juan Hernández Cuervo, portugués, y de María González.
Juan Hernández-Cuervo de Barrios y Ana Rodríguez, citados en el texto, fueron padres de Bartolomé Hernández-Cuervo, que casó con María Rodríguez Limiña, y procrearon a otro Bartolomé Hernández-Cuervo casado con María Lozano, que fueron padres de doña Bárbara Hernández-Cuervo, mujer de don Miguel de Cámara, de quienes descienden los de este apellido en La Laguna y Santa Cruz y entre los que había que destacar al arquitecto don Menandro de Cámara [1838-1908]; y los periodistas don Miguel Honorio de Cámara [1840-1898] y don Manuel de Cámara [1848-1921], acalde accidental éste último de Santa Cruz de Tenerife y presidente de la Junta de Obras del Puerto.
[29] Don Cristóbal Sánchez de Arocha y Torres, hizo informaciones de limpieza de sangre que fueron aprobadas, el 13 de septiembre de 1735, y protocoladas en el registro del escribano Álvaro José Muñoz Machado. Don Cristóbal y sus hermanos los presbíteros don Francisco y don José Tomás Sánchez de Arocha, fueron hijos, entre otros, de Alonso Sánchez de Arocha, bautizado en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios el 16 de mayo de 1665, hijo de Cristóbal Sánchez de Arocha y María Núñez de Aguiar, parroquia en la que también recibió el bautismo su mujer, Lucía de Torres, el 19 de diciembre de 1667, hija de Miguel Martín del Corral, natural de la isla de La Palma y de María de Torres. Cristóbal Sánchez de Arocha y sus hermanos el licenciado Juan de Arocha, presbítero, y María de Arocha, madre de don Jerónimo Rodríguez de Arocha, beneficiado de los Remedios, fueron fruto del matrimonio de Lucas Sánchez de Arocha y Ana Francisca González de Barrios. Lucas Sánchez de Arocha fue hijo de Cristóbal de Arocha y Bernardina Tabares, nieto de Alonso de Arocha y Beatriz Perera y bisnieto de Alonso de Arocha o Aroche, conquistador de Tenerife, y de su segunda mujer, cuyo nombre no nos ha llegado.
[30] Testamento de Francisca de Jesús de Barrios.
[31] Título de la Fuente de Las Palmas.
[32] Lázaro Rivero de Escobar.
[33] Testamento el 20 de junio de 1692 y codicilo 18 de julio de 1692. Pn. 528, ff. 105r-113r y 117r-119v.
[34] Luis Interián Cabrera.
[35] Sobre la familia del cronista don Juan Núñez de la Peña, véase: Darias Padrón, Dacio V.: «Del pasado tinerfeño. El historiador don Juan Núñez de la Peña y su tiempo». Revista de Historia. 69 (1945),  3-25; 70 (1945), 210-222; 71 (1945), 287-289; 72 (1945), 462-472; 73 (1946), 26-34. Bonnet y Reverón, Buenaventura: «Nuevas investigaciones. El cronista D. Juan Núñez de la Peña». Revista de Historia. 79 (1947), 297-318; 81 (1948), 12-32; 82-83 (1948), 217-236. Cioranescu, Alejandro: «Juan Núñez de la Peña», en Millares Torres, Agustín:Biografías de Canarios Célebres. Edirca. Las palmas de Gran Canaria, 1982, pp. 191-197 .
[36] Desde su temprano establecimiento en Tacoronte, esta familia fue conocida con el apellido compuesto Hernández de Barrios, al que añadían en ocasiones, el de Centeno, que llevaba en segundo lugar su antepasado Pedro Martín, o el adjetivo Centenero para indicar, sin duda, la procedencia de la misma. Ignoramos si los topónimos existentes en La Laguna —San Isidro Centenero o El Centenero— proceden de antiguas propiedades de esta familia o, simplemente, se trata de terrenos propicios para el cultivo de dicho cereal.
[37] El alférez Manuel Afonso y su mujer Magdalena Ascencio fueron padres de Benito Pérez, del licenciado don Lorenzo Pérez, racionero de la catedral de Canaria, ministro calificado que testó e hizo codicilos ante Calderón en 1684, ff. 343 a 348, y de don Juan Afonso Batista, presbítero.
Sebastián Rodríguez Leonardo y Francisca Domínguez fueron padres, además de Juan Rodríguez Leonardo, ente otros, de los licenciados don Lucas y don Lázaro Rodríguez Leonardo, presbíteros y familiares ambos del Santo Oficio.
En la información practicada por el bachiller don Lucas Felipe Domínguez Borges, natural y vecino de Caracas, hijo del capitán don Juan Felipe Domínguez Borges, oriundo de Tacoronte, y de doña María Josefa Rodríguez Delgado, nacida en la expresada ciudad de Caracas —pero de familia originaria de Tacoronte, y parientes dentro del tercer grado, por lo que debieron ser dispensados— ante el corregidor y capitán a Guerra de Tenerife y La Palma, licenciado don José Perciva, a 2 de abril de 1818, los testigos contestaron a la pregunta décimo novena que les consta que los padres y ascendientes del sobredicho bachiller han merecido en los pueblos de Tacoronte y El Sauzal, donde vivieron, el buen concepto y estimación de personas honradas de la primera nobleza y distinción de ellos, habiendo por lo tanto ejercido en los mismos los empleos de república de alcaldes, diputados y personeros, y de cuyos ascendientes del repetido bachiller don Lucas Felipe Domínguez Borges han descendido muchas personas de carácter y de la primera distinción y nobleza de esta Isla, con quienes aquel está enlazado en parentescos cercanos y remotos y en cuyas familias es probable que ha habido sacerdotes seculares y regulares, ministros calificados del Santo Oficio de la Inquisición y oficiales de las tropas de Su Majestad, y otros sujetos constituidos en dignidad y de igual carácter y distinción.
Al testigo le consta que de Jorge González Viera y Sebastiana Luis Álvarez, su mujer, quintos abuelos de varón en varón del dicho bachiller […] descienden don Matías González Suárez y los presbíteros don Miguel y don Manuel González Suárez, ministros calificados y familiares del Tribunal del Santo Oficio […].
Que así mismo le consta que la expresada Sebastiana Luis fue nieta legítima del conquistador de esta Isla Luis Álvarez, y de María Hernández, su mujer, de los cuales descendieron el capitán don Gonzalo de la Torre, los doctores don Juan y don Pedro de la Torre, venerable beneficiado de la iglesia de Tacoronte, don Francisco Crisóstomo de la Torre, tesorero de la Real Hacienda por Su Majestad en estas islas; los licenciados don Andrés y don Juan de la Torre, don Luis Trujillo de la Coba, venerable beneficiado que fue de la isla del Hierro, ministro calificado y comisario del Santo Oficio de la Inquisición; el sargento mayor don Juan Fernández Franco y sus nietos el coronel don Matías Franco de Castilla y teniente coronel don Juan Franco, abuelo de la señora doña María Guadalupe Román, condesa de Siete Fuentes; el capitán don Pedro Domínguez, tercero abuelo de don Lope Antonio de la Guerra y Peña, regidor decano de esta Isla; los reverendos padres maestro fray Francisco y presentado fray Manuel de Cayrós, ministros calificados del dicho Santo Oficio y otras personas de igual carácter y distinción.[…] el capitán don Pedro Soria y los capitanes don Tomás y don Francisco de Castro […] del subteniente don Gonzalo de la Torre Sánchez, que fue padre del capitán don Gonzalo de la Torre y del doctor don Juan de la Torre, padre éste del dicho tesorero don Francisco Crisóstomo de la Torre, que litigó su nobleza e hidalguía ante la Real Justicia de esta Isla en al año de mil setecientos seis y gozó de sus privilegios […] así como lo es el capitán don Miguel Fernández Bello, el licenciado don Ambrosio y los bachilleres don Mateo y don Miguel Fernández Bello con el capitán don Mateo Fernández Bello, todos ministros calificados del Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición; el reverendo padre fray Francisco Rodríguez del Manzano, el doctor don Melchor Borges el Manzano, chantre de la Santa Iglesia Catedral de estas Islas y el capitán don Diego Borges del Manzano, todos tres ministros calificados del expresado Santo Oficio […] los alféreces don Mateo Hernández y don Manuel Afonso, padre éste del licenciado don Lorenzo Pérez Afonso, ministro calificado del Santo Oficio, prebendado de la Santa Iglesia Catedral de estas Islas y de don Ascencio Afonso que fue bisabuelo paterno del ilustrísimo señor don Santiago Bencomo, del Orden de Carlos III, obispo de Astorga, del excelentísimo e ilustrísimo señor don Cristóbal Bencomo, caballero Gran Cruz de la dicha Orden, arzobispo in partibus, del Consejo y Cámara de Su Majestad y del de la Suprema Inquisición, y del doctor don Pedro Bencomo, chantre dignidad de la Santa Iglesia Catedral de Canaria […] el capitán don Salvador Home, el coronel don Juan de Franchy y Grimaldi, el teniente coronel don Francisco Tolosa, el capitán don José de Tolosa, el maestre de Campo don Miguel Rossell y Lugo, el capitán don Cristóbal de Herrera y otras personas de la primera distinción. […] los capitanes don Tomás Hernández de Barrios y don Nicolás Hernández de Barrios, el presbítero don Lorenzo Pérez Antúnez, ministro calificado del Santo Oficio de la Inquisición en el pueblo de Tacoronte, don José Hernández Antúnez, venerable beneficiado de la iglesia parroquial de dicho pueblo y otras personas de igual distinción.
[38] Matías Álvarez de la Fuente, núm. 1303, f. 230,
[39] A propósito del capitán don Nicolás Hernández de Barrios, escribe en su Diario, don Juan Primo de la Guerra:
Lunes 12 de diciembre de 1803, en el Valle.
[…] El jueves 1 recibí carta de mi madre avisándome que fuera a La Laguna para que la acompañase a Tacoronte. En efecto, el viernes siguiente mi madre, mis hermanas y yo fuimos a Tacoronte. Asistimos en casa de mi tío don Lope, donde permanecimos hasta el domingo 4, y en aquellos días vimos los templos. Fuimos visitados de don Nicolás Hernández, gobernador de las armas y alcalde real de aquel lugar, a quien me presenté, del beneficiado don Domingo García, del prior de San Agustín y de algunos otros eclesiásticos. Uno de estos, don Josef Nicolás, clérigo joven, natural de Caracas, sobrino del mayorazgo don Andrés de Torres, quien tiene el mérito y recomendable de talento de haberse habilitado en el espacio de un año y sin otro auxilio que el de los libros para ser ordenado sacerdote.
Jueves, 21[de febrero], en el Valle.
Ayer tarde fue el obispo de Tacoronte a La Laguna, acompañáronle el gobernador de las armas don Nicolás Hernández, el vicario don Josef Martínez y don Juan Machado Dapelo, mi primo y la familia episcopal, en que se incluyen el visitador y largo número de eclesiásticos y dependientes.
Jueves 22[de septiembre de 1808], en el Valle.
Yo he estado hoy en Tacoronte. Por la mañana salí a pasear con mis hermanas; entramos en la casa de don Tomás de Castro; fuimos a las tribunas y a la huerta y después a ver un puente que se ha construido  en frente de la parroquia, para contener os estragos que ocasiona un barranco terrible que atraviesa por allí. Aun el proyecto parecía desproporcionado para los costos y la dificultad de formar tan larga extensión de arcos de cantería sobre aquella elevación, pero se ha concluido en poco tiempo. Los vecinos han contribuido con crecidas sumas y se han personado a dicha fábrica el actual beneficiado servidor de aquella iglesia don [en blanco] Antúnez, hijo de Pedro Hernández y de Ángela Pérez Antúnez, de aquel vecindario, y el teniente de milicias don Nicolás Hernández.
Guerra, Juan Primo de la: Diario I [1800-1807] y Diario II [1808-1810]. Edición e introducción de Leopoldo de la Rosa Olivera. Aula de Cultura de Tenerife. Instituto de Estudios Canarios, Madrid, 1976, pp, 220 y 273, T. I y 59, T. II.
[40] Ontoria Oquilla, Pedro, Luis Cola Benítez y Daniel García Pulido: Fuentes documentales del 25 de julio de 1797. Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Ministerio de Defensa. Madrid, 1997, p. 181.
[41] Véase Luque Hernández, Antonio: «La familia de Torres-Perdomo y el llamado «Mayorazgo de Tacoronte». Boletín de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife. 2010. San Cristóbal de La Laguna, 2010, pp, 122-150.
[42] Véase Alfonso Mola, Marina: «Armadores canarios en Cádiz durante el periodo del libre comercio». Coloquios de Historia Canario-Americana. Núm. 10.Tomo I. Las Palmas de Gran Canaria, 1992, pp. 369-401.
[43] Cola Benítez, Luis y Daniel García Pulido: La historia del 25 de julio de 1797, a la luz de las fuentes documentales. Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Cabildo Insular de Tenerife. Madrid, 1999, p. 110.
[44] Cola Benítez, Luis: «Apuntes históricos 230. Los alcaldes de Santa Cruz». La Opinión. Santa Cruz de Tenerife, 21 de marzo de 2010].
[45] «Doña Polonia Caprario de Casariego. Necrología». La Prensa. Santa Cruz de Tenerife, 22 de octubre de 1924.






 




FELIZ 2016

$
0
0
Con todos los mejores deseos para el año que se estrena, recibe nuestra felicitación solidaria de paz y bienestar.
¡Por un año genealógico apasionante!


2016. AÑO GENEALÓGICO FRANCISCO FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT (1850-1916)

$
0
0




















Este año se cumple el centenario del fallecimiento del genealogista canario Francisco Fernández de Bethencourt, que alcanzó renombre internacional al renovar la ciencia genealógica en España y constituirse en referente internacional por su sistemática enciclopédica.
Si bien puede entenderse, a tenor de su obra, que centró su interés en la aristocracia -la que, casi en exclusiva y por distinta motivación, mostraba interés, sin embargo, marcóel camino de una escuela de investigación, introduciendo el método de la escuela francesa de Borel, que ha desembocado en la genealogía como estudio de la familia.
Nació en Lanzarote en 1850, en el seno de una familia de origen sevillano, por el flanco paterno, y lanzaroteña por el lado materno, desde donde se traslada a realizar estudios eclesiásticos a las Palmas de Gran Canaria, que abandona para iniciar los de Derecho en Tenerife, isla en la que se dedica al periodismo. Una muestra de ello es la fundación del periódico La Lealtad, de corta vida. En este lugar se inicia en las investigaciones genealógicas.
Entre sus obras más destacadas y por las que es más recordado, podemos encontrar: Diccionario histórico, biográfico, genealógico y heráldico de la Provincia, Anales de la Nobleza de España, Les Ordres de Chevalerie en Espagne, La Genealogía y la Heráldica en la Historia (discurso de entrada en la Real Academia de Historia de España en 1900), La Corona y la nobleza de España, · Historia Genealógica y Heráldica de la Monarquía Española, Casa Real y Grandes de España Nobiliario y Blasón de Canarias que, revisado y actualizado por una junta de especialistas coordinados por el profesor Juan Régulo en los años 50 del pasado siglo, pasó a denominarse Nobiliario de Canarias escrito en cuatro tomos.
El conjunto de su bibliografía le abrió las puertas de la Real Academia de Historia, en donde fue recibido el 29 de junio de 1900, y la de la Real Academia Española de la Lengua en 1914; aunque, mucho antes, su inquietud intelectual, lo había hecho merecedor del nombramiento como socio de número de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife, en sesión celebrada el 11 de julio de 1870.
Por todo lo anterior y por muchas otras motivaciones que harían extender innecesariamente estas palabras, distintas personas y entidades de los ámbitos público, social, cultural y genealógico, hemos propuesto la institucionalización del homenaje al erudito y polifacético autor bajo el nombre de “2016 Año Genealógico. Francisco Fernández de Bethencourt (1850–1916)”, con un planteamiento totalmente abierto a cuantas personas y entidades quieran adherirse, pues sólo pretende reconocer y proyectar la figura de un canario universal, en el centenario de su fallecimiento, que fue capaz de llevar su pasión más allá de nuestras fronteras, y ofrecer así el justo reconocimiento que se merece.
Canarias, en el año genealógico de dos mil diez y seis, a veinte de enero.


ENTIDADES ADHERIDAS:
Real Academia Española.
Real Academia de Ciencias, Bellas Artes y Nobles Artes de Córdoba
Ayuntamiento de Agaete. Gran Canaria.
Ayuntamiento de El Sauzal, Tenerife.
Real Sociedad Económica de Amigos del País de Gran Canaria.
Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife.
Instituto de Estudios Históricos Rey Fernando Guanarteme.
Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias.
Gaviño de Franchy Editores. Tenerife.
Centro de Estudios Genealógicos Marqués de Acialcázar.
Genealogías Canarias.
Cartas Diferentes Ediciones. La Palma.
Liceo Taoro. La Orotava, Tenerife.
Doce linajes de Soria.
Genea Generaciones. Chile.
Cuban Genealogy Club of Miami.
Academia Dominicana de Genealogía y Heráldica.
Red de Antepasados.
Instituto de Estudios Históricos Bances y Valdés. Asturias.
Asociación de Genealogía Hispana HISPAGEN.
Asociación Cultural Francisco Fernández de Bethencourt. Lanzarote.
Instituto de Estudios Lanzaroteños.
Junta de Cronistas Oficiales de Canarias.
Maxerco.es
Tataranietos.com
Asociación Cultural de Genealogía e Historia de Aragón.
Sociedad Genealógica y de Historia Familiar de México.
Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias.
Asociación Canaria de Genealogía e Historia Familiar.
Asociación Riojana de Genealogía y Heráldica.
Sociedad de Fomento Instrucción y Recreo Casino de Gáldar. Gran Canaria.
Instituto Piadoso Eclesiástico Jesús Sacramentado  de la Villa de Agüimes. Gran Canaria.
Turigen.

Para información y adhesiones:
Paginas Oficiales:
Facebook: https://www.facebook.com/groups/1924615341097519/?fref=ts


ASCENDENCIA DE MADEIRA: DIEGO SARDINHA Y MARÍA SÁNCHEZ

$
0
0
JUAN R. GARCÍA TORRES
FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA

TOPÓNIMOS ANTIGUOS
PUERTO DE SARDINA (GÁLDAR)
En la “Cuarta década” de Alonso de Palencia hemos encontrado el texto más antiguo que conocemos (es anterior a 1491) en el que aparece citado el topónimo grancanario “Puerto de Sardina”, topónimo que en este caso particular no creemos que guarde relación con el colono portugués que encabeza el cuadro genealógico. Con posterioridad a este texto hemos encontrado múltiples referencias a dicho puerto en distintos documentos de los primeros años de siglo XVI.  He aquí uno de tantos ejemplos obtenidos de la obra “Canarias en el Archivo de protocolos de Sevilla” fechado en febrero de 1500: “…y luego a Gran Canaria, al puerto de las Isletas y desde allí al puerto de Sardina que es en el término de Gáldar…”.
Pero volvamos a la “Cuarta Década” en el momento en que se narra la llegada de una flota portuguesa a Gran Canaria, expedición de conquista de la isla que podemos datar con precisión a fines de  julio de 1478 tan solo un mes después de la fundación del Real de Las Palmas por Juan Rejón en nombre de los reyes de Castilla:
“Por entonces veinte naves lusitanas de las cuales siete iban numeradas se empeñaron en desembarcar a sus soldados con el fin de acabar con los nuestros gracias a su abrumadora mayoría. Unos mil seiscientos llevaría aquella flota portuguesa, y creían que les sería en extremo fácil poder capturar al reducido grupo de los nuestros si llegaban a poner pie en la playa. Para asegurar más el éxito de su empresa los portugueses enviaron a los canarios a un conocedor de su idioma a fin de que estableciera con ellos un convenio sobre esta base: en un día y hora determinados desembarcarían los soldados portugueses llevados al puerto de Sardina aunque pretendieran estorbárselo las reducidas tropas de Andalucía”.
COMENTARIOS A PROPÓSITO
El cronista real e historiador Alonso de Palencia fallece en 1492 cuando trabajaba en la redacción de esta, su obra magna, que quedó inconclusa. En las Décadas, obra escrita en latín, se describen los acontecimientos desde finales del reinado de Juan II hasta 1481, incluyendo por tanto el reinado de Enrique IV de Castilla, su enfrentamiento con su medio hermano Alfonso, el conflicto por la sucesión de Enrique IV, la subsiguiente Guerra Civil y la consolidación de los Reyes Católicos en el trono tras la firma de la paz.
A partir de estas cuadraturas estimamos que el topónimo Puerto de Sardina, aunque el cronista lo confunda con el de Las Isletas, es anterior al final de la conquista de Gran Canaria. Si bien Alonso de Palencia fallece en 1491, ocho años después de la anexión de la isla a la Corona de Castilla, su relato como ya dijimos concluye a mediados de 1481 justo con la llegada del nuevo gobernador Pedro de Vera.
Del texto seleccionado extraemos la noticia de que los portugueses desembarcaron en el puerto norteño a un negociador que conoce la lengua canaria con el  objetivo de sellar un pacto con los naturales que les permitiera hacerse con la isla en el marco del conflicto que enfrentaba  a ambas potencias por el control del Atlántico medio. De haber triunfado esta operación militar de la marina portuguesa, que se realizó, creemos, en  connivencia con los Señores de las islas, hoy los canarios hablaríamos portugués en vez de español, tal y como sucede en el resto de las islas de la Macaronesia: Madeira, Azores y Cabo Verde.
El desembarco del negociador se realizó, según las crónicas, en el puerto natural al que daría nombre, el más próximo a la capital del reino de Gáldar.  En algún texto hemos leído, sin documentación alguna de apoyo, que dicho personaje se llamaba Joao o Juan  de Sardinha pero no hemos encontrado prueba alguna al respecto.
Según Millares Torres, quien lo toma a su vez de Marín de Cubas, el almirante de la flota que trata de expulsar a los castellanos de la isla es un tal Almeida a quien podemos identificar como Francisco de Almeida, el marino que llegó a ser, pasados unos años, virrey de La India, y que falleció en 1510 en la Aguada de Saldanha  (hoy Saldanha Bay en África del Sur) en un contraataque de los hotentotes. 
CRUZ Y HUERTAS DE SARDINA (VALSEQUILLO)
LOMO DE SARDINA  (SANTA LUCÍA DE TIRAJANA)

Según Humberto Pérez en su  blog “Mi Gran canaria: Origen y noticia de sus lugares” el primero de los topónimos en cuestión, Huertas de Sardina, “tiene su origen según algunas fuentes en un antiguo propietario de dichas tierras, el licenciado, abogado de los Reales Consejos y Alcalde Mayor de Gran Canaria, Miguel de la Torre González y Sardina”.
Tenemos que disentir en esta ocasión del prestigioso editor de este blog puesto que el personaje citado desarrolla sus cargos en el último tercio del siglo XVIII y como podremos comprobar en este estudio el topónimo “Huertas de Sardina” aparece en los libros sacramentales de Telde desde mucho antes. Pongamos un ejemplo:
Partida de Bautismo Iglesia de San Juan Bautista Telde, L 8-F 100–Nº 578- Año 1675
"En la Ciudad de Telde en 20 de Diciembre de 1675 años Yo el Bachiller D. Lorenzo Finollo y Venegas… bauticé … a Joan hijo legitimo de Alonso Rodríguez y de Bárbola de San Juan su legítima mujer vecinos de esta Ciudad donde dicen las huertas de Sardina...”
No dudamos en todo caso de que tal personaje pueda ser un descendiente de los primeros Sardina que se afincaron en dicho lugar del actual Valsequillo y que provienen, según queremos establecer, del colono portugués Diogo da Sardinha de quien tenemos la certeza de que era vecino de Telde en fechas cercanas al 1500 y al que hacemos responsable del topónimo Huertas de Sardina en el municipio de Valsequillo y también del topónimo Lomo de Sardina en el municipio de Santa Lucía de Tirajana como luego comentaremos.

VECINDAD TELDENSE
Dicha vecindad puede atestiguarse en el Libro Primero de Bautismos de Telde:
Bautismo de Leonor, Libro 1 - Folio 1 Nº 3 - Iglesia de San Juan Bautista de Telde:
"Viernes tres del mes de Junio (1503) bautizó Diego Sardina una hija, pusiéronle nombre Leonor, fueron padrinos Vicente Tabordo y su mujer Juana (¿Sanches?)"
(Acerca del padrino de bautismo de la niña, Vicente Tabordo, hemos de decir que es el mismo  que comparece en la carta de reformación de repartimientos hecha por el Licenciado Juan Ortiz y Zárate  presentando las escrituras de ciertas tierras que posee en Valsequillo. Creemos asimismo que puede ser, en razón de su original apellido de origen francés, un familiar directo de Gregorio Tabordo, uno de los fundadores de Taganana. La nacida es Leonor, la menor de las hijas de Diego de Sardina quien creemos que es el único vástago de su prole nacido en Canarias).

VECINDAD LAGUNERA
Cuatro años más tarde, en 1507, encontramos a Diego Sardina como vecino de La Laguna y como propietario de tierras en Taganana dedicadas al cultivo de caña. De todo ello encontramos huella en algunos documentos  del escribano Juan Ruiz de Berlanga  a los que haremos algunas acotaciones entre paréntesis:
24. 1507-junio-4.--FoI, 29v.
“Diego Sardina, vecino, da a renta a Alonso de Sevilla, vecino de Gran Canaria, en el lugar de Agüimes, unas casas que posee en la villa de Agüimes, y 2 suertes de tierra de regadío con su agua, lindantes con la vega real, con tierras de Cornado y de Juan Adobad. Estas tierras fueron dadas en repartimiento y vecindad: unas a Diego y otras a su hermano Luis, quien las traspasó a Diego. Le arrienda también 1 buey hosco, que anda en los ganados de Tuahanato, término de Gran Canaria, y otras tierras de sequero, unas 16 fanegadas en Agüimes. El arrendamiento es por 4 años que comenzará el día de San Juan de junio y la renta anual será de 20 fanegas de trigo, pagaderas el mismo día de San Juan.— Testigos: Esteban... (roto),Rodrigo de Baeza, Martín Sánchez y Juan Sánchez, estantes y vecinos.” Diego Sardina. Alonso.
(Diego llega a Gran Canaria acompañado de su hermano Luis quien parece que le traspasa la propiedad y después abandona la isla porque de él no ha quedado huella documental. En su honor, el hijo mayor de Diego lleva su nombre. Esto nos atestigua que se trata de una migración familiar. Debemos prestar atención al hecho de que las tierras que obtuvieron en repartimiento ambos hermanos lindan con las otorgadas a Alonso de Cornado o Coronado,  y a Luis de Adobar, el primero un hombre de las islas vecino de  Lanzarote en los años 70, criado leal de los Herrera Peraza, y el segundo, un indígena canario, creemos que guanche,  hipótesis que argumentaremos en un próximo artículo. Lo que nos interesa resaltar en este momento es la ubicación y extensión de las tierras que recibe y que arrienda una vez pasa a ser vecino de Tenerife. Las de regadío, situadas junto a la vega real de Aguatona, pueden ser las mismas que, dedicadas a cañaveral,  pasaron  a ser propiedad  del también portugués Alonso de Matos; las de secano, creemos que pueden corresponderse con las situadas en una loma junto al río de Tirajana que serán llamadas por entonces Lomo o lombada (en portugués) de Sardina. No es necesario aclarar que el Señorío de Agüimes englobaba en aquellos tiempos todo el territorio que hoy ocupan los tres municipios del sureste con la excepción del Lugarejo es decir del pueblo de Santa Lucía, ya dentro de la caldera.  Es probable que la propiedad de estas últimas tierras de secano que se citan se mantuviera  en manos de la familia  o retornara a ellas con el tiempo pues a finales del siglo XVI pobladores de este apellido aparecen asentados en la comarca de Tirajana).
66. 1507-julio-23 FoI. 81v.
“Francisco Ruiz en nombre de Antonio Enríquez, candelero, y de su mujer Isabel Ribera, vecinos de Gran Canaria, y Diego Ortiz anulan la venta de unas casas con sus solares que el primero había vendido al segundo por 25 doblas. Testigos: Pedro de Vergara, alcalde mayor, Sebastián Páez, escribano público, Ruy Jiménez de Becerril y Diego Sardina, vecinos”.
(Tanto Antonio Enrique como Isabel Ribera, su mujer, constan como padrinos de cierto bautismo en el libro primero de El Sagrario. Podrían ser los padres de Catalina de Ribera, la esposa de Luis Sardina, hijo, lo que explicaría la presencia de su padre, Diego Sardina como testigo de la anulación de este contrato.)
77. 1507-julio-30.--Fol. 90v.
“Fernando Sánchez Pitel, yerno de la mujer de Diego Sardina, vecino, vende a Rodrigo Alonso, vecino, un cañaveral de azúcar en el valle de Taganana, que tiene plantado en unas tierras de Diego Sardina, unas 4 fanegadas de sembradura, lindantes con el barranco del mismo valle y con el monte. Las tierras se llaman "La Fajana" y la mitad del cañaveral se plantó en el mes de mayo del año pasado y la otra mitad en el presente. Le vende solamente la primera hoja con el agua y con un estanque de agua, que está en las mismas tierras, para regar las cañas, y la zoca que quedare, después de cortada la caña, será para Sardina,propietario de la tierra. El precio es de 65 arrobas de azúcar blanco, lealdado, que declara haber recibido. Testigos: Juan Serrano, Diego Ramírez, criado del Ldo. Alarcón, y Rodrigo de Baeza, estantes.” Firma: Fernando Sánchez Pitel.
(Advertimos con este documento que Diego Sardina, avecindado en Tenerife, es propietario de tierras en Taganana que pueden ser las mismas (Valle de Benijo) que este   había comprado a Bautista de Ascanio, el absentista Alguacil Mayor de la isla. El cultivador de las mismas resulta ser un yerno de su mujer. Efectivamente,  como se deduce de nuestras pesquisas, la esposa de Diego, María Sánchez, había estado casada anteriormente, y de tal matrimonio nació una hija llamada María Martínez que casó con el tal Fernando Sánchez Pitel. María Martínez era pues entenada de Diego Sardina.)
193. 1507-diciembre-29.--FoL 248v.
“Juan de Quadros, estante, vende a Juan Benítez, aserrador, estante, un solar situado en la calle de Santa María, que linda con casas y solar de Alonso Bello y con solar de su yerno DiegoSardina. El precio del solar y tapias es de 2 doblas de oro, que declara haber recibido. Testigos: Pedro de Azpeitia, Juan Francés, Rodrigo Cañizares y Alonso Gutiérrez, estantes”. Juan de Quadros. A ruego, Alonso Gutiérrez.
(La originalidad del apellido Quadros nos lleva también a Portugal y más concretamente a la isla de Madeira  a partir de nuestras consultas en la obra Antroponimia primitiva da Madeira. En este documento observamos que el tal Juan de Quadros es estante, es decir no avecindado por el momento en la isla, y que se le identifica como el padre de María Sánchez, la esposa de Diego Sardina. El solar está en La Laguna en una calle cercana  al actual catedral donde se concentran pobladores portugueses como se acredita en los apellidos de los vecinos cuyos solares son anejos: Sardinha y Velho,  castellanizados como Sardina y Bello).

MOTIVOS DE LA MARCHA A TENERIFE DE LOS SARDINA
En su libro Génesis y desarrollo  de Ingenio en el siglo XVI sus autores Rafael Sánchez Valerón y Felipe Enrique Martín Santiago, previa consulta de las datas de Tenerife, nos refieren lo siguiente:
“En el año 1503 Diego Sardina tuvo problemas en la isla de Tenerife con las tierras recibidas por él en repartimiento. Su ausencia de las mismas fue considerada como causa de pérdida de vecindad y sus tierras fueron entregadas a Bartolomé de Porcuna. Conocedor de su desgracia, realizó gestiones ante el adelantado Alonso Fernández de Lugo recibiendo el 14 de octubre de 1504 en la Punta del Hidalgo tierras en regadío al tiempo que se le autoriza  para la instalación de un trapiche o molino azucarero movido por bestias. También recibe en esa fecha 200 fanegadas de sequero para cultivar trigo y pastel encima del camino que une La Laguna con Taoro”.
Noticias de dicho traslado a Tenerife y de las actividades agroindustriales que allí desarrolla  nuestro ascendiente las encontramos, asimismo, en el artículo titulado Tagananade Elías Serra Ráfols publicado en 1944 en la Revista de Historia.
El profesor Serra sostiene en el mismo que la prosperidad inicial de la comarca estuvo asociada no solo a los hombres de las islas (Lanzarote y Fuerteventura) que obtuvieron la data original sino también a emprendedores colonos portugueses como es el caso de  Diego Sardina que asume la tarea de erigir un ingenio de azúcar en la localidad. Les mostramos a continuación los extractos de dos contratos notariales fechados en 1506 en la escribanía de Sebastián Páez que nos dan fe de la relevancia de las responsabilidades que Diego asume y de la solidez de sus finanzas:
"Sepan cuantos esta carta vieren como yo, Alonso Martín, albañil, y como yo Diego Saldaña, ambos vecinos que somos de la isla de Tenerife, otorgamos e conocemos que somos convenidos e concertados e igualados en esta manera: que yo el dicho Diego Saldaña doy a vos el dicho Alonso Martín a hacer una casa de ingenio en la acequia del agua en sitio que yo allí tengo nombrado e señalado, de la forma e manera que yo vos la diere trazada e señalada e bien...las... a mi costa e misión para que de tal anchor, longor e compás me hagades la dicha casa de ingenio, toda de piedra, en tanta altura como yo vos mandare, bien hecha ripiada e regada e vista de maestros…”
"Sepan cuantos esta carta vieren como yo Luis Afonso, carpintero portugués, estante que soy en esta isla de Tenerife otorgo e conozco que tomo a hacer de vos Diego Sardina, vecino que sois de esta dicha isla, que sois presente, un ingenio que vos habéis de hacer en el lugar e sitio de Taganana, que es término de esta isla, en las casas que vos ahora hacéis en el dicho lugar de Taganana para lo que he de hacer bien hecho de carpintería con mis oficiales y que es la rueda e ejes e prensa e cureños e todas las otras cosas anejas al dicho ingenio, e las canales para el ingenio, todo hasta lo dar moliente e corriente, bueno e bien fecho, a vista de dos oficiales que de ello sepan, dándome vos el dicho Diego Sardina toda la madera que fuere menester puesta en el lugar donde se ha de hacer el dicho ingenio a vuestra costa e misión..." En 17 de septiembre de 1506. Firmado autógrafo: Diego Sardynha
Para completar su artículo, el profesor Serra, después de probar que ambos documentos se refieren al mismo personaje y lugar, aun a pesar de la confusión del escribano a la hora de escribir su apellido, nos dice por último glosando su figura:
“Este Sardinha, tan evidentemente portugués, sería probablemente uno de los maestros de azúcar que de la Madera vinieron a implantar aquí esta industria. Por las Datas conocíamos ya algunos, todos portugueses. De Sardinha sabemos además que poseía casas (esto es, una casa con varias estancias) en La Laguna, acaso en la calle Real (hoy San Agustín) y de sus actividades industriales en Taganana es rastro el contrato que hace en noviembre del mismo año 1506 para que le suministren 3000 cargas de leña buena y gruesa como es costumbre cortar para los ingenios, en Taganana, en la montaña de dicho valle, por precio de cuatro maravedís por cada carga. Se trata, pues, junto con los mencionados en la Data del Adelantado, de uno de los destacados fundadores del pueblo de Taganana”.

EPIDEMIA DE MODORRA EN LA LAGUNA
(Sobre la fecha y circunstancias del fallecimiento de Diego Sardina y de su esposa  y de al menos dos de sus hijos)
Además de los protocolos citados de Juan Ruiz de Berlanga y Sebastián Páez, hemos hecho un rastreo  en  escribanías tinerfeñas de fechas posteriores  para obtener noticias  de la familia Sardina. Del resultado de estas pesquisas se colige que no todo parece ir bien a comienzos de la segunda década del siglo puesto que Diego Sardina, aunque está vivo, ya no ejerce como cabeza de familia y parece tener problemas financieros.
Efectivamente, en 1510, ante Hernán Guerra, aparece Luis Sardina, el hijo mayor de Diego, recibiendo un poder especial de su madre, María Sánchez, para vender bienes muebles y raíces de sus padres. De esto concluimos que Luis era ya mayor de edad (más de 25 años) por esas fechas y por lo tanto nacido fuera de las islas y que su padre debía estar enfermo o impedido, motivo por el que este actúa en su nombre. En este mismo año Luis aparece vendiendo puercos a un portugués, Gonzalo Báez de Tavira, y comprando 24 fanegadas de tierra en Tegueste a un tal Juan Martín de Espinal.
En 1512 Diego Sardina es citado en una de las cláusulas del testamento de Lope Fernández, herrero, conquistador de Tenerife, como deudor:
“Ítem mando que se recabe de Diego sardina, vecino que fue de esta isla, 600 arrobas de azúcar blanco que me debe para lo cual está hipotecada la hacienda de Taganana…”
En la década siguiente, en 1520 y ante Alonso Gutiérrez aparece Luis Sardina ejerciendo de testigo en el recuento de bienes posterior al fallecimiento de Francisca del Castillo (Princesa Dácil). Asimismo es citado en el testamento de Andrés Martín como arrendatario en mancomún de ciertas abejeras salvajes. En este mismo año y ante el mismo escribano encontramos la única nota que hemos podido localizar en todo este periodo referida a su padre, Diego Sardina, en la que se señala que este se hace con un alfanje en el remate de los bienes del genovés Bartolomé Gerin.
Al año siguiente, en 1521, aparece también Luis Sardina arrendando sus tierras de Tegueste, comprando ropa y ejerciendo de testigo en la declaración testamentaria, por encontrarse este muy enfermo, de Miguel del Barco, hijo de  Gregorio Tabordo, difunto, y de Juana del Barco, pareja originaria del Taganana colonial con la que parece que los Sardina mantenía una especial relación.
Todavía en marzo de 1522 aparece Luis Sardina comprando un solar en San Cristóbal  de La Laguna a Juan Martín de Espinal que linda con un solar de María Sánchez, mujer de Diego Sardina, con casas del vendedor y con la calle real, documento que nos sirve de prueba para confirmar la localización de la residencia familiar en la Calle Real o de San Agustín y para probar que el fundador de la estirpe vive aún en esa fecha.
Pero es en la primavera de 1522 cuando la muerte toca a la puerta de los Sardina en la Calle Real de San Cristóbal de La Laguna trayendo la desgracia a toda la familia:
- El 21 mayo de 1522 fallece, después de dictar su testamento ante Juan Márquez, Isabel Sánchez Sardina, hija de Diego Sardina y María Sánchez. Veamos un extracto de dicho testamento:“Testamento de Isabel Sánchez, mujer de Diego Álvarez. Albaceas: Ibone Fernández y Guillén de Betancor. Nombra herederos a Juana, María, Malgarida y Catalina, sus hijas y de su marido Diego Álvarez por partes iguales. Otorgado en las casa de Ibone Fernández. Testigos: Luis Sardina, Alonso Mirabal y Diego de Ortega”
El hecho de que tenga cuatro hijas (la última es de corta edad porque no aparece registrada en el testamento que hizo su padre dos años atrás en 1520 ante Juan Márquez) nos informa de que Isabel fallece joven, a una edad próxima a los 30 años, debiendo haber nacido por tanto en la década de los 90, también en Madeira, probable lugar de origen de la familia. Este es el extracto del documento citado:
“Testamento de 14 de marzo de 1520 de Diego Álvarez porque se va de armada. Albaceas: Ibone Fernández y su mujer. Casado con Isabel Sánchez Sardina. Tierras en Tegueste, viña, molino y casas. Hijas: Juana, María y Malgarida”.
Por interés genealógico, haciendo un pequeño inciso, diremos que Diego Álvarez es hermano de Malgarida Perdomo y sobrino de Guillén Betancor quien consta  en un documento de  septiembre de 1510 como “hombre de las islas”.
-El  19 junio de 1522 y ante el mismo escribano será el turno de testar de María Sánchez declarando en los prolegómenos que su marido, Diego Sardina, era difunto. Suponemos que el óbito de su esposo se había producido recientemente ab intestato por no encontrarse aquel en plenitud de sus facultades mentales. Veamos un extracto de las últimas voluntades de su esposa:
“Testamento de María Sánchez, mujer de Diego Sardina, difunto. Hijos: Luis Sardina; Catalina Sánchez, mujer que fue de Lorenzo Fernández; María Martínez, mujer  de Fernán Sánchez Pitel; Leonor Sardina, mujer de Melchor Fernández ; y sus nietos,  hijos de Isabel Sardina, difunta, mujer de Diego Álvarez. Albaceas: Juan de Llerena y Sebastián de Llerena, su primo”.
Como puede comprobarse, la testadora cita a todos sus hijos como herederos y también a sus nietas, las hijas de Isabel Sardina, quien había fallecido tan solo un mes antes. Señala por otra parte que también era difunto su yerno,  Lorenzo Fernández,  el esposo de Catalina Sánchez, su hija mayor, muerte que debió ser también reciente pues tenemos constancia de que el tal Lorenzo estaba vivo en mayo de 1521 siendo citado en el documento que lo acredita como yerno de Sardina, lo que viene de nuevo a confirmarnos que el cabeza de familia, Diego Sardina, seguía vivo por entonces a pesar de su invisibilidad en los protocolos.
-El  26 julio de 1522 y ante Alonso Gutiérrez es el turno de testar del primogénito:
“Testamento de Luis Sardina. Albaceas: Bastián Machado e Ibone Fernández. Herederos: Diego y Ana, sus hijos, y de su mujer, Catalina Rodríguez. Cita  a Melchor Fernández, su cuñado”.
Tenemos la seguridad de que Luis fallece poco después de haber dictado este testamento pues se señala en un documento de septiembre de este mismo año de 1522 que Catalina de Ribera era ya viuda.

LA MORTANDAD DE LOS AÑOS VEINTE
Así pues y con todo esto tenemos que concluir que la descendencia de Diego Sardina quedó seriamente comprometida por la extraordinaria mortandad que asoló a esta familia. Nos preguntamos de inmediato si la mortífera epidemia los afectó solo a ellos  o por el contrario si se extendió por la isla, y para resolver ese interrogante  recurrimos a la consulta de un interesante trabajo de Mª Josefa Betancor Gómez y Luis Alberto Anaya Hernández titulado: Las epidemias en Gran Canaria hasta la tercera década del siglo XVI publicado en  MDC 2006. 
“A lo largo de la tercera década, Gran Canaria sufrirá la epidemia más larga, y quizás mortífera de su historia, aunque las referencias en las fuentes impresas sean escasas. Marín de Cuba alude en unas pocas  líneas a que hubo en casi todas siete islas una grave enfermedad a modo de peste, llamada modorra, que duró nueve años donde murieron casi todos los naturales de ellas. Viera la menciona para justificar el que por su causa, el gobernador Bernardino de Anaya no pudiera enviar socorros a la fortaleza de Mar Pequeña, asediada por el rey de Fez, y para explicar la abolición de la mancebía. Millares Torres es quién aporta más datos, situándola cronológicamente, aludiendo a su intermitencia y mencionando documentos del Cabildo catedral y particulares sobre la misma”.
Anaya y Betancor nos amplían la descripción del fenómeno citando acuerdos del Cabildo de Tenerife para informarnos, después de señalar la aparición a principios de esta década de brotes de la epidemia en África, Madeira y Andalucía, de su llegada a Canarias hacia principios de 1523, primero a La Gomera y poco después a  Lanzarote y Gran Canaria. Nos dicen además estos autores que la isla de Tenerife no se vio afectada gravemente por la mortandad aunque haciendo la siguiente matización:
“No obstante, Tenerife debió de padecer alguna enfermedad, pues el 23 de mayo de 1522 al discutirse la renovación del salario del Dr. Jiménez, se dice en las actas del cabildo que esta isla no está muy sana y hay muchos enfermos en ella. El seis del mes siguiente se ordena al médico que vea a los esclavos de Francisco Díaz para ver si están enfermos de pestilencia, aunque la ausencia de noticias posteriores parece descartar que fuera este el mal que padecían”.
Nosotros estimamos, sin embargo, que la isla de Tenerife sí se vio afectada por esta enfermedad como puede deducirse de lo ocurrido a la familia Sardina, residente en La Laguna, que en cuestión de pocos meses pierde a gran parte de sus efectivos. Consideramos además que fue en esta isla donde primero se sintieron los efectos de la epidemia (primavera de 1522) y que desde aquí la modorra debió extenderse al  resto del archipiélago.
Asimismo, la noticia en las actas del cabildo referente a que la enfermedad afecta a los esclavos de un tal Francisco Díaz nos conduce a pensar por una parte que, tal y como señala Marín de Cubas, la mortandad se cebó en los naturales de las islas, desprovistos de defensas inmunológicas, y por otra, a presumir que Diego Sardina y María Sánchez son igualmente naturales descendientes de esclavos guanches en primera o segunda generación que llegaron a Canarias desde la isla de Madeira tras la definitiva orden de expulsión de los canarios  decretada por el rey de Portugal, orden que fue dirigida a los mandatarios de la isla en 4 de mayo de 1503:
“Hemos mandado muchas veces echar fuera de dicha isla a todos los canarios, así horros como cautivos, por los grandes inconvenientes que para dicha isla se producen por culpa de ellos, según estamos informados, lo cual nunca se ejecutó tan enteramente como mandamos. Sin embargo, por esta presente mandamos que, a partir del día de la notificación de este mandato nuestro hasta el fin de los meses primeros siguientes, se han de encontrar fuera de dicha isla todos los canarios que en ella hubiere, así horros como cautivos, bajo pena de que, los que sean horros, pierdan la libertad y pasen a ser cautivos nuestros si pasado dicho tiempo se encuentran aún en dicha isla, y los que tengan dueño pasarán asimismo a nuestra propiedad. Y damos para esto encargo de ejecución a Joao Rodrigues de Parada, al cual por esta mandamos que, pasados los dichos dos meses, tome para Nos como cautivos a todos los que se encuentren en dicha isla y nos los envíe a esta ciudad en la primera carabela que de aquella venga, para mandar hacer con ellos lo que nos plazca”.

PROBABLE ASCENDENCIA GUANCHE DE  DIEGO SARDINA
Fundamentaremos nuestra hipótesis en primer lugar con dos textos muy clarificadores, el primero extraído de la tesis de Alberto Vieira La esclavitud en Madeira dirigida por Manuel Lobo y el segundo de un artículo de Lothar Siemens y Liliana Barreto publicado en AEA titulado Los esclavos aborígenes canarios en la isla de Madeira.
Como resultado de la colaboración entre diversos profesionales entre los cuales están los dos investigadores citados se ha publicado recientemente, por iniciativa del Ayuntamiento de  Candelaria, en la Colección Guanches, un magnífico y bien documentado cómic, obra
de Quique Ramos y Eduardo González, cuya lectura muy sinceramente recomendamos.
- Alberto Vieira:
“La presencia de los guanches en Madeira es un hecho natural. A ello contribuirá la proximidad de Madeira y el empeño de los madeirenses en la iniciativa Henriquina. Transcurridos apenas 26 años desde el inicio del poblamiento de Madeira los madeirenses tomaron parte en la disputa por la posesión de Canarias al servicio de su señor el infante don Henrique. Tales condiciones definirán la presencia madeirense en el mercado de esclavos teniendo lugar en la primer a mitad del siglo XV algunas incursiones de las que resultó aprovisionamiento de esclavos. Acerca de estas, se tienen referencias de tres (1425, 1427,1434) que parten de Madeira. Más tarde en la expedición a la costa africana de 1445 el madeirense Alvaro de Ornelas hace un desvío a la isla de La Palma donde toma algunos indígenas que son conducidos a Madeira. Además en los numerosos viajes organizados por portugueses entre 1442 y 1446 se capturan esclavos que después serán vendidos en Madeira o en Lagos.
A partir de mediados del siglo XV son frecuentes las referencias a esclavos canarios en la isla de Madeira como pastores y maestros de ingenio. Su presencia en la isla es importante en las últimas décadas del siglo XV. Los documentos clamando por medidas para domar su rebeldía son indicios de ello. Muchos se mantienen en Madeira fieles a la tradición de pastoreo. Extrañamente, en los testamentos del siglo XV no encontramos indicaciones de ningún esclavo guanche. Además de dos esclavos que poseía el capitán Simao Gonçalves da Camara, se sabe que Joao Esmeraldo, en la Lombada da Ponta do Sol, era también detentador de esclavos de este origen, sin que se indique el número de ellos. Cadamosto en su primera visita a Funchal en 1445 refiere haber visto a un canario cristiano que se dedicaba a hacer apuestas sobre lanzamiento de piedras.
Aquí, a ejemplo de las Canarias, ellos sobre todo los fugitivos serán un quebradero de cabezas para las autoridades. Fue como resultado de esta situación insumisa, de libres y cautivos, que el Señorío de Madeira determinó en 1483 una investigación de los hechos, seguida de una orden de expulsión en 1490. De acuerdo con este último documento todos los esclavos canarios oriundos de Tenerife, La Palma, Gomera y Gran Canaria, con la excepción de maestros de azúcar, mujeres y niños, deberían ser expulsados del archipiélago.
Las reclamaciones de los funchalenses, síntoma de que se sentían perjudicados y de que esta comunidad era importante, llevaron al infante a considerar tan solo la expulsión de los libres. En 1503 el problema aún persistía ordenando el rey que todos fueran expulsados en un plazo de diez meses. De nuevo el rey retrocede abriendo una excepción para aquellos que eran maestros de azúcar y para dos esclavos del capitán llamados Bastián Rodríguez y Catalina, con el argumento de que estos nunca habían sido pastores. De todo esto podemos concluir que las Canarias se consolidan en el siglo XV como el principal aportador de esclavos complementándose esta fuente con presas de los asaltos a la costa de Marruecos y de viajes más hacia el sur”.
- Lothar Siemens y Liliana Barreto
“El apogeo del negocio azucarero en otras islas atlánticas, en detrimento del de la Madera, era ya entonces un acontecimiento próximo e irreversible. Entre las causas que provocaron este venir a menos de su industria, hay dos que fueron decisivas y que favorecieron notablemente el auge económico del mismo negocio en Canarias: la actitud excluyente de los madeirenses frente a determinados extranjeros genoveses y de otras partes… y la fuga de su mejor mano de obra especializada hacia Canarias.
Es bien sabido, efectivamente, que, de la misma manera que Pedro de Vera hizo traer frutales y cañas azucareras de la Madera a Gran Canaria después de 1483, en que terminó la conquista de esta isla , también de la Madera llegaron luego los cosecheros, los maestros de azúcar y el personal auxiliar que formaban los carpinteros, caldereros, refinadores, etc. Tras el estudio de estos documentos, presumimos que muchos de aquellos «portugueses» que vinieron a las Canarias a fomentar el negocio del azúcar no eran otros que antiguos esclavos aborígenes canarios, ahora libertos, cristianizados y ostentando los apellidos de sus padrinos portugueses o el de sus antiguos amos madeirenses. En abono de esta conclusión hay que señalar que algún lusitano trajo incluso apellido de toponímico canario cual es el caso de «Juan de Gáldar, portugués» que aparece citado en documentos de nuestras islas desde fines del siglo XV”.
En el cómic citado, Alzados de La Madeira, que es una especie de síntesis de la

investigación sobre el tema de los esclavos de origen canario en aquella isla se refleja la existencia (no sé si esto está bien documentado) de una gran migración forzada de canarios tanto libres como cautivos hacia las islas de las que proceden. Esta migración colectiva, que de existir, tuvo que situarse cronológicamente con posterioridad a este edicto, se realizó en carabelas fletadas por Portugal para el cumplimiento de la orden real previo pacto con los desterrados.
En segundo lugar señalaremos algunos indicios relevantes de la probable naturaleza indígena canaria de Diego Sardina y de su familia:
- En el testamento ya citado de Luis Sardina en 1522 se hace saber que este,  que es el primogénito de Diego Sardina, es compadre del natural  Rodrigo Hernández con quien comparte una colmena en Güímar. También nombra Luis en su testamento al guanche Pedro Miguel, hidalgo que fue de dicho menceyato, precisando que este sabe dónde están unos corchos de drago que son de su propiedad.
- Ya hemos citado asimismo la presencia de Luis Sardina como testigo en el recuento de bienes de Francisca del Castillo (Dácil) inmediatamente posterior a su testamento de 1520 cuyos albaceas fueron Ana Gutiérrez, mujer de Martín de Mena, la hija de Bentor, y su primo Pedro de Tacoronte que es asimismo un hidalgo guanche. Puesto que Luis Sardina sabe firmar y es una persona letrada es posible que sus congéneres lo hayan seleccionado por tal motivo para acometer esa tarea.
Por último acudiremos a la consulta del libro Antroponimia primitiva da Madeira e repertorio onomástico histórico de Madeira (Séculos  XV e XVI), cuyos autores son Naidea Nunes Nunes y Dieter Kremer, para constatar la presencia en dicha isla de distintas personas que portan dicho apellido, algunas de ellas descendientes de esclavos.  Destacamos del listado adjunto la última de las notas en la que se habla de Ana Sardinha, esclava que fue de Tomé Sardinha, referencia con la que se atestigua una vez más que es generalmente el propietario quien otorga su propio apellido a los esclavos de su hacienda.
- Sardinha,  Diogo. Calheta a 1513-1514  L Contas Madeira
- Sardinha, Diogo e Catherina Afonso (Lopo, filho de) Jardim a 1538-1553. L Matricula Funchal
-Sardinha, Diogo e Beatriz Vaz (Manoel  filho de) Jardim a 1538-1553. L Matricula Funchal
- Sardinha, Joane (preto, forro, filho de Joao Dias, preto, e Ana Sardinha que foi escrava de Tome Sardinha. Funchal a 1574. Escravos Madeira casamentos.
De la lectura atenta de dicho índice de habitantes de Madeira en los siglos XV y XVI observamos por otra parte con curiosidad genealógica  la presencia de apellidos que también se dieron en Gran Canaria en torno al año 1500 como es el caso de Mouro y Matos, entre otros que son muchísimo más cercanos para nosotros como Alvares, Martins y Gonçales, lo cual nos lleva a pensar, como dice Lothar Siemens, que muchos pobladores portugueses que forman parte como Diego Sardina de nuestra ascendencia, pudieron quizá provenir de Madeira y ser asimismo descendientes de esclavos de origen canario.
  
DIGRESIÓN SOBRE EL ORIGEN REMOTO DEL APELLIDO SARDINA
- Sobre el origen remoto del apellido Sardina hemos encontrado dos interesantes reseñas en la red con explicaciones encontradas sin que creamos necesario decantarnos por ninguna de ellas, dada su irrelevancia para esta investigación:
La primera reseña, localizada en el blog apellidosespanoles.blogspot.com.es, nos dice: “Apellido de vieja raigambre gallega y portuguesa. Como linaje toponímico, su cuna se encuentra en alguno de los poblados que citan los índices geográficos: Sardiñas, una aldea en la parroquia de Soaserra, en el municipio de Cabañas y partido judicial de Puentedeume, y que fue singularizado, como era normal en tiempos antiguos al tratarse de una sola persona. Por nuestra noticias es un antiguo apellido de Portugal, pues en 1209 vivía Pedro Sardiña (o Sardinha), padre de Pero Pires Sardiña, prior del monasterio de San Vicente en Lisboa. En 1316 vivía un Martín Martíns Sardiña, ubicado en Neiva, y con casa en la quinta de Riba Fría. En este país los Sardinha son frecuentes en el Alentejo”.
La segunda reseña se corresponde con un post  de Felipe Enrique Martín Santiago en el periódico digital Maspalomas ahora.com que lleva por título Topónimos de Gran Canaria: Sardina en el que este autor plantea  un posible origen mediterráneo de dicho apellido relacionando el término con el  nombre de la isla de Cerdeña, que en portugués se escribe Sardenha, isla que estuvo vinculada a Génova durante la Baja Edad Media.

EL REGRESO DE LOS SARDINA A GRAN CANARIA
Diego Sardina, el hijo de Luis Sardina, debió nacer según nuestras cábalas sobre 1510 pues su madre al solicitar en 1523 ante el escribano Alonso Gutiérrez un tutor para él y para su hermana, un año después de la muerte de su padre, nos dice que sus dos hijos tenían por entonces menos de 14 años, siendo Diego el mayor. Ofrecemos un extracto de dicho documento en el que actúa de fiador Diego Álvarez, tío político de los menores:
“Catalina de Ribera, mujer de Luis Sardina, difunto, dice que su marido dejó como herederos a Diego y a Ana menores de 14 años quienes tenían necesidad de un tutor. Preguntados los menores, dicen a instancias de  su madre que quieren a Juan de Llerena quien asiente. Fiador: Diego Álvarez”
Siete años más tarde, en una sesión del cabildo de Tenerife de 20 de mayo de 1530  Diego Sardina es citado como testigo de un pregón que ha tenido lugar días antes en la Plaza de la Concepción. Es pues vecino de la Laguna por entonces. Hemos de decir, sin embargo que en la tazmía de 1552 no parece nadie de este apellido en el recuento de vecinos laguneros que son cabeza de familia.
Mucho tiempo después, un Diego Sardina, que puede ser el nieto o bisnieto del fundador, aparece bautizando a un hijo de su mismo nombre en la Ciudad de Canaria (Las Palmas) concretamente en 1578, tal y como consta en el Libro 5 de El Sagrario.
“Bautismo de Diego, Libro 5 - Folio 92 Vto- Iglesia El Sagrario Catedral. Padres: Diego Sardina y María Sarmiento, el día 1 de febrero de 1578. Padrinos: Nicolás de Franquis y Jerónima Calderín”.
De ser este el nieto, es decir Diego Sardina 2, sería ya muy mayor (rondando los 70 años) cuando tiene a este hijo con María Sarmiento. También podríamos pensar que es un bisnieto homónimo el que bautiza a ese niño en Las Palmas. En ese dilema, lo único que tenemos documentado, por el momento, es que Diego Sardina 2 estuvo casado en primeras nupcias en Tenerife con Andrea Martín con la que procrea  a Miguel Sánchez Sardina tal y como se recoge en la genealogía ilustrada cuya foto adjuntamos  (Información ad perpetuam rei memoriam de Francisco Perera).
La hipótesis de trabajo sería la siguiente: Catalina Rodríguez de Ribera viuda de Luis Sardina, a la que hacemos de una edad inferior a los 30 años cuando se produce el óbito


de su marido, debió casar de nuevo como era lo propio en esa época.  Su hijo Diego, tutorado por los Llerena, se habría casado en Tenerife con una mujer cuyo nombre en la genealogía citada es Andrea Martín. Allí debió nacer, entre otros, su hijo Miguel con el que se producirá el retorno de los Sardina a Gran Canaria.
El reto para confirmar esta hipótesis es encontrar noticias en La Laguna del primer matrimonio de Diego Sánchez con Andrea Martín y, en su caso, de los hijos que procrean. Presumimos que Diego debió casar en la década de los años treinta. Así pues sus primeros hijos deben estar bautizados en La Laguna a fines de los 30 o principios de los 40.
Nos hemos propuesto por tanto resolver el enigma consultando los libros sacramentales de las iglesias laguneras lo cual nos va a tomar cierto tiempo. Nos comprometemos ante los lectores a publicar una adenda a este artículo en cuanto tengamos noticia de los Sardina tinerfeños hacia mediados del siglo XVI.
MIGUEL SÁNCHEZ SARDIÑA E ISABEL SÁNCHEZ PERDOMO
Según dicha genealogía ilustrada de principios del siglo XVIII que nos está sirviendo de respaldo Miguel Sánchez Sardina e Isabel Sánchez Perdomo son los padres de Amaro Sardina. Sin embargo, a pesar de lo que cuentan las imágenes, reiteramos que no tenemos pruebas del entronque de Miguel con sus presuntos padres, Diego y Andrea, por lo que advertimos a los lectores de la endeblez de ese peldaño.
Del matrimonio formado por Miguel e Isabel podemos aportar  que, además de ser los padres de Amaro Sardina, nacido al parecer en Tenerife, por quien sigue la línea, procrearon al menos dos hijos más de los que tengamos noticias:
- Petrona Sánchez casada con José González, vecinos de Tirajana, padres entre otros hijos de María Sánchez, casada con Diego García, y de Juan González, casado con Catalina Martín.
- Pedro Sánchez Castellano, casado con Francisca Pérez, también vecinos de Tirajana, padres entre otros hijos de Ana Sánchez, casada con Diego Gómez, y de Pedro Sánchez, casado con Luisa Matías.
DATOS ACERCA DE AMARO SARDINA Y DE SUS ESPOSAS E HIJOS
Aunque no aparece su bautismo por ninguna parte, tenemos certezas en los libros sacramentales  de La Vega y Telde acerca de los matrimonios que contrajo Amaro y también acerca de la identidad de una parte de su descendencia:
Amaro casó en primeras nupcias con Isabel Rodríguez, calculamos que sobre 1570. De este matrimonio tenemos confirmación de sucesión a través de las partidas de matrimonio de una de sus hijas en las que son citados como sus padres:
- María Suárez que casaría con Juan Mateos en La Vega en 1589.
Posteriormente, en los años ochenta, Amaro casó en segundas nupcias con Brígida de Morales con la que también tiene hijos, entre ellos:
- Isabel Sánchez, que se llama como su abuela paterna, quien casaría en 1598 en La Vega con Simón González y poco después en 1601 en Telde con Marcos Hernández.
- Manuel Sardina, nacido en 1588 en La Vega que casaría con Angelina Álvarez y que fue fundador de una capellanía.
- Catalina Hernández que casaría con Gregorio Delgado.
- Amaro Sardina 2, por quien prosigue la línea.

CONTINUIDAD DEL LINAJE PARA FACILITAR LOS ENTRONQUES
AMARO SARDINA 2 Y BÁRBOLA (ANTONA) DE LOS ÁNGELES
Partida de Matrimonio Iglesia de Santa Brígida, Libro 1-Folio 238 Vto - Año 1618
"A 27 días del mes de enero de 1618 yo Sebastián de Agama cura de este lugar doy fe que casé y velé a Amaro Sardina y a su mujer Bárbola (sobrescrito encima Antona) de los Ángeles y fue su padrino Salvador Báez (roto) en presencia de Mateo Luis, sacristán, y Sancho Vélez y por verdad lo firmé”. Sebastián de Agama.
Aportamos asimismo un extracto del testamento dictado por Amaro Hernández Sardina ante Francisco Carrillo el 10 de julio de 1645:
“Casó con Bárbola de San Juan hija de Bartolomé Benítez y Beatriz de los Ángeles y con ella le dieron en dote un cercado de tierras en el saucillo y una vaca parida… declara por sus hijos a Manuel Sardina, a Brígida Morales, a María Flores que murió y Angelina Hernández. Dice que Brígida casó con Juan Rodríguez y le dio en dote cuantiosos bienes: tierras en el caidero que lindan con las huertas, tierras en el propio término de Tenteniguada, tierras en el saucillo, las cuevas donde vive, ganado (una yunta de bueyes, 50 ovejas, una yegua)  y ciertas medidas de trigo y centeno. Nombra a su hermano Manuel Sardina para que administre los bienes de su hija Angelina Hernández hasta que esta se case. Los albaceas encargados del cumplimiento de sus voluntades son su hermano Manuel Sardina y su compadre el capitán Gabriel de Armas”.
En el libro primero de bautismos de La Vega constan por otra parte los siguientes natalicios de la pareja formada por Amaro y Bárbola: en 1618 nace Manuel (por quien prosigue la línea);  en 1621, Brígida Morales (casada con Juan Rodríguez en Telde en 1637);  en 1624, María; en 1627, Isabel; y en 1632, Angelina. En el índice del libro sacramental aparece por error que los padres de Angelina son Manuel Sardina y Águeda de San Juan. Corregido el error, podemos señalar que Angelina Hernández tenía tan solo 13 años cuando su padre dicta su testamento y creemos que es la misma persona que, casada con Diego Rodríguez, tiene cuatro hijos en La Vega entre 1648 y 1664.
MANUEL HERNÁNDEZ SARDINA Y MARÍA GARCÍA
Partida de Matrimonio. Iglesia de Santa Brígida Libro 2 - Folio 25 Vto - Año 1639
"En 6 de octubre del año de 39 casé y velé los contenidos al margen según lo dispuesto por el Santo Concilio de Trento siendo testigos Bartolomé Díaz y Alonso Rodríguez y Sebastián Gil y otros muchos y lo firmé  ut supra”. Diego Ravelo Guerra.
Nota al margen: Manuel Sardina con María de San Juan y Bartolomé Gil con Inés de Montesdeoca.
Además de Bárbola de San Juan, por quien prosigue la línea, tenemos constancia de la existencia de otras hijas de este matrimonio: una llamada Sebastiana que nace en La Vega 1651 y otra llamada María de San Juan que casaría con Juan de la Torre. Una hija de estos últimos, llamada por igual María de San Juan, casó con Francisco Perera cuya información de génere nos ha sido de tanta utilidad para afianzar los enlaces. Dicha información pudo ser localizada gracias a la siguiente nota del archivo diocesano:
“Francisco Perera, marido de María de San Juan. Información ante Tomas Agustín de Sosa, año 1719, folio 258, donde consta que Manuel Sardina fundador de Capellanía era hermano de Amaro Sardina, que este caso con Bárbola de San Juan y tuvieron por hijo a Manuel Sardina que casó con María García y (estos últimos) a Bárbola de San Juan casada con Alonso Rodríguez”
BÁRBOLA DE SAN JUAN Y ALONSO RODRÍGUEZ DE VEGA
Encontramos asimismo en la carpeta del archivo diocesano un extracto de testamento que ha sido esencial para continuar el linaje hasta nuestros días:
“Alonso Rodríguez. Su testamento ante Hernando de la Cruz Alarcón a 17 de agosto de 1689 y declara que era hermano de don Luis Fernández de Vega, cura de la Vega, que casó con Bárbola de San Juan a quien nombró por albacea junto a su hermano Salvador de Vega y tuvo por hijos a María de Vega, a Bárbola de San Juan, a Manuel Sardina, a Blasina de Vega, a Juan Rodríguez, a Ana María, a Luis de Vega y a Manuel Gil”.
JUAN RODRÍGUEZ DE VEGA Y ANA GONZÁLEZ NAVARRA
Partida de Matrimonio Iglesia de Santa Brígida  Libro 3 - Folio 181 - Año 1708
"En el lugar de la Vega en 11 de abril de 708; Yo don Cristóbal Rodríguez de Quintana con licencia del Beneficiado Cura de este lugar casé in facie ecclesiae a Juan de Vega viudo de Alexandra de Quintana con Ana González Navarra hija legítima de Martín Suárez y de Sebastiana González habiendo precedido las tres amonestaciones en tres días festivos al tiempo del ofertorio de las misas mayores… de que no resultó impedimento y fueron testigos Francisco Agustín, Juan Ruiz y otros muchos vecinos de este lugar. Y lo firmé”.  Cristóbal  Rodríguez de Quintana.
Nota: Juan de Vega había celebrado un primer matrimonio con Alejandra de Ortega de Quintana en la Iglesia de Nuestra Señora del Pino de Teror el 16 de Agosto de 1700 (Libro 2  folio 121 Vto). Él, hijo de Alonso Rodriguez de Vega y de Bárbara de SanJuan, vecinos de Valsequillo, y ella, hija de Bartolomé Lezcano y de Sebastiana de Quintana, vecinos de la Vega donde dicen la Yedra."
FRANCISCA DE VEGA SUÁREZ Y CRISTÓBAL DE MONTESDEOCA
Partida de Matrimonio Iª de San Juan Bautista de Telde, L4 -  199 – Nº 660 - Año 1740
"En 13 días del mes de julio de 1740 años Yo D. Joseph Antonio Falcón de Alarcón Beneficiado Servidor en esta ciudad de Telde asistí a la celebración del Santo Sacramento del Matrimonio que celebraron in facie ecclesiae  a Cristóbal de Montesdeoca, hijo legítimo de Juan de Montesdeoca y de Lucía Perera, vecinos del lugar de Arucas, y Francisca de Vega, hija legítima de Juan de Vega difunto y de Ana Suárez, vecinos de esta ciudad, … fueron testigos presentes D. Julián López de Morales Ministro del Santo Oficio, Juan Machín y José Díaz y otras muchas personas y lo firmé”. José Antonio Falcón de Alarcón.
ANA DE VEGA Y FRANCISCO SÁNCHEZ
Partida de Matrimonio Iª de San Juan Bautista de Telde, L 7 - F 125- Nº 351- Año 1773
"En 5 de julio de1773 años Yo D. Domingo Monagas y Zorita Beneficiado Curado en esta ciudad de Telde Asistí a la celebración del Santo Sacramento del matrimonio que celebraron… Francisco Sánchez hijo legítimo de Salvador Sánchez y de Leonor de Ojeda, y Ana de Vega, hija legítima de Cristóbal de Montesdeoca y de Francisca de Vega vecinos de esta ciudad en Tenteniguada … siendo testigos presentes Joseph Ortega Padrón, Alonso Valerón, Francisco Álvarez y otras más personas y lo firmé”. Domingo Monagas y Zorita.
ANA SÁNCHEZ Y AGUSTÍN HERNÁNDEZ MONZÓN
Partida de Matrimonio Iª de San Miguel Arcángel de Valsequillo L1-F76 vto-Año 1821.
"En la Iglesia Parroquial del Arcángel San Miguel de este lugar de Valsequillo a 13 de agosto de 1821 años. Yo D. Agustín José de Sosa cura propietario de dicha iglesia casé  in facie ecclesiae a Agustín Hernández hijo legítimo de Pedro Hernández y de Juana Monzón vecinos de la Vega de Santa Brígida con Ana Sánchez hija legítima de Francisco Sánchez difunto y de Ana Montesdeoca vecinos de esta jurisdicción en Tenteniguada … siendo testigos el Provisor D. Juan Socorro vino de la Vega, Don Francisco Barrera, vecino de la ciudad, y Francisco Sánchez, de esta jurisdicción y lo firmé”. Agustín José de Sosa.
AGUSTÍN HERNÁNDEZ SÁNCHEZ Y Mª ANTONIA RODRÍGUEZ GONZÁLEZ
Partida de Matrimonio Iglesia de Santa Brígida  Libro 7 - Folio 101 - Año 1847
"Agustín Hernández hijo legítimo de Agustín Hernández y Ana Sánchez y María Rodríguez hija legítima de Antonio Miguel Rodríguez y María González fueron casados y velados por mí el infrascrito presbítero teniente de cura de esta parroquia hoy 21 de junio de 1847 …fueron testigos Antonio Miguel Rodríguez, D. Diego de Vega y José Robaina; son todos vecinos de este lugar y para que conste lo firmé”  José de Quintana.
AGUSTÍN HERNÁNDEZ REYES Y Mª JESÚS HERNÁNDEZ RODRÍGUEZ
Partida de Matrimonio Iglesia de San Lorenzo, Libro 4 - Folio 38 vto - Año 1872
"En la iglesia parroquial de San Lorenzo, pueblo del mismo nombre, Diócesis de Canaria a doce de febrero de 1872 yo el abajo firmado cura propio de dicha Iglesia casé por palabras de presente y velé a don Agustín Hernández, soltero y labrador, natural y vecino de Las Palmas, de edad de veinte y cinco años, hijo legitimo de Jerónimo Hernández y de Francisca Reyes, con María del Jesús Hernández, soltera y labradora, natural de Santa Brígida y vecina de Tamaraceite, de edad de veinte años, hija legitima de don Agustín Hernández y de doña María Rodríguez: precedieron los requisitos legales para la validez del contrato sacramental y fueron testigos don Lorenzo Hernández y don José Hilario García vecinos de este pueblo y para que conste firmo la presente”. Rubricado = Cristóbal Ramírez." 
Con la foto de mis bisabuelos Agustín Hernández y Mª Jesús Hernández, vecinos de Los Barrancos de Las Palmas,  en la que aparecen junto a  Mª Jesús, una de sus hijas, damos por hoy concluida la tarea esperando que haya sido del interés de los lectores.

 


Pesentación del libro: UN PUENTE PERMANENTE CON AMÉRICA. EL EJEMPLO DE TELDE Y VALSEQUILLO (1503-1900)

$
0
0
Invitación a la presentación del libro: UN PUENTE PERMANENTE CON AMÉRICA. EL EJEMPLO DE TELDE Y VALSEQUILLO (1503-1900), que tendrá lugar el 11 de Febrero en Valsequillo y el 18 de febrero en Telde, donde podrán retirarse, y abonar, los ejemplares.
Para los suscriptores de esta obra que no puedan asistir a dicha presentación, se ruega comuniquen dónde se les puede entregar o remitir, los ejemplares que tienen reservados previamente.
Agradecidos por su colaboración, esperando verles pronto.
Jesús Emiliano Rodríguez Calleja y Alfredo Jesús Viera Ortega.
Correo-e: callejadevillaveta@yahoo.es

VALSEQUILLO
 
 TELDE

EL APELLIDO GUERRA: JUAN DE SANLÚCAR E ISABEL GUERRA (I) (Y APUNTES SOBRE EL APELLIDO RAVELO EN GRAN CANARIA)

$
0
0
JUAN R. GARCÍA TORRES
FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA
PEDRO SOCORRO
Empezaremos nuestro trabajo, como hacemos siempre, citando a una autoridad en la materia. Veamos lo que nos dice Cebrián Latasa al respecto del  personaje que encabeza el cuadro:
JUAN DE SANLÚCAR
“Conquistador de Gran Canaria, labrador. Como conquistador, en repartimiento, recibió tierras y aguas en el término del Real de Las Palmas en el año 1485. Actuó como testigo, siendo vecino de la villa real de Las Palmas en una venta de tierras de Francisco López a Francisco de Porras en 1487. En 1500 tenía deudas con Alonso de Matos. Fue testigo en la información que sobre los servicios de Hernán Guerra hizo su hija Catalina en 1502. En las elecciones para formar el Concejo en diciembre de 1501 para el mandato 1502-1503 sería electo alcalde ordinario. Por deudas con los Sopranis estuvo preso en Jerez de la Frontera en el año 1509. Ya había muerto en 1513. Fue enterrado en el monasterio de San Francisco. Casado con Isabel Guerra tuvo por hijos a: Juan Guerra, labrador y vecino en La Vega; Isabel González, mujer de Hernando Moro; Pedro, Antón y otros posibles”.
Enmendar al ilustre Cebrián Latasa resulta harto difícil dada su capacidad de objetivar las cosas con inmenso acierto y apropiado respaldo documental.  Nada tenemos que objetar al conjunto de este texto salvo si quisiéramos añadir algún hijo a la lista de posibles, cosa que haremos. Pero ahora en la introducción de este trabajo nos vamos a centrar en la resolución del enigma, que no afronta Cebrián Latasa, relacionado con la ascendencia de Isabel Guerra, la esposa del conquistador. Esta será nuestra tarea esencial en este primer trabajo de una serie dedicada al apellido Guerra en Gran Canaria, un apellido castellano  repartido hoy por toda España  donde lo portan en total, como primero o segundo apellido, unas setenta mil personas, de las cuales casi doce mil (un 17%) tienen en la provincia de Las Palmas su lugar de residencia, cifra que supera incluso a la de la superpoblada provincia de Madrid donde los Guerra no llegan a los diez mil.
SOBRE ISABEL GUERRA LA ESPOSA DE JUAN DE SANLÚCAR
Empezaremos con un respetuoso descarte. Miguel Rodríguez Díaz de Quintana nos dice en un documento que se conserva en el Museo Canario que la tal Isabel, casada con Juan de Sanlúcar, y su hermana Catalina Guerra, casada con Alonso de Albaida, eran hijas de un presunto conquistador llamado Pedro Guerra. Al respecto tenemos que decir que no aparece  ningún Pedro Guerra en el listado de  conquistadores recogido por Lobo e inserto en su libro La conquista de Gran Canaria. Por otra parte hemos podido comprobar que la esposa de Alonso de Albaida recibe el nombre de María Guerra y no Catalina. Dejando a un lado pues esta propuesta, avanzaremos nuestra opinión que es bien diferente:
Que existía una estrecha relación de parentesco entre la familia de Isabel Guerra la esposa de Juan de San Lúcar y la de Catalina Guerra, la esposa de Juan de Siberio e hija de Hernán Guerra, el adalid de la conquista de Gran Canaria, era para nosotros una evidencia desde que empezamos los primeros compases de esta investigación. Vean los lectores algunos de los argumentos que tuvimos en consideración:
- En la información que encarga en 1502 Catalina Guerra, esposa de Juan de Ciberio Mujica, el primo del contino real herido en Ajódar y fallecido en Gáldar a principios de 1483,  se emplaza como testigo de la misma a Juan de Sanlúcar aunque este finalmente no comparece, creemos que por el hecho notorio de que su mujer era una pariente muy cercana del informado como su apellido delataba por lo que no podía superar las preguntas generales del interrogatorio.
- Algunos años después, en 1524, Isabel González, la hija de Juan de Sanlúcar e Isabel Guerra hace una curiosa declaración ante el inquisidor Martín Jiménez  (Colección Bute) en la que queda acreditada su relación de parentesco con Juan de Ciberio, el hijo mayor de Catalina Guerra:
“15 de Junio de 1524 años en Canaria, Isabel Gonzalez, mujer de Juan Bartolomé, vecino de esta isla, juró en forma de derecho, y dijo  que puede haber cuatro años poco más o menos tiempo que este testigo viendo que Juan de Civerio su pariente es desposado con una doncella muy honrada y que se está amancebado con una mujer y no hace vida con su esposa, que pensó en su corazón si estaría hechizado y que entonces estando en esta ciudad unas moras de resgate que había traído Vicente de Montedoca, ollero, y habiendo oído decir que una de ellas era mujer muy gran hechicera, que pensó en si este testigo de saber de aquella si habían hecho algunos hechizos al dicho Juan de Civerio para que no pudiese hacer vida con su mujer, y que vino la dicha mora a casa de este testigo, le habló, y le dijo que le dijese si habían hecho a aquel hombre per el dicho Juan de Civerio algunos hechizos, y que la Mora le dijo que sí y que le diese un pedazo de azúcar o una escudilla de miel, y que ella le haría con que se quitase, y que este testigo le dio la dicha miel y el azúcar, y que nunca después la mora le dijo si había hecho algo o si no, y que esta mora no está [en esta] isla sino que la llevaron a resgatar y fue resgatada, etc. fol. 249”
- Pero fue Pedro Socorro, el cronista oficial de la villa de Santa Brígida, quien dio definitivo respaldo a nuestra disquisición aportándonos un precioso documento obtenido en el Archivo Acialcázar. Son las notas mecanografiadas de un  investigador anónimo que en el año 1591 dicen lo siguiente:

INFORMACIÓN SOBRE JUAN DE SAN LÚCAR PRACTICADA EN EL SANTO OFICIO DE LAS ISLAS
Plano de Las Palmas, siglo XVI

“Aparece de este documento que Juan de Sanlúcar fue vizcaíno, de los primeros conquistadores que vinieron a Gran Canaria y que sometida la isla vivió en la comarca de  La Vega donde poseyó mucha hacienda en dicho término hacia 1521 el año de la pestilencia. También que dicho Sanlúcar vivió casado con Isabel Guerra, hermana de Catalina Guerra, la mujer de Juan de Civerio, habiendo tenido del matrimonio a Juan Guerra y a Isabel González, mujer que fue de Hernando Moro, hijo de otro Hernán, siendo nietos de estos: Isidro Ravelo, Mariana de Fonseca,
mujer de Juan Rico, portero del Santo Oficio, e Isabel Guerra, mujer de José Díaz, familiar y alcaide del mismo tribunal. Todos los cuales vivían en 1591. Que Juan de Sanlúcar dio principio a la obra de la Iglesia de Santa Brígida terminándola su mujer, que fueron patronos de su capilla mayor; que dejaron un parral a beneficio de dicha iglesia”.
COMENTARIOS:
El investigador anónimo del Acialcázar parece estar bien documentado aunque la información que copia contiene algunos errores pues cita a Isidro Ravelo, Mariana de Fonseca e Isabel Guerra como nietos de Juan de Sanlúcar cuando en realidad son bisnietos suyos, hijos como sabemos de Ana González y nietos de Isabel González. Plantea asimismo que Hernán Moro el que fue segundo marido de Isabel González es hijo de otro Hernán lo cual no tenemos muy claro como luego explicaremos. En cuanto a lo que ahora nos preocupa, el texto no deja lugar a dudas al respecto de la relación de hermanas entre Catalina e Isabel Guerra.
Nos preguntamos de inmediato cómo es posible, si efectivamente eran hermanas, que Isabel no haya sido partícipe de la demanda de compensaciones que supuso la información de 1502 solicitada por Catalina como única heredera viva de Hernán Guerra y María May, sus padres, información que extrañamente fue remitida a la corte dos años después de realizada, ya en 1504. Explicaremos en la segunda parte de este trabajo el descarado apaño que supuso dicha Información.
La relectura ahora de la segunda pregunta  que Catalina Guerra dirige a los testigos nos aclara algunas cosas acerca de la cuestión planteada:
“Ítem serles ha más preguntado a los dichos testigos si saben y oyeron que el dicho Fernán Guerra siendo casado legítimamente hubo y procreó con María May, su legítima mujer a Catalina Guerra, mujer de Juan de Ceberio, por su hija legítima y otros hijos que son fallecidos; y la dicha Catalina Guerra fue habida y tenida por su hija legítima del dicho Fernán Guerra”.
Es evidente que la pregunta  se refiere a la descendencia legítima de sus padres pues ella es efectivamente la única de sus hijos que vive por entonces. Hemos de pensar en consecuencia que Isabel es hija natural de su padre, habida por este con mujer que desconocemos. Le fecha de su nacimiento puesto que Isabel tiene hijos hasta 1510 (bautismo de Antón, el último de sus hijos inscritos en el libro primero de bautismos del Sagrario) habría que situarla en torno a 1470 en Lanzarote, mucho antes del fallecimiento de Fernán Guerra en 1485, en un trágico desenlace a manos de los guanches en la última de sus correrías de rapiña en la isla de Tenerife.  La fecha del matrimonio de Isabel con Juan de Sanlúcar estimamos que puede situarse sobre 1490.
La hipótesis que sostenemos (que Isabel es una hija natural  de Hernán Guerra) afectaría por igual a María Guerra, la esposa de Alonso de Albaida, hermanastra de las anteriores. Nos basamos para decir esto en el testamento de Ana Guerra, hermana de Hernán Guerra, mujer de  Luis Guerra, difunto, realizado en 1509 ante Cristóbal de San Clemente, gentilmente aportado por Pedro Socorro. En este documento Ana cita  a su hermana Beatriz Guerra, vecina de Tenerife y a Catalina, hija de Alonso de Albaida “mi sobrino” (la tal Catalina, también de apellido Guerra, es una hija de Alonso de Albaida y de María Guerra). El único hijo de la testadora, el beneficiado Luis Guerra, era difunto por entonces por lo que Ana manda que sus bienes los haya y los herede la fábrica de la iglesia de Santa Ana a la cual deja por su legítima y universal heredera.
Si Alonso de Albaida, el esposo de María Guerra, es su sobrino esto quiere decir que María es hija de un hermano o hermana suya. Puesto que, gracias a la conservación de sus testamentos dictados en Tenerife, conocemos la descendencia completa de Beatriz Guerra solo nos queda pensar que María es asimismo hija natural de Hernán Guerra el adalid, si bien podría serlo de otro hermano o hermana que desconocemos.

JUAN BARTOLOMÉ O HERNÁN MORO E ISABEL GONZÁLEZ
Tenemos serias dudas sobre la identidad del esposo de Isabel González que fue efectivamente el padre de su hija Ana González, por quien prosigue el linaje que hoy estudiamos. Ambos personajes fueron sus esposos. Con el primero, Juan Bartolomé, del que desconocemos su origen, Isabel tuvo hijos en el periodo comprendido entre 1510 y 1524. Con su segundo marido, Hernán Moro, de origen portugués, no tenemos  constancia  en el libro primero de bautismos de El Sagrario de que haya tenido hijos con ella.  
En la Información de génere de Isabel Guerra (esposa de José Díaz) de 1594,  que es una de las nietas de Isabel González, llamada como pueden ver como su bisabuela, se plantea la duda al respecto de quién es su abuelo por parte de uno de los testigos, Antonio Díaz, escribano de la catedral de Canarias, de 80 años de edad por entonces, cuando dice:
“A la 1ª pregunta dijo que conoce  a la dicha Isabel Guerra mujer del dicho José Díaz el cual conocimiento es de haberle tratado desde que nació, que será de 50 años. A la 2ª pregunta dijo que conoció a sus padres: Diego Ravelo, espadero, y su mujer (Ana González) que no sabe si fue hija de Juan Bartolomé o Hernán Moro…”
Mucho tiempo después sin embargo  un descendiente de Isabel González, el Ldo. Juan Ravelo de Quevedo, el que fue cura de Teror, dicta en su testamento que desea ser enterrado en la tumba de su bisabuelo Hernán Moro.
Nos planteamos entonces esclarecer el asunto, aunque la respuesta  no sea relevante para nuestro estudio sobre los Guerra por el hecho de ser colaterales, y para ello acudimos en primer lugar a la escribanía  de Cristóbal de San Clemente en Las Palmas en busca de pistas:
EXTRACTO DE ALGUNOS DOCUMENTOS DE LA ESCRIBANÍA DE CRISTÓBAL DE SAN CLEMENTE ORDENADOS CRONOLÓGICAMENTE QUE GUARDAN RELACIÓN  CON JUAN BARTOLOMÉ Y CON HERNÁN MORO
3 de noviembre de 1519
Esteban Afillado, portugués, morador de la ciudad de Tavira estante maestre de su carabela Nazareth surta en el puerto de la Isletas la fleta a Juan Bartolomé vecino … para con la buenaventura ir de armada a la berbería contra los moros… Un tal Francisco Guerra es socio y fletador.
8 de noviembre de 1522
Ana de Serpa mujer de Antonio de Casares difunto arrienda a Juan Bartolomé y a Juan Guerra su cuñado vecinos de la isla 5 fanegas de tierra de sequero en el término de Tamaraceite.
3 de febrero de 1524
Juan Bartolomé, recibo de deuda por valor de 40 doblas por un esclavo negro…
28 de julio de 1528
Isabel González, mujer de Juan Bartolomé, difunto, reconoce deber a Fernán Blanco 6 doblas de oro
22 de diciembre de 1530
Isabel González,  mujer de Hernán Moro, dote a Alonso Hernández Robles para que casara con Catalina González, hija de la dicha Isabel y de Juan Bartolomé, su primer marido, ante Pedro Ortiz, documento protocolado ante Sebastián de Saavedra en 1621 f 45 a instancia de Alonso de Robles, nieto de aquella.
(Se casan al parecer dos hermanastros sin lazos de sangre entre ellos: una hija de Isabel y Juan Bartolomé con un hijo de Hernán Moro 1 y Violante Pérez)
19 de mayo de 1533
Hernán Moro, herrero, vecino de Gran Canaria otorga carta de dote de Leonor Robles su hija legítima y de su primera mujer Isabel Rodríguez, difunta, pues se va  a casar con Francisco Sánchez,  labrador y vecino  de la isla… Además se obliga  a entregarle lo que se recupere de los bienes que Leonor de Robles aportó a su primer matrimonio con Francisco Déniz, difunto, quien los vendió y sobre lo cual Hernán Moro en nombre de su hija sigue reclamando... Testigos: Pedro García vº de Arucas, Francisco de Ortigosa, Alonso Hernández herrador, Francisco Pérez , Hernán Moro el mozoy Juan Delgado. Por no saber, Hernán Moro.
(Atención al hecho de que su hijo Hernán Moro 2 el mozo es testigo de la dote y firma en nombre de su padre por este no saber. También al hecho de  que Alonso Hdez de Robles es el hijo de Hernán Moro 1 y de Violante Pérez nacido en 1505, quien era herrador como su padre).
11 de noviembre de 1535
“Hernán Suárez y Leonor Robles, su mujer, hija de Hernán Moro, vecinos de Gran Canaria, dicen que el dicho Hernán Moro dio en dote a Leonor unas tierras del doctor de la Mata y de Juan Bajo y con el barranco de los canales y por ellas 80 doblas de oro que sobre estas tierras Hernán Moro en nombre de su hija trata pleito con Juan Lorenzo, maestre de azúcar, vecino que está presente, el cual las hubo y compró de Leonor y Francisco de Niz su primer marido y en esta venta fue fiadora de saneamiento Magdalena Fernández, madre de Francisco de Niz, a la cual Lorenzo le ha pedido que le haga sanas y ciertas las dichas tierras... Testigos: Maestre Pedro, cirujano, Juan Álvarez, boticario, Luis de Betancor y Antón de Mederos vecinos y estantes”
NOTICIAS SOBRE SU DESCENDENCIA EN EL LIBRO 1º DE BAUTISMOS
-Hijos del matrimonio formado por Hernán Moro e Isabel Rodríguez son: Diego en 1503, Hernán en 1508, Leonor en 1510, María en 1512, Juan en 1516, Bernardina en 1518 y otra Bernardina en 1520
Hemos podido obtener el nombre de adulto de algunos de ellos en los protocolos de Alonso Hdez y Fdez de Chávez en los años 60 (Las Palmas y Telde respectivamente): Diego López puede ser el mismo que casado con Elvira Hernández tuvo a Isabel López, la esposa  de Juan de Quevedo; Hernán Moro de Robles, calcetero,  que fue también alcaide de la cárcel, casó con Beatriz Moreno; Leonor Robles, casada primero con Francisco Déniz, lo hizo luego con Francisco Sánchez y más tarde con Hernán Suárez; María de Robles o María Rodríguez, estuvo casada con Juan Rodríguez de Cubas; acerca de Juan y Bernardina no tenemos noticias.
Tenemos además referencia en cierto documento de la existencia de otra hija de Isabel González llamada Isabel Rodríguez que extrañamente tiene el nombre de la primera esposa de su marido por lo que procedemos a adjudicarla a dicho matrimonio. Se trata de un contrato como aprendiz de platero de su nieto Andrés, hijo de Juan Poleón e Isabel Rodríguez, su hija (sic), suscrito ante el escribano Alonso Hernández en enero de 1559.
 (Hay que decir para evitar confusiones que otro Hernán Moro tiene hijos, casi al tiempo que su homónimo, con una tal Violante Pérez, que son: Juan en 1503 y Alonso en 1505. ¿Son hijos del mismo personaje habidos con una esclava o manceba o hijos del padre del mismo? Nos decantamos por pensar que es la misma persona que tiene hijos con dos mujeres distintas a un tiempo. La confusión viene dada porque Hernán Moro 2, hijo de Hernán Moro 1, recibe tierras en repartimiento en 1536. Nosotros pensamos que el agraciado fue en esta ocasión Hernán Moro de Robles el hijo de Hernán Moro e Isabel Rodríguez nacido en 1508, es decir que el tal Hernán era ya mayor de edad y estaba casado cuando recibió el repartimiento en esa fecha).
-Hijos del matrimonio formado por Juan Bartolomé e Isabel González registrados en el libro primero de El Sagrario son: en 1510 una niña sin nombre, Catalina en 1514, Leonor en 1516, Juana en1518, Juan en 1520 y Francisca en 1524.
En este caso, gracias a los protocolos de Alonso Hernández y Fernández de Chávez estamos en disposición de poder  señalar la identidad de adultos de la práctica totalidad de la prole:
-La niña nacida en 1510 puede ser Isabel Guerra casada con Melchor de la Puebla quienes bautizan a una hija llamada Inés en El Sagrario en 1529.
-Catalina González es la ya citada que casó con Alonso Hernández de Robles quien creemos que es el hijo de Hernan Moro y de  Violante Pérez nacido en 1505.
-De Leonor no tenemos noticias por lo que podemos pensar que falleció siendo niña También pudiera pensarse que le cambiaron el nombre para evitar la confusión con la  hija de su padrastro, también llamada  Leonor, nacida seis años antes que ella. Esta podría ser, en este endeble supuesto, nuestra Ana González.
-De Juana González sabemos que casó en primeras nupcias con Juan Yánez con quien tuvo a Felipe y posteriormente casaría con Martín Álvarez con el que procrea a Andrés y Juana.
-De Juan Bartolomé sabemos que es vecino de Telde a fines de los años 60 del siglo.
-De Francisca Guerra sabemos que casó con Francisco Cobo.
DEDUCCIONES A PARTIR DE TODOS LOS DATOS RECABADOS
Concluimos con la idea de que Hernán Moro 1, herrador de oficio, nacido en Portugal tuvo hijos con dos mujeres diferentes: Violante Pérez, su probable esclava o manceba, e Isabel Rodríguez, su primera esposa. Casará posteriormente con la viuda Isabel González, la hija de Isabel Guerra, sobre 1530, cuyo primer marido había sido Juan Bartolomé. No nos consta que Hernán Moro tuviera descendencia de este segundo matrimonio habiendo fallecido en los años 50. Con la defunción de su segunda esposa, Isabel González, podemos ser algo más precisos pues consta ante Alonso Hernández que aún vivía el 9 de enero de 1559  y aparece ya citada como difunta en otro documento de 23 de enero de 1560 ante el mismo escribano:
“Donación que Alonso Hernández de Robles, vecino, por sí y como padre legítimo de sus hijos, y Leonor Rodríguez, mujer de Juan Cobo, hijos y herederos de Isabel González, esposa de Hernán Moro, ambos difuntos, hacen a Francisca Guerra, mujer de Francisco Cobo, de una esclava negra llamada Catalina, manca y coja, que procede de los bienes que quedaron de la dicha Isabel González. Hacen la tal donación con la condición de que Francisca Guerra ofrenda la sepultura de Isabel de pan, vino y cera todos los domingos de este año. Testigos: Alonso Peraza, Pedro Sitronela y Pedro de Caria vecinos y estantes”. Fdo: Alonso Hdez de Robles

DIEGO RAVELO Y ANA GONZÁLEZ
Nos hemos decantado por pensar que Ana González es hija del primer matrimonio de Isabel González con Juan Bartolomé. Se trataría de la misma niña nacida en 1516 que fue bautizada como Leonor, y a quien se le debió cambiar el nombre para no confundirla con su hermanastra homónima, que era seis años mayor que ella. La tal Leonor sería en este supuesto una moza de aproximadamente 15 años cuando su madre se vuelve a casar con  Hernán Moro. Será este pues el que ejerciendo de padre conviva con ella algunos años y quien la dote posteriormente, sobre 1540, para su casamiento con el también portugués Diego Ravelo. De ser esto así, Ana habría casado a una edad próxima a los 25 años.
Otra posibilidad que podría contemplarse es que Ana pueda ser la primera y única hija habida del matrimonio entre Hernán Moro e Isabel González. Decimos esto porque Isabel tuvo su primer hijo en 1510 y por tanto podía estar todavía en edad fértil cuando casó en segundas nupcias con Hernán Moro sobre 1530. De ser esto así, su hija Ana habría casado muy joven, con menos de 20 años.
Hemos tenido en cuenta para hacer ambas aproximaciones que Diego Ravelo estuvo casado anteriormente con un tal María Hernández con quien tuvo un hijo de su mismo nombre que fue bautizado en Las Palmas en 1537 aunque este al parecer no prosperó pues uno de los testigos de la información de 1594 de la que luego hablaremos declara que “también tuvo el dicho Ravelo otra mujer primero con quien fue casado con la cual no tuvo hijos”.
Cuadraría todo esto con el hecho de que los hijos de Ana y Diego hayan nacido en los años 40 según deducimos de la Información de génere de Isabel Guerra, hija de Diego Ravelo y Ana González,  a quien se da por nacida sobre 1545 (los testigos dicen que tiene más o menos 50 años en 1594).
De la dote otorgada por los padres de Ana para casar con Diego Ravelo, documento que no hemos localizado, tenemos referencia tardía en otro documento muy posterior, de 6 de diciembre de 1558, ante Alonso Hernández:
“Traspaso de censo que Diego Ravelo vecino hace a Isabel González, mujer de Hernán Moro, padres de Isabel (sic) González, su mujer, del tributo de 4 doblas que recibió entre
Mesao Frio, Portugal. Foto: Mauricio Abreu
otros bienes dotales
que paga Francisco Díaz, pescador, vecino, impuesto sobre unas casas en las que hay dos moradas juntas sitas al cabo de Triana…Testigos: Alonso Benítez, Gonzalo Pérez, vecinos de Santa Brígida y Juan de San Juan, hijo del dicho Alonso Benítez”. Fdo: Diego Ravelo.
En relación con la descendencia de este matrimonio tenemos certeza de que tuvieron como hijos: a Isidro Ravelo, casado con Elvira de Quevedo, por quien continuará la línea; a Mariana  de Fonseca, casada con Juan Rico; y a Isabel Guerra, casada con Hernando Galván y también con José Díaz.
Acerca de la genealogía de ambos cónyuges y de otras circunstancias relevantes de su vida y de la de sus descendientes contamos con valiosa documentación  que les vamos a mostrar siguiendo un orden cronológico:
A) LA LIMPIEZA DE SANGRE DE DIEGO RAVELO DE 1576
LAS CUATRO PRIMERAS PREGUNTAS DEL INTERROGATORIO
1. Primeramente si conocen al dicho Diego Ravelo de cuya información se trata, declaren los testigos cómo es el conocimiento y de qué tiempo y la edad que tiene el dicho Diego Ravelo.
2. Ítem si conocen a Gonzalo Ravelo y a su mujer Mariana de Fonseca, padre y madre del dicho Diego Ravelo, y si saben de dónde eran naturales y han vivido y son vecinos y de qué tiempo y cómo es el conocimiento.
3. Ítem si conocen a Vicente Ravelo y a su mujer, padre y madre del dicho Gonzalo Ravelo, abuelos por parte de padre del dicho Diego Ravelo, y si tienen noticias de los demás ascendientes por parte de padre; declaren cómo es el conocimiento y de qué tiempo y de dónde son naturales y han sido vecinos y han tenido domicilio.
4. Ítem declaren los testigos el padre y la madre de la dicha Mariana de Fonseca, madre del dicho Diego Ravelo, y si tienen noticia de los demás ascendientes de parte de madre; declaren cómo es el conocimiento y de qué tiempo y de dónde son naturales y tenido domicilio porque acá no se sabe el nombre de ellos.
El resto de preguntas hasta la undécima inclusive no tiene mayor interés genealógico.
EXTRACTOS DE LAS RESPUESTAS DE ALGUNOS TESTIGOS
- Antonio Mateos natural de Aveiro (Portugal) de 40 años  declara: “que lo conoce desde hace más cinco años desde que vino a esta isla… y que no conoce a sus padres aunque conoce deudos suyos en Aveiro, que el uno se dice Antonio Ravelo mercader y hombre que rige la república, otro se dice Simón Ravelo que es médico y muchas veces almotacén que es oficio en Portugal que rigen la república y asimismo hay otros muchos parientes de estos que son vecinos muy principales”.
- Fray Diego Sobreras de la Orden de San Francisco de 55 a 60 años declara “que conoce a Diego Ravelo de 36 años a esta parte y que este será de 55 o 60 años poco más o menos…que no conoció a los padres de Diego Ravelo más de que este testigo oyó decir a deudos de este testigo, vecinos y ciudadanos en el Puerto de Portugal, que los padres del dicho Diego Ravelo que allí habían sido vecinos se llamaban Gonzalo Ravelo y su madre Mariana de Fonseca y esto era público y notorio, los cuales supo este testigo que eran vivos y vivían en un pueblos que se dice Meson Frio en el Reino de Portugal y este testigo yendo desde esta isla a Portugal el dicho Diego Ravelo le dio cartas para los dicho sus padres y en la dicha ciudad de Oporto las dio a Lope Ravelo, primo del dicho Diego Ravelo, para que se las encaminase y estando en la dicha ciudad tratando este testigo con sus deudos tuvo noticias que los padres del dicho Diego Ravelo eran cristianos viejos y gente limpia…”
- Amador Garcés, portugués, natural de la ciudad del Puerto, estante en esta isla que como está muy enfermo en cama y no puede presentarse ante el tribunal declara en el Hospital San Martín a 19 de agosto de 1576 ante el reverendo padre Andrés de Morón, cura de la catedral,  por mandato del Señor Inquisidor Ortiz de Funes,  dice: “que conoce a Diego Ravelo de vista, que conoce igualmente a Gonzalo Ravelo y Mariana de Fonseca, sus padres, los cuales son naturales de Lamego y vecinos y que los conoce de 30 años a esta parte y les oía nombrar y vido que el dicho Gonzalo Ravelo traía en la dicha ciudad de Lamego vara de breador que es cosa honrosa en Portugal y que oyó decir en la dicha ciudad que los dichos Gonzalo Ravelo y Mariana de Fonseca tenían en esta isla de Canaria un hijo que se llamaba Diego Ravelo el cual era barbero y espadero”.
- Gregorio Fernandes, zapatero portugués, natural de la villa de Meson Frio, de 36 años en la ciudad de Canaria a 7 de diciembre del mismo año declara que “conoce a Diego Ravelo de 12 años  a esta parte y que este será de edad de más de 50 años, que conoció en la villa de Meson Frio a Gonzalo Ravelo y Mariana de Fonseca, su mujer, padres del dicho Dº Ravelo, los cuales son naturales de la dicha villa y eran vecinos al tiempo que este testigo los conoció habrá 20 años poco más o menos”.
COMENTARIO: 
No aparece el interrogatorio referido a la limpieza de sangre de Ana González, la esposa de Diego Ravelo. Pensamos que es de este “documento perdido”  de donde se obtiene la información sobre Juan de Sanlúcar que consta en el Acialcázar donde se precisaba que Isabel Guerra, su esposa, era hermana de Catalina Guerra, la mujer de Juan de Civerio. Quizá no interesaba airear esta relación porque de ello se podía deducir que Isabel Guerra no era hija legítima.
Publicaremos en segundo lugar una curiosa testificación de Diego Ravelo ante el Sr. Inquisidor a petición propia dando cuenta como alcaide de las cárceles secretas de ciertas extrañas cosas que tienen lugar durante la noche en las celdas de las que es responsable:
B) UNA TESTIFICACIÓN DE DIEGO RAVELO EN 1578
“En Canaria a 8 de febrero de 1578 estando el Sr. Inquisidor Ldo. Ortiz de Funes en audiencia de la mañana apareció en ella sin ser llamado Diego Ravelo alcaide de las cárceles e hizo relación diciendo que estando esta mañana en las cárceles abriéndola compuertas llegando al aposento de catalina Báez y su compañera que está junto al de Martínez una pared, las susodichas dijeron a este que declara que ayer tarde Martínez le había dado golpes en el tabique y dicho tuvieran cuenta cómo andaba fuera Pascuala que estaba hablando con el mulato Antón que decía  a los presos que con él están ¿no los oís vosotros? Ten en cuenta como anida fuera una presa, y que el Pedro González le respondió que él no veía ni oía nada, y este declarante se vino y tentó todas las cerraduras de las
Firma de Diego Ravelo
cárceles y dijo ¿qué presa es una que anduvo ayer tarde por aquí? Y Ramón le respondió que si tal hubiera, que presa anduvo fuera, el señor inquisidor le de grandes azotes por todos ellos, que ello quiere pagar si tal lo hubiere y este fue  a la cárcel de debajo de la audiencia y sacó al mulato Antón y le dijo “Ve macabeo si estas cárceles están todas cerradas” y él estuvo mirando y como las vio cerradas dijo que el dicho Martín levantaría este testimonio como otros que ha levantado y que no anda sino por echarlos a perder y

que le pidiese audiencia sobre este negocio ansí parece citado como el Antón y así se le pidió a su señoría y que esto es la verdad so cargo del juramento que le fue tomado se le hizo y perseveró y le fue mandado que traiga uno de estos que ha pedido la audiencia y firmó ante mí, Alonso Valdés”.
Los presos a los que se toma declaración posteriormente,  todos los cuales niegan lo ocurrido, son Antón, mulato, Pascuala, Ramón y Sebastián Hernández, portugués.
C) INFORMACIÓN DEL LINAJE DE ISABEL GUERRA DE 1594 PARA QUE JOSÉ DÍAZ SU MARIDO FUERA NUNCIO
GENEALOGÍA DE ISABEL GUERRA SEGÚN ESTA INFORMACIÓN
LAS CUATRO PRIMERAS PREGUNTAS DE LA INFORMACIÓN DE 1594
Por las preguntas siguientes serán preguntados los testigos que se han de examinar para averiguación de la limpieza del linaje de Isabel Guerra, mujer de José Díaz.
1º Primeramente si conoce a la dicha Isabel Guerra de cuya información se trata, declaren los testigos cómo es el conocimiento y de cuánto tiempo y la edad que tiene la dicha Isabel Guerra.
2º Ítem si conocen a Diego Ravelo y a Ana González su mujer padre y madre de la dicha Isabel Guerra y si saben de dónde son naturales y han venido y sido vecinos y de qué tiempo y cómo es el conocimiento.
3º Ítem si conocen o conocieron a Gonzalo Ravelo y a Mariana de Fonseca padre y madre del dicho Diego Ravelo abuelos por parte de padre de la dicha Isabel Guerra, declaren cómo es el conocimiento y de qué tiempo y de dónde son naturales y han sido vecinos y tenido domicilio
4º Ítem si conocen o conocieron a Hernán Moro e Isabel González padre y madre de la dicha Ana González y abuelos por parte de madre de la dicha Isabel Guerra y de dónde son naturales y han sido vecinos y tenido domicilio, declaren los testigos cómo es el conocimiento y de qué tiempo
El resto de preguntas hasta la undécima inclusive no tiene en nuestra opinión mayor interés genealógico.
EXTRACTOS DE LAS RESPUESTAS DE ALGUNOS TESTIGOS
El primer testigo Antonio Díaz, de 80 años, escribano de la Catedral de Canaria dijo: “que conoce  a la dicha Isabel Guerra mujer del dicho José Díaz …desde que nació, que será de 50 años poco más o menos…y que conoció a Diego Ravelo espadero y su mujer que no sabe si fue hija de Juan Bartolomé o Hernán Moro con la que tuvo por su hija a la mujer de Juan Rico y a la del dicho Ravelo y que no se determina si tuvo más hijos y que también tuvo el dicho Ravelo otra mujer primero con quien fue casado con la cual no tuvo hijos y que la mujer  del dicho José  Díaz fue primero casada con Hernando Galván tundidor y entiende que fue hija del dicho Diego Ravelo y que sabe que el dicho Diego Ravelo es natural del Reino de Portugal no sabe de qué lugar y que la mujer segunda del dicho Diego Ravelo que arriba dije que fue hija de Juan Bartolomé o de Hernán Moro es natural de esta ciudad y vecina de ella”.
El segundo testigo Juan López, de 72 años, procurador de la real Audiencia, aporta: “que sabe que Isabel ha más de 40 años que nació y que conoció a Hernán Moro e Isabel González su mujer la cual fue primero casada con un Juan Bartolomé vecino de esta ciudad y que el dicho Hernán Moro y la dicha Isabel González fueron padre y madre de la mujer del dicho Ravelo y abuelos por parte de madre de la dicha Isabel Guerra mujer del dicho José Díaz y por tales los conoció a los dos y que no tiene noticias de los demás ascendientes por parte de madre aunque a la bisabuela de la dicha Isabel Guerra, madre de Isabel González, mujer de Hernán Moro, este testigo la conoció…”
El resto de los testigos a los que ahora presentaremos no aportó nada relevante:
3º testigo: Diego Osorio, racionero de esta catedral, clérigo presbítero, de 73 años
4º testigo: Gaspar de Betancor, vecino de esta ciudad de 60 años.
5º testigo: Lorenzo de Palenzuela de 58 años  escribano público y del Juzgado de Indias.
6º testigo: Gaspar de Alarcón de 64 años alguacil mayor de la isla.
CONTINUIDAD DEL LINAJE PARA FACILITAR LOS ENTRONQUES
ISIDRO RAVELO Y ELVIRA DE QUEVEDO
El testamento que sabemos que dictó Isidro Ravelo en 1623 no lo hemos localizado.
Elvira de Quevedo, la esposa de Isidro, es hija de Juan de Quevedo e Isabel de Arcos y nieta por línea paterna de los fundadores de la estirpe en Gran Canaria Juan Sánchez Quevedo y María Vélez a quienes dedicaremos un artículo en exclusiva más adelante dada la relevancia de este apellido en la genealogía de Gran Canaria.
Hijos de Isidro Ravelo y Elvira de Quevedo que constan en nuestro archivo son:
Gregorio Ravelo por quien sigue la línea que estamos trazando; María Vélez casada en Tunte en 1625 con Alonso Pérez Magás 2, hijo de Juan Magás y María de Candelaria, fallecida sin sucesión al poco de haberse casado; Isabel de Quevedo  dotada en 1622 para casarse con Andrés Guerra, hijo de Simón Martín y Melchora Magás, con sucesión de dicho matrimonio; Ana Guerra Ravelo casada con Francisco Nuez, con sucesión; Juan de Quevedo Ravelo casado con María Ardid Aríñez; y el Ldo. Diego Ravelo, presbítero que fue de Teror.
GREGORIO RAVELO Y FRANCISCA PÉREZ
No aparece la partida de este matrimonio por lo que aportamos otros documentos que garantizan igualmente el entronque: las partidas de bautismo de ambos cónyuges y en el epígrafe siguiente la de matrimonio de uno de sus hijos.
Iglesia de Santa Brígida (La Vega), Libro 1 - Folio 56 - Año 1602
"Día de San Juan Bautista de 1602 bauticé yo fray Francisco Rodríguez cura en Santa Brígida de la Vega en Canaria  a Gregorio hijo de Isidro Ravelo y de Elvira de Quevedo su legítima mujer fue su padrino don García… y por ser todo así verdad lo firmé de mi nombre que es fecho ut supra”. fray Francisco Rodríguez.
Iglesia de Ntra. Sra. del Pino - Teror, Libro 1 - Folio 35 Vto - Año 1613
 "En Terore 13 días del mes de octubre de 1613 años yo Francisco de Escobar Cura de este dicho lugar bauticé a Francisca hija de Hernando Pérez y de Isabel Díaz su mujer, fue su padrino Salvador de Quintana, todos vecinos de este lugar, fuesele advertido el parentesco espiritual en fe de lo cual lo firmé”.  Francisco de Escobar.
Gregorio Ravelo parece ser que había casado en 1633 con María Navarro, hija de Francisco González y de María Rivera, y poco después lo haría con Francisca,  la hija de Hernando Pérez e Isabel Díaz del Río. Hizo testamento ante Bartolomé de Mirabal en 1648. Fueron hijos de este matrimonio: Isidro Ravelo Guerra nacido en 1638 (casado con Sebastiana Navarro); Sebastián Pérez Quevedo, nacido en 1642, por quien sigue la línea, y Fernando Pérez Quevedo bautizado en 1644 (casado con María de Candelaria).
SEBASTIÁN PÉREZ QUEVEDO Y LEONOR SUÁREZ TRAVIESO
Si estamos atinados, Sebastián, nacido en junio de 1542, se habría casado a fines de 1657, a la edad de 15 años,  con Leonor, de 18 años. Aunque anómalo es posible. 
Iglesia Nuestra Señora del Pino Teror, Libro 1 - Folio 48 Vto - Año 1657
"En Teror en 28 de noviembre de 1657 yo el Bachiller Antonio de Montesdeoca cura del lugar casé a Sebastián Pérez de Quevedo hijo legítimo de Gregorio de Quevedo y de Francisca Pérez, todos vecinos de este lugar, con Leonor Suárez hija legitima de José Hernández y de Agustina Báez fueron testigos el Alcalde y Capitán Juan de Quintana y otros muchos de que doy fe y lo firmé”. El Br.Montesdeoca."
GREGORIO QUEVEDO Y CATALINA DE VEGA
Iglesia Nuestra Señora del Socorro - Tejeda, Libro 2 - Folio 8 - Año 1698
 "En el lugar de Tejeda en 20 días del mes de octubre de 1698 yo fray Salvador Pérez predicador y Religioso de la orden de mi Padre San Agustín y Cura de la Parroquial de nuestra Señora del Socorro de este dicho lugar casé y velé in facie ecclesiae a Gregorio de Quevedo hijo legítimo de Sebastián de Quevedo y de Leonor Suárez su legítima muger difuntos vecinos que fueron del lugar de Teror y a Catalina de Vega hija legítima de Bartolomé de Vega y de Isabel Lorenzo su legítima mujer difuntos vecinos que fueron de este dicho lugar… fueron testigos Juan Delgado Suárez, alcalde de este dicho lugar y José de Alvarado y Pablo Alonso y otros muchos todos vecinos de este dicho lugar y para que conste lo firmé ut supra”. Fray Salvador Pérez.
SEBASTIÁN QUEVEDO Y MARÍA CANINO
Iglesia Nuestra Señora del Socorro - Tejeda, Libro 3 - Folio 51 Vto - Año 1739.
"En el lugar de Tejeda en 5 del mes de octubre de 1739 años Yo Esteban de Sosa y Quintana casé y velé a Sebastián Quevedo con María Canino hija legítima de Joan Canino y de María Montesdeoca y de Gregorio Quevedo y Catalina de Vega vecinos de este lugar fueron testigos D. Juan Sarmiento y José Martin y Antonio Medina y para que conste lo firmé en dicho día, mes y año”. Sebastián de Sosa y Quintana."
JUANA JOSEFA CANINO Y FRANCISCO TRAVIESO
Iglesia Nuestra Señora del Socorro - Tejeda, Libro 3 - Folio 121 - Año 1770.
"En el lugar de Tejeda en 2 días del mes de agosto de este año de 1770 yo D. Juan Cabrera cura de dicho lugar Casé in facie ecclesiae a Francisco Travieso hijo legítimo de Francisco Travieso y de Josefa Mederos con Juana Canino hija legítima de Sebastián Quevedo y de Maria Canino …siendo testigos… Juan Rodríguez, José Rodríguez y Gabriel Antonio de Quintana y para que conste lo firmé” Juan Cabrera Umpiérrez.
Mª CONCEPCIÓN CANINO Y FRANCISCO GONZÁLEZ CANINO
Iglesia Nuestra Señora del Socorro - Tejeda, Libro 4 - Folio - Año 1795
 "En el lugar de Tejeda a 11 de febrero de 1795 años. Yo D. Diego Navarro cura de esta Parroquial de Nuestra Señora del Socorro Casé y Velé in facie ecclesiae a Francisco Antonio González hijo legítimo de José González y de Jerónima Canino, difunta en Guardaya,  y a María de la Concepción Travieso hija legítima de Francisco Travieso y de Juana Quevedo, difuntos; …siendo testigos presentes D. Agustín Tovar, D. Diego José Mederos, D. Antonio Trenzado y otros vecinos de este lugar y para que conste lo firmé”. Diego Navarro.
JUANA Mª GONZÁLEZ CANINO Y JUAN ANTONIO GONZÁLEZ SUÁREZ
Iglesia Nuestra Señora del Socorro - Tejeda, Libro 4 y 5 - Folio 20 - Año 1821
"En la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora del Socorro del lugar de Tejeda a 27 de marzo de 1821 yo el infrascrito Cura casé in facie ecclesiae a Juan Antonio González hijo legítimo de José Antonio González difunto y de María Ortega naturales y vecinos de la Vega de Santa Brígida, con Juana María González natural y vecina de este de Tejeda e hija legítima de Francisco González difunto y de María Concepción Canino fueron amonestados en tres dias festivos de lo que no resulto impedimento alguno… fueron testigos  Francisco González y José Travieso vecinos de este pueblo y para que conste lo firmé”. Juan Pedro Saavedra."
ANTONIO GONZÁLEZ GONZÁLEZ Y Mª CONCEPCIÓN PÉREZ LÓPEZ
Iglesia de Santa Brígida (La Vega), Libro 7 - Folio 102 vto - Año 1847.
 "José González hijo legitimo de Juan González y Juana Canino y María de la Concepción Pérez hija legitima de Lucas Pérez y María López fueron casados por mí el infrascrito Presbítero teniente cura de esta parroquia, el día 31 de octubre de 1847… fueron testigos Agustín Afonso, Don Diego de Vega y José Robaina, todos son vecinos de este lugar y para que conste lo firmé”. José de Quintana
ANTONIO GONZÁLEZ PÉREZ Y Mª PINO ESTÉVEZ TROYA
Iglesia de Santa Brígida (La Vega), Libo 9 - Folio 32 vto – Nº 12 - Año 1869
 "En el pueblo de La Vega de Santa Brígida diócesis y provincia de Canarias a 6 de septiembre de 1869, yo el infrascrito cura párroco propio de dicha parroquia casé y velé in facie ecclesiae … a Antonio González natural y vecino de este pueblo de estado soltero, jornalero de 22 años hijo legitimo de Antonio González y María de la Concepción Pérez, con María del Pino Estévez de estado soltera, hija legitima de Juan Estévez y Juana de Troya, de 24 años, todos vecinos de esta jurisdicción y pago del Exmonte, … siendo testigos presentes José Troya, Manuel Estévez y otros todos vecinos y labradores propietarios y para que conste lo firmó” Sebastián Calderín.

RECAPITULACIÓN FINAL
Sevilla, siglo XVI. Autor: Alonso Sánchez Coello
Con la aparición en el cuadro de mi tatarabuelo Antonio González vecino de La vega concluimos por hoy la tarea no sin antes hacer una breve recapitulación sobre la relevancia  de la impronta que deja en las islas la ciudad de Sevilla de donde  es oriundo Fernán Guerra el iniciador de la estirpe de los Guerra en Gran Canaria. Fernán es con toda probabilidad natural de Sevilla con ascendientes en la guarda y colación de Triana, barrio marinero al otro lado del Guadalquivir,  cuya denominación  se repite en el plano del Real de Las Palmas en el barrio nuevo o de Triana que queda al otro lado del Guiniguada. La mención al respecto de la ciudad de origen de Fernán Guerra la deducimos de la vecindad en Triana del cómitre Antón Fernández Guerra quien puede ser, según nuestras pesquisas,  ascendiente directo de nuestro personaje, y también del testamento de 1509 de Ana Guerra, hermana del adalid, que manda en una de sus cláusulas que se pague una cantidad a la fábrica de la iglesia de Santa María La Mayor de la ciudad de Sevilla (se refiere a la catedral gótica). Pero de todo esto hablaremos en la continuación de este trabajo en la que poco a poco iremos desgranando la genealogía de los Guerra afincados en Gran Canaria

LA FAMILIA GUERRA EN GRAN CANARIA




AÑO GENEALÓGICO FRANCISCO FERNÁNDEZ BETHENCOURT

$
0
0
PRIMEROS PASOS EN GENEALOGÍA

Jueves, 25 de febrero, a las 20,30 h., en el Centro Cultural de la Villa, Agaete (Gran Canaria)



















Dentro de los actos conmemorativos del Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt, en la programación de los "Jueves Culturales" que organiza la Concejalía Cultura, Historia e Identidad del Ayuntamiento de Agaete, se celebrará la charla "Primeros pasos en genealogía", impartida por Eugenio Egea Molina, cofundador de Genealogías Canarias y miembro de la Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias.
En la misma, se destacará la figura de Francisco Fernández de Bethencourt y su trascendencia genealógica.




APELLIDO GUERRA: JUAN DE SANLÚCAR E ISABEL GUERRA (II)

$
0
0
JUAN R. GARCÍA
FANEQUE HERNÁNDEZ
PEDRO SOCORRO

EL ADALID FERNÁN GUERRA Y SU PARENTELA
A) INTRODUCCIÓN
Hemos defendido en la primera parte de este trabajo que Isabel Guerra, la esposa del labrador Juan de Sanlúcar, quien fue nombrado en 1503 alcalde de la isla, es una hija natural de Fernán Guerra, personaje a quien consideramos, junto a su hermana Beatriz, como el tronco de las líneas de apellido Guerra que llegan hasta nuestros días en Gran Canaria. Destacaremos en esta segunda parte la relevancia de Fernán Guerra como
Catedral de Canarias. Foto: sobrecanarias.com
verdadero fundador de la ciudad pues a él como adalid se debe la ubicación del Real de Las Palmas y como vecino de Triana la elección de Santa Ana como advocación de la primera ermita del campamento militar que hoy es Catedral de Canarias.
Los Guerra constituyen una familia que  parece estar afectada por la fatalidad pues se suceden en torno a ella ejecuciones, muertes a traición, crímenes pasionales. Es asimismo una familia marcada por los intereses pecuniarios, las intrigas de poder, la falta de escrúpulos. Es una familia, en fin, de la que nunca se acabará de contar toda su historia. Todavía quedan ramas sueltas y hechos por estudiar. La colaboración entre investigadores, como en el caso de este artículo, terminarán por resolver los misterios de este poderoso clan cuyo punto de partida parece ser el barrio de Triana.
Destacaremos por otra parte  en este trabajo la presunción, que trataremos de probar a lo largo de estas líneas, de que los Guerra de Gran Canaria están a su vez emparentados con los de Tenerife y no solo a través de la descendencia de Beatriz Guerra, hermana del adalid que se afinca en dicha isla, sino también  a través de los herederos de Lope Fernández Herrero el poderoso conquistador que es el protagonista del Poema de Viana. Dedicaremos por ello un apartado de este trabajo al enigmático Bachiller Juan Guerra, fue alcalde mayor de Gran Canaria en 1504 y teniente de gobernador del cabildo de Tenerife en 1506 y que parece ser el nexo de unión entre los Guerra de ambas islas.

B) EL ADALID FERNÁN GUERRA Y LA INFORMACIÓN DE 1502-1504
Veamos para empezar  lo que nos dice Cebrián Latasa sobre Fernán Guerra nuestro principal protagonista de hoy.
“Conquistador de Gran Canaria. Probablemente de origen andaluz, fue repoblador de Lanzarote hacia el año 1446. Era de los llamados de las islas.  Desafecto a los detentadores del Señorío será uno de los que propicien la Pesquisa de Pérez de Cabitos 1476/1477. Entraba en las islas insumisas en busca de presas y estuvo cautivo en Gran Canaria. En la conquista de esta isla, donde se avecindó, sirvió de adalid y estratega. Murió en Tenerife durante el mandato de Pedro de Vera.  Su hija Catalina hizo información de méritos que se remitió a la Corte en 1504. Pedía ayuda económica apoyándose en los méritos de su padre.
Casado con María May. Hijos legítimos: a) Juan Guerra (Nacido en Lanzarote y muerto sin sucesión en Gran Canaria, año 1495) b) Ana Guerra (Nacida en Lanzarote y muerta en Gran Canaria antes de 1502 madre de María May) y c) Catalina Guerra (Nacida en Lanzarote hacia 1472 y muerta en Gran Canaria. Casada con Juan de Ceberio tuvo como hijos a Michel de Moxica, Juan Ceberio, Ginebra de Moxica, Marina de Moxica, Bernardino Lezcano, Lope de Moxica, Catalina de Villafranca, Teresa de Villafranca, Francisca de Villafranca y Juana de Villafranca)”.
Nos centraremos a continuación en la información de méritos de  1502-1504 solicitada por su hija Catalina
Las informaciones, no dice Manuel Lobo, son documentos de carácter oficial en los que se persigue mediante el testimonio de testigos directos o cercanos a los acontecimientos probar hechos concernientes a quien solicita la probanza, con la finalidad, añadimos nosotros, de obtener ciertos privilegios (otorgamientos, exenciones de impuestos, acceso a determinados cargos u oficios, etc.)
La Información que hoy nos ocupa fue solicitada por Catalina Guerra hija de Fernán Guerra y esposa de Juan de Ceberio, el primo del contino regio Miguel de Mujica muerto en la batalla de Ajódar. Sobre la misma hay un excepcional estudio de don Antonio Rumeu de Armas cuya lectura muy sinceramente recomendamos (MDC Biblioteca Universitaria  de la ULPGC).
La parte testifical se realizó en Las Palmas en septiembre de 1502 ante el escribano público Juan de Aríñez por comisión que le dio el bachiller Juan Hernández de Anaya teniente de corregidor de la isla. Los testigos que declararon eran todos vecinos de Gran Canaria en esa fecha. Estos son: Lope de Salazar, Ibone de Armas, Pedro de Hervás, Gonzalo de Jaraquemada, Gutierre de Ocaña, Juan Rodríguez de Cubas, Fernando de Avia y Alonso Cornado. Otras personas fueron requeridas como testigos y prestaron juramento pero a la hora de la comparecencia se abstuvieron de presentarse. Estos fueron: Juan de Sanlúcar, Magdalena de Armas la vieja y Margarida Alonso, ambas viudas.
El motivo de la no comparecencia está claro en al menos dos de los casos citados. Juan de Sanlúcar es cuñado de Catalina Guerra (esposo de su hermanastra) y  Magdalena de Armas la vieja, que es hija de Juan de Armas I, es a su vez cuñada de Beatriz Guerra (hermana de Fernán Guerra) pues Beatriz estuvo casada en segundas nupcias con Juan de Armas II. Observamos que el hermano de Magdalena  llamado Ibone de Armas sí pudo pasar el filtro y prestar declaración porque no era familiar directo. Por último reseñaremos que Malgarida Alonso es la mujer de Diego de Aday el viejo a la vez que recordamos que los Aday se destacaron junto con los Armas y los Guerra en la revuelta comunera de las islas señoriales, es decir que eran familias aliadas y también probablemente emparentadas.
La finalidad de la Información se descubre en el encabezado del documento que se registra en Medina del Campo a 3 de octubre de 1504, dos años después de las testificaciones: “Solicitud de recompensas presentada por Catalina Guerra ante el rey Fernando en reconocimiento de los méritos contraídos por su padre Fernán Guerra en la conquista de la isla de Gran Canaria”.
Efectivamente la solicitante va al grano a por las recompensas cuando, después de loar las hazañas de su padre diciendo que ayudó a conquistar la isla de Gran Canaria y que reveló la conquista de ella y que murió en su servicio, procede a hacer recuento del importe de las compensaciones a las que aspira con estos argumentos: “y le tomaron toda cuanta hacienda  tenía en la isla de Lanzarote que valía más de 400.000 mrs. y gastó en venir  a la Corte y en la estada  y vuelta otros 100.000, que son 500.000, a cuya causa la dicha Catalina Guerra quedó huérfana y pobre por lo que humildemente suplica a Vuestra Alteza descargue su real conciencia y le mande pagar lo que el dicho su padre perdió y gastó  y más lo que fue su servicio, por los dicho servicios, o le manden dar en la dicha isla de Gran Canaria las caballerías de tierras de riego que vieren que basta para la dicha paga porque la dicha Catalina Guerra, su  hija, está pobre y tiene muchos hijos…”
- ¿Muerte al servicio de los reyes?
El primer amaño destacable de la solicitud se advierte cuando dice que su padre murió al servicio de los reyes. Sabemos que fallece en ciertas alformas (intercambios comerciales bajo salvoconducto) en la isla de Tenerife poco después de conquistada la isla de Gran Canaria, pero hemos de dejar claro que aquella expedición no obedeció a ninguna iniciativa real sino a su propio interés comercial. Fernán Guerra lleva muchos años depredando las islas no conquistadas capturando presas humanas para venderlas en Sevilla al mejor postor. Sus enemigos directos, los señores de las islas, don Diego de Herrera e Inés Peraza, fueron posiblemente los organizadores, de común acuerdo con sus aliados guanches, de la celada que le hicieron.
- ¿Mujer pobre y necesitada?
Para desmontar la falsa declaración de Catalina de que su padre no había recibido repartimientos y que era una mujer sin medios, traemos a colación el siguiente texto de Néstor Álamo basado  en las Datas de la casa de Ceberio ARCHA Legajos Lezcano (Apéndice del libro Thenesoya Vidina y otras tradiciones Las Palmas  de Gran Canaria, 1945).
“También presenta la Catalina, que debió ser hembra brava y valiente, a Zárate para su confirmación la data hecha por el gobernador y general Pedro de Vera a su madre María May de suerte y media de tierra en el valle de Tenoya que lindaba con tierras de Juan de Mayorga e Ibone de Armas. La data le había sido hecha  a la expresada María May hacía más de 25 años, heredándolas su hija legítima Catalina Guerra que las poseía en este año de 1506. Por tanto dicha data debió ser efectuada hacia 1480”
Entre las posesiones que Catalina acredita tener ante el reformador Luis de Zárate constan, tan solo en Tenoya, un ingenio y quince suertes de riego, lo cual era una extraordinaria fortuna,  entre ellas la suerte y media que fue de María May (por la muerte de su esposo Fernán Guerra que tuvo lugar con anterioridad a los primeros repartimientos), heredada por su hija Catalina Guerra, y una suerte otorgada en repartimiento directo a Catalina Guerra. Esta última suerte debió ser la recompensa obtenida tras la información practicada en 1502-1504 para que se reconocieran los méritos de su padre y de paso para engrandecer su ya de por sí ingente patrimonio.
El resto de las inmensas propiedades que declara en las vegas de Tasaute, Tasautejo y  Santa Ana proceden de algunas compras de tierras pero sobre todo de los repartimientos otorgados a su marido Juan de Ceberio por su participación en la conquista y por ser el heredero universal de su primo el capitán y contino real Miguel de Mujica fallecido en combate. Podemos por tanto decir sin temor a equivocarnos mucho que Catalina Guerra era una de las mujeres más ricas de su tiempo en toda la isla a pesar de que comete
Villa de Ceberio, Vizcaya. Foto: zeberio.net
perjurio declarando ser pobre y necesitada.
(Medias agrarias en la época de la conquista: 1 aranzada= 1 fanega; 5 aranzadas=1 suerte; 4 suertes= 1 caballería; es decir que una caballería de riego equivale en Gran Canaria a 20 fanegadas=10 hectáreas de terreno aproximadamente).
- ¿Por qué se realiza la información en 1502 y no se envía a la corte hasta 1504?
Ya hemos señalado que las pruebas testificales se realizaron en 1502 ante el escribano Juan de Aríñez por comisión del Teniente de corregidor Hernández de Anaya, es decir que extrañamente la autoridad ha delegado su responsabilidad en el vizcaíno Juan de Aríñez, escribano mayor del Concejo, quien resulta ser alguien tan allegado que en fechas venideras se convertirá en el esposo de Juana de Villafranca, la hija de Catalina Guerra, es decir, en yerno de la solicitante. Este matrimonio no tuvo sucesión por la muerte temprana de Juana, anterior a 1511 según Cebrián Latasa.
Esta anomalía junto con la participación como testigo de Ibone de Armas y otros hombres de las islas del bando comunero, muy allegados por tanto a los Guerra, debió ser el motivo de la no prosperidad inicial de la Información en 1502 en base a una supuesta parcialidad que en la opinión del que escribe era una evidente componenda.  Sin embargo, dos años después, el documento llega a la Corte con la firma de validación del alcalde mayor de la isla que en aquel momento ejercía de máxima autoridad  por muerte del gobernador Escudero. El alcalde mayor firma como Iohannis Bachiller, es decir,  escribe su nombre en latín omitiendo el apellido. ¿De quién se trata en realidad? Su nombre completo es Juan Guerra.

C) EL BACHILLER JUAN GUERRA Y LOS GUERRA DE TENERIFE
El bachiller Juan Guerra, alcalde mayor de Gran Canaria en 1504, aparece citado en el siguiente documento en el que sale muy malparado como cofrade mayor en ciertos sucesos que se describen y que le van a costar la pérdida de sus posesiones en Gran Canaria y la huída a Tenerife:
La integración de las Islas Canarias en la Corona de Castilla 1478-1526 Aspectos administrativos sociales y económicos. Eduardo Aznar Vallejo. Universidad de Sevilla
“En determinados casos las cofradías eran utilizadas como instrumentos de intereses particulares o de grupo contrarios al espíritu de fraternidad que debían defender. Sirvan de ejemplo el intento siempre rechazado de crear hermandades de limpios para defender la supremacía de los cristianos viejos sobre los conversos; y la constitución de grupos de defensa mutua con vistas a obtener objetivos políticos económicos y sociales. Sobre esta segunda modalidad conocemos un documento de gran interés: el proceso instruido por Lope de Sosa contra algunos prohombres de Gran Canaria (Alonso de Vargas, Fernando Bachicao, Ruy Díaz de Cerón y otros vecinos) por promover una cofradía escandalosa (AGS Cámara de Castilla (Pueblos) legajo 5 fols 106-107)
Los cargos contra tales personas eran los siguientes:
- Hacer una capilla en la Iglesia Mayor para enterrar a los cofrades, que habían de ser trece a imitación de los apóstoles de Jesucristo.
- Juramento de ser amigo de amigo y enemigo de enemigo, y si moría esclavo o caballo de alguno lo pagasen entre todos.
- Si alguno recibía ofensa la vengarían todos y hasta tomar venganza todos llevarían luto.
- En caso de que la justicia procediese contra uno que los demás le defendiesen y ayudasen.
- En las elecciones para oficios de regimiento se votarían unos a otros para que los cargos no saliesen de ellos.
- Que los cofrades tuviesen los mejores sitios en la Iglesia y si se los quitaban que se ayudase para echar de la iglesia  a los responsables.
- Ayuda al bachiller Juan Guerraen su residencia para que siempre fuese Justicia por los muchos favores recibidos y que esperaban recibir. -Además se les acusaba de conspiradores y responsables de un crimen de lesa majestad.
Los acusados se defendieron diciendo que habían actuado con aprobación del provisor al que habían pedido que hubiese 12 o 13 cofrades en honor “de la Virgen y los apóstoles” y que estos fuesen personas honradas y vecinos,  y no genoveses, extranjeros o gentes de baja suerte, “más otros capítulos no escandalosos”.
Gracias a un trabajo de Gambín (La Revolución del Concejo de Gran Canaria de 1511 publicado en el XIX Coloquio de Historia Canario-Americana) podemos confirmar que el nuevo gobernador Lope de Sosa destituyó de inmediato a Juan Guerra como alcalde mayor, y podemos asimismo transcribir enteramente la cláusula de la cofradía secreta a él referida: 
“Ítem, que todos los dichos cofrades fuesen a una en ayudar y favorecer en la residencia al bachiller Juan Guerra, alcalde mayor en esta dicha isla, y que procurasen como siempre estuviese por justicia en ella, porque ninguna justicia contra ellos se ejecutase, porque dicen que les dio muchas suertes de tierras de regadío en la dicha isla y que estorbasen y amenazasen a los que se quisiesen quejar del dicho bachiller”.
Siguiendo con nuestras pesquisas comprobamos que aparece citado el bachiller Juan Guerra en otro  artículo de Gambín titulado  “Primeros repartimientos”, publicado en A.E.A.:
“El sucesor de Valenzuela, Antonio de Torres, realizó asimismo otras entregas de tierras. Es conocido el reparto en el heredamiento de Firgas de tierras al licenciado Hernando de Aguayo, Pedro de Santana, Enrique Yáñez y otros vecinos, en “pago del sueldo que se les debía”. Conocemos también otros repartos de tierras y aguas en Firgas y Tenoya y en Las Palmas. Hay constancia además de entregas efectuadas dos años después por el bachiller Juan Guerra, alcalde de Gran Canaria, quien estuvo de facto al frente de la gobernación de la isla al fallecimiento del gobernador Alonso Escudero en 1504. Guerra entregó al vecino Hernando Espino una caballería de tierra en la montaña de Moya, por haberse casado y avecindado allí”.
Habría que explicar en este punto que el tal Espino, el primero de su estirpe en la isla, es un escribano y que su mujer Juana de Valera es al parecer una hija de Gutierre de Ocaña a quien ya habíamos citado por ser uno de los testigos  en la información practicada  por Catalina Guerra.
Hemos encontrado finalmente  otras referencias de este personaje, que parecen confirmar su huída de Gran Canaria, en las actas del cabildo y en las datas de Tenerife, isla en que residirá durante un corto periodo de tiempo:
- Acuerdos del cabildo de Tenerife Tomo II Nómina de oficios de la república de la isla de Tenerife hasta el año 1513 Elías Serra Rafols y Leopoldo de la Rosa
El bachiller Juan Guerra que había sido alcalde mayor de Gran Canaria figura como Teniente de gobernador en el cabildo de Tenerife en 15 de marzo de 1506, sesión  en la que se le nombra mensajero a la corte.
- Data concedida por Alonso Fernández de Lugo en 20 de febrero de 1505
“Y porque el bachiller Juan Guerra es persona honrada, y  tal que su alteza está servida, que esté y pueble y se avecinde en esta isla y  porque él se ha venido a avecindar y a vivir en esta dicha isla y la voluntad  de su alteza es que  a semejantes personas  se dé sus vecindades según que merecen,  por tanto como repartidor otorgo que doy a vos los dichos Fernando de Llerena y el bachiller Juan Guerra toda el agua  y tierras que con ella se pudiera aprovechar que está en dicha isla que es hacia la costa de Aguache, la cual agua se llama en lengua de Tenerife Ajofa en Temijar…”
En la reformación del repartimiento en 1506 ante Ortiz de Zárate el otorgamiento de esta data tuvo contradictores cuyo testimonio nos aportan valiosa información sobre Juan Guerra. Uno de los testigos señala que “el bachiller Belmonte, teniente del adelantado, y el bachiller Guerra no son vecinos ni pobladores en la dicha isla (Tenerife) más antes que el bachiller Guerra es casado en Baeza (o en Llerena dicen otros) y que no los tiene por vecinos” Los demás testigos confirman lo anterior y algunos añaden “salvo que tiene cargo de la justicia (Teniente de gobernador) por el Adelantado…”. El único de los testigos que no acusa al bachiller de haber obtenido injusto repartimiento es curiosamente Lope Fernández, su probable deudo, a pesar de que este era en aquellos momentos enemigo declarado del Adelantado.
Volvamos ahora al repartimiento realizado en Gran Canaria al escribano Hernando Espino para que, partiendo de dicho documento, nos planteemos hacer algunas disquisiciones sobre su filiación. La confirmación real de dicho repartimiento vino dada por edicto real lo que implica que la decisión del alcalde mayor fue recurrida, como también lo fueron otras adjudicaciones, por falta de justo título del otorgante (es el caso del recurso presentado en 1506 por Martín de Vera hijo de Pedro de Vera):
38-RGS. 1-1505. Fol. 53. 1505, enero, 17. Toro.
“Confirmación de la posesión de una caballería de tierra en la villa del Real de Las Palmas, en la montaña de Moya, a Hernando Espino, vecino de Canaria, que Bartolomé Juan Guerra, alcalde de la dicha villa, le había concedido por haberse casado y avecindado allí, ya que era voluntad de la reina que se poblase la isla”. El Rey.
Observemos que en este documento el alcalde mayor pasa a ser llamado Bartolomé Juan Guerra. Podría ser un error de transcripción y donde dice Bartolomé probablemente debamos leer Bachiller que era su título. Las abreviaturas pueden jugar esas malas pasadas, sin embargo no sería descabellado pensar que este pueda ser su verdadero nombre completo teniendo en cuenta que es el mismo de un familiar muy cercano, como ahora veremos.
Bartolomé Joannes Guerra es un personaje no muy conocido en la historia de Canarias. Contamos con algunos datos de este personaje gracias a la obra “El conquistador Lope Fernández” publicado por Leopoldo De la Rosa Olivera en Revista de Historia: 
Lope Hernández Herrero, conquistador de Gran Canaria, de  La Palma y de Tenerife, y poseedor en esta última de Valle Guerra lo cita como primo suyo cuando cede en 1512  una parte de su herencia a  Hernando Esteban Guerra, “hijo de su primo Bartolomé Joannes Guerra”. Otra parte de su herencia, como bien saben los lectores, fue asignada a su primo, el escribano Hernán Guerra, que había sido conquistador de la isla. Tanto uno como otro personaje, nos dice el profesor De la Rosa proceden de Fuentes de León en la provincia de Badajoz.
Nosotros planteamos la posibilidad de que Bartolomé Joanes Guerra pudiera ser identificado como el conquistador Bartolomé Sánchez de Cardela (o Guerra), el padre de Hernando Esteban Guerra, pues con ese nombre es también señalado. Cebrián Latasa nos dice de este personaje que “fue de los primeros conquistadores de Gran Canaria y que como tal recibió tierras en repartimiento en 1485 en el Real de las Palmas; que participó en los Concejos de la  isla como alcalde ordinario en 1499-1501 y regidor; que en 1505 actuaba como testigo informante de los asuntos de Berbería; que fue corredor de lonjas y escribano; que  casó con Juana Fernández”. De confirmarse esta identidad habría que pensar que el cargo de alcalde mayor estuvo asignado “de oficio” a la familia Guerra pues después de este personaje hemos visto pasar por el cargo a Juan de Sanlúcar y a Juan Guerra.
Tras este inciso continuamos la búsqueda de pistas acerca de la filiación del Bachiller Juan Guerra y para ello hemos de recurrir nuevamente a Cebrián Latasa en las entradas correspondiente a los dos herederos de Lope Fernández:
- Hernando Esteban Guerra
“No fue conquistador de Tenerife sino repoblador. Muerto su padre, Bartolomé, Lope Hernández trajo a Tenerife a Hernando, a su madre Beatriz y a su hermana Marina… Era natural de la villa de Fuentes de León (Badajoz). Hijo de Bartolomé Juárez Cárdeno (o Guerra) y de Beatriz Domínguez, de familia de conversos reconciliados. Pariente (sobrino nieto) y uno de los herederos de Lope Fernández en 1512…Hermano de Juan Guerra, muerto sin sucesión, Onofre Guerra, fallecido asimismo sin sucesión y Marina Guerra casado con Benito González; sobrino segundo de Hernán Guerra, escribano público, el otro heredero de Lope Fernández que por minoría de edad de Hernando quedó como su curador en 1512. Esto hace a Hernando nacido después de 1487…”
- Hernán Guerra
Conquistador de Tenerife… Natural de Fuentes de León, hijo de Rodrigo Álvarez y Juana Fernández y primo del conquistador Lope Fernández. Casó con Juana Fernández. Hijos: Alonso Álvarez, Juana Guerra, Juana Fernández, Francisca Álvarez y Nufro Guerra.
Hechas las presentaciones, podemos pasar a plantear nuestra hipótesis acerca la relación entre el bachiller Juan Guerra y los citados herederos de Lope Fernández.
Acudimos para ello a la lectura de una cláusula del  testamento dictado en 1512 en Tenerife por Lope Fernández poco antes de su muerte, cláusula en la que establece una capellanía en sus tierras de Tacoronte (Valle de Guerra):
“Otrosí mando que las tierras que yo tengo en Tacoronte no se vendan en ninguna manera…y de la renta que rentaren se paguen 15.000 mrs. a un sacerdote el cual resida y esté en la iglesia de Santa Cruz de esta isla y ahí diga cada semana cuatro misas por mi ánima…Y mando que la dicha renta se dé a Juan Guerra, sacerdote, hermano de Hernán Guerra, mi primo, el cual resida y esté en la Iglesia y diga las dichas misas por mi ánima hasta que un hijo de Hernán Guerra, mi primo, sea sacerdote…”
- Comentarios
De todo esto parece deducirse que el bachiller Juan Guerra debió salir a toda prisa de Gran Canaria por su participación en una especie de sanedrín o cofradía secreta de fuerzas vivas de probable origen judeoconverso y que, cesado en su cargo y despojado de sus propiedades, se traslada a principios de 1505 a Tenerife donde recibe el amparo del Adelantado quien lo nombra teniente de gobernador y le otorga una importante data. Posteriormente se le comisiona para ir a la Corte en representación de los intereses del Cabildo de dicha isla, y no parece haber  más noticias suyas en las islas a partir de entonces.
Sin embargo nosotros tenemos la convicción de que el sacerdote que en 1512 fue nombrado capellán en el testamento de su deudo Lope Hernández Herrero puede ser identificado como el mismo bachiller Juan Guerra. Sabemos que este tenía una esposa en Llerena, según ciertos declarantes en el juicio de residencia del Adelantado, pero es muy posible que, fallecida  esta, el bachiller retornara a la isla convertido en sacerdote.
En el primer testamento de Lope, el patrono de la capellanía que este instituye resulta ser Bartolomé Fernández Herrero, primer alcalde de Santa Cruz, otro destacado comunero que comparte profesión y parentela con él. Un hijo suyo llamado Ibone Fernández Herrero será asimismo el albacea del último de los testamentos de Lope, el de 1512.
Lope Hernández Herrero y su deudo Bartolomé Hernández Herrero son como su apelativo indica  herreros de profesión que asumen en la conquista de las islas el rol de artilleros accionando pequeñas armas de fuego, lo que se denominaba entonces artillería menuda. Por si alguien duda del uso  de estas armas durante la guerra de conquista de Gran Canaria (1478-1483) les remitimos a la lectura de algunas  de las cuentas recogidas por Ladero:
De enero a mayo de 1481 (Viaje de las carabelas Gaeta y Cayada a Gran Canaria)
-Un quintal de buen plomo
-Un pipote de pólvora en que podía haber 50 libras
A 1º de octubre de 1482 (Relación de la partida de Miguel de Mujica)
-Seis  tiros de pólvora pequeños con sus servidores
-Sesenta pelotas de fierro

D) LA PESQUISA DE CABITOS (1476-1477)
Para enlazar debidamente todos los cabos sueltos que hasta ahora tenemos hemos de acudir a la Pesquisa de Cabitos (Estudio de Eduardo Aznar Vallejo) en la que se dirimieron los derechos señoriales sobre las islas ya conquistadas en oposición a las demandas de los vecinos y en la que se segregan del señorío las islas que quedan por conquistar a cambio de una considerable cantidad de dinero y de la obligación de los señores de las islas de no emplear en adelante el título de reyes de Canaria.
En las testificaciones de la Pesquisa (marzo de 1477) declaran por parte del bando realista o comunero las siguientes personas:
- Juan Rodríguez de Gozón, mercader, vecino de Sevilla en la collación  de Santa María.
- Antón Fernández Guerra, cómitre del rey, vecino de Sevilla en la collación de Triana.
- Pedro Fernández Chichones, mercader, vecino de Sevilla en San Nicolás.
- Juan García Bezón, cómitre del rey, vecino de Sevilla en San Llorente.
- Diego de Porras, vecino de Sevilla en la colación de San Martín.
- Juan Rodríguez de Cubillos, cómitre del rey.
- Juan Ruiz de Zumeta, escribano público y vecino de Lanzarote
- Fernán Guerra, vecino de Lanzarote
- Juan Bernal vecino de Lanzarote
- Juan Mayor, vecino de Lanzarote
- Juan Íñiguez de Atabe, escribano de cámara del rey y la reina, vecino de Sevilla.
De la parte de los señores testifican numerosos vecinos  de Sevilla que no vamos a nombrar y ningún vecino de la isla. De ellos tan solo señalaremos que son en su mayoría testigos no relevantes socialmente hablando: un cambiador, tres marineros, un mercader, un carpintero, dos carboneros, un bizcochero y por último un clérigo.
De la parte comunera declaran pues hidalgos, cómitres, mercaderes, y escribanos que conocen las islas, como poco, desde varias décadas atrás mientras que de la parte señorial los testigos son gentes del pueblo llano que han visitado las islas en la última década en razón de actividades probablemente dependientes de los señores.
El bando comunero en la isla de Lanzarote estuvo directamente representado en la Pesquisa  por los vecinos de Lanzarote Fernán Guerra, Juan Bernal, Juan Ruiz y Juan Mayor quienes actuaban en nombre de todos. Sin embargo por temor a represalias la mayoría  de los vecinos no se atrevió a dar su nombre en el escrito colectivo que dirigen a los reyes. Dicho bando estuvo integrado con certeza, además de por los ya señalados,  por Lope Fernández Herrero, Bartolomé Fernández Herrero, Juan de Armas, Juan de Mayorga, Pedro de Aday y Luis de Aday. Entre todas estas familias que fueron aliadas durante décadas frente al poder señorial debieron establecerse numerosos lazos casando hijos e hijas entre sí, de ahí que no nos deba extrañar que el parentesco entre todas ellas pueda ser generalizado.
Destacaremos por otra parte que en el movimiento antiseñorial además de las razones que alegan los comuneros en relación con su situación económica y social (malos tratos señoriales, el pago del quinto de todas las mercancías que salen de la isla, el pago de diezmos a Dios y de lo que queda el quinto al señor, la pobreza imperante por los escasos recursos de la isla, la no observancia de sus privilegios, usos y costumbres, etc.)  una razón muy de peso a tener en cuenta para explicar su enfrentamiento pudiera derivarse de la pérdida de sus hijos naturales a los que tuvieron que dejar en la isla de Gran Canaria algunos años antes como salvaguarda para la construcción de la torre de Gando y que allí quedaron cautivos tras la destrucción de la misma por las huestes de Maninidra.
En el testamento de Inés Peraza otorgado en Sevilla en 1482 se recoge su pesar  por aquellos niños perdidos por la codicia y la lujuria  de los castellanos de la torre con esta triste cláusula:
“Y otrosí mando que saquen de cautivo todos los hijos de mis vasallos que por mi causa se cautivaron en el castillo de Gando”
De los comuneros citados en la relación de testigos  prestaremos ahora especial atención al cómitre del rey (marino mercante y de guerra, en caso necesario) Antón Fernández Guerra por creer que este personaje es un ascendiente directo de los Guerra que se establecen en Lanzarote a mediados del siglo XV. Veamos algunas citas históricas acerca del mismo:
“Castilla y el  mar”  25 junio 1476
“A las 4 de la tarde. Reunidos en el hospital de los cómitres en la collación de Santa María Magdalena estando presente Alfonso García, marinero, vecino y estando también presentes Ferrán Martínez de Serpa y Juan Ortiz alcaldes de los cómitres junto con Antón Fernández Guerra y 15 personas más, cómitres del rey, en presencia de Martín Bernal, escribano público…”
Veamos a continuación un fragmento de la declaración de Antón Fernández Guerra en la Pesquisa de Cabitos de 1477 referida a hechos que tuvieron lugar antes de mediados  del siglo XV (deducimos la fecha de la referencia que este hace a  Francisco de Moya quien fue obispo del Rubicón entre 1436 y 1550).
“Y que sabe que después de esto, que el dicho Mosén Maçiote, estando este testigo en la dicha isla de Lanzarote con un su navío que traía, le fletó el dicho su navío y gente por cierto precio para conquistar la isla de Las Palmas (en referencia a La Palma)  y que este testigo fue con el dicho su navío en compañía de otros navíos en la dicha conquista de la dicha isla de Palmas, de donde sacaron de aquel viaje setenta y cinco esclavos y esclavas. Y que lo sabe porque vido que el dicho Mosén Maçiote y el Obispo de Canaria que por entonces era (Francisco de Moya) fueron en el dicho su navío a la dicha conquista y que a este testigo le cupieron dos esclavos por la parte del navío más su flete”
De ambas citas  concluimos que el cómitre era un hombre de mucha edad por entonces debiendo haber nacido en el primer cuarto del siglo XV. Decimos esto, de una parte, por haber sido citado como el primero y más antiguo de los cómitres en su cabildo de 1476 y de otra porque se señala que era armador y maestre de navío en una expedición de rapiña a la isla de La Palma que tuvo lugar en los años 40.
Su presentación en el interrogatorio de la Pesquisa nos confirma estas cábalas:
Antón Fernández Guerra, Cómitre del Rey nuestro señor, vecino de Triana, Guarda y collación de Sevilla, dijo en respuesta  al primer artículo que este testigo  “conoce la isla de Lanzarote porque fue en ella mucha veces en mercaderías y que la conoce  la dicha isla y a las otras islas de Canaria de 40 años a esta parte porque las ha andado todas ellas así en las que hoy día son de cristianos como las que están rebeladas”.
Veamos a continuación la presentación de los cuatro testigos que son vecinos de Lanzarote y representantes en la pesquisa del movimiento comunero:
Fernán Guerra  dijo que “conoce la dicha isla de Lanzarote ha más tiempo de 30 años que ha que vive y mora en ella…”
Juan Bernal nos dice que “conoce la isla de Lanzarote de 50 años a esta parte y más tiempo y que desde entonces ha vivido y vive en ella”.
Juan Ruiz el escribano  dijo que “conoce muy bien la isla de Lanzarote y que lo sabe por ser vecino de ella de 35 años poco más o menos”.
Juan Mayor en su presentación ante el pesquisidor señala que “conoce la  isla desde que nació y que ha vivido en ella de 25 o 26 años acá”. Aznar Vallejo deduce de esta respuesta que Juan tiene 25 años, idea que no podemos compartir. El rol que ocupa como representante de los amotinados nos hace pensar que su edad ha de ser necesariamente muy superior. Nosotros entendemos de la lectura del texto que nació efectivamente en Lanzarote pero que debió criarse fuera de la isla  para regresar a esta con su mayoría de edad. Presumimos por tanto que es una persona de edad en el momento de la pesquisa y creemos que no debe ser de ningún modo confundido con su probable hijo natural Juan Mayor, el lengua que fuera nombrado a perpetuidad alguacil mayor de Gran Canaria por los Reyes Católicos. Este último, como bien señala Marín de Cubas, fue uno de los niños dejados en prenda por Inés Peraza cuando se construye la torre de Gando, de ahí su dominio de la lengua nativa.
Como prueba de lo que decimos, copiamos a continuación un fragmento de la respuesta de Juan Mayor a la tercera pregunta:
“Que oyó decir que el dicho Fernán Peraza conquistó y ganó la isla de La Gomera a sus expensas y que sabe que al dicho Fernán Peraza le mataron cierta gente. Y que esto lo sabe porque este testigo estaba presente en la dicha guerra y conquista que el dicho Diego Ferrera hizo.”
La incorporación  de dos bandos de La Gomera al Señorío de  Fernán Peraza tuvo lugar en 1450 habiendo fallecido este en 1452 en San Sebastián. Los hechos de guerra de los que fue testigo directo Juan Mayor tienen lugar en 1454 cuando el nuevo señor de las islas  Diego de Herrera, como esposo de Inés Peraza, hija de Fernán Peraza, reincorpora Lanzarote al señorío tras la secuestración de la isla y logra que los portugueses abandonen la parte de La Gomera que ocupaban. Esto ocurre casi 25 años antes de la Pesquisa. Juan Mayor por lo tanto, para haber tomado parte en dicha guerra, tuvo que haber nacido en los años 20 como poco.

E) LOS GUERRA DE SEVILLA Y LA ADVOCACIÓN DE SANTA ANA
Francisco Morales Padrón  en su artículo La americanidad de Sevilla  nos describe  la iglesia trianera de Santa Ana y su relación con la empresa descubridora.  Del epígrafe Santa Ana: una vocación marinera truncada hemos escogido este ilustrativo fragmento:
Iglesia de Sta. Ana. Foto: pasos-palio.blogspot.com
“Alfonso X está en los orígenes de la marinera parroquia de Santa Ana. Y decimos marinera por el menester u oficio de muchos de sus hijos ejercido en las aguas del río y, sobre todo, en la geografía americana del Descubrimiento. Templo gótico el de Santa Ana, construido a partir de 1276 por maestros burgaleses, reedificado y ampliado en las siguientes centurias, remodelado después del terremoto de 1755… Fue Santa Ana de un gótico insólito en una Sevilla fundamentalmente barroca; templo unido a las empresas ultramarinas. Y es que en América no podemos saltar al barroco sin pasar por el Medievo. Esencias medievales tuvo la conquista, y del Medioevo se sustrajeron diversas instituciones que en el Nuevo Mundo se revitalizaron. Mentalidad medieval tenían los hombres que descubrieron al Nuevo Mundo, como esos trianeros hermanos Luis, Cristóbal y Antón Guerra, bizcocheros metidos a navegantes y descubridores para perder en ello la vida los dos primeros. De Triana era Rodrigo de Bastidas, contemporáneo de los anteriores y comprometido en lides similares en una América inicial donde un hijo suyo será obispo. De Triana era Luís Rodríguez de la Mezquita, que con su esposa regalarían la pila bautismal del templo, tal como consta en leyenda que ella exhibe, y que financiaría las expediciones de los Guerra y de Vélez de Mendoza. Como estos, otros nacieron en Triana, “guarda y collación” de Sevilla, dueña de fábricas de jabón, de bizcocho, de pólvora, de cerámica. Todos muy presentes en el nacimiento de una nueva cartografía que iba a trastornar la concepción geográfica de la Ecúmene. Triana será sus hombres, sus fábricas, sus huertas, su ribera fluvial y muelles, su templo parroquial y su convento de los Remedios...”
De la lectura de este texto entresacamos que Fernán Guerra como responsable de la ubicación del campamento militar de las Palmas pudo ser  asimismo  el responsable de la elección de la advocación a Santa Ana de la primera ermita por ser originario de Triana:
Catalina Guerra, su hija nos da algunas precisiones al respecto  en la pregunta VI del Interrogatorio en la que se señala: «Que cuando la dicha conquista vino a esta isla  fueron a asentar el Real a Telde y a Gando y a otras partes, que no sabían donde lo asentar; y por consejo e industria del dicho Fernand Guerra... lo asentaron donde es la dicha villa del Real de Las Palmas…”
Entresacamos  de la lectura por otra parte la presencia en Triana de comerciantes, navegantes, y bizcocheros de apellido Guerra que participaron en torno al 1500 en varias expediciones de rapiña, que algunos autores llaman de descubrimiento, asaltando a las poblaciones indígenas de las costas actuales de Venezuela.
En la web mcnbiografías.com hemos localizado esta bien documentada semblanza de los Hermanos Guerra en la que se describen algunas de sus lucrativas actividades:
Descubridores de la isla Margarita y territorios costeros de Tierrafirme, los Guerra era una familia acomodada de Triana, donde tenían una fábrica de bizcochos destinados a aprovisionar los buques que iban a Indias. La dirigían tres hermanos, llamados Luis, Cristóbal y Antón Mariño. El primero de ellos ejercía además como mercader en Sevilla y se asoció con el piloto Pero Alonso Niño, que había estado con el almirante Cristóbal Colón en el descubrimiento de Paria, para realizar un viaje de rescate a la costa de Tierrafirme. Como Luis no podía realizarlo, por sus ocupaciones, le impuso a Niño la jefatura de su hermano Cristóbal, que iría en la expedición. Los socios capitularon para hacer exploraciones a 50 leguas de lo descubierto por Colon, cosa que no cumplieron.
El viaje se realizó con una sola carabela, que salió de Sevilla en 1499, poco después de la partida de Ojeda con Juan de la Cosa y Vespucci, siguiendo la ruta del tercer viaje colombino. Alcanzaron la península de Paria dos semanas después de Ojeda, donde cargaron algo de brasil y desde allí se dirigieron a la isla de Margarita, donde al parecer fueron los primeros en arribar, recogiendo un inmenso botín de perlas. De Margarita pasaron a Cumaná, donde vieron algunos grupos caribes con los que siguieron rescatando más perlas, hasta llegar a la provincia de Curianá, donde según Las Casas rescataron “gran número de perlas, que si no me engaño, pesaban más de ciento cincuenta libras o marcos”. El 6 de febrero de 1500 partieron de Curianá y alcanzaron Galicia en dos meses. Los propios tripulantes acusaron a Guerra y Niño ante el gobernador Hernando Vega por haber ocultado muchas perlas, con objeto de defraudar el quinto real. Se hizo proceso y fueron encarcelados unos meses. El rescate tuvo enorme repercusión, ya que la riqueza de Indias estaba en entredicho por entonces, a la vista de los fracasos obtenidos en los años anteriores. Sirvió así para revalorizar la imagen de rentabilidad de las Indias.
A fines de 1500 Cristóbal Guerra realizó un segundo viaje, patrocinado igualmente por su hermano. Estuvo en Margarita y Paria, donde rescató perlas e hizo esclavos, que los Reyes Católicos le ordenaron poner en libertad. Ese mismo año los Guerra entraron en contacto con el comendador Alonso Vélez de Mendoza, sevillano pero vecino de Moguer, que había obtenido permiso para ir a Indias con cuatro carabelas. Acordaron organizar dos expediciones, una armada por los Guerra y mandada por Luis, y la otra mandada por Vélez. Partieron a fines de agosto y se dirigieron a la costa brasileña, más al sur de donde había estado Pinzón, pero realmente se ignora hasta donde llegaron. Trajeron esclavos del viaje. Los Guerra hicieron un último viaje en 1503-1504. Fletaron dos carabelas, mandadas una por Cristóbal y otra por Luis. Partieron de Cádiz y alcanzaron nuevamente a Margarita y la costa de Paria, donde rescataron más perlas (“cuasi un costal”, dijo Las Casas). Pasaron luego a la costa de Santa Marta y Cartagena. En el último puerto obligaron a los indios a llenar en un cesto de vendimiar con oro para poder recuperar a su cacique, a quien habían apresado con malas artes. En el viaje de regreso murió Luis de enfermedad, todavía en aguas americanas, y la carabela de Cristóbal se partió por la mitad, pereciendo casi todos sus tripulantes. Las Casas consideró todo esto obra de la justicia divina, por haber hurtado a los indios su oro y perlas. Parece que Cristóbal murió en el naufragio, aunque no es seguro.
No escondemos nuestra intención al traer aquí esta referencia: los bizcocheros de Triana son, en nuestra opinión, presuntos deudos del cómitre real antes citado Antón Fernández Guerra y también de nuestro ancestro, el adalid Fernán Guerra.

F) EL CONQUISTADOR JUAN GUERRA, HIJO DE FERNÁN GUERRA
Tenemos otro Juan Guerra en la historia de la isla que está incluido en la relación o nómina de conquistadores de Gran Canaria realizada por  Manuel Lobo. Este Juan Guerra, fallecido antes de 1500, es indubitadamente el hijo de Fernán Guerra quien participó junto a su padre en la conquista de esta isla como acredita uno de los declarantes de la Información solicitada por su hermana Catalina Guerra en 1502, concretamente Gonzalo de Jaraquemada, cuando a la pregunta séptima contesta: “que es público que el dicho Fernán Guerra sirvió mucho a sus altezas en la conquista de esta isla y asimismo en su hijo que se llamaba Juan Guerra; que asimismo iba a saltear y conquistar las otras islas de Tenerife y La Palma y que es público que lo mataron en la dicha isla de Tenerife”.
Rumeu de Armas nos dice respecto de él:
“Juan Guerra se dedicó a la ganadería llegando a poseer un rebaño de 500 vacas y ovejas en la isla de La Gomera, herencia en parte de su madre María May. Otra de sus actividades fue la fabricación de quesos. Nunca contrajo matrimonio. Estando gravemente enfermo en 1495 otorgó testamento en Las Palmas el 26 de mayo en presencia del escribano Diego de San Clemente. Fueron herederas del modesto patrimonio “mis sobrinas María May, hija de la dicha Ana Guerra, mi hermana, e Juana de Villafranca, hija del dicho Juan de Ceberio y de Catalina Guerra, mi hermana”
El albacea de su testamento viene  a ser  el citado Juan de Ceberio, el esposo de su hermana Catalina Guerra, como se acredita en la siguiente cita de Ladero en su artículo de AEA Trescientos nombres canarios a comienzos del siglo XVI. En una de las partidas, datada en 1503, el tesorero de la Santa Composición en el obispado de Canaria declara haber  recibido 672 mrs. de “Juan de Ceberio, testamentario de Juan Guerra”
En relación con el comentario de Rumeu de que nunca contrajo matrimonio queremos argumentar que ello no significa que no tuviera descendencia natural. En la tesis de Betancor sobre pervivencia indígena se hace constar la existencia de una serie de  personas, indígenas de La Gomera que portan el apellido Guerra, que se establecieron en el sur de Tenerife, concretamente en Adeje (Francisca, Inés, Isabel, Juan, María y Pedro Guerra). Tenemos la convicción de que algunas de estas personas son hijos naturales de Juan Guerra habidos con sus esclavas o mancebas nativas durante su larga estancia en dicha isla.
El documento que nos atestigua que Juan Guerra fue efectivamente conquistador  lo hemos encontrado en el artículo publicado en AEA: Canarias en el archivo de protocolos de Sevilla de  Francisco Morales Padrón.
Hoja suelta libro 1º del año 1500 Escribano Francisco Segura
(Nómina de los mrs. que han de haber por sus servicios ciertos conquistadores de Gran Canaria)
Los mrs. que han de haber las personas vecinas de la isla de la Gran Canaria  y enviadas acá a Castilla a mí Francisco de Arévalo en una fe escrita e firmada de Gonzalo de Burgos, escribano público de la dicha isla, en que venían escritas las personas que habían de haber sueldo, si están vivas y de las que están fallecidas escritas sus herederos para que hayan y reciban el sueldo que cabe a cada persona por millar de los 101.650 mrs. que son cobrados y lo que ha de haber cada uno de lo que queda por cobrar para cuando sea cobrado de esta libranza si sus altezas lo mandaren pagar, es de lo suyo escrito según se declaró por Gonzalo de Burgos y por un oficial de las cuentas de Juan López contador mayor de los Reyes nuestros señores.
Entre la treintena de conquistadores relacionados aparece la siguiente cita:
“A los herederos de Juan Guerra se les deben 6856 mrs. de que les vienen 2766; de estos se les sacan para costas 143 mrs. Restánseles debiendo 2622 mrs y para la libranza de por venir 4099 mrs”.
Como  ya se ha dicho, al no tener descendencia legítima, sus herederos fueron dos de sus sobrinas.

G) TRUCULENCIAS MORTALES DE LOS GUERRA
Para concluir por hoy la tarea,  prometiendo que en la continuación de este trabajo describiremos una nueva línea de descendencia de Juan de Sanlúcar e Isabel Guerra hasta nuestros días a través de un hijo de estos llamado también Juan Guerra, y como simple divertimento histórico, vamos a repasar ahora algunas de las truculencias relacionadas con los Guerra afincados en las islas de las que hemos tenido noticia a lo largo de los siglos XV y XVI:
-1430 El Hierro
Juan Guerra, hombre de Maciot de Bethencourt, fue muerto hacia 1430 en El Hierro ajusticiado por Guillén de las Casas tal y como declaran algunos testigos en la Pesquisa de Pérez de Cabitos.
-1479 Registro del Sello
Ejecutoria contra Juan Guerra, capitán de nao, y otros por robar las naves de Juan Felipe y Juan Miguélez, ingleses. Por dicha sentencia se condenó al primero de los inculpados a pena de muerte y a los restantes a dos años de destierro en las islas de Canaria más el pago de 5000 coronas en compensación de nave y mercancías.
-1490 Tenerife
Hernán Guerra fue muerto por mano de sus aliados guanches tal como nos lo describe su hija Catalina: “Yendo a la dicha isla de Tenerife saltó en tierra como solía con ciertas alformas y amigos suyos que él tenía, los cuales lo mataron”.
-circa 1500 Gran Canaria
Lope Fernández Herrero mata a su mujer y al amante de su mujer en la Villa Real de Las Palmas tras de lo cual, después de un tiempo en la cárcel, abandona la isla y se dirige a Tenerife.
-1515 Gran Canaria
Juan de Ceberio Guerra, hijo, mata en el puerto de Santa María a su primo Luis de Armas, hijo de Ibone de Armas y Beatriz Guerra (hermana de Fernán Guerra), por ciertos litigios sobre el agua de riego en las medianías de Gran Canaria.
-1552 Gran Canaria.
Catalina Guerra y su hijo García de León, vecinos del Señorío de Agüimes, son ajusticiados en el Real de Las Palmas como asesinos presuntos de su respectivo  esposo y padrastro, Juan Martín Garrote. 


HOMENAJE A FRANCISCO FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT (1850-1916)

$
0
0


La Real Sociedad Económica de Amigos del País de Gran Canaria, enmarcado en los actos conmemorativos que se están celebrando en el Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt, organiza este tributo a su figura y obra.
En el mismo participarán:
D. Miguel Rodríguez Díaz de Quintana,
D. Juan R. Gómez-Pamo Guerra del Río  
D. Rafael Rodríguez de Castro.

Colaboran: Genealogías Canarias, Centro de Estudios Genealógicos Marqués de Acialcázar e Instituto de Estudios Históricos Rey Fernando Guanarteme.























EXPOSICIÓN EL RENACER DE LA GENEALOGÍA: IN MEMORIAM RODRÍGUEZ MOURE

$
0
0
Organizada por la Real Sociedad Económica del País de Tenerife y Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias, dentro de los actos que se están celebrando con motivo de "2016, Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt (1850-1916)" se une su figura a la del intelectual José Rodríguez Moure, que tienen en común la genealogía y compartieron la condición de Miembro de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife.


DIEGO DE CABRERA MATHEO, UN OLVIDADO ESLABÓN MAJORERO

$
0
0
LOLA GARCÍA CABRERA

Al debutar por primera vez en este blog, lo hice con un artículo al que titulaba Morales, un eslabón majorero, el cual lo finalizaba diciendo: “Otro de los hijos de don Juan Matheo y doña María Eva fue, don Diego de Cabrera Matheo, mi antepasado por esta línea, pero hablar de éste es otra historia”. Pues, he aquí la historia.
Cuando años atrás indagaba sobre mi ascendencia genealógica, además de “picotear” en diversos archivos de las islas Canarias en periodos muy pausados y cortos, por la distancia que de ellos me separaba, tuve que documentarme con artículos y publicaciones a los que podía acceder por internet y, también, por diversos libros, alguno de ellos, en versiones más tarde comentadas por otros escritores, o bien ediciones revisadas por cualificados historiadores.  
Ocurrió que cuando alcancé a llegar al ascendiente que más arriba menciono, Diego de Cabrera Matheo, mi corta experiencia me hizo pensar que me había equivocado en las indagaciones, pues una y otra vez tuve que volver al principio para comprobar donde estaba mi error, dado que, según se decía en los libros y documentos a que pude tener acceso, este personaje, aunque había casado tres veces, con ninguna de sus esposas alcanzó a tener posteridad. Sin embargo, yo estaba aquí.
Todo era inútil; al final siempre llegaba al mismo sitio y… vuelta a empezar.
No hace mucho, en uno de los comentarios que en este blog se han hecho al artículo que acabo de citar, su autora dice, y con mucha razón, que las referencias del nobiliario canario suelen llevar a errores.
En el Nobiliario de Canarias(1952-1967) de J. Régulo Pérez, obra que originariamente
escribió don Francisco Fernández de Bethencourt (1850-1916) -del que se está conmemorando el Año Genealógico en su honor, al cumplirse el centenario de su fallecimiento- bajo el título de Nobiliario y Blasón de Canarias, posteriormente ampliada y puesta al día por una Junta de Especialistas, obra de tanto prestigio en Canarias (justamente ganado) y de referencia obligada en tantos trabajos genealógicos, se pueden encontrar noticias relativas a diversos personajes de las islas Canarias que marcaron hitos más o menos importantes en la historia; más bien, como nos comenta Eugenio Egea Molina en su reciente publicación en este mismo blog, sobre personas pertenecientes a la aristocracia; sin embargo, no todos aquellos que de alguna forma tuvieron cierta relevancia en el tiempo en estas islas han sido estudiados o recordados; circunstancia que les ha llevado a permanecer en la más absoluta oscuridad.
Ya el ilustre herreño don Dacio V. Darias y Padrón, que precisamente formó parte de esta Junta, lo expresaba en su, a mi entender, muy interesante artículo publicado en la revista de Memorias de la Real Academia Mallorquina de Estudios Genealógicos, Heráldicos e Históricos, “Sobre la reimpresión del Nobiliario de Canarias. GLOSA A SU INTRODUCCIÓN"; con motivo de haberse puesto en circulación el primero de los volúmenes, de los cuatro que finalmente conformarían el Nobiliario, al decir que se dejaba restringido el conocimiento nobiliario a las principales islas del Archipiélago, prescindiendo de tal elemento en lo que también afectaba a las llamadas islas menores de Lanzarote, Fuerteventura, La Gomera y El Hierro, como si éstas, tan injustamente omitidas, no formasen parte integrante y no tuviesen el rango de tierras madres de las mayores. Del referido artículo, y al hilo de lo que me encuentro exponiendo, elijo uno de sus primeros párrafos:
“Más que Nobiliario, sin embargo, la nueva publicación, debiera titularse simplemente Genealogías Canarias, por aquello de que en sus páginas no figuran todos los que son, ni tampoco lo son todos los que están”.
Ahí puede encuadrarse el caso de don Diego Cabrera Matheo, del que, tras expresarse en el citado texto algunos de los cargos que ostentó, lo que seguidamente se decía sobre el mismo era para aclararnos que en ninguno de sus tres matrimonios había alcanzado a tener descendencia.
Pero la historia se repetía; trabajos de distinta naturaleza, todos de un excelente valor, curiosamente me llevaban al mismo lugar; clara evidencia de que la investigación histórica sobre el personaje central de este relato, no había sido muy distinta a la que pudiera haber realizado un simple aficionado.
Pues bien, expuesto lo anterior, me encuentro en condiciones de afirmar que:
Don DIEGO DE CABRERA MATHEO, hijo de don Juan Matheo de Cabrera Sanabria y Bethencourt y doña María Eva Chagueda González Melián, nació en la isla de Fuerteventura, siendo bautizado en su parroquia matriz de Nuestra Señora de la Concepción, el día 20 de febrero de 1667. Fue Capitán de Milicias, Juez de Ausencias, Regidor, Alguacil Mayor y Alcalde Mayor de su ilustre Cabildo. Casó efectivamente en tres ocasiones; la primera, el 3 de noviembre de 1696, en la iglesia de Santa María de Betancuria en Fuerteventura, con doña María de Armas Aguilera Valdivia, hija del Capitán don Diego de Cabrera Aguilera Valdivia y doña Catalina de Armas, vecinos de Fuerteventura, en La Matilla.
De este enlace nacieron tres hijos:
1. Doña JOSEFA DE ARMAS, cuyo bautizo tuvo lugar en la expresada iglesia el 8 de mayo de 1697, falleciendo sin haber contraído matrimonio, el 23 de octubre de 1712.
2. Doña MARÍA DE ARMAS, que casó con don Laureano Cabrera, y
3. Don JUAN MATHEO DE ARMAS, que caso con doña Leonor Cabrera.
No habiendo transcurrido aún un mes desde la muerte de doña Josefa, el 20 de noviembre de 1712, fallecería su madre, doña MARIA DE ARMAS.
Don Diego, casó en segundas nupcias con doña María Cabrera, hija de don Antonio González Robaina y doña Inés Hernández, quien fallecería el 13 de diciembre de 1724, procediendo de este matrimonio un único hijo, que llevaría el mismo nombre de su padre:
1. Don DIEGO CABRERA MATHEO, que nació el 25 de enero de 1719 y contrajo nupcias en Fuerteventura, en la iglesia de Nuestra Señora de Regla, en Pájara, el 30 de octubre de 1741, con doña María Umpiérrez, hija del Teniente Capitán don Esteban Sánchez y doña Ángela Cabrera, vecinos de dicho lugar.
Su tercer y último matrimonio tuvo lugar en la iglesia de Nuestra Señora de Santa María de Betancuria, el 3 de Junio de 1726, con su prima doña Gaspara de Cabrera Dumpiérrez, la cual había sido bautizada en la misma iglesia el 9 de Abril de 1699, hija del Regidor de la isla, don Pedro Cabrera Bethencourt y doña Lucía de Cabrera Gutiérrez, vecinos de la Antigua.
Fruto de este consorcio nacieron siete hijos; los tres últimos siendo don Diego ya septuagenario. Fueron los siguientes:
1. Doña LUCÍA CABRERA, que nació el 10 de abril de 1727 y fue llevada a la pila de la iglesia parroquial de Betancuria seis días más tarde. Casó en la misma iglesia, el 17 de octubre de 1749, con el Teniente Capitán don Francisco Fulgencio, hijo del Alférez don
Salvador Fulgencio y doña María de Bethencourt, naturales de La Matilla, en Fuerteventura
2. Don JOSÉ ANTONIO CABRERA, nacido el día 30 de agosto de 1729, quien fallecería el 23 de octubre del siguiente año.
3. Doña JOSEFA DE SAN LORENZO CABRERA, nacida el 10 de agosto de 1731 y bautizada cuatro días más tarde en la iglesia matriz de la isla, donde posteriormente, el 25 de septiembre de 1753, contraería nupcias con don Andrés López de Vera, hijo de don Andrés Hernández y doña Teresa López de Vera, naturales y vecinos de Tacoronte, en la isla de Tenerife.
4. Don JOSÉ ANTONIO CABRERA, llamado como su anterior hermano, en recuerdo del mismo, nacido el 31 de mayo de 1734.
5. Doña MARÍA CABRERA, que sigue la línea.
6. Don CAYETANO CABRERA, que nació el día 4 de Septiembre de 1741, y
7. Doña MARÍA DE SAN ANTONIO CABRERA, nacida melliza con el anterior y casada más tarde con don José Manuel Zeruto, administrador de la Real Renta del Tabaco.
Mi ascendiente fue la quinta hija de su último matrimonio, doña María Cabrera, cuyo bautizo tuvo lugar en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Concepción el 24 de noviembre de 1737 y casó en la misma el 27 de junio de 1768, con su primo don Diego de León Cabrera, hijo de don Domingo Borges y doña María Márquez, vecinos de Triquivijate en la citada isla de Fuerteventura.
Don Diego falleció el 27 de octubre de 1753 a los 86 años en el Pago del Espinal, Fuerteventura, lugar donde vivió con sus respectivas esposas y en el que nacieron todos sus hijos.
Sólo me resta añadir que este es el resultado de las indagaciones que realicé para mi particular historia genealógica, lo cual he querido sacar a la luz tanto para desenterrar de la oscuridad al personaje como para, llegado el caso, que pudiera servir a algunos de sus descendientes que todavía, por fortuna, compartan su diario vivir con nosotros y que hubieran tropezado con determinados textos, que sin quitarles el valor que tienen, en este caso, más que aumentar su conocimiento haya producido, como a mí me ocurrió, algunas confusiones.

FUENTES Y BIBLIOGRAFÍA
- Archivo Parroquial de Antigua, Sección Betancuria. Libros Sacramentales. (Fuerteventura).
- Archivo Histórico Diocesano de Las Palmas. Expte. matrimonial 7051. Diego de Cabrera Matheo y Gaspara de Cabrera. (Fuerteventura).
- Archivo Histórico Diocesano de San Cristóbal de la Laguna. Expte. matrimonial Legajo 0005, doc. 02. Diego Borges y María Cabrera. (Fuerteventura).
- Archivo Histórico Provincial de las Palmas. Protocolos Notariales de Fuerteventura, Legajo 3025. Pp. 98-109. Testamento de Diego Cabrera Matheo ante José Pérez Mota.
- Memorias de la Academia Mallorquina de Estudios Genealógicos, 1ª Época (1953-1955), Tomo I-IV, Edición Facsímil año 2000.
- ROLDÁN VERDEJO, R. y DELGADO GONZÁLEZ, C. (2008). Acuerdos del Cabildo de Fuerteventura (1701-1798). Puerto del Rosario. Servicio de Publicaciones Cabildo de Fuerteventura.
- CONCEPCIÓN RODRÍGUEZ, J. (2003). Las manifestaciones artísticas en las islas de Fuerteventura y Lanzarote: Sus promotores. En XI Jornadas de Estudios de Fuerteventura y Lanzarote. Tomo I. Puerto del Rosario 2004. Servicio de Publicaciones Cabildo de Fuerteventura.
- VVAA. Nobiliario de Canarias. (1952-1967). J. Régulo Pérez, Tomo II, La Laguna (Tenerife).

-  

APELLIDO GUERRA EN GRAN CANARIA: ISABEL GUERRA Y JUAN DE SANLÚCAR (III)

$
0
0
JUAN R. GARCÍA
FANEQUE HERNÁNDEZ
PEDRO SOCORRO


           INICIO (pulsando aquí)
DOS ESCLARECEDORES DOCUMENTOS ACERCA DE JUAN DE SANLÚCAR
- 14 septiembre de 1514 Antonio de Sopranis. Poder Ante el escribano de Sevilla  Bernal González Vallecillo (Obtenido en Documentos del Archivo Notarial de Sevilla referentes a Canarias obra de Alejandro Cioranescu)
“…Yo Antonio de Sopranis, mercader genovés, estante que soy en esta ciudad de Sevilla digo que por cuanto a mi pedimento está preso en la cárcel de la ciudad de Jerez de La Frontera Juan de Sanlúcar  vecino de canaria por cuantía de 106 arrobas y 10 libras de azúcar que me debe de resto de mayor cuantía de azúcar y ahora  estoy convenido con el dicho Juan de Sanlúcar en que me haga obligación por las dichas 106 arrobas y 10 libras de azúcar para me las dar y pagar en la ciudad de Cádiz de calidad y manera según está obligado…otorgo todo mi poder cumplido…a Jerónimo de Mafre mercader genovés estante en la dicha ciudad de Jerez para que por mí y en mi nombre como yo mismo pueda sacar de la dicha prisión en que está el dicho Juan de Sanlúcar…”
Cioranescu señala al pie de este extracto que “Juan de Sanlúcar, vecino de Gran Canaria en 1500, estaba en Granada en 1512 y que falleció antes de 1516”.
(Medidas de masa en la época 1 quintal = 100 libras; 1 arroba = 25 libras. Conversión al sistema métrico decimal 1 arroba equivale aprox. a 12 kilos  y 1 libra a algo menos de medio kilo)
Juan de Sanlúcar le queda pues a deber a Antonio de Sopranis una cantidad de más de 1200 kilos de azúcar. La cantidad inicial cuando se produjo su encarcelamiento debía ser muy superior. De otra forma, dadas sus importantes posesiones territoriales, no se explica que fuera llevado a prisión por el tamaño de esta deuda.
- 19 enero de 1514 Madrid Registro del Sello
“Orden al Gobernador de Gran Canaria y al alcaide de la torre de Mar Pequeña, a petición de Catalina Guerra, mujer de Juan de Ceberio, Bartolomé de Salamanca, Vasco López, Isabel Guerra, mujer de Juan de Sanlúcar, Fernando Moro, herrador, Pedro de Hervás y Antonio Martínez, vecinos de Gran Canaria, para que permitan a los vecinos de dicha isla rescatar mercancías autorizadas en la citada torre pagando por ellas los derechos que estaban fijados en la merced que se les hizo por su contribución en la construcción de dicha torre, merced que se ha perdido”. El Rey.
Podemos ver que las dos hermanastras están al frente de los negocios familiares. Catalina, por muerte de su marido Juan de Ceberio, ocurrida en 1504, e Isabel por el encarcelamiento de su esposo Juan de Sanlúcar por deudas con los Sopranis que tuvo lugar en 1509 según señala Cebrián Latasa. Asociados en la empresa africana con estas mujeres aparecen el vecino de Telde Vasco López; Bartolomé de Salamanca, personero, hijo de Pedro de Salamanca conquistador de la isla; Pedro de Hervás conquistador de Tenerife y La Palma que muere este mismo año y que había sido testigo en la información de Catalina Guerra; Fernando Moro, que será el futuro marido de Isabel González, hija de Isabel Guerra y Juan de Sanlúcar;  y Antonio Martínez, al que no identificamos.
Ahora entendemos que Isabel no haya tenido más hijos con su esposo desde el nacimiento en las Palmas de su hijo Antón a 12 de septiembre de 1510. Su esposo había sido prendido a fines de 1509 por las deudas contraídas con los poderosos Sopranis y no será liberado hasta fines de 1514. Estimamos que Juan de Sanlúcar no regresó a la isla, pues no se tienen otras noticias de él, habiendo fallecido con certeza antes de 1516 según Cioranescu.

LA CAPELLANÍA DE ISABEL GUERRA DE 1530
Copia del original ante Francisco de Ortega escribano público a pedimento del Ldo. Simón Díaz Cherino, presbítero capellán del monasterio del señor San Bernardo de esta Ciudad de Canaria en 19 de junio de 1679.
“En el nombre de Dios, amén, sepan cuantos esta carta vieren como yo Isabel Guerra mujer de Juan de Sanlúcar, difunto que Dios haya, vecina que soy de esta isla de la Gran canaria otorgo y conozco que por cuanto yo tengo practicado y concertado con los señores prioste y cofrades de la iglesia de Ntra. Sra. de la Concepción de esta Ciudad Real de las Palmas para que me hagan decir en la dicha iglesia dos misas cantadas con un respondo cada año perpetuamente para siempre jamás, las cuales se han de decir en el octavario de la fiesta de Ntra. Sra. de La Concepción cada año comenzándolas a decir de este presente año en que estamos de 1530 años y así desde ahora en adelante para siempre
Plano de Las Palmas, siglo XIX
jamás… Por tanto yo por esta presente carta otorgo que doy e vendo e traspaso a la dicha iglesia y cofradía … dos doblas de oro de renta y tributo perpetuo de cada un año que Melchor de la Puebla, vecino de esta isla, y sus herederos y sucesores me son obligados de me dar y pagar en cada un año perpetuamente para siempre jamás, la una dobla de oro por el día del Señor San Juan de junio de cada año por razón de unas casas que de mí tiene a censo y tributo el dicho Melchor de la Puebla las cuales son en esta ciudad, en Triana, linde de la una parte con casas de Antonio Cerezo en que mora Francisco Larcon y con las casas de mi morada de mí la  dicha Isabel Guerra y por las otras partes las calles reales…”
“…fecha esta carta en esta ciudad de Las Palmas sábado diez días del mes de diciembre año del nacimiento de Ntro. Sr. Jesucristo de 1530. Testigos que fueron presentes: Lázaro de León, clérigo, y Andrés Parrado y Antonio de Zamora y Joseph Pérez, confitero y Joan del Castillo, albardero, y Francisco de Villalobos, candelero, y Alonso Gómez, velero, vecinos de esta dicha isla y porque no sabía escribir a su ruego lo firmó por ella el dicho Antonio de Zamora. Yo Cristóbal de San Clemente escribano público de esta isla en testimonio de verdad hice mi signo”.
COMENTARIOS:
Melchor de la Puebla, el personaje citado, es el marido de Isabel Guerra, nacida en 1510, hija de Juan Bartolomé e Isabel González, y nieta materna de Juan de Sanlúcar e Isabel Guerra. El tal Melchor es probablemente un deudo de Cristóbal de la Puebla quien, según Cebrián Latasa, fue conquistador de Gran Canaria habiendo recibido repartimiento en 1485. Cristóbal fue vecino de la Villa del Real de Las Palmas, contador regio, alcalde mayor y mercader.
Presumimos que las casas que ocupa Melchor de la Puebla le fueron cedidas en dote para su casamiento con Catalina Guerra de ahí que sean colindantes con las de su abuela Isabel Guerra. Habría que pensar por otra parte que la vecindad de dichas casas con las del genovés Antón Cerezo el viejo, quien fallecerá poco después, en 1535, pudiera tal vez explicar, como luego veremos, la relación existente entre Cerezos y Guerras.

LA CAPELLANÍA DE ISABEL GUERRA DE 1545
AHPLP Escribanía de José Betancor protocolo 1540 folios 621-631. El documento es copia realizada por este escribano el 20 de febrero de 1738 a instancias de Francisco de Miranda interesado en el patronato, a partir de otra copia realizada ante Tomé Solís en 12 de febrero de 1580 a pedimento de Pedro Guerra, bisnieto de Isabel Guerra, para dirimir el litigio planteado entre Francisco de Betancor y Alonso Suárez Carreño por el mismo patronato. (El original fue dictado ante Jerónimo Bautista el 5 de agosto de 1545).
“Sepan cuantos esta carta vieren como yo Isabel Guerra mujer que fue de Juan de Sanlúcar, que Dios haya, vecina que soy de esta isla de Gran Canaria otorgo y conozco digo que por cuanto es mi voluntad e intención es de en mis días hacer e instituir una capellanía…”
“…que quiero y es mi voluntad que de aquí en adelante y para siempre jamás en esta isla se digan una misa rezada cada semana la cual se diga señaladamente en el día viernes de cada semana perpetuamente para siempre jamás y más otras tres misas en cada un año, señaladamente la una el día de nuestra señora de Candelaria,  y la otra el día de Santa Brígida y la otra el día de Santa Lucía, la cual dicha capellanía y misas quiero y es mi voluntad que se digan en la iglesia de Santa Brígida de esta dicha isla y porque vos el padre Pedro Citronela, clérigo presbítero, estante que sois en esta isla que estáis presente
Pª Sta. Brígida, finales siglo XIX. FEDAC
sois persona hábil suficiente para tener cargo de esta dicha capellanía y habéis de ser obligado y os obligáis a cumplir y decir las dichas misas perpetuamente para siempre jamás…”
“…quiero y es mi voluntad que sea el patrón Juan Guerra Muñoz, mi hijo, para poder poner, quitar y señalar capellán suficiente cual al bien visto que fuera y que cada y cuando quiera le pareciere, y después de dicho Juan Guerra sea el patrón de dicha capellanía su hijo el mayor y después sus descendientes por la vía masculina para siempre jamás, y dicho poder y facultad cuán bastante se requiera para que pueda usar y ejercer el dicho patronazgo del propio y bienes de dicha capellanía”
“para ello dejo un parral que está en la vega de Tasaute que linda por una parte con el camino real que va a la vega vieja, por la otra el barranco del Gamonal, por la otra tierras de Juan Guerra Muñoz, mi hijo, y más nombro y señalo y dono  para dicha capellanía una casa que yo tengo junto con la iglesia de Santa Brígida con una cocina junto a un corral junto a la que vos el dicho Pedro Citronella, capellán de la dicha Santa Brígida viváis y después de vos el capellán que fuese nombrado por el patrón que le suceda y por esta  presenta carta vos doy poder cumplido a vos Pedro de Citronella, según qué derecho en tal caso se requiere, para que de hoy en adelante os podáis entrar en la dicha casa y corral susodicho y serviros de ellas como de cosas anejas a esta dicha Capellanía. Y otrosí para que podáis demandar, recibir, haber y cobrar las dichas doce doblas de oro de tributo en cada un año de la persona que tiene o tuviere dicho parral, hacer de ella como casa vuestra propia habida y donada en esta dicha capellanía, porque las otras tres doblas en cuenta de las quince doblas que yo tengo hecho de tributo quiero que las haya y posea el patrón que fuere de la dicha capellanía para siempre jamás…”
 “…que es fecha y otorgada en la noble Ciudad Real de Las Palmas que es en la isla de Gran Canaria en 5 días del mes de agosto de 1545 y porque la dicha otorgante dijo que no sabía escribir, a su ruego y por testigo lo firmó en el registro de esta carta Cosme Manuel, testigos que fueron presentes Diego Alcón y Gonzalo Pérez, labradores, y Gaspar González, mercader, y Cosme Manuel, vecinos de esta dicha isla”.
COMENTARIOS:
Hemos constatado que con el mismo nombre de Juan Guerra Muñoz tenemos a dos personas coetáneas: al hijo de Isabel Guerra que es nombrado patrono de esta capellanía de 1545, nacido sobre 1590, y a un homónimo fallecido antes de 1542  cuyos herederos son propietarios en esa fecha de tierras que lindan con las del primero de los nombrados.
El capellán Pedro Citronella, que parece ser el guía espiritual de doña Isabel, se ha quedado con el usufructo de unas casas en La Vega, junto a la iglesia de Santa Brígida, y con una renta de doce ducados anuales sobre un extenso parral situado asimismo en la Vega de Tasaute. Todo esto a cambio de decir cada año 55 misas en favor del alma de la instituyente cuya usura espiritual ha quedado de manifiesto pues se asegura una misa semanal hasta el día del juicio. El capellán no obstante es el verdadero beneficiario material pues se asegura una vivienda y una buena renta anual de por vida.
Al hijo de Isabel Guerra y Juan de Sanlúcar nombrado primer patrono de esta capellanía le dedicaremos el siguiente apartado de este trabajo.

JUAN GUERRA  MUÑOZ (1),  TAMBIÉN LLAMADO JUAN GUERRA DE SANLÚCAR, Y CATALINA PÉREZ
Cioranescu nos dice que Juan Guerra, labrador, vecino de la Vega obtuvo data en el Palmar de Pino Santo en 1517 confirmada en 2 de agosto de 1542. Documentos del Archivo Notarial de Sevilla.
La confirmación la encontramos en el libro de repartimientos de GC  de Ronquillo y Aznar (nº 53 de 1542)
“Magníficos Sres.: Juan Guerra de Sanlúcar, labrador, vecino de esta isla en La Vega besa las manos de Sus Señorías y dice que tiene y posee ciertas tierras que son en el Palmar del Pino Santo sembrándolas y haciendo de ellas como suyas propias en las cuales puede haber hasta cantidad de 30 fanegadas que frontero las tierras que tuvo y poseyó Cayo Hernández, su cuñado, ya difunto… pido y suplico a vuesas mercedes que  le hagan merced de nuevo de darle título de ellas porque se ha perdido… Las cuales dichas tierras
Pino Santo. Foto: Naranjo Ojeda
lindan de una parte con tierras de los herederos de Francisco Hernández Borrero y de la otra, tierras de los herederos del cardenal Juan Guerra Muñoz”
COMENTARIOS
Si la data original fuera efectivamente de 1517, ello nos indicaría que Juan Guerra el hijo de Isabel Guerra ha nacido al menos 25 años antes, sobre 1492.
¿Pero quién es este otro Juan Guerra Muñoz ya fallecido en 1542 cuando tiene lugar la confirmación de la data? ¿Es cardenal o capellán? Creemos que se han confundido ambas abreviaturas y que en realidad se trata de un sacerdote que ejerce de capellán no sabemos de qué alma. Un hijo de Juan Guerra de Sanlúcar y Catalina Pérez, por quien sigue el linaje, se llamará también de este mismo modo: Juan Guerra Muñoz. Evidentemente este personaje difunto en 1542 no puede ser identificado con el hijo homónimo de Isabel Guerra al que su madre otorga el patronazgo de su capellanía de 1545. ¿Podría ser un hermano de la citada Isabel? No lo sabemos. Lo realmente importante para nosotros en este momento es haber comprobado que se trata de un colateral que no afecta al linaje que hoy estudiamos.
La referencia por otra parte a un cuñado ya difunto de Juan, llamado Cayo Hernández, debe ponerse en  relación probablemente con un hermano de su mujer, Catalina Pérez, ya que la madre de esta se llama Magdalena Hernández.

OTRAS REFERENCIAS A JUAN GUERRA MUÑOZ
- En 1522 anta Cristóbal de San Clemente encontramos otra referencia a Juan Guerra en la que se acredita que este era cuñado de Juan Bartolomé, el esposo por entonces de su hermana Isabel González.
“Arrendamiento. Ana de Serpa, mujer de Antonio Casares difunto arrienda a Juan Bartolomé y a Juan Guerra, su cuñado, 5 fanegas de tierra de sequero en Tamaraceite.
- En 19 de octubre de 1522 y ante el mismo escribano localizamos su carta de dote:
“Juan Guerra, hijo de (no legible) y de Isabel Guerra su mujer, reconoce que ha recibido de Magdalena Fernández, mujer de Luis Afonso, difunto y como dote de la hija de ambos, Catalina Pérez, esposa del otorgante, 230 doblas de oro razonadas a 500 mrs. de moneda isleña en dineros contados y en una yegua, ropas de vestir y de cama, alhajas y preseas todo apreciado ante el presente escribano. Además él da como arras 40 doblas de oro. Si  muriese antes que su marido podrá dejarlos a quien quisiere y su marido se compromete a entregarle. Testigos: Álvaro Rodríguez, Francisco Déniz y Juan Sánchez Niño, vecinos y estantes”. Firma: Juan Niño
- En el libro primero de bautismos de Las Palmas (L1- F91) localizamos el nacimiento de su hijo Juan Guerra Muñoz (2)  por quien seguirá la línea que hoy trazamos:
"En 26 de agosto de 1520 años bautizó Aparicio López a Juan, hijo de Juan Guerra y de su mujer Catalina Pérez, fueron sus padrinos Hernando Moro y su mujer."
Nota: La mujer de Hernando Moro en esa fecha es Isabel Rodríguez. Más tarde casará con Isabel González, la hermana de Juan Guerra Muñoz (1)
- Tenemos la sospecha por otra parte de que Juan Guerra Muñoz (1) pudo haber casado en segundas nupcias con Leonor de Ortega, nacida en Telde en 1512, hija de Pedro Hernández de Rociana y de Francisca Gutiérrez. De ese matrimonio nacieron al menos dos hijas: Isabel de Ortega en 1537 y Francisca de Ortega en 1543, ambas  bautizadas en Telde.

CONTINUIDAD DEL LINAJE
JUAN GUERRA MUÑOZ (2) Y JUANA DE BOLAÑOS
Juan Guerra Muñoz recibe en repartimiento en 1546 un solar en Santa Brígida cerca de la casa del capellán. Y en 1549 recibe tierras sobrantes en donde dicen Tasaute y Gamonal que son 4 fanegas colindantes con las suyas.
No teníamos muy claro inicialmente  si este Juan Guerra Muñoz era el padre o el hijo de mismo nombre. Creemos ahora, por las fechas, que es el hijo, dado que este, que fue bautizado en Las Palmas en 1520, acaba de cumplir en 1546 la mayoría de edad  (25 años) que le permitía aspirar una vez casado a la obtención de repartimientos. A pesar de estas dudas que nos planteamos,  tenemos la seguridad de poder descender en la escala genealógica con plenas garantías gracias al siguiente extracto localizado en la carpeta del Archivo Diocesano, y de paso nos enteramos de quiénes fueron los tres primeros patronos de la capellanía:
“Diego Álvarez, hijo de Leonel Álvarez e Isabel Hernández, obtuvo licencia del Provisor para administrar una capellanía y patronato que Isabel Guerra, mujer de Juan de Sanlúcar instituyó en Santa Brígida, cuya fundadora había nombrado por patrón de ella a Juan Guerra, padre de Juan Guerra Muñoz, suegro del testador”.
En dicha Carpeta  hemos encontrado además para nuestra tranquilidad el extracto de un documento que nos informa acerca de la descendencia habida del matrimonio entre Juan Guerra Muñoz y Juana Bolaños. Se sobreentiende que  su hija mayor, Ginebra de Palenzuela, nacida en torno a 1555, por quien sigue la línea, no requería de tutor por estar ya casada.
“Cristóbal de Vergara tutor de Juan Guerra, Ambrosio de la Mata y Francisca Bolaños, hijos de Juan Guerra y de Juana Bolaños, año de 1583.
En cuanto a la ascendencia de Juana Bolaños diremos que es la hija del doctor Álvaro de la Mata y de su esposa Ginebra de Palenzuela (1). De Ginebra, nacida en 1503, podemos señalar que es hija de Alonso Rodríguez de Palenzuela y Francisca de Mayorga y nieta por parte de padre del burgalés Alonso de Palenzuela y de su esposa Catalina Rodríguez. Por parte de su madre, Francisca de Mayorga, Juana es nieta del conquistador Juan de Mayorga que fuera alcalde de la Villa del Real Las Palmas y de su esposa Juana de Bolaños, la que le da su nombre.
Juana Bolaños dictó al parecer testamento, al cual no hemos podido acceder, el 28 de agosto de 1579 ante Diego Carvajal Guanarteme. Como ya se ha dicho los hijos de su segundo matrimonio con Juan Guerra Muñoz (2) fueron además de Ginebra de Palenzuela (2), Pedro Guerra, nacido en 1556,  Francisca Bolaños, Ambrosio de la Mata y Juan Guerra. Conviene precisar en este momento  que Juana Bolaños había casado en primeras nupcias con Alonso Espino con quien tuvo a Alonso Espino el mozo, nacido en 1547, a Francisco Espino y a Álvaro de la Mata (2).

ALGUNAS NOTAS SOBRE LOS APELLIDOS PALENZUELA Y DE LA MATA
Extractos de las actas del Cabildo de la Catedral de Canarias (1514-1791) realizados por el historiador Viera y Clavijo, libro publicado por la RSEAPGC en 2007
En 12 de junio de 1518
“El Cabildo recibió por su médico al bachiller Álvaro de la Mata para curar las personas de los beneficiados y sus familias con el salario de 30 arrobas de azúcar en cada un año en dos pagas y se le dio pandectas que había de cumplir entre cuyas obligaciones había la del número a visitar según la enfermedad, el examinar los medicamentos que se trajesen de la botica, asistir al sochantre y al pertiguero y se imponía la pena de perder la parte de la renta del prebendado a quien dejare de visitar siendo llamado”.
A 24 de diciembre de 1535 ante Cristóbal de San Clemente
“El doctor Álvaro de La Mata, medico vecino de Gran Canaria y Alonso de Palenzuela su suegro, como fiador, reconocen que deben a Francisco de Herrera, mercader, estante, 35 arrobas de azúcar blanco que le compró. Se obligan a pagar en San Juan en junio.
Se dice asimismo en otra nota que los padres del Doctor Álvaro de la Mata se encuentran en un libro de Genealogías en el Archivo Diocesano de las Palmas, documentación que no hemos podido localizar.
Encontrado en la carpeta del Archivo Diocesano:
“Ginebra de Palenzuela. Su testamento ante Lorenzo de Palenzuela en 10 de noviembre de 1574, casó con don Álvaro de la Mata, tuvo por hijos a Jerónima de la Mata mujer de Luis Inglés, Francisca Bolaños, Agustina de Palenzuela, Ambrosio de Palenzuela y Francisco de la Mata.
“Ginebra de Palenzuela es madre de Ambrosio de Palenzuela que casó con María de San Juan, hija de Francisco Hernandez Mentado y Catalina Gil según escritura de dote Andres de Rosales en 1594 oficio de Campos”
“Ginebra de Palenzuela, viuda de don Álvaro de la Mata dote a su hija Francisca de la Mata con Alonso de Zurita hijo de Bartolomé Martín de Zurita y de Luisa Vélez;  es hermana de Bernardino de Palenzuela, año  de 1561,  protocolada ante Martínez Domínguez por Don Diego Casabuena año de 1620 folio 131”

DUDAS ACERCA DE UN POSIBLE PRIMER MATRIMONIO DE JUAN GUERRA MUÑOZ (2) CON MARÍA DE LOS ÁNGELES BECERRIL
Tenemos constancia (Testamento de Antón Cerezo,obra de Julio Sánchez Rodríguez y Enrique Pérez Herrero) de que Antón Cerezo de Betancor, nieto de su homónimo e hijo  de Juan Perdomo de Betancor y de Francisca Cerezo, casó con Catalina Guerra, presunta nieta o bisnieta de nuestra Isabel Guerra y de Juan de Sanlúcar.  De confirmarse el entronque podrían ufanarse sus descendientes de provenir del linaje de Luisa de Betancor (Tenesso) la madre de Juan Perdomo de Betancor.
En la carpeta del Diocesano hemos encontrado algunas referencias a esta Catalina Guerra, la que fue esposade Antón Cerezo de Betancor:
“Juana Becerril, mujer de Pedro Báez e hija de Alonso de Becerril y de María Jiménez deja una capellanía en Gáldar de una misa cada semana; nombra por patrono a María de los Ángeles, su hija y a Juan Guerra, su marido, y a sus descendientes y faltando estos a Gonzalo de Quintana y sus descendientes”. Folio 584.
“Juana Becerril donación a Antonio Cerezo el mozo, hijo de Juan Perdomo y de Francisca Cerezo, por haber casado con Catalina Guerra, hija de Juan Guerra y María de los Ángeles, hija esta de Juana Becerril y de Pedro Machado, su primer marido” F 356.
“Dote de Juan Guerra para casar con María de los Ángeles, hija de Pedro Fernández Machado y Juana Becerril” Folio 59 vto.
Comprobamos gracias a estos extractos, a pesar de no venir datados, que Antonio Cerezo el mozo, hijo de Francisca Cerezo y Juan Perdomo y nieto del genovés Antón Cerezo y de
Antón Cerezo por J. van Cleve
Juana Sánchez, casó con Catalina Guerra, hija de Juan Guerra y María de los Ángeles; que María de los Ángeles era hija a su vez de Juana Becerril y de su primer esposo Antonio Machado; y que Juana  era hija del conquistador de Gran Canaria Alonso de Becerril y de su esposa María Jiménez. Son por tanto cuatro las generaciones que separan por línea materna a Catalina Guerra de su bisabuela María Jiménez.
En cuanto a la ascendencia paterna de Catalina Guerra, también en cuatro generaciones, estimamos que Juan Guerra, su padre, el casado con Mª de los Ángeles,  podría ser  identificado como Juan Guerra Muñoz (II) quien pudo como su padre haber tenido dos matrimonios. El primero con Mª de los Ángeles Becerril en los años 40 del que nacería Catalina Guerra (y sus hermanos Leonor Guerra y Juan Guerra) y el segundo en los años 50 con la viuda Juana Bolaños. De estar en lo cierto, el citado matrimonio de Catalina Guerra con Antón Cerezo de Betancor habría tenido lugar en los años 60 o 70 del siglo XVI. Confirmaríamos de este modo que Catalina Guerra es bisnieta de Isabel Guerra
Sirva de comprobación en estas cuentas que Juana de Becerril consta como casada con su segundo marido el purgador Pedro Báez en un documento de marzo 1524 (escribanía de Guía y Gáldar) ante Alonso de San Clemente. Así pues su hija Mª de los Ángeles  habría nacido en los años 20 y su nieta Catalina Guerra en los 40 o 50. Hay que pensar por tanto que el matrimonio de María de los Ángeles con Juan Guerra pudo tener lugar antes de mediados de siglo. De conformarse esta hipótesis se habrían casado sobre 1554 dos viudos, Juan Guerra y Juana Bolaños.

GINEBRA DE PALENZUELA (2) Y DIEGO ÁLVAREZ
Mostramos a continuación una serie de  notas localizadas en la Carpeta del Diocesano referidas a este matrimonio:
-En primer lugar la carta de dote de Ginebra en 1571:
“Juan Muñoz Guerra, viudo de Juana Bolaños, y Pedro Guerra, su hijo, dote a Ginebra de Palenzuela,  su hija  y hermana (respectivamente), para casar con Diego Álvarez, hijo de Leonel Álvarez, y entró en esta dote 40 fanegas de tierra situadas en el Lomo de Espino que cupieron tres partes a los hijos de Alonso Espino, difunto, en la partición que se hizo entre los hijos de Espino el viejo y estas tres partes se dividieron en los hijos de Alonso que son Francisco Espino, Alonso Espino y Álvaro de la Mata, hermano de la Ginebra e hijos todos de Juana Bolaños, difunta, y le donaron sus partes a la contrayente ante  el presente escribano en abril de 1571”.
- En segundo lugar una comprobación de relaciones familiares obtenidas de un documento de 1580:
“Francisco de la Mata y Jerónima de la Mata son tíos de Ginebra. Cristóbal de Vergara es sobrino también de ellos y otra Ginebra de Palenzuela es abuela de la contrayente. Año de 1580 a 19 de julio Ante Lorenzo de Palenzuela”.
- En tercer lugar un extracto del primer testamento de Diego Álvarez de 1615
“Testamento de Diego Álvarez, vecino de Canaria, hijo de Leonel Álvarez y de Isabel Gutiérrez, declara por sus hermanos a Juan, Inés Álvarez, Jorge Alvarez. Declara que fue casado con Ginebra de Palenzuela, hija de Juan Muñoz Guerra y Juana Bolaños, vecinos de la Vega. Francisco de la Mata, Regidor, es tío de su mujer, Ambrosio de la Mata y doña Francisca de la Mata, hermanos de su mujer; Álvaro de la Mata, hijo de Juana Bolaños y esta Juana, hermana de Francisco Espino, en Indias; que falleció dicha Ginebra en el año 1596; tuvieron por hijos a Juana de Bolaños, mujer de Alonso Suarez, y la dotó ante Lope Galán en 1608 y a Leonel Álvarez y Juan Guerra y Lorenzo de Palenzuela. En 7 de Noviembre de 1615, ante Antón de Zerpa.
- Por último añadiremos un amplísimo extracto de nuestra factura del segundo testamento de Diego Álvarez dictado ante el escribano Salvador González en 1620 (AHPLP Legajo 2349):
“En el nombre de dios nuestro Señor y de la virgen nuestra señora a quien tengo por mi abogada e intercesora en todas sus cosas amén sepan cuantos esta carta de testamento e última voluntad vieren como yo Diego Álvarez vecino de esta isla morador de presente en la villa de Guía estando como estoy oprimido de una grave enfermedad en una cama y en mi buen juicio natural cual dios nuestro señor ha sido servido de lo dar...”.
Ítem declaro que yo soy hijo legítimo de Leonel Álvarez y de Isabel Hernández ya difuntos, vecinos de esta isla de Canaria, y después que fueron fallecidos se hizo partición entre mí y mis hermanos y me cupo al pie de tres mil doblas así lo declaro.
Ítem declaro que yo fui casado en haz de la santa madre iglesia con Ginebra de Palenzuela y al tiempo del casamiento me mandó Juan Muñoz Guerra y Pedro Guerra su hijo mil y doscientas doblas con la mitad de la hacienda de viña que tenía en la Vega y tierras de pan sembrar y con la mitad del Lomo que dicen de Espino y así mismo Francisco de la Mata Regidor que fue de esta isla me prometió con la dicha Ginebra de Palenzuela mi mujer trescientas doblas y la dicha mitad del lomo de Espino como parecerá por escritura ante Lorenzo de Palenzuela escribano que fue de esta isla el año de ochenta a que me refiero. Toda la cual dicha hacienda y dote como tengo declarado la tengo recibida de mi suegro y su hijo y del dicho Francisco de la Mata de que, si necesario es, hago carta de recibo en forma.
Ítem declaro que yo vendí todas las tierras que dicen del lomo del Espino en La Vega a Cosme González vecino del Pino Santo en doscientas y ochenta doblas por escritura ante Luis de Loreto, años de ochenta y siete hasta ochenta y nueve.
Ítem declaro que estando yo en la isla de Tenerife la dicha Ginebra de Palenzuela mi mujer compró a doña Francisca de Bolaños y a Ambrosio de la Mata, su hermano, las partes que tenían en la hacienda de la Vega con la casa de la morada de sus padres en precio de doscientas doblas y después que yo vine a esta isla las pagué para encaminar a los susodichos a las Indias de su Majestad donde están, las cuales dichas doscientas doblas pagué de mis bienes y dineros que traje de la isla de Tenerife que cobré de bienes que dejaron mis padres.
Ítem declaro que al tiempo que falleció la dicha mi mujer Ginebra de Palenzuela yo gasté en su entierro 35.368 mrs. como parece por mi libro por menudo en su cuenta.
Ítem declaro que de la hacienda que me dio mi suegro en plantar mucha parte y cercarla gasté muchos dineros de mi patrimonio.
Ítem declaro que después de haber fallecido la dicha mi mujer yo casé en haz de la santa madre iglesia a doña Juana de Bolaños nuestra hija habida en dicho matrimonio con Alonso Suárez Montedoca, hijo de Vicente de Montedoca vecino de la Vega y con ella le mandé en dote todo lo que tenía en la Vega, parral y (.....) y un buey y cascos de echar vino y otras cosas por escritura ante Lope Galán de Figueroa escribano de esta isla a que me refiero lo cual todo se lo tengo entregado.
Ítem declaro que durante el matrimonio entre mí y la dicha Ginebra de Palenzuela hubimos y procreamos por nuestros hijos legítimos y legítimo matrimonio a Leonel Álvarez, a doña Juana de Bolaños mujer del dicho Alonso Suárez, y a Juan Guerra, y a Lorenzo de Palenzuela que hoy viven y en la Vega está Leonel Álvarez y en la isla de Tenerife está Juan Guerra y en las Indias Lorenzo de Palenzuela. Declaro que los dichos mis hijos Leonel Álvarez y Juan Guerra y Lorenzo de Palenzuela no han llevado bienes ningunos ni de mi legítima ni de la de su madre que solamente ha llevado la dote declarada doña Juana de Bolaños con Alonso Suárez,  declárolo para descargo de mi conciencia.
Ítem ruego por amor de dios a Luis Barreto Quintana y al capitán Marcos Verde de Aguilar, regidor de esta isla, sean mis albaceas testamentarios y de mis bienes vendan así  en almoneda o fuera de ella cual más quisieren los que basten a pagar mi testamento y mandas en el contenidas asé el año del albaceazgo como fuera de él, que cual poder tengo tal lo doy a los susodichos y los hagan porque Dios depare quién por ellos otro tanto haga.
Y en el remanente de mis bienes derechos y acciones titulo voz y recurso dejo por mis universales herederos a los dichos Leonel Álvarez y Juan Guerra y Lorenzo de Palenzuela y a la dicha doña Juana de Bolaños con que la susodicha traiga a partición y colación los bienes que le di en dote con su marido Alonso Suárez y trayéndolos, entre y haya parte con sus hermanos, tanto unos como otros.
Ítem declaro que tengo por mis bienes en la casa de la Vega que fue de mi hermana María Álvarez, difunta, que ahora es de los hijos de Pedro del Castillo cuatro toneletes de a doce y trece barriles, mando se cobren.
Y revoco y anulo y doy por ningunos cualesquiera testamentos que haya fecho o codicilios antes de este, quiero que no valgan sino este que otorgo ante el presente escribano este quiero sea mi última voluntad que es fecho y otorgado en la villa de Guía en la morada del dicho Diego Álvarez hoy tres días del mes de mayo del año de 1620 el otorgante que doy fe conozco es el contenido lo firmó aquí de su nombre y fueron testigos presentes a leer y otorgar este testamento Luis Barreto Quintana, Gaspar Ramírez, Pascual Hernández, Hernando de Armas y Francisco de Fuensalida, vecinos de la villa de Guía. Diego Álvarez. Pasó ante mí Salvador González, escribano público.
- Añadiremos para completar la información que hemos localizado la carta de dote de su hija Juana Bolaños (3) a la que Diego hacía referencia en su testamento:
“Diego Álvarez, vecino de la Vega, Leonel Álvarez y Juan Guerra, sus hijos, carta de dote a Alonso Suárez, hijo de Vicente de Montesdeoca y de Antonia Suarez, para que case con Juana Bolaños hija de Diego Álvarez y de Ginebra de Palenzuela por ante Lope Galán en 26 de Septiembre de 1608.”

LEONEL ÁLVAREZ Y LEONOR MÁRQUEZ
En  este peldaño de la escala aportaremos como pruebas de entronque las siguientes:
- Partida de Matrimonio. Iglesia de Santa Mª de Guía, Libro 1, folio 198 vto. Año 1631
"En la villa de Guía en 30 días del mes de junio de 1631 años casé y velé a D. Leonel Suárez hijo legítimo de Diego Álvarez y doña Isabel de Montesdeoca vecinos del lugar de la Vega y doña Leonor Duarte habiendo hecho las tres amonestaciones, fueron testigos el Capitán Alonso de Guzmán, Francisco Carvajal y Salvador Jiménez”. El Br. Gaspar Ruiz Villar.
- Extracto del testamento de Leonel Álvarez  dictado en 24 de mayo de 1647 ante  Martín Suárez de Armas (Legajo 2360):
“Declara que es vecino de Guía y que fue casado en primeras nupcias con Catalina Rodríguez, hija de Ignacio Rodríguez y de María de la Cruz, con la que no tuvo descendencia. Declara que fue casado por segunda vez con Leonor Márquez que  al presente vive, hija de Juan Duarte y de María Lorenzo, con la que le dieron en dote lo que consta en la carta que pasó ante Salvador González, escribano de estas villas. Declara que tuvieron por hijos a Diego, Juan, Francisco, Ginebra y Juana. Nombra albaceas a Leonor Márquez, su mujer y a su hermano (de ella) Baltasar Lorenzo Duarte. Nombra por sus herederos universales a los dichos sus hijos Diego, Juan, Francisco, Ginebra y Juana a partes iguales.  La carta de testamento es hecha en la villa de Guía en 24 de mayo de 1647 en las casas del otorgante siendo testigos Francisco Melián, Sebastián Domínguez y Domingo Barrera y Francisco de León y Felipe la Torre. vecinos de esta isla.”
Fdo: Leonel Álvarez.    Paso ante mí, Martin Suárez de Armas, escribano público.

ESTEBANA GINEBRA DE PALENZUELA DUARTE Y ANDRÉS DE BETANCOR
- Aportamos como prueba de entronque un amplio extracto de la carta dotal de Leonor Márquez Duarte a Andrés de Betancor para casarse con su hija:
“En el nombre de Dios nuestro Señor Amén sepan cuantos esta carta de manda y promesa dotal vieren como yo Leonor Marques Duarte viuda de Leonel Álvarez mi marido y señor que Santa gloria haya,  vecina de la villa de Guía otorgo y conozco por esta presente carta y digo que por cuanto para honra y servicio de Dios nuestro Señor sea tratado y concertado casamiento en que haya de casar y case Andrés de Betancor Cabrera hijo legítimo de Lorente de Betancor y de doña Inés de Oliva, sus padres vecinos  de la Villa de Gáldar, con Estebana de Palenzuela mi hija legítima y del dicho mi marido y porque mediante la voluntad de Dios nuestro Señor el dicho matrimonio tiene efecto le mande en dote y casamiento, el dicho Andrés de Betancor Cabrera con la dicha Estebana de Palenzuela mi hija para ayuda y sustentar las cargas del matrimonio, los bienes siguientes:
Primeramente unas casas bajas terreras que yo tengo en esta villa notorias y conocidas con todo el sitio…la mitad del cercado de tierra de la ladera con media suerte de agua de la Vega de Gáldar que dicen de Las Parraqueras, una fanegada tierra en el lomo, una yunta de bueyes de labrar, una yegua de cercado, una saya nueva, un jubón y ropa de tafetán, una saya y un jubón nuevo, unas enaguas de chamelote de lana colorados y otras de batilla y jubón blanco y dos camisas de Ruan, una cama de campo, dos colchones, cuatro sábanas, seis almohadas, más dos sábanas de colgar que por todos son seis, una colcha blanca y rodapiés, un cobertor de color, cuatro sillas, un baúl nuevo en dorado, una arca de madera, seis servilletas, una tabla, un lebrillo de amasar, dos cedazos, una caldera, un harnero, una cuchara asador y otros trastes de cocina, un bufete de madera, dieciocho arillos de oro, un anillo de oro, dos mantas, una de seda y otro de anacoste, seis platos y seis escudillas dos toallas, una de algodón y otra de hilo, un tonel y una pipa, un tapete barteado, dos cahíces de pan, cuatro de trigo y dos de centeno, una novilla de un año… los cuales dichos bienes le daré y entregaré luego que sean casados y velados en haz de la Santa Madre Iglesia …
En la Villa de Guía a ocho de abril de mil 1657 años… siendo testigos presentes don Esteban de Sopranis y Gaspar de Betancor,  Pedro de Miranda Vizcaíno, vecinos de la villa y de Gáldar”.
Esteban Sopranis Fiesco      Martin Suárez de Armas, escribano publico
- Estebana de Palenzuela dictó dos testamentos, que sepamos, el primero a 14 de marzo de 1684 en Guía ante Cristóbal Suárez de Medina y el segundo que les extractamos  a continuación a 16 de diciembre de 1701 (legajo 2385) ante el mismo escribano:
Testamento de Estebana de Palenzuela
“Declara que es hija legítima de Leonel Álvarez y de Leonor Duarte vecinos de Guía Asimismo declara que es casada y velada  con el alférez Andrés de Betancor hijo de Lorente de Betancor y de doña Inés de Oliva y durante el matrimonio han tenido por hijos a Francisco de Betancor, a Luis de Betancor , a María de Betancor, a Inés de Betancor y a Silvestre de Betancor mis hijos y del dicho mi marido que hoy viven y asimismo tienen por hijo a Josephe de Betancor que es el más pequeño.
Ítem declara que lo que le dieron en dote y casamiento consta de la escritura dotal y  que
Portada antigua iglesia de Guía. FEDAC
durante el matrimonio compraron a su madre Leonor Duarte media fanega de tierra y otra fanegada y media de tierra que compraron a Juan Duarte su hermano para el entierro de mi madre por escritura ante el presente escribano. Ítem declara que compraron al Ldo don Juan Bautista Espino, canónigo que fue de la Iglesia Catedral una casa alta sobradada a tributo que es en la que viven… Ítem declara que cuando su hijo Francisco de Betancor sentó plaza en la leva dio su marido 500 reales en contado y dos vestidos  y su espada… Ítem declara que cuando se casó Luis de Betancor su hijo llevó un vestido y calzón y un arcabuz con sus frascos…
Nombra por albaceas al alférez Andrés de Betancor su marido y a los dichos sus hijos los mayores. Nombra por sus universales herederos a sus hijos y del dicho su marido que son Francisco, Luis, Silvestre, Josephe de Betancor y María e Inés de Betancor.
Otorgado  en 16 de diciembre de 1701 años y la otorgante  no firmó porque dijo que no sabía y a su ruego lo firmó un testigo estando presentes Juan de Torres, oficial de zapatero, Cristóbal Báez, hijo legítimo de Marcos Rodríguez Báez, José Morales, Bernardo Rivero y Esteban Correa vecinos de Guía”.
Fdo. Cristóbal Báez. Pasó ante mí, Cristóbal Suárez de Medina, escribano Publico.

LOS BETANCOR DE GUÍA
A los interesados en continuar el descenso por la escala hasta nuestros días les informamos que la documentación relativa a la continuidad del linaje partir del matrimonio guíense formado por Francisco de Betancor y Melchora de Barrios la pueden encontrar actualizada en el capítulo XVIII de nuestra publicación “Una ascendencia canaria de cinco siglos” (Cam-Pds 2015).


HOMENAJE A FRANCISCO FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT

$
0
0
JUEVES 7 A LAS 7
REAL SOCIEDAD ECONÓMICA DE GRAN CANARIA
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
Enmarcado en los actos conmemorativos que se están celebrando en el Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt, la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Gran Canaria, organiza este tributo a su figura y obra.
En el mismo participarán:
Miguel Rodríguez Díaz de Quintana, 
Juan R. Gómez-Pamo Guerra del Río y
Rafael Rodríguez de Castro.
Colaboran: 
Genealogías Canarias, 
Centro de Estudios Genealógicos Marqués de Acialcázar e 
Instituto de Estudios Históricos Rey Fernando Guanarteme.



FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT Y LA GENEALOGÍA CANARIA

$
0
0

En el ciclo Jueves Culturales organizado por la Concejalía de Cultura, Historia e Identidad del Ayuntamiento de Agaete, conmemorando el Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt (1850-1916), se celebrará la charla: 
FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT Y LA GENEALOGÍA CANARIA, 
a cargo de 
D. JUAN R. GÓMEZ-PAMO GUERRA DEL RIO, 
el día 14 de abril a las 20 horas, en el Centro Cultural de la Villa de Agaete.
Colaboran:
Centro de Estudios Genealógicos Marqués de Acialcázar
Instituto de Estudios Históricos Rey Fernando Guanarteme
Genealogías Canarias.


HOMENAJE A FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT EN LA RSEAPGC

$
0
0

 
En el centenario del fallecimiento erudito Fernández de Bethencourt, dentro de las actividades de 2016 Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt, la Real Sociedad Económica del País de Gran Canaria, en colaboración con Genealogías Canarias, el Instituto de Estudios Históricos Rey Fernando Guanarteme y el Centro de Estudios Genealógicos Marqués de Acialcázar, el 7 de abril celebraron un Homenaje en el que intervinieron: D. Miguel Rodríguez Díaz de Quintana, D. Juan Gómez-Pamo Guerra del Rio y D. Rafael Rodríguez de Castro; presentado por D. Tomás Van de Walle de Sotomayor marqués de Guisla-Ghiselin, director de la RSEAPGC.
Puedes visualizarlo en el siguiente enlace:


OFICIOS Y GENEALOGÍA EN TEROR

$
0
0


Ponencia de José Luis Yánez Rodríguez, cronista oficial de la villa de Teror, titulada: "Oficios y genealogía en Teror", en el II Encuentro de Genealogía de Gran Canaria, el 18 noviembre de 2015, organizado por la RSEAPGC y Genealogías Canarias.


 

ASCENDENCIA GALLEGA: LOS TRAVIESO DE GRAN CANARIA (Y NOTAS SOBRE EL ORIGEN DE LOS APELLIDOS MONTESDEOCA Y BAUTISTA EN EL NORTE DE LA ISLA)

$
0
0
JUAN R. GARCÍA TORRES
FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA





ANTECEDENTES
FERNÁN RODRÍGUEZ, GALLEGO, Y ELVIRA FERNÁNDEZ
En la obra Primeros pobladores de Las Palmas de Manuel Lobo y Benedicta Rivero encontramos una referencia directa a nuestro personaje primigenio:
“Los gallegos se dedicaban preferentemente a la agricultura y ganadería y entre ellos destaca Fernán Rodríguez, presente en Las Palmas desde 1501. Se dedica al transporte tanto de leña para nutrir los ingenios como de azúcar que lleva al puerto y con el numerario obtenido de la venta del azúcar que le correspondía como salario compraba ropas, cereales y en alguna ocasión hasta un esclavillo para que le ayudara en sus tareas”.
En el libro 1º de Bautismos de Las Palmas aparece un Fernán Rodríguez casado con Inés Yanes teniendo hijos: en 1505, Beatriz, y en 1506, Juan. Podrían ser estos quizás los hijos de un primer matrimonio de Fernán.
(Hay en la isla otro Fernán Rodríguez en estas fechas que es curtidor,  natural de Sevilla, casado con Mencía López, natural de Béjar. El nuestro sin embargo es cortador y como tal aparece citado en el artículo Las Palmas en 1524: hechicería y sexualidad  de Francisco Fajardo Spínola.)
FERNÁN RGUEZ EN LOS PROTOCOLOS DE CRISTÓBAL DE SAN CLEMENTE
7 de enero de 1518
“Fernando Rodríguez, gallego, vecino, reconoce deber a Alonso de Illescas mercader, vecino, ausente, 12 arrobas de azúcar blanco y lealdado que le compró. A pagar en mayo próximo. Hipoteca por esta deuda unas casas que tiene en la banda de Triana que tiene por lindes casas de Diego Gozón y la calle de los herederos de Juan Gómez, carpintero. Testigos Fernán Gutiérrez, Juan Díaz y Juan Barrial, vecinos”.
10 de septiembre de 1522  Compañía
“Mª González, mujer de Juan González, difunto, vº de Gran Canaria, Fernando Rodríguez, gallego, y Valentín Estero, estantes, hacen compañía para plantar azúcar en un pedazo de tierra que María González tiene en el término de Arucas junto al albercón de Santa Gadea…María pone la tierra y la planta de caña, Fernando Rodríguez 3 horas de agua de cada año según se reparten en el heredamiento de Firgas que son dos días y una noche o dos noches y un día, una azada de agua, Valentín Estero se compromete a trabajar la tierra. Hacen la compañía por tiempo de 6 años o 3 esquilmos que se comienzan a contar en mayo en que se planta la caña”.

UN HALLAZGO EXTRAORDINARIO
Pocas veces se tiene la suerte de encontrar un documento del siglo XVI con tal cantidad de información genealógica que puede resolver en un santiamén inquisitorial toda una estirpe. El hallazgo es obra de Juan Ramón García Torres como resultado de sus pesquisas tras conocer ciertas testificaciones realizadas ante Hurtado de Gaviria en 1606 después de que el inquisidor ordenara la publicación de un edicto en el que imponía la excomunión a los que no declarasen las cosas impías de las que hubieran sido testigos. Esta es la declaración que sirvió a Juan Ramón de punto de partida:
“En la villa de La Vega a 3 de noviembre de 1606 Juan Gil vecino de Teror en El Palmar (de 30 años) labrador ... Preguntado si sabe la causa por la que ha sido llamado a este Santo Oficio dijo que presume haber sido llamado para que declare ciertas palabras que oyó a Gonzalo Álvarez y fueron que estando el susodicho y este testigo y Diego Hernández y Alonso Naranjo y Juana Traviesa en casa de la susodicha en una trasquila, no sabe a qué propósito el dicho Gonzalo Álvarez dijo que en Dios creía pero no creía en los santos y los que estaban presentes se lo reprendieron y con todo eso se volvió a afirmar en lo que había dicho y esto es lo que sabe...”
El siguiente paso  de nuestro pesquisidor fue buscar en los archivos del Museo Canario el proceso seguido contra  Gonzalo Álvarez. Este es el extracto del hallazgo:
ES 35001AMC/INQ 145.003
PROCESO CRIMINAL CONTRA GONZALO ÁLVAREZ VECINO DE TEROR POR PRONUNCIAR PROPOSICIONES ERRÓNEAS (19 octubre de 1606-13 de junio de 1608)
GENEALOGÍA QUE DECLARA ANTE EL INQUISIDOR:
PADRES Y ABUELOS DEL CONFESANTE
TÍOS (HERMANOS DE PADRE)
-Baltasar González, labrador, vecino de Terore, hombre mayor, casado que fue con Ana Sánchez, difunta.
-Aldonza Báez, difunta, casada que fue con Francisco Báez, vecinos de Terore.
-Beatriz Alonso, difunta, casada que fue con Cristóbal Martín, vecino que fue de Guía.
-Estebanía Traviesa, difunta, casada que fue con Francisco Rodríguez Morana en Telde, difunto.
-Justa de Santa Mª, difunta, casada que fue con Domingo López, vecino de Arucas, difunto.
-Rufina Traviesa, difunta, que fue casada con Pedro López, labrador que vive en Arucas.
-Juliana Traviesa, viuda de Lorenzo Ramos, difunto, de más de 40 años que vive en Terore.
-Agustina Báez que vive en esta ciudad y fue casada dos o tres veces que no se acuerda este confesante de los nombres de los maridos sino del postrero que se llama Juan Ángel Vera, extranjero y sastre, y murió en Las Indias.
TÍOS (HERMANOS DE MADRE)
-Inés Rodríguez difunta que fue casada con Melchor Rodríguez, labrador vecino de Arucas y es difunto.
Y no conoce otros tíos por esta línea si no es a Gaspar de Ayala, Regidor que fue, hermano de Margarita Rodríguez, abuela materna de este confesante.
HIJOS DE BALTASAR GONZÁLEZ, SU TÍO PATERNO
-María Traviesa de 30 años y más, casada con Juan de Arencibia vecinos de Terore y labrador.
-Baltasar González, labrador, de 28 años, que vive en Terore, que fue casado con una hermana de Blas González, cerero, y vecino de esta ciudad y que es difunta.
-Martín Sánchez, que murió soltero.
HIJOS DE ALDONZA BÁEZ, TÍA PATERNA
-Gabriel Báez, labrador, que vive en Las Tres Palmas, casado que ha sido dos veces, no se acuerda del nombre de la primera más de que era de La Vega y esta última entiende que se llama María Alcón.
-Beatriz Alonso, difunta, casada con Juan García labrador vecino que fue de Arucas y al presente lo es de esta ciudad.
-Marcos Báez, difunto, casado que fue en Terore, no se acuerda del nombre.
-Francisco Báez de edad de 28 años casado con Clara Suárez, labrador y vecino de Terore.
-Juliana Travieso, doncella, difunta.
HIJOS DE BEATRIZ ALONSO, TÍA PATERNA
-Juan Acedo, labrador, vecino de Guía casado con María de Ceberio.
-Hernando Acedo, casado con Luisa de Santa María, vive en esta ciudad y él ausente en Tenerife.
-María de San Juan, mujer de Juan Bautista Cigala, que vive en Las Tres Palmas,
HIJOS DE ESTEBANÍA TRAVIESA, TÍA PATERNA
-Luis, mozo soltero, lo mataron los ingleses.
-Rodrigo, de edad de 25 años, casado en Telde no sabe con quién.
HIJOS DE JUSTA DE SANTA MARÍA, TÍA PATERNA
-Baltasar González, de edad de 30 años y más casado con Juan de Montesdeoca en Arucas, labrador.
-María Traviesa de 28 años, casada con Francisco de Armas, ausente en Indias y ella vive en Moya.
-Gaspar López, de 26 años, labrador, casado con Catalina Sánchez vecinos de Arucas.
-Melchor López, soltero, de edad de 25 años, labrador.
HIJOS DE RUFINA TRAVIESO, TÍA PATERNA
-Catalina López, difunta, mujer que fue de Manuel Álvarez, labrador, que vive en Arucas.
-Beatriz Gómez de más de 30 años casada con Juan Rodríguez vecinos de Arucas, labrador.
-Mencía López, doncella de de 30 años.
-Andrés López, mozo soltero de 28 años.
-Gregorio López, de 26 años.
-Domingo López, de 20 años, soltero.
-Juan, difunto, no fue casado.
HIJOS DE JULIANA TRAVIESO, TÍA PATERNA
-Antonio Lorenzo, de más de 30 años, labrador, casado con Juana Gómez vecinos de Terore.
-Juana Ramos, de 30 años, casada con Alonso Naranjo vecinos de Terore.
-Elvira Ramos difunta mujer que fue de Francisco de la Vega y natural de La Vega.
-María Traviesa, doncella de 24 años.
-Cristóbal, que murió soltero.
-Estebanía Traviesa, de 20 años, doncella.
-Bartolomé de 14 o 15 años,  que viven con  su madre.
HIJOS DE AGUSTINA BÁEZ (TÍA PATERNA)
-Fray Fagundo Méndez de la Orden del Sr. San Francisco que debe ser hijo de los primeros maridos que tuvo la dicha su tía.
-Gonzalo Álvarez, de más de 30 años, casado con Isabel Sánchez labrador vecino en El Acebuchal
-Mª de los Ángeles, doncella de edad de 30 años.
HIJOS DE INÉS RODRÍGUEZ (TÍA MATERNA)
Dijo que no sabe que tenga ninguno.
HIJOS DE GASPAR DE AYALA (TÍO ABUELO POR PARTE DE MADRE)
-Doña Mariana, mujer de Miguel de Mujica y primero casada con Juan Augustín (¿Mayorazgo?) de Telde.
-María de San Augustín, monja profesa en el convento de esta ciudad.
-Pedro de Ayala, casado con doña Juana, hermana de Antón Jover.
HIJOS DE MARÍA TRAVIESA
Dijo que tiene algunos niños que el uno se llama Miguel y el otro Alonso que todos son pequeños y no sabe los nombres de los otros.
HIJOS DE BALTASAR GLEZ
Dijo que no tiene ninguno
HIJOS DE GABRIEL BÁEZ
Dijo que la primera mujer no le conoce ninguno aunque sabe que los tiene y están con su abuelo en Telde y que de María Alcón con quien está casado al presente tiene dos hijos muchachos que el uno se llama Francisco y otro Andrés y aunque entiende que tiene otros, no los conoce.
HIJOS DE BEATRIZ ALONSO
Dijo que tuvo algunos y que se murieron niños.
HIJOS DE MARCOS BÁEZ
Dijo que tiene uno o dos niños pero  no sabe los nombres
HIJOS  DE FRANCISCO BÁEZ
Dijo que tiene una niña pequeña y que no sabe el nombre.
HIJOS DE JUAN ACEDO
-Ana de Santiago, doncella de 24
-María, de 16 años, doncella.
-Juan, de poca edad.
-Catalina, de poca edad.
-Y un niño pequeño llamado Juan.
HIJOS DE HERNANDO ACEDO
-Felipe de Santiago, músico, casado con Leandra Venegas, vecinos de esta ciudad.
-Cosme de Santa Mª, estudiante y ausente en España.
-Fray Mateos de la Orden de Santo Domingo
HIJOS DE Mª DE SAN JUAN
-Beatriz Alonso, doncella de 24
-Bernardino, de 15 años
HIJOS DE RODRIGO TRAVIESO
Dijo que no sabe que los tenga
HIJOS DE BALTASR GONZÁLEZ
Dijo que tiene algunos y que no sabe sus nombres.
HIJOS DE Mª TRAVIESA
Domingo, de 8 o 9 años y otros que no sabe sus nombres.
HIJOS DE GASPAR LÓPEZ
Justa de 7 u 8 años y tiene otros que no sabe sus nombres.
HIJOS DE CATALINA LÓPEZ
-María Traviesa de 20 años, doncella.
-Vicente de 15 años, muchacho.
HIJAS DE BEATRIZ GÓMEZ
Catalina, Francisco, Melchor, niños
HIJOS DE ANTONIO LORENZO
Beatriz, Juliana y Lorenzo, niños.
HIJOS DE JUANA RAMOS
Constanza, de 4 años,  y Domingo, de 3 años.
HIJOS DE ELVIRA RAMOS
Dijo que no tiene ninguno.
HIJOS DE GONZALO ÁLVAREZ
Juana de 10 y otra niña menor que no sabe su nombre.
HIJOS DE DOÑA MARIANA Y DE DON AGUSTÍN
-Ana, de 15 años, doncella.
HIJOS  DE LA DICHA CON MIGUEL DE MUJICA
Dijo que no tiene ninguno
HIJOS DE PEDRO DE AYALA
Gaspar, de 5 o 6,  Jerónima y otro niño, menores.
HIJOS DE FELIPE DE SANTIAGO
Dijo que no tiene hijos
HERMANOS DE ESTE CONFESANTE
-Francisco Baptista, difunto, que murió soltero.
-Margarita Rodríguez casada con Diego de Montesdeoca, labrador, vecinos de Arucas.
-Juana Baptista, doncella de 15 años.
-Gaspar, soltero de 20 años
MUJER E HIJOS DEL CONFESANTE
Dijo que es casado con María Jiménez, hija de Pedro González, difunto, vecino de Firgas y que va para tres años que se casó con ella y que tiene un niño de edad de dos años que se llama Joan.
OTROS DATOS DEL EXPEDIENTE
El confesante es nacido en Arucas en donde dicen El Repartimiento. Bautizado y confirmado en Arucas. Trabaja en la labranza. Ahora es vecino de Firgas, antes lo fue de Terore. Sabe leer en un libro que se lo enseñó un maestro de esta ciudad en casa de su tío Gaspar de Ayala pero no sabe escribir y dice que nunca ha salido ni entrado de esta isla con ninguna persona.
Una fianza le va a permitir salir de la cárcel avanzado el proceso. Los fiadores son
Tribunal de la inquisición
Bartolomé González, vecino de los Granadillares, y Constantín González. El convenio incluye, si huye, 100 ducados de 11 reales para gastos del Santo Oficio. En tanto se dicta sentencia que finalmente no afectará a sus deudos y herederos, se requisan sus bienes y se nombra a un responsable de los mismos: su cuñado Sebastián Marrero.
Inventario de sus bienes:
Pedro Sarmiento el alguacil mayor del Santo Oficio tiene en depósito de Gregorio Álvarez una casa en la que al presente vive, 4 fanegadas de sembradura en el Repartimiento de Firgas en compañía de Baltasar Marrero y una vaca llamada Albahaca en poder de Roque Martín de Guía y una caja, dos sillas, dos colchones, tres sábanas blancas y una mesa con sus bancos y una espada en poder de Diego Montesdeoca, prestada, todo lo cual se depositará en Sebastián Marrero vecino del lugar el cual dijo se daba y dio por entregado de ellos y no los daba a ninguna persona sin licencia y mandado de los señores inquisidores y lo firmó de su nombre. Testigos: Juan Suárez Figueroa, Juan González, Domingo González, vecinos de la isla.
En  noviembre de 1608 se dicta sentencia  de la que resulta el pago de 8 ducados y una penitencia que ha de cumplir con soga al pescuezo y una vela encendida en las manos.

LA IMPOSICIÓN DE NOMBRES A LOS HIJOS EN EL SIGLO XVI
Ya que contamos con una relación completa de hermanos, padres y abuelos del confesante, Gonzalo Álvarez, nos podemos plantear  la formulación de  una hipótesis de trabajo sobre imposición de nombres y apellidos en las familias galaico-portuguesas del XVI: son los abuelos los que deciden la onomástica de sus nietos en un orden que depende del sexo del nacido. Curiosa costumbre sobre la que vamos a hacer comprobaciones:
El primer hermano de Gonzalo, fallecido soltero, se llamaba Francisco, como su abuelo materno. La segunda parece ser Margarita Rodríguez, mi ancestro directo cuyo nombre y apellido coinciden con el de su abuela materna. Gonzalo Álvarez el confesante es el tercero de la serie por edad y recibe el nombre y apellido de su abuelo paterno. A partir de aquí siguiendo esta lógica entendemos que antes del nacimiento de Juana Baptista debió haber nacido una María llamada como su abuela paterna que pudo fallecer de pupila. Observamos por otra parte que a partir del cuarto hijo ya pueden entrar a jugar otros nombres más aleatorios como el de Juana y Gaspar que quizá coincidan con los nombres de sus respectivos padrinos. Recordemos que el tío abuelo materno de Gonzalo es Gaspar de Ayala a quien este tiene en gran estima porque en su casa aprendió a leer.
Gonzalo Álvarez, el confesante, declara que lleva tres años de  casado  y tiene un hijo de dos años llamado Juan, llamado como el abuelo paterno del niño. Una forma de completar la verificación de esta hipótesis sería la de conocer el resto de la prole de Gonzalo, si es que  tuvo más descendencia después de su salida de la cárcel en 1607, una vez pagada la fianza. Si estuviéramos en lo cierto su siguiente hijo varón debió llamarse Pedro, como su abuelo materno, y la primera niña o la segunda pues nos falta un dato podría llamarse María, como su abuela paterna.

CONTINUIDAD DEL LINAJE
GONZALO ÁLVAREZ Y MARÍA TRAVIESO
12 de mayo 1532 Carta de dote
“Fernando Rodríguez, gallego, y Elvira Fernández, su mujer, vecinos de la villa de Arucas, otorgan a Gonzalo Álvarez, portugués, estante en esta isla, por casamiento y como dote con su hija María Traviesa 150 doblas de oro en esta forma: unas casas en Arucas que fueron de Rui Gallego en que habitan al presente con su cocina y corral y un pedazo de solar que lindan de una parte con casas de Fernando Rodríguez y de la otra con casas de Fernando Bachicao apreciadas en 30 doblas de oro más unas cuevas que están encima de las casas además de una …y una esclavilla negra llamada Lusema de 4 años y un esclavillo también negro de nombre Bernardino, de 8 a 10 años, apreciados en 20 doblas y lo demás que sotura en vestidos ropas y piezas de vestir valorados por personas entendidas en todo esto que se obligan a entregarlo desde la fecha de esta carta como dote de dicha María Traviesa. Testigos: Pedro González, Domingos González y Pedro Báez vecinos de la villa de Arucas. Fdo: Fernán Rodríguez. Por no saber Elvira Fernández, Domingos González, vecinos y estantes.
12 de mayo de 1532 Carta de arras
“Gonzalo Álvarez, portugués, otorga carta de arras a María Traviesa de 60 doblas de oro. Testigo: Pedro González”.
12 de mayo de 1532 Venta
“Fernando Rodríguez, gallego, otorga carta de venta a Gonzalo Álvarez de una suerte de cañaveral. Testigo: Domingo González”.

SOBRE EL ORIGEN REMOTO  DEL APELLIDO TRAVIESO
Por lo que hemos podido escudriñar en la Red el apellido se escribiría originalmente como Traveso o Travesso y tendría un origen toponímico.  En el noménclator de la web de la Junta de Galicia aparecen ejemplos dicho topónimo en municipios  de Lugo (Vilalba),  Orense  (Castrelo do Miño) y La Coruña (Santa Comba).
Como simple curiosidad pues la coincidencia resulta demasiado sorprendente como para darle crédito diremos que hemos localizado en la Red un documento antiguo de 1431 en el que se cita a un personaje que podría ser un ascendiente directo de nuestro Fernán Rodríguez:
“Sabem quantos esta carta vieren como eu, Diego Mendes, notario de Lugo, vendo a vos
Cultivo de caña en Arucas. Foto: grancanaria.com
Fernán Rodrigues Traveso et a vossa muller, Mayor Fernandes, et a toda vosa vos por jur de erdade para senpre a mina mitade de todo o casal de Buratay que he sub signo de Santa María de Bobeda”
En el diccionario de Madoz se dice del término Buratay que es una aldea de España en Galicia, de la provincia de Lugo. Y que es una de las que componen la parroquia de Santa María de Bóveda.
Tres años antes en 1428 en otro documento otorgado en Deade (Pantón) localidad situada en la misma comarca lucense de Tierra de Lemos se dice: “et topan ena casa en que morou Rodrigo Afonso de San Juliao en que ora mora Fernán Rodrigues Trabeso”
LA DESCENDENCIA DE GONZALO ÁLVAREZ Y MARÍA TRAVIESO
Libros de bautismo de El Sagrario
22 enero de 1538 Libro 2 “Bautizo de Beatriz, hija de Gonzalo Álvarez y María Traviesa. Padrino: Bernardino de Besa y su madre”
12 septiembre 1542 Libro 2 “Bautizo de Agustina, hija de Gonzalo Álvarez y María Travieso. Padrinos Antonio Díaz capellán y Rodrigo de Quesada, mercader”
26 de marzo de 1548 Libro 3 “Bautizo de Juan, hijo de Gonzalo Álvarez, labrador, y de María Traviesa. Padrinos: el Canónigo Juan Salvago y doña María de Herrera”.
1550 Libro 3 “Bautizo de las hermanas Justa y Rufina”
Hemos de suponer que otros hermanos de Juan Bautista que eran difuntos o de mucha edad cuando tuvo lugar la confesión (caso de Baltasar González y Aldonza Báez) nacieron antes que Beatriz entre el año 32 en que se casan sus padres y el año 38 en que nace Beatriz, sin embargo no constan tales bautismos en la Iglesia de El Sagrario. La declaración del confesante nos señala que en 1606 Baltasar y Aldonza tenían hijos de más de 30 años lo que viene a confirmarnos que ellos debían estar por encima de los 60, es decir que habían nacido efectivamente a mediados de los 30. Juliana nació con posterioridad al año 50 en que nacen sus hermanas gemelas pues tiene sus primeros hijos en 1570. Asimismo ha de haber nacido con posterioridad  a ese año Estebanía pues tiene a su hijo Rodrigo en 1582.
JUAN BAUTISTA TRAVIESO Y MARÍA DEL CASTILLO
Juan Bautista Travieso, nacido en Arucas y bautizado en Las Palmas en 1548 casó con María del Castillo, hija de Francisco Salguero y Margarita Rodríguez de Ayala
Hijos  de este matrimonio:
-Gonzalo Álvarez, el confesante, que por su nombre debe ser el primogénito de los varones, casado con María Jiménez, con descendencia.
-Gaspar nacido en 1587
-Juana Baptista nacida en 1592
-Margarita Rodríguez por quien sigue la línea
-Francisco Baptista
MARGARITA RODRÍGUEZ Y DIEGO MONTESDEOCA
La prueba del matrimonio de Diego y Margarita la hemos encontrado en la partida de defunción de su esposa:
Libro1-folio1: “Margarita Rodríguez, mujer de Diego Montesdeoca, falleció en Arucas en 11 de febrero de 1618 y fue enterrada en sepultura propia”.

LOS MONTESDEOCA DEL NORTE
Diego Montesdeoca, el esposo de Margarita Travieso, como puede verse en el cuadro,  es hijo de Francisco Montesdeoca y Ana de Miguel y nieto de Maese Antonio Montedoca, cajero de profesión,  personaje del que conocemos su ADN del cromosoma Y por ser el  primero de los ascendientes conocidos en la isla de los varones de apellido Bautista en mi linaje. El análisis de ADN de un primo hermano por parte de mi madre arroja el siguiente resultado: Haplotipo J2, también llamado gen fenicio. Estudios recientes, según 23andMe.com, señalan que una rama específica de J2 puede encontrarse en la actualidad entre los descendientes de los antiguos fenicios una civilización que estableció colonias en Tunicia, Sicilia y el sur de Iberia desde principios del primer milenio antes de Cristo.
El personaje llamado Maese Antonio Montesdeoca, el situado en el segundo peldaño, creemos que puede ser, de esto no tenemos pruebas, un hijo del conquistador de mismo nombre que cita Cebrián Latasa en su obra magna:
Antonio Montesdeoca:
“Jinete de la compañía de Castillo. Viana, Poema… Canto XI. Conquistador de Gran Canaria y Tenerife. Natural de Villanueva del Bierzo. Casó Con Ana de Tamariz, hija de Antonio Luis de Tamariz y de Luisa Fernández de Vera. Estos datos proceden de los genealogistas locales. No consta su condición de conquistador”
Sin embargo Manuel Lobo sí lo incluye en su nómina de conquistadores (La conquista de Gran Canaria) indicándonos que es originario de León.
En el siguiente documento tenemos la prueba de entronque entre el cajero (carpintero de cajas, es decir, de piezas de madera donde se encajan la nuez de la ballesta o el caño y la llave de la espingarda o del arcabuz) Maese Antonio y su hijo Francisco de Montesdeoca, por quien sigue la línea:
Las Palmas 20 de enero de 1559    Pr 788 F301 escribano Alonso Hernández
“Reconocimiento de deuda que Francisco de Montesdeoca, hijo de Vicente de Montedoca, y Francisco de Talavera hijo de Domingos Fernández hacen a Hernán Pérez de Loya vecino, mercader, presente, de 12500 mrs. por razón de que  los salen y quedan a pagar por Francisco de Montedoca, hijo de maese Antonio, cajero. A pagar la mitad el día de San Juan de Junio de este año y el resto pasado un año de la primera paga. Testigos Ángel de Betancor, Fco Hquez Melián y Bernardino de San Juan vecinos y estantes”. Por no saber, Francisco Henríquez Melián”
SALVADOR MONTESDEOCA Y LEONOR DÍAZ
Su matrimonio tuvo lugar en 20 noviembre de  1621 según en la Iª de San Juan Bautista Arucas, Libro 2 - Folio 11 - Año 1621
Dicho libro 2 de matrimonios de Arucas no está disponible al público para su consulta. Los datos fueron recogidos del índice que se encuentra en el archivo parroquial.
JOAN BAPTISTA MONTESDEOCA Y MARÍA DE SAN DIEGO
Partida de Bautismo Iglesia San Juan Bautista de Arucas, Libro 2 - Folio 62 - Año 1626. Juan: "Hijo legítimo de Salvador de Montesdeoca y su mujer Leonor Díaz fue bautizado en primero de octubre de este año de 1626 años, bauticele yo el cura de Arucas, tiene óleo y crisma fue su padrino el padre fray Francisco López y lo firmé de mi nombre”.  Juan Pérez de Ojeda.
La esposa de Juan Baptista Montesdeoca, llamada María de San Diego,nació en Guía en 1625 y es hija de Juan González de San Martín y de María Lorenzo
No hemos localizado la partida de su matrimonio con María de San Diego pero no cabe duda alguna acerca de su existencia como puede comprobarse en la partida de su hijo Salvador por quien sigue la línea.
SALVADOR BAPTISTA Y Mª DEL PINO TORRES PALOMARES
Partida de Matrimonio Iglesia de Santa María de Guía, Libro 2 - Folio 10 - Año 1671. "En la villa de Guía en 27 días del mes de septiembre de 1671 años yo el Br. Constantino Acedo y Peloz Beneficiado de la Iglesia de dicha villa casé habiendo precedido las amonestaciones dispuestas por el Santo Concilio Tridentino y no habiendo resultado impedimento alguno a Salvador de Montesdeoca, hijo legítimo de Joan Baptista Montesdeoca y de María de San Diego, y a María del Pino, hija legítima de Pedro de Torres y de Ángela Palomares, unos y otros vecinos de Guía, siendo testigos el capitán D. Francisco del Castillo Sopranis, el capitán D. Fernando de Quintana y D. Félix Espino, vecinos asimismo de Guía”.    
Br. Constantino Acedo Peloz.
MATÍAS DE TORRES Y JUANA GÓMEZ GORDILLO
(Una bonita historia  de amor)
Partida de Matrimonio Iglesia de Santa María de Guía, Libro 3 - Folio 100 vto y 101.
"En la villa de Guía en 6 de febrero de 1701 años yo el Br. Constantino Acedo Beneficiado de dicha villa case a Mathías de Torres hijo legítimo de Salvador Batista y de María del Pino vecinos de esta villa con Juana Gómez hija legítima de Joseph Gordillo y de Jacinta de la Peña, vecinos de esta villa, habiéndose amonestado en esta iglesia en tres días festivos de precepto conforme al Santo Concilio de Trento y no habiendo resultado más impedimento que el ser parientes por consanguinidad en cuarto grado en el cual están dispensados por su Señoria Ilustrísima el Sr. Bernardo de Vicuña  y Suazo, obispo de estas islas en virtud de la facultad apostólica que para ello tiene su Señoria Ilustrísima por este quinquenio por causas del notable descrédito y disfame que a la contrayente se le ha seguido de haberse tratado y comunicado con fracuencia y a todas horas con el contrayente y de haber dejado la casa de sus padres y pedido ante la Justisia Real por su marido al contrayente de modo que de no casarse con él seguiria expuesta a los peligros del Mundo y certifico que los contrayentes han cumplido las penitencias que por su Ilustrisima se les impuso, fueron testigos Jerónimo López, Andrés de Silva y Cosme de Santa María vecinos de esta villa. Están celados, doy fe”. Br. Constantino Acedo Pelos."
SALVADOR BAUTISTA Y Mª JESÚS ALMEIDA
DECLARACION DE LOS BIENES DE SALVADOR BAUTISTA
Ante Miguel Álvarez Oramas Legajo: 2419  Folio: 283 Vto.  A 20 de octubre de 1774
En la villa de Guía a 20 de octubre de 1774 años ante mí el escribano público y testigos infrascritos pareció presente Salvador Bautista vecino de esta dicha villa, que de su conocimiento doy fe; y Dijo, que por cuanto por fallecimiento de María de Jesús su primera mujer, casó segunda vez con Margarita Gordillo de esta misma vecindad que al presente vive; y para que se tenga presente lo que trajo al matrimonio esta y no se le ponga reparo por los hijos que tuvo en la dicha su primera mujer; y que los saque, como cosa propia suya que es. Declara en descargo de su conciencia que fueron los bienes siguientes. Primeramente una cama de colgar con cuatro sábanas, mangos y sobreagua. Y dos colchones nuevos, uno listado de lana y otro blanco de paja, colcha y ruedo de borrega; cuatro almohadas de lienzo, dos listadas y dos blancas; una barra de cama; seis sábanas, fuera de las cuatro dichas, de ellas cuatro nuevas y dos usadas; tres camisas una delgada y dos de lienzo casero; con más un justillo de lo mismo, una servilleta y unas toallas todo nuevo; dos corbatillas, una fina y la otra de lienzo de a tres de plata; dos pañuelos cruzados; un jubón negro de tafetán; un justillo azul de espumillón y un delantal nuevo; un jubón de color en corte; medias y calcetas nuevas; dos pares de enaguas, nuevas una de campanilla y las otras de género, otras enaguas blancas nuevas; una pila de estilar con sus armas nuevas, talla y vaso; un telar con todos sus pertrechos; unos sarcillos de acebuche con catorce perlas finas; unas charcateras de plata; una caja de madera de la tierra nueva con su escudo; un buferito pequeño y un taburete de madera de la tierra; dos libras de lino y una de esto por tres libras y media de cordón para principio de otra colcha; una hechura de un Crucifijo; dos estampas de cartón con sus marcos y una imagen de Nuestra Señora de los Dolores sin bastidores, un manto y saya nuevo y otro usado de anascote y una mantilla nueva de bayeta nueva con sus cintas todo lo cual trajo la dicha su segunda mujer al matrimonio y por lo mismo lo ha de sacar después que se haya disuelto, por ser bienes suyos propios aunque se hayan consumido sin que dichos sus hijos tengan derecho a oponerse a ello, por constarle como le consta a este declarante ser,
Firma de Salvador Bautista. AHPLP
como va referido, caudal de la dicha su mujer y hace esta declaración bien entendido de su derecho y del que en este caso le pertenece; y que se guarde en todo y por todo como si fuera última voluntad suya, sin ir ni venir ninguno de dichos sus hijos contra su tenor y forma; y para que así se cumplirá se obliga según y como por derecho puede y debe con renunciación de todas las leyes que le favorecen; Y así lo dijo otorgó y firmó, siendo testigos Bartolomé Miranda, Pedro Aríñez y Tomás Vicente Álvarez de Vega, vecinos de esta villa y la de Gáldar.”
Fdo: Salvador Bautista         Ante mí: Miguel Álvarez de Oramas. Escribano Público.
LA PARTIDA DE SU PRIMER MATRIMONIO
Iglesia de Santa María de Guía, Libro 4 - Folio 93 vto - Año 1726
"En 2 de mayo de 1726 años Yo Juan Antonio Cardo de Valencia Beneficiado de la Parroquia de Santa María de esta villa de Guía habiendo precedido las tres amonestaciones que dispone el Santo Concilio de Trento en dicha Iglesia en tres días festivos y no habiendo resultado impedimento alguno sino el de tercero con quarto grado de consanguinidad por una línea, del de cuarto de consanguinidad por otra, en que fueron dispensados por su Ilustrísima el obispo mi Señor en Santa Cruz de Tenerife a 10 de abril de 1726 años, casé in facie ecclesiae por palabras de presente y velé a Salvador Bautista, hijo legítimo de Mathías de Torres y Juana Gómez, con María de Almeida, hija natural de María de Jesús y de Manuel Castellano, que se dice fue su padre, vecinos de esta dicha villa, siendo testigos Diego Castellano, Diego Tabares y Carlos Trujillo vecinos de dicha villa y lo firmé”.  Francisco Bernardo Guerra
Nota: Al margen izquierdo de esta partida hay una reseña que dice:
“Por mandato del Sr. Provisor de este Obispado se ha puesto entre líneas el apellido de Torres según se halla ordenado en auto de 28 de mayo de 1864 según consta de la copia que se conserva en este archivo y en el libro de informaciones. Villa de Guía a 30 de mayo de 1864”.  Francisco Bernardo Guerra.

PESQUISAS EN EL ARCHIVO DIOCESANO SOBRE EL SIGNIFICADO DE LA NOTA DEL PROVISOR 
AÑO DE 1864 EXPEDIENTE PROMOVIDO POR D. SALVADOR DE TORRES VECINO DE ESTA CIUDAD, CONOCIDO VULGARMENTE POR EL APELLIDO DE BAUTISTA PARA QUE SE SALVEN LOS ERRORES COMETIDOS
Sr. provisor Vicario de este Obispado:
“D. Salvador de Torres, conocido vulgarmente por el apellido de Bautista, vecino  de esta Ciudad ante V.S. con la consideración debida expongo: que según consta de la partida que acompaño, marcada con el número 1º que es la bautismo de mi abuelo, el verdadero apellido que me corresponde es el de Torres según se desprende de la misma; pero en el año 1726 al verificarse el casamiento de mi referido abuelo `por un error sin duda originado de confundir el apellido paterno con el del padrino que lo fue José Bautista, se dio asiento a la partida que es la marcada con el nº 2 llamando a mi dicho abuelo Bautista y considerándolo como hijo legítimo de Matías de Torres, sin que entonces chocara la visible contradicción que resultaba entre los dos apellidos; ya en el año de 1770 al dar asiento a la partida de casamiento de mis padres, nº 3, que lo era Antonio de Torres como hijo de Salvador y este de Matías de Torres no figura para nada este apellido y solo se usa el de Bautista.  Como este error pudiera con el transcurso del tiempo producir dudas y acarrear algunos males al exponente y a sus hijos si tuvieran que ventilar algún asunto en juicio, he creído de mi deber Suplicar a Vs se sirva examinar con detención las respectivas partidas que presento y convencido de la justicia de la reclamación mandar que por el Reverendo beneficiado de la Parroquia de Guía se ponga al margen de la partida de casamiento del abuelo y padre del que expone y en la de su bautismo correspondiente nota aclaratoria verificando la misma el Reverendo Beneficiado de la Matriz de esta Ciudad con respecto a la del casamiento del suplicante y la de bautismo de sus hijos; debiendo también llamar la atención de Vs a que en la partida de mi casamiento, nº 4, se dice que mi consorte Dª Jacinta era hija legítima de D Francisco de Matos y de Francisca Suárez, siendo así que en la de bautismo de mi referida consorte que tuvo lugar en la Villa de Arucas a 9 de mayo de 1793 consta que el verdadero nombre de su madre era el de Catalina Suárez y no el de Francisca, falta que igualmente suplico a Vs se subsane por lo que pudiere convenir. Así lo espera el suplicante de la acreditada rectitud de VS.
Las Palmas de Canarias, Mayo 23 de 1864.  Fdo: Salvador Torres
COMENTARIOS AL DOCUMENTO
-El expediente fue resuelto favorablemente por el Obispado por lo que se procede al cambio de apellido en las partidas correspondientes por Auto del  Sr Provisor de 10 de noviembre de 1864, seis meses después de iniciado el mismo.
-El apellido que realmente le hubiera correspondido si se tratase de respetar el patronímico paterno no es Torres sino Montesdeoca. Pero hay que recordar que en estos siglos no existe la regla de  dotar a los hijos con el apellido del padre por lo que es correcto a todas luces el apellido Bautista que tiene su ascendiente Salvador Bautista Montesdeoca, el casado en 1671 en Guía con María del Pino Torres Palomares.
-No tiene sentido la reclamación pues se rehúye el apellido Bautista, cuyo origen creemos que es la advocación de la Iglesia San Juan Bautista de Arucas asumido como apellido por parte de una familia con ascendientes  Montesdeoca y Travieso que vivía en dicha localidad, para tomar el apellido Torres que proviene de una línea materna varias generaciones atrás.
- El verdadero motivo para incoar el expediente es en nuestra opinión que el hijo del reclamante Francisco Torres Bautista se casa en Las Palmas en 1854, diez años antes de la incoación del expediente, con una señorita de alcurnia Dª Francisca Azopardo y Savi natural de Santa Cruz de Tenerife pero de renombrada ascendencia maltesa e italiana. Parece ser que a estos prebostes el apellido Bautista no les resulta decoroso sino vulgar y buscan entonces la manera de sustituirlo por un apellido más apropiado y el de Torres
C. Los Malteses, 1864. LPGC. FEDAC
parece que les resulta más aristocrático.
- Quedan por tanto resueltas  nuestras dudas acerca del motivo de la nota al margen de la partida de matrimonio de mis ancestros Salvador Bautista y María Jesús Almeida pues esta no se relaciona con ninguna investigación de la Inquisición, como habíamos pensado, sino con unos afanes de grandeza de determinados descendientes suyos  para los que el apellido Bautista resulta vulgar.
-Veamos a continuación para terminar el artículo  un cuadro sinóptico  explicativo de la descendencia de Antonio Torres quien es hermano del primer Francisco Bautista de mi linaje, el casado en Guía en 1747 con María Sarmiento. En las partidas de matrimonio de este linaje colateral que vamos a describir, consta efectivamente una nota al margen donde dice: “Se rectifica el apellido Bautista por Torres por Auto del Sr. Provisor en 10 de Noviembre de 1864”

DESCENDENCIA DE ANTONIO TORRES BAUTISTA HIJO DE SALVADOR TORRES BAUTISTA Y DE MARIA DE ALMEIDA

I. Antonio Torres Bautista. Se bautizó en la villa de Guía en 1748 (Libro 9 – Folio 187). Celebró matrimonio con María Galván de Silva hija de Vicente Galván y Beatriz de Silva el 18 de Marzo de 1770 en la Iglesia de la Parroquia de Santa María de Guía (Libro 5 – Folio 37 Vto ). Tuvieron entre otros hijos a:
   1) Salvador Torres Bautista. Se bautizó en la villa de Guia, se apuntó por no encontrarse la partida el día 6 de Agosto de 1806 (Libro 12 – Folio 423 Vto), consta en una nota al margen que nació en 1783. Celebró matrimonio en primeras nupcias con María de la Concepción Perdomo y en segundas nupcias con Jacinta Vicenta Matos Suarez hija de Francisco de Matos y de Catalina Suarez el 19 de Enero de 1824 en la Iglesia de San Agustín (Libro 13 – Folio 40). Tuvieron entre otros hijos a:
     a) Francisco Torres Bautista. Celebró matrimonio con Francisca Azopardo y Savi natural de Santa Cruz de Tenerife hija del comerciante maltés  Gabriel Azopardo y de Francisca Savi en la Iglesia de San Francisco de Asís el 21 de Agosto de 1854 (Libro 3 – Folio 33 Vto).



MUJERES Y MADRES. UNA GENEALOGÍA “FEMENILINEAL”

$
0
0
EUGENIO EGEA MOLINA


En el Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt (1850-1916)

a. CONSIDERACIONES INTRODUCTORIAS
Este trabajo discurre a través de una descripción genealógica de once generaciones de
Mujeres lavando la ropa. FEDAC
mujeres, en un recorrido que va de madres a hijas, partiendo de nuestra undécima abuela tratamos de las madres de nuestras madres.  Mujeres anónimas que la memoria y el tiempo las ha ido difuminando y apartando, pero indefectiblemente son parte de nuestra esencia y de nuestra historia, de lo que nos rodea y de numerosos descendientes actuales, arrancando del siglo XVII hasta acotar el XX, en la dirección de lo que el Dr. Sánchez Molina (2014) ha apuntado en su trabajo Antepasados y gente sin historia.
En la ciencia genealógica, tradicionalmente se siguen los linajes por varonía (ascendente: hijo, padre, abuelo... o descendente: abuelo, padre, hijo), aquí vamos a seguir nuestra genealogía matrilineal, por línea mujer o como hemos osado en titular como feminilineal, tradicionalmente denominada como de ombligo o cognaticia.
Aunque escasos son los datos que sobre las mismas podemos aportar, si podemos identificarlas y conocer algo de sus circunstancias, sobre todo de sus matrimonios y descendencia, además del lugar en que vivieron.
El marco geográfico se mantendrá estable, desde principios de 1600 hasta final de 1900, enclavándose la villa de Moya en la isla de Gran Canaria. De allí serán naturales las féminas y allí formarán sus familias. En el caso de los maridos, unos serán del lugar, y otros naturales u oriundos de pueblos aledaños: Teror, Arucas, Firgas y Guía. La residencia y la vida familiar se desarrolló en la villa moyense, en un entorno rural marcado por una
Isla de Gran Canaria
economía eminentemente agrícola.
En cuanto al marco geográfico, el alférez mayor Pedro Agustín del Castillo, nuestro ilustre e ilustrado antepasado, en el año 1686, en su  Descripció de las Yslas de Canaria, refirió lo siguiente acerca del lugar:
(Moya) Tiene iglesia parroquial con su cura i mas de 60 vesinos (familias) y alcalde: es lugar muy fresco por estar al lado de la muy selebre montaña de oramas (Doramas)
Por su parte, los roles de género estaban claramente definidos y encorsetados, desde la apariencia física y la vestimenta a las actitudes y los comportamientos, explícitamente patriarcales.
El matrimonio, como institución fundamental, y previo  al mismo, mediante dotes que daban sus padresalas mujeres para su mantenimiento, de manera que de la dependencia paterna se pasaba a la sujeción del marido. 
La endogamia se convierte en una constante, como apreciaremos en esta descripción genealógica.
Por su parte, la dedicación exclusiva de la mujer se encontraba en la procreación, el cuidado de la familia y las actividades relacionadas con el hogar.
Como ilustración de esto, en documentos del siglo XX, aparece en lo que respecta a la actividad femenina, aquello de tareas propias de su sexo, mientras que en hombres se definían como labrador, zapatero, carpintero..., así como la ocupación exclusiva de cargos sociales dentro de la comunidad. Más tarde, a mediados del siglo pasado -no hace tantos años- puede leerse aquel eufemismo de ama de casa. De esta manera, todo giraba en torno a la casa, dentropara la mujer y fuera para el hombre.
Pasamos a la descripción descendente, siguiendo ordinalmente de madres a hijas, que en su vertiente genética, el ADN mitocondrial, transmitido por ellas, está clasificado como haplogrupo H3, originario de Oriente próximo y medio; en la actualidad distribuido por Europa y el Magreb.

b. DESCRIPCIÓN GENEALÓGICA FEMINILINEAL
1. JUANA GONZÁLEZ [1], esta es la antepasada más remota que, hasta el momento, hemos podido hallar. Su referencia nos viene por la inscripción de casamiento de su hija, en la primera veintena de 1600, donde se le menciona como madre, así como la de su marido Andrés Díaz. Por el cotejo de fechas, se puede deducir que los natalicios de Juana y su marido tuvieron que acontecer en el tránsito de finales del XVI o inicios del XVII, desarrollando su vida en el lugar de Moya.
[1] La mayoría de los apellidos aquí tratados y sus primeros portadores en la villa moyense, se pueden consultar en el artículo Apellidos de antiguos pobladores de Moya. Siglos XVI-XVIII(2013).

2. EUFRASIA MIRANDA, hija de Juana González y de Andrés Díaz, como mencionamos arriba. Contrajo nupcias en el templo moyense de Ntra. Sra. de la Candelaria, el 27 de mayo del año 1652, con Francisco Gil (Mentado), hijo de Juan Gil y de María Rodríguez
[2], originario de Teror, descendiente de los pobladores castellanos Juan Gil y Juana Pulido que llegaron a la isla alrededor de 1550, cuya nieta Catalina Gil casó con Francisco Hernández Mentado, abuelos paternos de Francisco Gil, posiblemente denominado por el sobrenombre Mentadopara diferenciar de otras familias Hernández terorenses. De esta forma, Mentado quedó constituido en apellido entre sus descendientes.
En el padrón de vecinos de Teror, realizado por su párroco el bachiller Juan Rivero, en el año 1595, a solicitud de la inquisición para determinar la presencia de moriscos en el lugar, quedaron anotados Francisco Hernández y su familia: franco hres/catalina xil su mujer/diego/anna/maria/franco/pedro/catalina/sus hijos. Asimismo, los padres de Catalina Gil, Bartolomé Gil y Mayor Ascanio, esta su vez hija de los vecinos de Teror Alberto Mañero y Blasina Suárez [3]. También se encuentran inscritos: brme xil/mayor descaño su mujer/juº (Juan)/Albertos/Gonzalo/maria/sus hijos/lazaro su esclabo [4]. El primero de esta familia Gil en la isla, fue el castellano Juan Gil que con su mujer Juana Pulido, padres de Bartolomé Gil, fueron vecinos de Teror, a mediados de 1500.
[2]  AHDC-PM. Libro 2 de casamientos, fol. 2
[3] AHDC-NIT fol. 7. Alberto Mañero, testamento ante Roque Loreto, en 26 septiembre 1574, casó con Blasina Suárez y tuvieron  por hijos a Ocasio, Martín, Matías, Bartolomé Mañero y Mayor Escaño mujer de Bartolomé Gil.
[4] AA. Leg. Quintana.  El esclavo Lorenzo sería de raza negra, puesto que en el padrón del cura Rivero se determina la ausencia de moriscos en Teror, como respuesta que se acompaña al final del mismo: Yo el Bher. Juº Ribero cura del lugar de terore digo que los vcos y personas supra escritos son los que en este año de noventa y cinco he empadronado paconfesar y viene a resebir los sanctos sacramentos a esta yglesia paRoquial de ntra señora del pino desde dicho lugar y en lo que toca a vssª me mandan de personas y vcos. moriscos por agora en este tiempo no los conosco ni los ay en este lugar y su termino que yo entienda y por ser ansi verdad que ffº a doce de febrero deste año de noventa y cinco.
El Bcher. Juº Ribero (rubricado y sellado).

3. FELIPA DE LA CRUZ, hija de los anteriores, matrimoniada en la parroquial de Moya, en al año 1679 [5], con Baltasar Mateo, nacido en Arucas y bautizado en su parroquia de S. Juan Bautista en 1630 [6]. Baltasar se encontraba viudo de Leonor de Armas [7], y era hijo de Salvador Mateo y de Gregoria Montesdeoca, vecinos de Arucas en el siglo XVI. La familia Mateo, cuyo primer antepasado en Gran Canaria fue Diego Mateo, ha estado apegada en Fontanales y a la fundación de la ermita de S. Bartolomé, su mujer Bernarda Trujillo [8], hija de Ibone de Armas Bethencourt y de María Trujillo, nieta paterna del conquistador Ibone de Armas, con repartimientos en Tenoya, y de Ana Perdomo, cuyo padre fue el rey de armas Juan Negrín, que llegó a las islas en el siglo XV, durante su etapa señorial. Por Bethencourt y Perdomo, tiene como ascendientes a Maciot I, familiar del conquistador normando y señor de las islas Juan de Bethencourt, y de la princesa índigena de Lanzarote Teguise, a través de su hija Inés Margarita Bethencourt y con el también normando Arriete Perdomo.
En su vertiente religiosa y social, Baltasar Mateo fue miembro destacado de la cofradía del Santísimo, siendo su mayordomo de 1666  a 1672 y en 1688 [9].
[5] AHDC-PM. Libro 2 de casamientos fol 39.
[6] AHDC-PA. Libro 2 de bautismos fol 94 vto. Su padrino fue el mercader Juan González.
[7] De Leonor de Armas fueron sus padres, los también moyenses, Lázaro de Armas e Inés Hernández, como consta en su partida inscrita en 1659 (AHDC-PM libro 2 de casamientos fol 7). Como es característico en las genealogías isleñas, la endogamia siempre está presente, y de ellos, por su hijo Feliciano Mateo y su mujer Juana Sánchez, alcanzan también a nuestra abuela materna que mencionamos abajo.
[8] Asimismo, Baltasar tiene como antepasados, entre otros, a los Cerpa, Rosales, Troya (descendientes del canónigo y primer párroco de Teror Juan de Troya, hijo de Úrsula de Troya que vino con el obispo Diego Muro, y de la mestiza canaria Antonia Ramírez), Álvarez-Travieso (oriundos de Portugal y Galicia), y Castro (tiene como primer ascendiente en Gran Canaria a Pedro de Castro casado con Juana Aguilar,descendiente de judíos conversos. La llegada de Tenerife de Pedro de Castro estuvo motivadapor la administracióndel ingenio de Aguatona, alrededor de 1527, GARCÍA-CORREA y RODRÍGUEZ DE CASTRO, 2014 p 104).
[9] MARRERO MARRERO, J. (1913).

Ermita de S. Bartolomé, Fontanales
4. ANTONIA MATEO, hija de Felipa de la Cruz y de Baltasar Mateo, natural de Moya,
donde casó en 1720, con José Benítez Trujillo [10], de su misma naturaleza, cuyos progenitores fueron Carlos Benítez y Lucía Trujillo, de primeras familias asentadas en el lugar; así como del conquistador de Gran Canaria Alfonso Rodríguez de Palenzuela quien enlazó con Francisca de Bolaños, hija del también conquistador de Gran Canaria Juan de Mayorga, converso de judaísmo y alcalde de la isla, y su mujer Juana Bolaños [11].
[10] AHDC-PM. Libro 3 de casamientos fol 42.
[11] CEBRIÁN LATASA, J.A. (2003), p 332, 333, 408. Descendencia que viene por Ginebra de Palenzuela, hija Alonso de Palenzuela y de Francisca Bolaños, matrimoniada con el médico Álvaro de la Mata, venido de Sanlúcar a petición del gobernador Lope Sosa, antes del año 1518 (AZNAR, E. et al, 1991, p 21 nº 34), con repartimientos de tierras en el barranco de Aumastel (RONQUILLO, M. y AZNAR, E. 1998, nº 15 y 55).

5. ISABEL BENÍTEZ, sus padres los nombrados Antonia Mateo y José Benítez, nacida y bautizada en Moya, donde contrajo nupcias, en el año 1740, con Francisco Montesdeoca [12], hijo de Bartolomé Montesdeoca y de Catalina Navarro, vecinos de Firgas. El matrimonio tuvo su residencia en Moya.
Isabel falleció antes de 1795, año en que lo hizo su marido que quedó anotado en esa  fecha como viudo [13].
[12]  AHDC-PM. Libro 3 de casamientos fol 80 vto.
[13] AHDC-PM. Libro 3 de enterramientos fol 19.

6. Mª ANTONIA MONTESDEOCA fue su nacimiento un 31 de diciembre de 1749 y llevada tres días después a la pila de Ntra. Sra. de la Candelaria [14], celebrando esponsales, en el año de 1770, con Antonio Santiago Benítez [15], natural de la misma localidad donde se bautizó en 1745 [16], hijo de Juan Benítez Herrera y de María Díaz. Ambos se dispensaron matrimonialmente por parentesco en tercero con cuarto grado de consaguinidad, es decir, los bisabuelos de Antonio Santiago, Cristóbal Benítez y Fabiana Rodríguez [17], eran a su vez, tatarabuelos de Mª Antonia.
El matrimonio y sus vástagos estuvieron domiciliados en el pago de El Palo.
Antonio Santiago Benítez dejó de existir a los 68 años sin haber testado, en 1813, encontrándose viudo en segundas nupcias de María de la Cruz [19].
[14] AHDC-PM. Libro 4 de bautismos fol 220.  Actuó de padrino su tío paterno José Motesdeoca, vecino de Gáldar.
[15] AHDC-PM. Libro 4 de casamientos fol 16.
[16] AHDC-PM. Libro 4 de bautismo en dispensa matrimonial. Su padrino fue su abuelo materno Antonio Díaz, de quien recibe su nombre.
[17] Cristóbal Benítez y Fabiana Rodríguez, ambos nacidos en la villa en 1634 y 1635 respectivamente, se unieron nupcialmente en el año 1663. Cristóbal fue una persona socialmente relevante en la localidad, apareciendo entre los firmantes que solicitaron la construcción una nueva iglesia (MARRERO MARRERO, 1913),  con  importantes rentas, y que en 1679  se convirtió en subarrendatario de la contribución del tabaco en rama y polvo vendido en Moya (SUÁREZ GRIMÓN y QUINTANA ANDRÉS, 2008, p 640).
[18] AHDC-PM. Dispensa matrimonial.
[19] AHDC-PM. Libro 4 de enterramientos fol 80.

7. MARÍA BENÍTEZ, nacida en la villa, alrededor de 1787 [20], tuvo sus esponsales en la iglesia de La Candelaria en 1802 [21], con el guiense Juan Viera Osorio, que nació en 1766 [22], hijo de Juan Viera y de Mª del Carmen Osorio Macías.
Residieron en Moya, donde fallecieron: Juan Viera en 1846 [23] y María Benítez al siguiente año, abintestatos.
[20] AHDC-PM. Libro 7 de enterramientos fol 5, consta por escrito que Isabel Benítez murió el 25 de noviembre de 1847, con 60 años, sin testar ni dejar bienes.
[21] AHDC-PM. Libro 4 de casamientos fol 127 vto.
[22] AHDC-PG. Libro 11 de bautismos fol 15. En esta matrícula se lee que los abuelos paternos de Juan Viera Osorio, eran de padres no conocidos.

8. Mª DEL CARMEN VIERA, en el año 1815,nació y recibió las aguas bautismales en la villa y parroquia de Moya [23]. Su marido fue Eduardo Suárez Díaz, de su naturaleza y mismo año natal, el 13 de octubre, onomástica de S. Eduardo. Hijo del alcalde constitucional, Salvador Suárez Guerra, natural de Teror, y de Juana Díaz Melián [24].  En el año de 1838, contrajo esponsales, con dispensa por su relación de 3º con 4º grado de consaguinidad: los bisabuelos del contrayente (Eduardo Suárez), Pedro Díaz y Juana de Candelaria, eran a su vez, tatarabuelos de la contrayente (María Viera) [25].
La familia habitó en el pago de S. Fernando.
María Viera falleció antes del año 1854, en que su marido volvió a casar con Juana Trujillo, dejando posteridad [26]. Eduardo Suárez murió con posterioridad, viudo de sus dos mujeres, de enfermedad de pecho, a los 64 años [27].
[23] AHDC-PM. Libro 5 de bautismos fol 274 vto. Su padrino fue su tío materno José Benítez.
[24] AHDC-PM. Libro 5 de bautismos fol 272 vto. Su tío materno Matías Díaz, su padrino.
El alcalde Suárez, dedicado a las labores agrícolas, tenía ascendencia en conocidas familias terorenses Guerra, Pulido, Sánchez, Sarmiento, Quintana, del Rio... Por su parte, su cónyuge Juana Melián  era de la familia que durante varias generaciones se nombraron como Melián de Ortega, cuyo desarrollo genealógico puede encontrarse en el trabajoMelián de Ortega, convergencia de linajes en la villa de Moya.
[25] AHDC-PM. Libro 6 de casamientos fol 4. Dispensa matrimonial.
Los padres comunes de María Viera y Eduardo Suárez, Antonio Díaz y Juana de Candelaria, fueron naturales y vecinos de Moya, contrayendo nupcias en 1716. Antonio Díaz desciende de los Alemán que se avecindaron en Gáldar, el majorero Salvador de Alemán que matrimonió con María de Quintana y Miranda, de ilustres familias de la villa norteña. Por su parte, Juana de Candelaria carece de padres conocidos.
[26] AHDC-PM. Libro 8 de casamientos fol  38 vto.
[27] AHDC-PM. Libro 12 de enterramientos fol 19. Dejó por herederos universales a sus hijos Salvador, Juana y María.

Vista de El Palmito
9. Mª DEL PINO SUÁREZ VIERA, su natalicio en 1844 [28], en el templo de La Candelaria, en el año 1863 se vinculó sacramentalmente a Juan Manuel Falcón Montesdeoca, nacido y bautizado en la misma villa, año 1839 [29], cuyos padres fueron Miguel Falcón Benítez y Mª Rita Benítez Marrero. Obtuvieron dispensa episcopal para poder matrimoniar, al emparentar en 3º con 4º grado de consaguinidad: como vimos arriba en el número 5, Isabel Benítez y Francisco Montesdeoca son bisabuelos de Mª del Pino Viera Suárez, a la vez que tatarabuelos de su cónyuge Juan Manuel Falcón Montesdeoca [30].
Vivieron y formaron su familia en El Palmito, dedicados a las faenas agrícolas.
Juan Manuel Falcón dispuso su testamento ante el escribano público de Guía Salvador Guía Pérez, el 23 de octubre de 1909, en el que declaró sus hijos habidos con su cónyuge Mª del Pino Suárez Viera:  José que falleció en Cuba, habiendo casado con Blanca Estrada dejando 4 hijos residentes en la citada isla; Felisa casada con Francisco Gonzalez Diaz, falleció dejando nueve hijos; Basilisa con la que continuaremos,Guadalupe consorte de Ricardo Alemán Ferrer; María de la Candelaria, soltera; Doroteaesposa de Antonio Rivero Afonso, y Miguel muerto en Cuba, siendo casado con Juana Estrada, dejando dos hijos en Cuba [31].
[28] AHDC-PM Libro 9 de bautismos fol 41. Se registró como madrina a su tía paterna Mª Encarnación Suárez.
[29] AHDC-PM Libro 8 de bautismos fol 156.
[30] AHDC-PM Libro 9 de casamientos/Expediente de Dispensa Matrimonial.
[31] AHPLP-PN. Escribano de Guía Salvador García, leg 3990 nº 192. Agradecimiento a Antonio Falcón Rodríguez. Del documento se desprende la trascendencia de la emigración a Cuba, donde muchos quedaron y dejaron su descendencia. Interesante consultar el artículo Familia Castellano: moyenses, indianos y cubanos.

10. BASILIA FALCÓN SUÁREZ, nacida el 15 de abril de 1869, día de santa Basilisa, bautizada cuatro días después en la parroquial de la Candelaria [32], aunque fue nombrada
Basilia Falcón y Sebastián Rodríguez
en su dilatada vida como Cecilia. Se unió maritalmente en 1894 [33], con su paisano Sebastián Rodríguez Melián, nacido y cristianado en Moya el 2 de junio de 1872 , hijo de José María Rodríguez García y de María Melián Falcón [34].
Su vivienda familiar, la tuvieron en la c. Alejandro Hidalgo, donde tuvieron una tienda de comestibles, a lo que Sebastián Rodríguez sumaba los oficios de labrador y carpintero. Sus tierras se encontraban en los aledaños, donde hoy es ocupada por una gasolinera.  Sebastián Rodríguez fue concejal de su ayuntamiento, de 1917 a 1922 [35].
Cecilia Falcón Suárez tuvo una larga vida, dejando de existir cuando contaba 90 años, el 14 de agosto de 1959 [36].
Tuvieron por hijos a:
- Manuel de los Reyes, muerto a pocos meses de nacer.
- Mª del Pino casada con Juan Rodríguez Guerra, sin descendencia.
- Cecilia, continúa abajo.
- Candelaria, fallecida soltera.
- Sebastiana, dejó su existencia sin casar.
- Marina matrimoniada con Sebastián Pérez Rodríguez, no dejando sucesión.
- Pedro, muerto soltero en Cuba.
[32] AHDC-PM: libro 14 de bautismos fol 188 vto.: Basilia Falcon Suarez hija de Juan Falcon y Maria Suarez. Nacio el dia 15 de Abril en la casa nr 2 de este pueblo. Hija de Juan Falcon, labrador y Maria Suarez naturales de Moya. Abuelos paternos: Miguel Falcon y Maria Montesdeoca. Abuelos maternos. Eduardo Suarez y Maria Viera, naturales y vecinos de Moya. Padrino Eduardo Suarez, su abuelo materno, natural y vecino de Moya.
[33] AHDC-PM: libro 13 de casamientos fol 282 vto.
[34] AHDC-PM: libro 15 de bautismo fol 130, siendo madrina su abuela materna Antonia Falcón, natural de Guía. RCM: partida de nacimiento en sección 1, tomo 3, fol 208.
Sebastián Rodríguez Falcón, por parte paterna, su apellido Rodríguez lo transmitió en Moya su bisabuelo paterno-paterno José María Rodríguez Afonso, natural de El Sauzal (Tenerife) quién casó en 1770 con la moyense María Fiesco de la Cruz (ver acerca de su ascendencia enFiesco en Gran Canaria). Estos Rodríguez, siguiendo por línea de varonía y en la localidad tinerfeña, alcanzamos documentalmente a Juan Rodríguez de San Pedro casado en segundas nupcias con Ana Serrano, en el año 1632, hija de Juan Serrano y de María Hernández Fiallo (AHDLL, Libro de mandas: 2º protocolo, 1670 nº 37; MACHADO, J.L. 2014, tomo II vol. 3, p 405).
Por García de su abuela materna, nos remontamos por línea varón hasta Juan García Castellano casado con Leonor Alonso, quien recibió su dote de casamiento de Antón Rodríguez como tutor y curador, en  28 de septiembre 1632, ante el actuario público Juan Fernández de Saavedra. Fueron vecinos de Teror, siendo padre de Leonor, el portugués Alonso Yanes y su mujer, la terorense Dominga Lorenzo (AHDC-IEP, carpeta 26; AA legajo Rivera; FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, tomo II p 722; RODRÍGUEZ DÍAZ DE QUINTANA a] pag. 25 y b] pag. 87).
La línea paterna-materna, llega a la isla con el cacereño Diego Falcón, asentado en Teror alrededor de 1530, como hemos desarrollado en varios escritos previos:  Extremeños en el poblamiento de Teror (Gran Canaria)...Falcón, linaje de confluencia en la ascendencia de Cecilia Rodríguez Falcón. Además de la nombrada línea de Melián de Ortega, y la línea Vega que alcanza al conquistador leonés Pedro de Vega, conocido como el Rey, y a la índigena Catalina Fernández Guanarteme, hija de los bautizados como Fernando Guanarteme (nombrado tradicionalmente como Tenesor Semidán, guadarteme de la isla) y de Juana Fernández (Abenchara hija del faiçán Chanveneguer).
[35] Boletín Oficial de Canarias del 25 de enero de 1922, p 4 (disponible en Jable, hemeroteca virtual de la ULPGC).
[36] RCM: partida de defunción en sección 3, tomo 30, fol 220. En ella, se enumeran sus hijos que llegaron a adultos, mientras su hijo fallecido en la infancia se omite, este aparece anotado en el libro 13 de enterramientos fol 48: ...falleció a las once de la noche del día de ayer (3 de mayo de 1897) en el pago del Palo, a consecuencia de tosferina a los cuatro meses y nueve días, siendo testigos de su defunción D. Leandro Quintana Díaz y Don Nicomédes Navarro Rodriguez de esta vecindad. Y para que conste lo firmo: Agustín Domínguez y Domínguez (rubricado).  

11. CECILIA RODRÍGUEZ FALCÓN, ocurrido su natalicio el 13 de octubre de 1902 [37], recibiendo el nombre por el que llamaban a su madre, contrajo nupcias con Juan Molina Ponce, nacido el 31 de mayo de 1901[38], hijo del galdense Juan Molina Sosa y de María Ponce Cerpa [39].
Cecilia Rodríguez y Juan Molina con algunos nietos
Juan Molina Ponce trabajó en la Heredad de Aguas y con su consorte tuvieron su hogar familiar en la c. padre Claret, nº 19.
Esta fue su descendencia: Juan, Cecilia, Sebastiana, Pino y Mª del CarmenMolina Rodríguez.
Cecilia falleció 17 de abril de 1994, contando 91 años [40]; con anterioridad lo había hecho su marido, el 5 de abril de 1986, a la edad de 85 años [41]
Sobre su genealogía se puede consultar Familia Molina-Rodríguez de la villa de Moya.
[37] RCM: partida de nacimiento en sección 1, tomo 29, fol 139.
[38] RCM: partida de nacimiento en sección 1, tomo 27, fol 80.
[39] Acerca de los ancestros de Juan Molina Ponce, los hemos expuesto enMolina en Canarias. Asentamiento en Gran Canaria, y Ponce de León, una descendencia en Gran Canaria.
[40] RCLGC: partida de defunción en sección 3ª tomo 236 pag 288.
[41] RCLPGC: partida de defunción: sección 3ª tomo 188-1 p 23.

FUENTES
- Archivo Acialcázar (AA).
- Archivo El Museo Canario (AMC):
Fondo magistral Marrero (FMM)
Fondo Chil Naranjo (FCN): padrones municipales de Moya.
- Archivo Histórico Diocesano de Canarias (AHDC):
Libros sacramentales de las parroquias de Arucas (PA), Guía (PG), Moya (PM), Teror (PT)
Dispensas matrimoniales (DM).
Índices de Escrituras y Protocolos (IEP).
Noticias e Índices de Testamentos (NIT).
- Archivo Histórico Diocesano de S. Cristóbal de La Laguna (AHDLL)
Pª El Sauzal (PS): libros sacramentales, libros de mandas.
- Archivo Histórico Provincial de Las Palmas.
Protocolos Notariales (PN)
- Registro Civil de Las Palmas de Gran Canaria (RCLPGC)
- Registro Civil de Moya (RCM).
BIBLIOGRAFÍA
- ARENCIBIA RODRÍGUEZ, L. (2012) Los Mateo y Fontanales. Infonorte Digital. Publicado 29 noviembre 2012.
- ARENCIBIA RODRÍGUEZ, L. Los Troya de Gran Canaria. Genealogías Canarias. Publicado 19 abril 2013.
- AZNAR, E., VIÑA, A., PALENZUELA, N. y BELLO, J.M. (1991) Documentos canarios en el Registro del Sello (1518-1525). Fontes Rerum Canariarum, Universidad de La Laguna.
- Del CASTILLO y LEÓN, P.A. (1686) Descripció de las Yslas de Canaria. Edit. Cabildo de Gran Canaria, edic. facsímil 1994 (nº 253).
- CASTELLANOS COLLINS, M.Familia Castellano: moyenses, indianos y cubanos. Genealogías Canarias. Publicado 15 febrero 2014.
- CEBRIÁN LATASA, J.A. (2003) Ensayo para un diccionario de conquistadores de Canarias. Edit. Gobierno de Canarias.
- EGEA MOLINA, E. (2012) Familia Molina-Rodríguez de la villa de Moya. Genealogías Canarias. Publicado 26 agosto 2012.
- EGEA MOLINA, E. (2013 a)  Apellidos de antiguos pobladores de Moya. Siglos XVI-XVIII. Genealogías Canarias. Varios artículos, publicados en 2013.
- EGEA MOLINA, E. Falcón, linaje de confluencia en la ascendencia de Cecilia Rodríguez Falcón. Genealogías Canarias. 7 mayo 2013
- EGEA MOLINA, E. Molina en Canarias. Asentamiento en Gran Canaria. Genealogías Canarias. 7 julio 2013.
- EGEA MOLINA, E. Melián de Ortega, convergencia de linajes en la villa de Moya. Genealogías Canarias. Publicado 1 marzo 2014.
- EGEA MOLINA, E. Fiesco (y II). El Dr. Alonso Fiesco, establecimiento y descendencia en Gran Canaria. Genealogías Canarias. Publicado 13 mayo 2014.
- EGEA MOLINA, E. Ponce de León, una descendencia en Gran Canaria (y II). Genealogías Canarias. Publicado 3 septiembre 2014.
- EGEA MOLINA, E. Extremeños en el poblamiento de Teror (Gran Canaria). Falcón y Castellano. Genealogías Canarias. Revisión y corrección de 8/11/2015
- FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, F. Nobiliario de Canarias. Revisión y ampliación de RÉGULO, J. edit. (1950-60). Edit. 7 islas (4 tomos).
- GARCÍA-CORREA, L. y RODRÍGUEZ DE CASTRO, R. (2014) Población de Agüimes, 100 primeros años del señorío. Edic. de los autores.
- GARCÍA, J.R. y HERNÁNDEZ, F. (2016)Los Travieso de Gran Canaria (y notas sobre el origen de los apellidos Montesdeoca y Bautista en el norte de la isla). Genealogías Canarias. Publicado 1 mayo 2016.
- LOBO CABRERA, M. Testamento de Catalina Fernández Guanarteme, transcripción publicada en el Boletín Millares Carló  volumen I, número 1, junio de 1980, pp 139-148 (disponible en internet).
- MACHADO CARILLA, J.L. (2014) Poblamiento de Tenerife. Estudio del manuscrito de don Juan Pérez Santos y don José María de las Casas López sobre libros parroquiales y escribanías. Edic. del autor (3 tomos).
- MARRERO, J. (1913) Libro Apuntes para la Historia de la Parroquia de Moya. Manuscrito, en El Museo Canario, FMM.
- RODRÍGUEZ DÍAZ DE QUINTANA, M. (a) Historia Genealógica de la familia del Rio. Mimeo, depositado en El Museo Canario.
- RODRÍGUEZ DÍAZ DE QUINTANA, M. (b) Familia Jaén. Mimeo, depositado en El Museo Canario.
- RODRÍGUEZ DÍAZ DE QUINTANA, M. Genealogía de de Doña Catalina Fernández de Guanarteme. Revista de laAsociación Rey  Fernando Guanarteme, tomo II.(Disponible en El Museo Canario).
- RODRÍGUEZ DÍAZ DE QUINTANA, M.De la inexistente primera mujer de Maciot de Bethencourt. Genealogías Canarias. Publicado 28 octubre 2012
- RONQUILLO, M. y AZNAR, E. (1998) Repartimientos de Gran Canaria. Edit. Cabildo de Gran Canaria.
- SÁNCHEZ MOLINA, R. Antepasados y gente sin historia. Una lectura de Genealogías Canarias. Genealogías Canarias. Publicado 22 marzo 2014.
- SUÁREZ GRIMÓN, V. y QUINTANA ANDRÉS, P. (2008) Historia de Moya (2 tomos). Edit. Anroart.
- YÁNEZ RODRÍGUEZ, J.L. (2006) El Palmar de Teror. Edit. Anroart.




INICIACIÓN A LA GENEALOGÍA. 2016 AÑO GENEALÓGICO FRANCISCO FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT

$
0
0


Actividad escolar, dirigida al alumnado de enseñanza secundaria del Colegio Ntra. Sra. del Rosario de Agüimes (Gran Canaria), que tendrá por objetivo introducir a los jóvenes en la genealogía.
Evento que se encuadra en la conmemoración de 2016 Año Genealógico Francisco Fernández de Bethencourt, coordinado por el Dr. Francisco Alemán González, durante los días 25, 26 y 27 de mayo.

APELLIDO SUÁREZ: CRISTÓBAL SUÁREZ CARREÑO E ISABEL LÓPEZ (I)

$
0
0
LEONARDO ARENCIBIA RODRÍGUEZ, 
JUAN R. GARCÍA TORRES y
FANEQUE HERNÁNDEZ BAUTISTA
(Y APUNTES SOBRE EL ORIGEN DEL APELLIDO NAVARRO EN GRAN CANARIA)
LOS SUAREZ CARREÑO EN GRAN CANARIA  
Se dice que el apellido Suárez Carreño llegó a las islas de la mano de algunos pobladores, emparentados entre sí, procedentes de Sanlúcar de Albaida, Sevilla:
-Cristóbal Suárez Carreño, casado con Isabel López, avecindado en Gran Canaria con prolija descendencia en esta isla.
-Alonso Suárez de Albaida, casado con María Guerra, avecindado en Gran Canaria, con prolija descendencia en esta isla.
-Pedro Suárez Carreño, casado con Catalina López, estante en Gran Canaria que al parecer regresa a Sevilla después de haber bautizado a una hija en El Sagrario.
-Antón Suárez Carreño, casado con Margarita Perdomo Betancor, que se establece en  Tenerife con amplia descendencia en dicha isla.
Tenemos dudas acerca de las fechas y circunstancias de la arribada de estos personajes tan relevantes de la historia familiar de Canarias. Si bien los estudiosos de este apellido coinciden en que son pobladores tardíos, tenemos la convicción de que al menos uno de ellos fue partícipe de la conquista de Gran Canaria. El documento que hace que nos planteemos este asunto forma parte de un artículo publicado en AEA: Canarias en el archivo de protocolos de Sevilla cuyo autor es don Francisco Morales Padrón:
Hoja suelta libro 1º del año 1500 Escribano Francisco Segura (Nómina de los mrs. que han de haber por sus servicios ciertos conquistadores de Gran Canaria)
“Los mrs. que han de haber las personas vecinas de la isla de la Gran Canaria  y enviadas acá a Castilla a mí, Francisco de Arévalo, en una fe escrita y firmada de Gonzalo de Burgos, escribano público de la dicha isla, en que venían escritas las personas que habían de haber sueldo, si están vivas y de las que están fallecidas escritas sus herederos para que hayan y reciban el sueldo que cabe a cada persona por millar de los 101.650 mrs. que son cobrados y lo que ha de haber cada uno de lo que queda por cobrar para cuando sea cobrado de esta libranza si sus altezas lo mandaren pagar, es de lo suso escrito según se declaró por Gonzalo de Burgos y por un oficial de las cuentas de Juan López, contador mayor de los Reyes nuestros señores”.
Entre la treintena de conquistadores relacionados a los que se adeudan cantidades aparece Alonso de Albaida que bien pudiera ser Alonso Suárez de Albaida, el casado con María Guerra. Con este mismo nombre, Alonso de Albaida, aparece efectivamente citado dicho personaje  en diversas fuentes primarias de principios de siglo XVI.
Somos conscientes de que Cebrián Latasa en su “Ensayo…” nos advierte de que no debemos confundir al conquistador Alonso de Albaida (el que, según nos dice, recibió media suerte en la Vega de Santana y se fue de la isla  reclamando en 1500 desde Sevilla el salario que se le adeudaba), con los Suárez Carreño que tan solo serían repobladores tardíos a partir del tronco formado por Cristóbal Suárez de Albaida e Isabel López. No coincidiendo con esta afirmación, daremos argumentos sólidos de inmediato para demostrar que el tal Cristóbal, casado con Isabel, es hermano de Alonso de Albaida, el casado con María Guerra, con amplia sucesión en ambos casos y no es por lo tanto el único fundador de la estirpe en Gran Canaria. Este sería en todo caso un honor compartido.

PRIVILEGIO REAL DE LOS SUÁREZ CARREÑO
Gracias a los papeles de la genealogía de Agustín de Pineda, un descendiente de Alonso de Albaida del siglo XVIII, hemos podido acceder a un edicto de los Reyes Católicos  dictado en 1477, anterior por tanto al inicio de las operaciones militares de la guerra de Canaria, por el que se excluye a los hermanos Suárez Carreño del pago de contribuciones en reconocimiento de su hidalguía. El documento es muy valioso:
“Don Fernando e Isabel por la gracia de Dios, rey y reina de Castilla, de León, de Sicilia, de Toledo, de Portugal, de Galicia, de Sevilla, de Córdoba, de Murcia, de Jaén, del Algarve, de Algeciras, de Gibraltar, Príncipes de Aragón, Señores de Vizcaya y de Molina: A Vos el Cabildo, alcaldes, alguaciles, regidores, oficiales y hombres buenos del lugar de Albaida y a los arrendadores y fieles y cogedores, empadronadores y otros cualesquier personas… Sepades que Alfonso Suárez Carreño, y Antón Suárez y Juan Suárez y Pedro Suárez, sus hermanos, vecinos de este dicho lugar, nos hizo relación diciendo que no obstante que ellos son hijosdalgo notorios y de solar conocido de nuestros reinos por lo cual ellos son exentos de pechar y pagar y contribuir con vosotros y las nuestras monedas y moneda forera y en los otros nuestros repartimientos y derramas reales y concejiles, que vosotros o algunos de vosotros, en su grande agravio y perjurio y quebrantamiento de su hidalguía, les habéis empadronado …para que  pechen y paguen y contribuyan…y que sobre ello los habéis prendado en lo cual dicen que si así hubieran de pagar, que ellos recibirían mucho agravio y daño, y nos suplicaron de merced acerca de ello con remedio de justicia las proveyésemos mandándoles guardar dicha su hidalguía como la nuestra merced fuere y nos, tuvímoslo por bien. Porque vos mandamos a todos y cada uno de vosotros que de aquí en adelante guarden e hagan guardar a los dichos Alonso Suárez y Juan Suárez y Pedro Suárez todas las honras, gracias y mercedes y franquezas y libertades y todas las otras cosas y cada una de ellas que por razón de las dichas sus hidalguías deben haber y gozar y les deben de ser guardadas, según que a los otros hombre hijosdalgo notorios de solar conocido de nuestros reinos, y guardándolas y cumpliéndolas, que los no empadronéis ni consintáis de empadronar para que pechen y paguen y contribuyan…salvo solamente en aquellas cosas en que los otros hombres hijosdalgo de nuestro reinos deban pechar y contribuir y que sobre esto no los prendaréis ni fatigaréis y que si por causa de ello algunos de sus bienes los tenéis tomados y prendados embargados, se los retribuyáis y tornaréis luego sin cosa alguna…so pena de la nuestra merced y de 10.000 mrs. para la nuestra cámara. Pero que si contra esto que dicho es alguna cosa quisierais decir o alegar en guarda de vuestro derecho porque  así no lo debierais así hacer ni cumplir por cuanto los sobredichos dicen que en quebrantamiento de dicha su hidalguía por lo cual el consentimiento de ello pertenece a los nuestros alcaldes de los hijosdalgo notorios de la probanza, que están en la nuestra Corte y Cancillería, por esta nuestra carta vos mandamos que del día que os fuera leída y notificada hasta treinta días primeros siguientes comparezcáis ante dichos nuestros alcaldes de los hijosdalgo notorios de la Provincia a lo decir y mostrar porque ellos vos digan sobre ello con los dichos Alfonso y Antón y Juan y Pedro Suárez y deliberen sobre ello lo que hallaron por derecho, y como esta nuestra carta os será leída y notificada y la cumpliréis mandamos so la dicha pena a cualquier escribano público que por esto fuese llamado que le dé al que la mostrare testimonio signado con su signo porque nos sepamos en cómo se cumple lo por nos mandado.
Dada en la ciudad de Jerez de la Frontera a 15 días de octubre del año de Nuestro Salvador Jesucristo de 1477 años. Yo el Rey. Yo la Reina. Y yo, Juan Ruiz, Secretario del rey Nuestros Señores.
ALGUNOS COMENTARIOS QUE VIENEN A CUENTO
Sostenemos que, de los cuatro hermanos citados en el edicto real, Alonso Suárez Carreño 1, el casado con María o Isabel Martín, es el tronco de los Suárez Carreño que se asientan  en Gran Canaria pues damos por hijos indubitados del tal Alonso a los hermanos Alonso de Albaida, el casado con Mª Guerra, y Cristóbal Suárez Carreño, el casado con Isabel López, doble entronque que quedará bien apuntalado en el siguiente epígrafe. Según Juan Fray Suárez de Quintana fueron también hijos de dicho matrimonio Martín Suárez y Francisco Suárez que no pasaron a las islas.
En relación con Antón y Pedro Suárez (descartamos a Juan del que no tenemos constancia de su posible paso por las islas), los hermanos de Alonso Suárez Carreño 1 citados en el edicto de 1477,  nos asaltan las dudas en cuanto a si son o no los personajes homónimos que viven en Tenerife y Gran Canaria a comienzos de la centuria siguiente, o si por el contrario estos son hijos de Alonso Suárez Carreño 1 y hermanos por lo tanto de Alonso de Albaida y de Cristóbal Suárez como nos refiere algún investigador. Nosotros nos decantamos por la primera posibilidad.
Carlos Platero en su obra Los apellidos en Canarias parece tenerlo más claro que nosotros, decantándose por la segunda posibilidad, cuando afirma:  “Los hermanos andaluces, naturales de Sanlúcar de Albaida, Alonso, Cristóbal y Antón Suárez se avecindaron en Canarias a fines del XV y principios del XVI: Alonso en La Vega del Gamonal en Gran Canaria donde aún vivía en 1529; Antón asistió a las conquistas de La Palma y Tenerife en donde luego residió; y Cristóbal se estableció en Gran Canaria por Santa Brígida extendiéndose sus descendientes por Gáldar, Guía y Arucas principalmente”
Observamos en todo caso que Platero desconoce la presencia de un Pedro Suárez en Las Palmas a principios del siglo XVI. Consta ciertamente en el libro primero de El Sagrario que Pedro Suárez de Albaida tiene con Catalina López una hija llamada Catalina,  como su madre, a la que bautizaron en octubre de 1505. Creemos en todo caso, pues no se tienen otras noticias de esta pareja, que Pedro y su mujer no se radicaron en la isla  terminando por regresar a Sevilla.
Es también para nosotros un enigma a resolver la identidad del personaje llamado Alonso de Albaida que con una mujer llamada Mari Díaz bautiza en Las Palmas en 1499 a un hijo suyo llamado Pedro. Pudiera ser, creemos, el mismo que estuvo casado con María Guerra, teniendo un hijo con mujer distinta de su esposa como tan frecuente ocurría en las clases dominantes de la época.
NUEVO PLEITO EN 1615 POR LA HIDALGUÍA DE LOS SUÁREZ CARREÑO











En el cuadro sinóptico adjunto, en el que compendiamos las relaciones entre los protagonistas del pleito de hidalguía de 1615 que vamos a describir, debemos prestar atención para seguir el hilo de la explicación al matrimonio formado por Hernán Suárez y Francisca Maldonado. Un hijo de este matrimonio, de nombre Salvador Arias Maldonado, por sí y en representación de su hermano Luis Suárez Maldonado, “criado del rey Nuestro Señor y alguacil perpetuo de la casa y corte”, pleitea en julio de 1615 para sacar a su hermano Alonso Suárez de la cárcel por ciertas deudas no pagadas aduciendo que en su familia disponen de una disposición real que los ampara en su hidalguía, disposición que es la que acabamos de mostrar a los lectores en el epígrafe anterior. Argumentan los hermanos reclamantes que por ser descendientes legítimos “conforme a derecho, debían gozar de las honras, preeminencias y libertades de que gozaron sus ascendientes”  entre ellas las de no poder ser encarcelados por impago de deudas.
En la demanda que estos presentan dicen ser hijos de Hernán Suárez Guerra y Francisca Maldonado, nietos de Alonso Suárez de Albaida y María Guerra y bisnietos de Alonso Suárez Carreño  y de María Martín (sic)  por la línea paterna,  y por la línea materna nietos de Gomes Arias Maldonado y de María Fernández Villalón. Señalan asimismo que sus padres, abuelos y bisabuelos  “fueron y eran hombres hijosdalgo notorios y de solar conocido, habidos y tenidos y reputados por tales en esta isla y en la villa de Albaida y en la de Almonte, Jerez de la Frontera y en otras partes donde habían vivido y en esta posición amparados y defendidos y sus progenitores; y lo mismo todos sus tíos, hermanos del mencionado su abuelo, como lo fue Cristóbal Suárez, padre de Antón Suárez quien fue primo hermano del referido Hernán Suárez Guerra, su padre, y sus hijos Alonso Suárez Carreño y Juan Tello, regidor de esta isla, primos hermanos del dicho Salvador Arias, así por provisiones de los Reyes Católicos de gloriosa memoria así como por privilegios y ejecutorias ganadas en  contradictorio juicio…”
Los datos antedichos han sido obtenidos de la Información de Agustín de Pineda cuya relación genealógica con los Suárez Carreño del siglo XVI se describe en ocho generaciones en el siguiente cuadro:
LA JUDERÍA DE JEREZ DE LA FRONTERA
En el libro de repartimiento dictado por Alfonso X el sabio en 1266 se señalan las 90 casas asignadas a los judíos en la repoblación de la ciudad, tras su toma por las tropas castellanas, así como  los nombres de los 90 pobladores judíos que allí se asentaron como cabezas de familia. La ciudad fue de este modo repoblada asentándose en ella una numerosa comunidad hebrea. Estas familias llegaron desde diversos lugares de la geografía peninsular. Los repartidores instalaron a los judíos en un barrio aparte separado del resto de la ciudad por una muralla. La mayor parte de ellos procedía de Castilla la Vieja (apellidos como Castellano, Carrión, Castro…identifican los lugares de origen) y otros provenían del Algarve portugués recién conquistado por Alfonso X.
Queremos plantear a partir de la lectura del documento la siguiente hipótesis: en los años 70 del siglo XV cierta familia judeoconversa, cristianada con el apellido Suárez Carreño, obtiene privilegios y se establece en Albaida después de abandonar Almonte y Jerez, lugares en los que habían estado avecindados desde hacía más de un siglo, imaginamos que como nueva escala de una migración forzada huyendo de las persecuciones que los lleva durante generaciones a emigrar desde el norte hasta el sur de la Península y más tarde a las Islas Canarias. Debían de ser en nuestra opinión una familia muy acomodada para obtener el privilegio que obtuvieron en 1477. Sin embargo los panegiristas de este linaje  quieren hacer a sus antecesores caballeros hijosdalgo por su participación en las guerras de Aragón y Portugal, con armas y caballos a su costa, hechos de los que no tenemos certezas. “Los muchos y leales servicios prestados a la Corona por los hermanos Suárez Carreño y por su padre, Suer Fernández, y por don Fernando Suárez de Carreño, su abuelo” según se hace constar en una sentencia confirmatoria de su nobleza de 1453 (Auto del Alcalde Mayor de Sevilla), están aún por determinarse en qué consistieron realmente y cuánto les costó acceder a tal privilegio.
En el artículo Cristianos contra judíos y conversos de Fernando Suárez Bilbao hemos encontrado algún fundamento para nuestras cábalas de relativización de esos papeles:
“…La conquista de Granada era la prioridad absoluta en el programa político de los RR.CC. Una guerra larga y costosa que solo podía ser sufragada con contribuciones extraordinarias entre ellas de forma especial la de los judíos. Mientras la guerra durara los judíos seguían siendo necesarios para la monarquía… Pero en enero de 1492 la guerra terminó…”
La referencia, por otra parte, en cierto sitio de la Web (nos referimos a una genealogía de los Carreño nada recomendable porque está plagada de errores, publicada en www.euskalnet.net) al hecho de que alguno de los Suárez Carreño habrían tomado parte en la guerra de Granada en su fase final (la toma de Almería) no puede resultarnos sorprendente si tenemos en cuenta que un judío, Samuel Abulafia, tuvo a su cargo el suministro de tropas durante la guerra contra los nazaríes. El reconocimiento de personas concretas de esa comunidad que ocupan posiciones sociales elevadas  y a las que la Monarquía debía agradecimiento por su cooperación financiera no debió ser sin embargo muy significativo, nos dice el autor antes citado, pues los empresarios hebreos fueron sustituidos paulatinamente por otros italianos y por la capacidad de sevillanos, burgaleses y valencianos, muchos de los cuales eran descendientes de conversos. Entre estos últimos creemos que podríamos  situar a nuestros ascendientes Suárez Carreño, una vez han sido “convencidos” de las ventajas de la Cristiandad.
Lo que sí nos resulta sin duda valioso en la citada página web es la hipótesis acerca de un posible origen remoto asturiano de los Suárez Carreño. Al bautizarse el patriarca de la familia que fue poblador de Jerez de la Frontera habría adquirido el apellido Suárez (hijo de Suer) con el añadido de su más que probable lugar de origen: el concejo de Carreño en Asturias.
Carreño, como bien nos informa Wikipedia, es un concejo costero del Principado de
Iglesia de Logrezana, concejo de Carreño. Foto: Gelaz
Asturias de algo más de 10.000 habitantes con capital en la Villa de Candás, que junto al vecino concejo de Gozón conforma la mancomunidad del Cabo de Peñas. Como nota curiosa diremos que una de las parroquias más antiguas de este concejo (la iglesia derruida era del siglo X) se denomina Carrió. Recordemos al respecto que Carrión es uno de los apellidos toponímicos con los que se nombra a determinada familia judía asentada a la fuerza por edicto real en la judería de Jerez de la Frontera.  
En este trabajo nos vamos a centrar, una vez establecidos en Gran Canaria, en la descendencia de Cristóbal Suárez Carreño, casado con Isabel López, hijo de Alonso Suárez 1 y de María o Isabel Martín.
CRISTÓBAL SUÁREZ CARREÑO E  ISABEL LÓPEZ
Según nuestro valioso colaborador, Leonardo Arencibia, quien ha dedicado mucho tiempo y esfuerzo a la investigación de este apellido en la isla, este matrimonio procreó tres hijos y dos hijas a los que identifica sin poder precisar su orden y lugar de nacimiento, aunque nos indica que es probable que nacieran en Sevilla y se casaran en Gran Canaria. Los cinco hijos son: Cristóbal Suárez, casado con Leonor Tello, por quien sigue la línea en esta primera parte del artículo; Antón Suárez, casado con Francisca Molina, por quien seguirá la línea en la segunda parte; Catalina Suárez, casada con Cristóbal de Vergara; y también Inés Suárez y Alonso Suárez, de quienes no conocemos las circunstancias de su vida  si bien sospechamos que este último puede ser el padre de otro Cristóbal Suárez Carreño casado con Isabel Téllez, padres que fueron a su vez de una niña llamada Inés bautizada en El Sagrario en 1543.  
Todos ellos son los ancestros de buena parte de los grancanarios de hoy puesto que, en general, tuvieron una amplia descendencia que se extiende por toda la isla aunque en un primer momento los descendientes de Antón y de Cristóbal se avecindaron en La Vega  y los de Catalina se dispersaron por la zona norte y también por la capital.
Dedicaremos a continuación, como ya anticipamos, esta primera parte del trabajo a la descendencia de Cristóbal Suárez casado con Leonor Tello y dejaremos para la segunda parte del estudio la descendencia de Antón Suárez casado con Francisca Molina.
En relación con Catalina Suárez, cuyo linaje no nos alcanza, de ahí que quede relegada en esta investigación, solo diremos ahora que de su unión con el regidor Cristóbal de Vergara nacieron (Libros de bautismo de El Sagrario): Miguel en 1511; María en 1516; Elvira en 1520; Isabel de Vergara en 1521 (casada con García Osorio, hijo de Gregorio Trujillo y Francisca Osorio); Andrés en 1525; e Inés de Vergara en 1530, quien estuvo casada con Gil de Quesada.
CRISTÓBAL SUÁREZ 2 Y LEONOR  TELLO  (Hija de Juan Barrial nacida en Las Palmas en 1508)
Hijos que tenemos contrastados de esta pareja son:
Las Palmas, siglo XVI
-Juan Suárez Carreño nacido en Las Palmas en 1527, casado con Elvira González, hija de Francisco González y Juana Díaz, por quien continuaremos la línea.
-Isabel Suárez, casada en 1552 con Manuel Hernández.
-Juana Suárez Tello, nacida en 1535 y casada con Juan de Higueras.
-Leonor Tello, nacida en 1540 y casada con Juan González.
-Alonso Suárez, de quien no tenemos certezas si bien creemos por los datos con que contamos que es el padre, con mujer que desconocemos, de Catalina Suárez, casada con Juan de Santa María; de Leonor Tello, casada con un tal Diego; y de una Isabel Suárez, que murió viuda, sin descendencia.
Existen la posibilidad de que sean algunos más los hijos habidos por esta pareja. Quizá Pedro Suárez Carreño el casado con Águeda Suárez de la Fuente pueda ser uno de ellos, y también Antonia Suárez que fue casada sobre 1545 con Alonso Sánchez.
Exponemos a continuación la pista que nos conduce a plantear esta última posibilidad que ha sido tomada del folio 3 vuelto del manuscrito de Fray Juan Suárez de Quintana, folio en el que se describe la descendencia de Cristóbal Suárez e Isabel López:
“Los dichos Juan Suárez y Elvira González vecinos de La Vega de esta isla de Gran Canaria tuvieron por hijos  a Francisco Suárez, Juan Suárez, Cristóbal Suárez, Gregorio Suárez y Pedro Suárez, que todo consta así legítimamente por información a pedimento de los dichos en 13 de enero de 1584, que también está inserta en los dichos papeles de la Ejecutoria de los Suárez, en la cual está por testigo Alonso Sánchez, vecino del lugar de La Vega, casado con hermana del dicho Juan Suárez…”
JUAN SUÁREZ CARREÑO Y ELVIRA GONZÁLEZ
-De este matrimonio avecindado en La Vega contamos con el extracto de alguno de sus respectivos testamentos localizados milagrosamente en la carpeta del Archivo Diocesano:
“Juan Suarez, labrador, otorgó testamento en dicho año de 1580 ante Lorenzo de Palenzuela (su mujer realiza otro en esa misma fecha) en el que dice que fue casado con Elvira González, hija de Francisco González, y declara por sus hijos a Francisco, Juan, Cristóbal, Gregorio, Pedro y María.”
“Elvira González, su testamento, casó con Juan Suárez, dice que testó (no se indica la fecha) ante Teodoro Calderín, escribano de esta isla, y que tuvo por hijos a Juan Suárez y María Suárez, mujer de Francisco Navarro, y que a esta la dotó ante Lorenzo de Palenzuela.”
Podemos concluir que el segundo testamento de la esposa (el que no está datado) debe ser muy posterior al que realiza al tiempo que su marido en 1580, dictado cuando ella tenía 53 años de edad, pues en este último solo se nombra  a dos de los hijos habidos en el matrimonio (María Suárez, por quien sigue la línea, y Juan Suárez, casado con Estebana Ramos) que son los únicos que permanecen vivos en la ignota fecha en que testa por segunda vez Elvira.
-El testamento en 1601 de Pedro Suárez, uno de los hijos no citados en el segundo testamento de la madre, nos ayuda a datar este último evento (necesariamente posterior a esa fecha) y a descender con confianza hasta el siguiente peldaño:
“Pedro Suarez, su testamento, hijo de Juan Suarez y de Elvira González; es hermano de Cristóbal Suárez y María Suárez, mujer de Francisco Navarro, y también de Juan Suárez, año 1601.”
MARÍA SUÁREZ Y FRANCISCO NAVARRO
-Partida de Matrimonio. Iª de Ntra. Sra. de Santa Brígida - L 1 - F 128 - Año 1588
"En esta Iglesia de Señora Santa Brígida, término de la Vega, en 19  de octubre de 1588 años casé y velé yo Mateo Alarcón cura en haz de la Santa Madre Iglesia a Francisco Navarro y a María Suárez, hija de Juan Suárez, difunto, y de Elvira González, su mujer, habiendo precedido las amonestaciones del derecho en presencia de Juan Francisco su padrino y de Esteban Calderín y Andrés Ortiz, vecinos de la ciudad, y de muchos vecinos de la Vega y por verdad lo firmé de mi nombre”. Mateo Alarcón.
-Para confirmar la  descendencia de María Suárez contamos además con un extracto de su testamento dictado ante Andrés Rosales en 1613: 
“María Suárez, vecina de La Angostura, declara que casó primero con Francisco Navarro (viudo de Prisca Hernández Talavera) y tuvieron por hijos a Juan (por quien seguirá la línea), Vicente y Francisco con los que hizo partición de bienes. Casó por segunda vez con Alonso Naranjo”
-Las pruebas de 1606 que hizo su segundo marido son la prueba definitiva de que estamos bien encaminados en los entronques del linaje que hoy describimos:
“Alonso Naranjo y su mujer María Suárez hicieron pruebas ante la Inquisición y dieron por padres a Francisco Naranjo Pérez y María Morales y por abuelos paternos a Alonso Naranjo y a Elvira Ramos y maternos a Rodrigo de la Fuente y Catalina González. La María Suárez dio por padres a Juan Suárez y Elvira González; por abuelos paternos, a Cristóbal Suarez y Leonor Tello, y maternos a Francisco González y Juana Díaz; aprobadas en el año de 1606”.
Postal de La Angostura
-El testamento de su primer marido nos viene a dar certezas acerca de su descendencia:
“Francisco Navarro, su testamento, casó primero con Prisca Hernández, hija de Luis Hernandez Talavera y Leonor Afonso y tuvo a Leonor y Francisca; y en segundas nupcias con María Suárez tuvo a Juan, Cristóbal, Vicente y Francisco, año 1601, protocolado el folio 179 ante Alonso Fernández de Saavedra”
-Las pruebas siguientes nos permiten, finalmente, identificar al tercero de sus hijos, Vicente Navarro, y plantearnos, antes de bajar al siguiente peldaño, hacer un pequeño alto para  recapitular sobre la genealogía de los Navarro:
“El capitán Vicente Navarro hizo pruebas en 1651, hijo de Francisco Navarro y María Suarez, abuelos paternos Francisco Navarro y Francisca Núñez y abuelos maternos Juan Suarez y Elvira González”.
El dicho capitán, Vicente Navarro,  hermano de nuestro ancestro Juan Suárez 2,  estuvo casado con Constanza Rodríguez e hizo testamento en 1648 ante Alonso Castrillo declarando que tuvo por hijos a María Suárez, mujer de Juan Luis, a Juana, a Leonor, a Francisco, a Alonso y a Ana.

APUNTES PARA INDAGAR SOBRE  EL ORIGEN DEL APELLIDO NAVARRO
Nos interesa en este epígrafe tratar de identificar a los padres de Francisco Navarro el eslabón más antiguo de la cadena en este linaje cuyo origen en el 1500 es hasta el momento desconocido para nosotros. De su esposa, Francisca Núñez tenemos sin embargo la certeza de que es la hija del tejero Vicente de Montesdeoca y de su esposa la vendedora Juana Hernández, vecinos del Real de Las Palmas. Francisca es por tanto hermana de Francisco de Montesdeoca, casado con Clara Hernández (hija del portugués Domingo Hernández y de la canaria Isabel Lorenzo Talavera); de Juan de Montesdeoca casado en Las Palmas con María Lorenzo  (hermana de Clara Hernández) y de Isabel Martín casada con Juan Gómez Pimienta, vecino de Tenerife.
Rastreando la documentación de principios del siglo XVI con la que contamos, tenemos  que eran vecinos de Telde por esas fechas dos conquistadores de apellido Navarro. Estos son según Cebrián Latasa:
-Martín Navarro: Consta como conquistador y vecino de Telde. Dejó su testamento el 23 de febrero de 1522 ante Diego de León una capellanía en la Iglesia de San Juan Bautista de Telde
-Diego Navarro. Conquistador de Gran Canaria. Recibió tierras en Telde.
De este último hemos podido saber que era  alguacil en 1509 (Datas de Gran Canaria) y que tuvo varios hijos bautizados en Telde:
-Bernardina, bautizada en 1517, hija de Diego Navarro y Juana Gutiérrez
-Gaspar bautizado en 1523, hijo de Diego Navarro y Juana Gutiérrez
-Baltasar, bautizado en 1525 hijo de Diego Navarro y Juana Inglés.
Hemos localizado por otra parte en el Real de Las Palmas a un vecino de este apellido, Cristóbal Navarro, que, en unión con Catalina Gómez, tienen una hija a la que bautizan con el nombre de María en 1512 (Libro Primero de Bautismos). Y no hay más Navarros en Las Palmas hasta los años 40 (Libro Segundo) en que aparecen un Juan Navarro casado con Catalina Viera bautizando a su hija Catalina en 1537, y nuestro ancestro Francisco Navarro bautizando a su hija María en 1542. Si bien en el primer caso el padrino es un zapatero, en el segundo, el que nos afecta más directamente, el padrino es el racionero Ramiro junto a Antón de Serpa. Por último diremos que vive también en Las Palmas por estas fechas un tal Pedro Navarro que es ministro de la Inquisición.
Nos decantamos por pensar, sin pruebas que lo sustenten, que el labrador Francisco  Navarro (como tal labrador consta en una declaración suya como testigo en la petición de repartimiento  nº 208) puede ser un hijo de Cristóbal Navarro y Catalina Gómez. Planteamos esta conjetura  por el hecho de que son muy escasas, como hemos visto, las personas de este apellido existentes en la isla a principios del siglo XVI y por compartir estos en concreto vecindad y estatus social en la Villa del Real de Las Palmas con el matrimonio formado por Vicente de Montesdeoca y su esposa Juana Hernández. Nos refuerza en esta presunción el hecho de que en la descendencia de Francisco Navarro y Francisca Núñez de Montesdeoca proliferen los nombres de Catalina y María.
La descendencia que conocemos de dicha pareja es la siguiente: María Navarro, nacida en 1542; Catalina Navarro nacida en 1548 que estuvo casada con Ambrosio López, con descendencia; Leonor Navarro y Vicente Navarro, de quienes desconocemos las circunstancias  pero que son sin duda reconocidos como tales hermanos suyos en el testamento de Francisco;  Juana Navarro que estuvo casada con Alonso Suárez Carreño 3 y también con Diego González; y nuestro ascendiente Francisco Navarro de Montesdeoca, nacido en 1556, quien, como ya dijimos, estuvo casado con Prisca Hernández Talavera y posteriormente con María Suárez, con sucesión de ambos matrimonios.

CONTINUIDAD DEL LINAJE
JUAN SUÁREZ Y JUANA LÓPEZ MUÑOZ
-Partida de bautismo
"Juan, hijo de Francisco Navarro y de María Suárez su mujer, vecinos de La Vega, fue bautizado por mí Mateo Alarcón cura en Señora Santa Brígida en 17 de octubre de 1589 años, fueron padrinos Juan Naranjo y María de Torres, su prima, y por verdad lo firmé de mi nombre”.  Mateo Alarcón.
-No hemos localizado aún la partida de este matrimonio pero podemos asegurar  a los lectores  que Juan Suárez y Juana López, hija de Miguel López, tuvieron al menos doce hijos con los que entroncamos la mayoría de los grancanarios de hoy, entre ellos Bartolomé Suárez por quien sigue la línea.
BARTOLOMÉ SUÁREZ Y ANA DE CASTRO
-Partida de matrimonio
"En la villa de Agüimes estando en el Barrio del Ingenio en 15 del mes de octubre de 1674 yo Mateo Pérez Villanueva cura de la Parroquial de Señor San Sebastián de dicha villa case in facie ecclesiae a Bartolomé Suárez con Ana de Castro… el dicho Bartolomé Suárez era viudo de Margarita Macías, vecinos del lugar de Teror, y la dicha Ana de Castro, vecina de esta dicha villa, hija legítima de Bartolomé Cazorla, difunto, y María de Umpiérrez; fueron padrinos Manuel Suárez y su mujer Tomasa López, asistieron por testigos presentes el alférez Joan López Salazar, alcalde ordinario, D. Joan Cigala, escribano, Joan de Toro, el capitán Joan de Quintana, D. Marcos Estupiñán, Joan de Ávila, todos vecinos y estantes en dicha Villa y Barrio del Ingenio y para que conste lo firmé”. Mateo Pérez Villanueva.
-Puesto que la partida de matrimonio no señala los padres del novio por ser este viudo, creemos conveniente afianzar el entronque mostrando a los lectores la correspondiente partida de bautismo:
Iglesia del Sagrario (Las Palmas) Libro 8 - Folio 209 Vto - Año 1632.
"Bartolomé, hijo de Juan Suárez y de Juana López, su legítima mujer, fue bautizado en esta Santa Iglesia en 3 de mayo de 1632 años, fue su padrino el Ldo. Juan Suárez (...) Racionero de la dicha Iglesia, vino a la pila de veintiún días de nacido”. El Bachiller D. Alonso Pacheco Solís.
FRANCISCO SUÁREZ NAVARRO Y GREGORIA DE OJEDA
-Partida de matrimonio:
"En el lugar de Teror en 25 días del mes de septiembre de 1698 Yo el Bachiller Juan Rodríguez de Quintana Cura de la Parroquial de nuestra Señora del Pino de dicho lugar casé y velé según orden de nuestra Santa Madre Iglesia a Francisco Navarro hijo legítimo de Bartolomé Suárez Navarro y de Ana Cazorla con Gregoria de Ojeda viuda de Andrés Hernández, todos vecinos de este lugar … testigos presentes Francisco Pérez, Juan Magás de Montesdeoca y Juan Domínguez y otras muchas personas confesaron y comulgaron para casarse hoy dicho día de todo lo cual doy fe”. El Bachiller Joan Rodríguez de Quintana.
JUAN SUÁREZ DE OJEDA Y CATALINA FALCÓN
-Partida de matrimonio:
"En el lugar de Teror en 24 del mes de mayo de 1738 años yo D. Francisco Ramos de Quintana de licencia parroquial asistí a la celebración del Santo Sacramento del matrimonio y casé y velé in facie ecclesiae a Juan Suárez hijo legítimo de Francisco Suárez y de Gregoria de Ojeda, difunta, con Catalina Falcón viuda de Francisco Moreno y vecinos de este lugar … están dispensados de tercero grado por el Ilustrísimo Señor Obispo D. Pedro Manuel de Ávila y Cárdenas obispo de estas islas de Canarias del Consejo de su majestad … siendo testigos presentes a dicho matrimonio Blas Mateo, Isidro Reyes y José Díaz y por verdad lo firmé”. Fdo: Domingo Marrero  y Francisco Ramos de Quintana.
JUAN SUÁREZ Y JUANA ORTEGA
-Partida de matrimonio:
"En el lugar de la Vega a 4 de Agosto de 1777 años, habiéndose hecho las tres proclamas… no ha resultado impedimento alguno sino el de cuarto grado de consanguinidad en que fueron dispensados por el Ilustrísimo señor D. Fray Juan Baptista Cervera, Dignísimo obispo de estas Islas, mi señor, Yo Francisco Antonio Cabrera y Quintana cura de dicho lugar … casé in facie ecclesiae a Juan Suárez, hijo legítimo de Juan Suárez y Catalina Falcón, vecinos de dicho lugar de Teror, con Juana de las Mercedes Ortega, hija legítima de Juan de Ortega y María Suárez, vecinos de este dicho lugar, siendo testigos presentes Gregorio Medina, sacristán mayor, Bernabé de Vega y Bartolomé de Vega y otros muchos vecinos de este dicho lugar y así mismo recibieron las bendiciones nupciales y para que conste lo firmé”. Francisco Antonio Cabrera y Quintana.
MARÍA DE PINO SUÁREZ Y JUAN ANTONIO GONZÁLEZ
-Partida de matrimonio:
"En el lugar de la Vega a 17 de Abril de 1795 años … yo Francisco Antonio Cabrera y Quintana cura de dicho lugar … casé in facie ecclesiae a José Antonio González, hijo legítimo de Baltasar González ya difunto y Bernarda Lezcano con María del Pino Suárez, hija legítima de Juan Ramón Suárez y de Juana Ortega, todos vecinos de este lugar siendo testigos presentes Bartolomé Pérez y Manuel Henríquez y otros vecinos de este lugar. Y asimismo recibieron las bendiciones nupciales y lo firmé”. Francisco Antonio Cabrera y Quintana.

BREVE RECAPITULACIÓN FINAL
Con la desaparición del apellido Suárez en el peldaño X de la escala genealógica  concluimos por hoy la tarea esperando que este primer trabajo sobre los Suárez Carreño haya sido útil a los aficionados a la historia familiar de Canarias para entroncar apropiadamente a sus antepasados portadores de dicho apellido. Sirva de comprobación de su importancia genealógica el hecho de que los tres firmantes de este artículo, sin ser familiares entre sí, tenemos como ancestro común a Cristóbal Suárez Carreño casado con Isabel López, tronco de esta familia en Gran Canaria.



Viewing all 315 articles
Browse latest View live


<script src="https://jsc.adskeeper.com/r/s/rssing.com.1596347.js" async> </script>